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La imagen de la prisión no salia de mi mente. Estaba totalmente destruida, fuego salía de ella y cada vez llegaban más caminantes. Mis ojos se llenaron de lágrimas y no hice nada para impedirlo.
Todo estaba perdido. Todos estábamos separados.
El sudor se mezclaba con mis lágrimas e intente limpiarlas. Sasha, Bob, Maggie y yo corríamos alejándonos de la prisión.
Paramos cerca de un río. Me acerque a la orilla y vi mi reflejo en el agua. Mi cabello castaño caía desordenado por mis hombros, mis mejillas estaban rojas y tenía un raspón con un poco de sangre en la mejilla izquierda y mis ojos no dejaban de botar lágrimas. Me sentía estúpida, muy estúpida.
-Allison.. — Maggie me miro con sus ojos cristalizados. Camino hacía mi y me envolvió en sus brazos. Me aferre a ella con fuerza y sentía sus acaricias en mi cabello.
— Todo estará bien pequeña... Encontraremos a todo el grupo, volveremos a estar juntos. Lo prometo. Pero ahora tenemos que ser fuertes ¿si? Tienes que ser fuerte como siempre lo has sido.Juntos, vamos a estar bien.. te quiero Cherri. —Maggie tomo mi cara entre sus manos y me regalo una sonrisa. Limpió el rastro de lágrimas y me ayudo a limpiar mi herida.
Suspire. Ella tenía razón. Maggie, que había perdido a su padre y esta separada de su hermana y su esposo, no se había derrumbado. Ella era la persona más fuerte, y yo también tenía que ser valiente. Perdimos todo, pero íbamos a encontrar a los demás. Por los caídos.
(....)
Estábamos frente al autobús. Al autobús que estaba lleno de caminantes. Mordí mi labio nerviosa. Glenn estaba en el, tal vez Beth también.
- Abriremos la puerta y haremos que salgan de uno. ¿si? —asentí con la cabeza y saque mi cuchillo. Bob sostenía la puerta y iba haciendo que salieran de a uno. De un momento a otro, Bob cayo al suelo y varios caminantes salieron de golpe.
-Mierda. —susurré mientras que enterraba mi cuchillo en la cabeza de un muerto. Y así continuamos hasta que ninguno más salió. Maggie subió al autobús viendo si estaba Glenn entre los muertos. Me quede mirando la entrada del autobús mientras que me mordía el interior de mi mejilla. Bob me dio un apretón en mi hombro y me sonrió. Intente sonreír, pero me salió una mueca.
-Ya veraz que todo saldrá bien. —ignore sus palabra. ¿Que todo iba a salir bien? Desde que el mundo se fue a la mierda dejaron las cosas de estar bien.
Maggie bajo del autobús limpiando algunas lágrimas que salían de sus ojos. La ansiedad comenzó a consumirme junto con los nervios.
-Él... ¿Estaba ahí? —murmuré con la voz entrecortada.
Negó acompañado de un suspiro.
El no estaba muerto. O eso esperaba.
-¿Beth?
Volvió a negar.
Sasha comenzó a caminar y la seguí al igual que Bob y Maggie.
(....)
Abrí los ojos despacio e instantáneamente sentí el dolor en mi espalda por dormir en el suelo. Todos se encontraban en sus respectivas "camas" e intentaban dormir. Dos días. Dos días han pasado desde que el gobernador ataco nuestro hogar y lo destruyó. Hace dos días estamos separados y no encontramos señal de nadie. Desde que nos separamos, volvió esa sensación a soledad, a que algo faltaba, esta sensación que te dan ganas de llorar y no parar por nada. Hace tiempo no la tenía, la primera vez fue cuando me entere que era adoptada. Luego al comienzo de todo esto, y ahora volvió.
Despeje esos pensamientos de mi mente y me levante con cuidado. El dolor de la espalda no se iba y hice una mueca. Me abracé a mi misma intentando darme calor, pero todo fue en vano. Bufe y tome una rama para escribir en el suelo "voy a cazar, vuelvo pronto." Tome mi arco junto con el carjac y me aleje del "campamento" sin hacer mayor ruido.
