Narra Will:
Me desperté por los rayos del sol en mis ojos. Sentí algo raro en mi pecho, hasta que recordé lo que había sucedido anoche.
Me di la vuelta y me encontré a Dipper completamente dormido, se veía muy tranquilo. Comenzó a abrir sus ojos y me miró, yo me sonroje y escondí mi cabeza en su cuello. El me abrazó.
*Una semana después*
Mabel no se me volvió a acercar, ya no había torturas y mis heridas habían sanado. Era feliz con Dipper. Las únicas veces donde me gritaba era delante de Mabel o sus tíos para que no sospecharan nada.
Narra Dipper Gleeful:
La verdad nunca había sentido amor, pero con Will era diferente, él era el único que despertaba esos sentimientos en mi.
Había hablado con Mabel con la escusa de que si lo seguíamos maltratando no nos diría nada acerca de los diarios, pero la verdad es que si me enteraba de que le volvía a tocar otra vez un solo cabello, no dudaría en matarla.
Era de noche y yo subía a mi habitación para dormir con Will. Al llegar al último escalón del segundo piso donde se encontraba un pasillo enorme con más de ocho puertas en donde una estaba mi cuarto, escuché algo caer al piso y hacerse pedazos. El ruido venía de mi habitación.
Corrí hasta la puerta y casi la tiro del golpe que le di.
Cuando vi la imagen me quede atónito.
¡¡¡¿¿¿QUIÉN DEMONIOS ERA ESE IDIOTA QUE ESTABA ACORRALANDO A WILL CONTRA LA CAMA???!!!.
Will me miró aterrado y con su boca formó la palabra AYUDA.
El idiota que asustaba a Will me miró a mi.
Tenía el cabello de un color verde casi negro, un parche en su ojo derecho y sus ojos si eran negros al igual que su ropa.
Al darme cuenta ya lo había golpeado sacándolo de encima de Will, pero antes de que cayera al suelo se puso a flotar por la habitación soltando una pequeña risa, era un demonio.
Yo me puse al frente de Will y el me abrazó escondiendo su cara en mu pecho.
-¡¡¡¿¿¿QUIÉN DEMONIOS ERES Y QUE LE HACÍAS A MI WILL???!!!.- Estaba furioso.
El se rió.
-¿Tu Will?, ya lo veremos, Gleeful.- Y se esfumó.
¿Cómo sabía mi apellido?.
Miré a Will y el seguía en shock.
-¿Will?, Will. ¡WILL!.- Le grité para ver si reaccionaba.
-¿E-Eh?.-
-¿Estás bien?.-
-S-Si... Y-Yo... El volvió por mi.- Se puso a llorar.- Creí que me había librado de el.- Dijo en un susurro.
-¿Qué?, ¿de qué hablas?.-
-El me quiere como su esclavo.- Dijo mirándome completamente asustado.
No entendía nada, pero no iba a permitir que se le volviera a acercar. Lo abracé y después de un rato dejó de llorar, cuando lo miré, se había quedado dormido.