L U H A N
Me levanté como pude y corrí hacia mi habitación cerrando la puerta con seguro. Me apoyé sobre esta y me dejé caer. Mis muslos tocaron el suelo y yo seguía con el corazón bombeando a mil por hora. Llevé mi índice a mis labios y sonreí recordando que con ellos había besado a SeHun.
-Eres un idiota. -me dije a mi mismo. Golpeé mi cabeza contra la puerta cada vez más fuerte hasta que el dolor se hizo presente. Me levanté y me arrojé sobre la cama.
Siendo honesto no me arrepiento, pero sé que no soy correspondido. Por eso soy un idiota, sigo soñando con que Sehun aparezca diciendo que está enamorado de mí.
Me di vuelta y quedé boca arriba, cerré los ojos. Espero conciliar el sueño...
•••
Los golpes en mi puerta me despertaron.
-¿Quién es? -pregunté con voz ronca.
-Tao, abre la puerta. -respondió al otro lado.
Caminé de manera perezosa hasta la puerta y la abrí. Tao estaba vestido con unos jeans negros y una camiseta roja. Entró y se sentó sobre mi cama.
-Alístate. -dijo.
-¿Perdón? -dije más despierto.
-Hoy saldremos para ver tu nueva escuela. Tú y SeHun no pueden perder clase.
La simple mención de su nombre hizo que me despertará por completo recordando todo lo ocurrido anoche como un flashback. Golpeé mi frente con la palma de mi mano e hizo un sonido seco.
-Soy un idiota. -dije.
-Eso es nuevo. -dijo cruzando las piernas. -Ahora qué pasó.
-Anoche hubo un beso... -dije tapandome el rostro.
-¡No es cierto! -gritó emocionado. -¡No es cierto!
-¡Lo besé! -dije exaltado. -¡Besé a Sehun! -dije frustrado.
-Arréglate y luego me cuentas todo con lujo de detalles. -dijo empujando me hasta el baño. -No te preocupes, yo escogeré tu ropa.
Me metió dentro del baño y cerró la puerta. Tomé una ducha rápida y cuando salí del lugar Tao estaba ordenando mi clóset.
-Fuiste rápido, bueno ponte eso, yo no voy a ver. -dijo volteándose.
Me coloqué unos boxers y tomé la ropa escogida por el. Me coloqué la camiseta y los pantalones, eran ajustados.
-Ya está. -dije sin ánimos.
-Se te ve muy bien, ahora dime qué pasó anoche. -dijo sentándose nuevamente sobre mi cama.
-Anoche cuando se apagaron las luces, salí a ver. Cuando estaba cerca de las escaleras SeHun apareció, dijo que regesará a mi habitación. Fuimos juntos porque era muy oscuro... -a estas alturas ya debo de estar sonrojado.- Caímos al suelo y luego lo besé. -lo último lo dije rápido.
-¡¿Tu lo besaste?! Perdóname, pero hasta ahora no lo puedo creer. -dijo emocionado.
-Sí... Cambiemos de tema. -dije colocándome unas zapatillas.
-¿Hablarás con él? -preguntó cauteloso.
-No, no lo haré. Nunca, creo. -respondí riendo nervioso.
Tao bufó y me arrastró fuera de la habitación. La puerta de la habitación de SeHun se abrió y mi mirada y la suya se conectaron antes de que volteé y bajé las escaleras ignorando los llamados del novio de YiFan.
-¿LuHan?
-Ah, hola Fan. -dije saludando a mi hermano.
-¿Estás listo para irnos? -preguntó mirándome de pies a cabeza extrañado.
-Sí. -contesté.
Escuché pasos, ambos giramos y Tao bajaba con el ceño fruncido junto con SeHun que ahora tenía una gorra.
-¿Pasa algo amor? -preguntó Yifan.
-Nada. ¿Nos vamos? -dijo sonriéndole.
-De acuerdo. Vamos chicos, tenemos un día pesado.
Caminé hacia la puerta y la abrí, los mismo hombres de seguridad estaban ahí. Kris abrió la puerta y le dijo algo que no pude comprender al hombre con traje que estaba en la puerta principal.
Fuimos hasta la camioneta y como mi suerte es tan buena, tuve que sentarme al lado de Sehun. No hice contacto visual en ningún momento con él y solo me senté siendo incapaz de mirarlo. Podía sentir su mirada sobre mí de vez en cuando pero prefería ignorar ese pequeño detalle.
-Bueno, SeHun espero que el idioma no se te dificulte. -dijo Kris mirándolo por el espejo retrovisor.
-Aprendí chino cuando era pequeño, puedo comunicarme en el y escribirlo también. Solo tengo problemas con la pronunciación y para entender a veces. -dijo.
-Estoy aliviado, pensé que LuHan tendría que enseñarte. -le dijo Tao en chino.
-No es necesario. -respondió SeHun en chino también. Me sorprendí un poco, su acento era bueno pero se notaba que era extranjero.
Luego se formó un silencio incómodo en la parte trasera del auto mientras que Tao y YiFan seguían hablando. Estaba sumido en mis pensamientos cuando siento que me jalan de la camiseta. Giré y era Tao que estaba atravesado.
-Hasta que por fin. -dijo algo fastidiado mi hermano.
-Perdón, estaba en otro mundo. -miré a los ojos de Kris en el retrovisor.
-Se nota, bueno. -pausa.- Cómo decía, me parece muy bueno que te re encuentres con tus antiguos compañeros y amigos.
Había olvidado ese detalle. Me mudé con mi hermano y dejé la escuela aquí, a mis amigos, familia todo. Todo por... Yifan y Corea.
-¿Mantuviste contacto con XiuMin? -preguntó casual YiFan.
-No, no lo hice. Espera, ¿volveré a la misma escuela?
-Así es. -dijo sonriendo.
Me encogí en mi lugar y cerré los ojos queriendo despertar de esa pesadilla. ¿Esto es una broma? Oh no...
Flashback
-¡Wu Luhan! -gritaron.
Giré y ahí estába, corriendo hacia mí. Estaba impávido, no podía moverme. No había escapatoria.
Era Xiumin.
-Luhan~ -llamó cuando me abrazaba.
-Ho-Hola XiuMin. -saludé cortés.
-¿Por qué tartamudeas, acaso te pongo nervioso? -preguntó.
-...
-¿Acaso te gusto? -preguntó sonriendo pervertidamente.
-No. ¿Podrías soltarme? -pedí.
-Claro que no, ahora eres mi novio. -dijo tomando mi mano y sonriendome divertido.
Me sonrojé al punto que la gente al rededor me miraba riendo. Lo vi y el reía también.
-Wu, me agradas. Eres mi amigo-novio ahora. -dijo guiñandome un ojo y luego rió.
Fin de Flashback
Dios, líbrame del mal.