Puse una flecha en el arco y lo tense, me pare y apunte a la ardilla que subía un árbol con rapidez. Solté la flecha y esta cayo dándole en el pecho de la ardilla. Camine hacía ella y la recogí colocando mi flecha nuevamente en el arco.
Iba a caminar, pero unas pisadas en en suelo llamaron mi atención. Me agache y toque con mi dedo la pisada. Mire las otras pisadas y estas iban en zic-zac.
-Caminante. —susurré con una sonrisa triste recordando las clases de Daryl.
-Mira. —Daryl paro de golpe y se agacho. Me hizo una seña y seguí sus movimientos. —¿Ves esto?
-Son pisadas.
Asintió. —Ahora, ¿sabes la diferencia entre las pisadas de caminante y de humano? —negué-
-Ni la más mínima idea. —hice una pequeña mueca.
-Las de los caminantes, van en zic-zac. Mientras que las de humanos no, esas siguen por si decirlo rectas. —explico. —Ahora, ¿estas pisadas de que son?
Mire las pisadas. Unas que otras se desviaban y iban en zic-zac. Sonreí triunfante. —son de caminante.
-¿Segura?
-Completamente. Estas pisadas son en zic-zac, y tú dijiste que cuando son así, son de caminante. —Daryl me regaló una sonrisa y asintió.
-Aprendes rápido. Y eso es bueno, estas cosas te serán muy necesarias. al vez en un futuro, cuando necesites rastrear o cosas así.
Nos paramos y comenzamos a caminar introduciéndonos cada vez más en el bosque.
-Por ejemplo, si encuentro sangre en un lugar equis, ¿cómo distingo si son de caminante? ¿El olor o color?
-Exactamente. El olor es a podrido y el color será más oscuro. Lo reconocerás rápido.
-Muchas gracias Darylina.
-No me llames así pitufa.
Le sonreí y lo abracé con fuerza. —No pensé decirte esto, pero te quiero Darylina.
Sentí su risa y él también me abrazo levemente. —Yo también niña.
Me paré e intente sacar esos pensamientos de mi mente. Suspiré y seguí mi camino
(...)
Ya llevaba dos conejos y la ardilla. Me puse la capucha y levante la vista mirando el "campamento". Veía las sombras de mis acompañantes. Bob el colocaba uno que otro palo al fuego, Sasha ordenaba algunas cosas y Maggie por último miraba al rededor buscando algo nerviosa. Sonrió al verme y se tranquilizo. Avanzó hacía mi y me abrazó por los hombros.
-No debiste salir sin avisar y sola, tuviste que haberme despertado. —murmuró.
-En si, si avise. ¿Leíste la nota del suelo? —sonreí.
-Sabes a lo que me refiero Allison. —me apuntó con el dedo y rió levemente.
-Esta bien, a la próxima los despierto.
Suspiro. —Tu y yo sabemos que no lo harás.
Sonreí y caminamos hacía la pareja.
-Buenos días. —saludo Bob. Sonreí de forma de saludo.
-¿Que trajiste pequeña cazadora? —Sasha habló intentando calentarse en el fuego.
-Dos conejos y una ardilla. ¡la ardilla es mía! —sonreí y me senté al lado del fuego y le pasaba los animales muertos a Bob.
-Toda tuya. —Bob rió mientras que le sacaba el pelaje a los animales.
-Ya debemos irnos. Los caminantes ya se comenzaron a acumular... no es seguro seguir vagando y buscar pistas... tenemos que buscar una construcción y mantenernos ahí un tiempo y..
-No dejare de buscarlos si eso crees. —murmuré.
-No me refiero a dejar de buscarlo. Pero..¡Diablos! vamos a morir si seguimos en el bosque.
-Pero..
-Sasha tiene razón Allison... tenemos que parar un poco. Si seguimos aquí, vamos a morir. El alimento es cada vez más escaso, pasamos mucho frío y los caminantes han aumentado bastante. Repondremos fuerzas y los volveremos a buscar. —Maggie me interrumpió. Miraba fijamente el fuego.
-¿Es broma no? —reí sarcásticamente.
-Allison es lo mejor.. —Maggie susurró.
-¡Claro que no! ¡Joder es Glenn! ¿Que pasa con Beth? ¿Rick? ¿Michonne? ¿Daryl? Diablos... podrían estar en peligro, ¿y nosotros? ¡retomando fuerzas! Somos una familia. No se les olvide eso. —los mire furiosa y salí de ahí dirigiéndome al bosque.
Seguí caminando furiosa hasta llegar a un tronco de un árbol botado. Me senté en la hierba apoyando mi espalda en el tronco del árbol. Suspiré con fuerza.
Se supone que somos una familia. Y nosotros deberíamos estar buscándolos a todo momento.
No quería perder a nadie más. No a ellos. No a Glenn, Beth, Daryl, Rick, Carl... y todos.
Saque mi cadena y la abrí. Mire las fotos con una sonrisa. Mire la foto donde estaban mis padres adoptivos, Glenn y yo.
-Los extraño tanto. —susurré.
¿Por qué todos los que quiero se van? ¿Por qué todas las personas a mi alrededor salen dañadas? ¿Por qué no me voy yo?
Apreté mis labios y me volví a colocar la cadena en su lugar. Saque mi cuchillo, que antiguamente era de mi padre y lo observe. Había un poco de sangre seca en el mango y se veía tan filoso como lo era al principio. La inicial de nuestros nombres estaban marcadas en el mango.. Pase las yemas de mis dedos por estas, recordando esa tarde de Invierno cuando estábamos el y yo frente a la chimenea. Yo lo miraba con admiración mientras que él tallaba las iniciales mientras que me sonreía.
-¿Por qué tienes un cuchillo papi? ¿por qué colocas nuestras iniciales? —miraba curiosa el objeto a lo que el río.
-Porque, siempre es bueno estar preparados por si hay algún peligro que nos quiera hacer daño cariño. Y si eso pasa, tendré este objeto, y al mirar sus iniciales para darme más fuerzas. Además, con este cuchillo haré unas ricas carnes. —reí y me tire encima de él.
-¿Harás tocino papi?
-Si tú quieres, claro que si nena.
Lo abracé con fuerza y deje un beso en su mejilla para subir corriendo las escaleras.
-¡Glenn! ¡Papi va a hacer tocino! —comencé a gritar mientras que soltaba unas pequeñas carcajadas.
Unas lágrimas comenzaron a salir de mis ojos mientras que reí levemente. Las limpié con mis puños y sonreí. Ellos seguían aquí, conmigo.
-¿Allison? —la voz de Maggie llegó a mis oídos. Me di vuelta y ella caminaba hacía mi con una pequeña sonrisa que se parecía más a una mueca. Se sentó a mi lado y soltó un suspiro. La quede mirando unos segundos y volví mi vista al frente.
-Allis.. se qué esto no es fácil. Quieres seguir buscando al grupo y créeme que yo igual. Todos queremos volver a estar juntos, y se, que lo haremos. Pero, necesitamos reponer un poco de fuerza, no tenemos nada. Comemos lo que traes de caza, conseguimos una que otra cosa. Necesitamos estar con fuerzas ¿si? Para encontrarlos tenemos que estar fuertes.
Bufe. —Lo sé... solo que quiero estar con ellos ¿sabes? Ya he perdido a demasiada gente que quiero.. No quiero que ellos se incluyan a esa larga fila. No quiero que Glenn, Beth, Carol, Judith o cualquiera del grupo este en ella. Solo... me gustaría que todo volviera a estar bien. Que nunca nos hubiéramos encontrado con el gobernador. —suspiré y apoye mi cabeza en su hombro. Maggie colocó su cabeza sobre la mía y reímos.
-Bienvenida al club linda.. Me dan ganas de que esta mierda se acabe de una vez. —reí.
-No eres la única. —suspiré.
-Tranquila.. Todo se va a solucionar. Te lo prometo.
-Glenn no se equivocaba. —Maggie me miro confundida.
-¿De que hablas?
-De que Glenn no se equivoco al estar contigo. Eres una gran chica Maggie. Te aseguro, que serías una gran madre. —Maggie me miro emocionada y me abrazo con fuerza.
-Te quiero pequeña... Desde pequeña me han gustado los bebes... pero no creo que podría tener uno. —suspiró y yo fruncí el ceño.
-¿Por qué dices eso?
-Porque.. un bebé nos pondría en peligro. Sería insensato traer un ser humano a este horrible mundo, donde no podrá conocer muchas cosas, donde tendrá que aprender a guardar silencio, a en vez de ocupar juguetes, ocupar armas. Y... no podría después de lo que paso con Lori.
Mordí mi labio inferior. Tenía puntos bastantes razonables.
-Tienes razón. No se podría traer un bebé donde no hay un lugar fijo, un lugar donde el bebé pueda crecer tranquilo. Pero, encontraremos un refugio. Y quiero mi sobrino. —sonreí. — El caso de Lori fue distinto.. esa horda arruino todo, no tiene porque volver a pasar.
-Me recuerdas a Beth. —sonrió con tristeza.
-Te aseguro que ella también querrá un sobrino. La encontraremos, encontraremos a Glenn, encontraremos a todo el grupo.
(...)
Unos ruidos a mi alrededor comenzaron a despertarme. Alguien beso mi frente y se alejo haciendo el menos ruido. Abrí mis ojos confundida y mire a mi alrededor. Maggie tomaba unas cosas y suspiro. Se puso en pie lista para comenzar a caminar. Fruncí el ceño.
-¿A donde vas? —susurré mientras que me paraba. Ella se dio vuelta maldiciendo.
-Vuelve a la cama, aún no es hora.. Luego te despierto. —se mordió el labio con nerviosismo.
-¿Te vas? —murmuré al verla preparada. Había guardado sus cosas y había escrito unas cosas en el suelo.
-Vuelve a la cama. Más tarde hablaremos de eso s..
-¿Te vas? —volví a preguntar.
Asintió. —Pienso igual que tú... tengo que buscar a Glenn y a Beth. Pero Sasha y Bob necesitan descansar un poco. Y tú también. —negué.
-Si te vas, me voy contigo.
-No Allison, vuelve a la cama y descansa un poco más. Luego Sasha o Bob te despertará.
-Es mi hermano ¿entiendes? Si no dejas que te acompañe, tendré que tomar mi propio camino y los buscaré por mi cuenta. —alce una ceja.
Se quedo pensando unos minutos analizando la situación para luego bufar. —Joder Allison, apúrate.
Me pare y sonreí. Guarde mis cosas y me puse mis zapatos. Tome mi arco junto con mis armas y me las puse.
-¿Lista?
-Si, vamos.
Comenzamos a caminar guardando el mayor silencio que podíamos.
Mire por última vez como la pareja dormían tranquilamente. Ellos estarían bien, lo sé.
(...)
Ya era medio día tal vez, y no habíamos parado de caminar. Seguimos por un camino, hasta toparnos con un letrero.
"Vayan hacía Terminus. Bajen las armas y serán aceptados. Los que llegan sobreviven. " Bajo de esta frase aparecía un mapa con las diferentes rutas para llegar a terminus. Algo no daba buena espina.
-¿Vamos a ir? —pregunté.
-Si alguien del grupo vio esto.. Va a ir hacía ese lugar. Asi que si, iremos.
-No me da buena espina el lugar ¿sabes? No lo sé, ya no confío en nada de esto.
-Ni yo.. pero se que alguien del grupo irá pensando que otro de nosotros iremos. Tenemos que ir.
Asentí. -Solo tenemos que seguir las vías.. sera fácil llegar.
-Así es. Mejor pongámonos en marcha. —sonreí y seguimos caminando, esta vez, por seguir las vías. Borre mi sonrisa al recordar a Bob y a Sasha. Ellos deben estar preocupados. Y son parte de nuestro grupo, y los dejamos solos.
-Maggie.. esto no esta bien. —murmuré deteniéndome. Ella me miro confundida y paro.
-¿A que te refieres?
-No tuvimos que irnos sin ellos. Somos un grupo, una familia ¿no? Y los dejamos para buscar a otros integrantes, pero de todas formas los abandonamos. Ellos pudieron habernos dejado e irse a una construcción hace mucho, pero nos esperaron. Tenemos que volver por ellos e ir a Terminus juntos Maggie. —sonreí levemente y ella me miro mientras que se mordía el labio. Bajo la cabeza y suspiro.
-Si.. tienes razón. Tenemos que volver por ellos. —sonrió y camino al lado contrario de nuestra dirección mientras que me abrazaba. —iremos al primer edificio que aparezca. Ellos se van a dirigir a ahí y así nos topamos y seguimos viajando por las vías.
-¿Al edificio Blanco?
-Ese mismo. —asentí. —Vamos.
comenzamos a caminar, volviendo por el camino que habíamos seguido.
Una hora, una hora tal vez pasó hasta que por fin llegamos al edificio antes pasado.
-¿Entramos? —murmuré.
Maggie negó mientras que analizaba nuestro alrededor. —No, nos camuflaremos entre estos caminantes muertos y esperaremos a que aparezcan. Si son otras personas, posiblemente pensarán que somos caminantes muertos y no tendremos problemas en escapar... No estamos en condiciones para pelear.
Asentí. Moví unos caminantes dejando espacio para dos personas con la ayuda de Maggie. Dejamos nuestras mochilas y mi arco debajo del auto más cercano para luego acostarnos entre los cuerpos de las anteriores personas muertas. Suspiré y cerré mis ojos.
Unos diez minutos habrán pasado y sentimos los conocidos gruñidos. Abrí mis ojos despacio y un caminante se acercaba arrastrando los pies.
-No te muevas. —susurró apenas Maggie. Tome la mano de esta y ella me dio un leve apretón.
Cada vez se sentía más cerca los gruñidos del muerto. Abrí un poco mi ojo derecho y lo ví. Se quedo quieta unos segundos mientras que aspiraba nuestro olor, intentando reconocer algún olor vivo,el que no cuadraba. Gruño y se volvió a alejar. Sonreí levemente. El mal olor era horrible, pero valía la pena en caso de alguna emergencia.
(...)
Un estruendo me hizo despertarme de golpe asustada. A Maggie le pasó lo mismo y me miro confundida. De apoco, muchos gruñidos llegaron a mis oídos y un escalofrió recorrió mi cuerpo. Nos paramos rápidamente y corrimos hacia nuestras mochilas, las pusimos rápidamente en nuestra espalda.
-Mierda. —no teníamos escapatoria, muchos caminantes salían de distintas direcciones y venían directo a nosotras. Mire con nerviosismo y comencé a lanzar flechas a los caminantes más cercanos.
Nos subimos a un auto y seguí lanzando flechas. Apunte a uno, pero antes este cayo muerto. La figura de Sasha apareció matándolos con rapidez. Le lanzo una pala a Maggie y así seguimos matándolos.
(...)
Caminábamos por las vías, ahora las tres. Antes de llegar al edificio, Sasha y Bob se separaron, Bob había seguido el camino que anteriormente nosotras seguíamos, en busca de nosotras.
Un hombre caminaba solo por las vías, unos metros más adelante de nosotras. Sonreí al reconocerlo al igual que las chicas.
-¡Bob! —Maggie gritó. Este se dio vuelta con una sonrisa y extendió los brazos hacía nosotras. Maggie fue hacia él y le dio un fuerte abrazo. Al separarse, me regalo una sonrisa y me envolvió entre sus brazos mientras que yo reía. Por último, le dio un 'pequeño beso a Sasha por lo que sonreí tierna mente.
"GLENN, BETH, VENGAN A TERMINUS, LOS ESPERAREMOS AHÍ. -MAGGIE, ALLISON, BOB Y SASHA. "
Escribimos con la sangre de un caminante muerto antes de seguir camino a nuestro supuesto refugio.
***
Soy un puto desastre lo sé. Digo que aparezco y vuelvo depués de un mes. Pero, saben que las amo, e intento escribir cuando puedo. Espero que les guste el capitulo y dejale un voto con un comentario <3 Muchísimas gracias, a todas, llegamos a los 12k. No saben como estoy de feliz. ¡Son lo máximo! ¿Llegamos a los 2k de votos? e.e
Las amo con todo mi corazón, y espero que entiendan, no he estado pasando un buen momento, tengo muchos problemas familiares, (que no comentaré aquí, pues no las pienso amargar con mis problemas) y algunas dificultades en el colegio. Aunque más que nada, he estado mal por los problemas de familia. Por lo que no me he sentido muy bien y con la imaginación para escribir algo que ustedes merezcan. En serio lo lamento.
Sin nada más que decir se despide:
~Cath.