Me desperté aturdida con la respiración acelerada, voltee a ver en todas direcciones y Rayan no estaba en la habitación, me acurruqué nuevamente en la cama y cerré los ojos con fuerza para lograr dormir, cuando de repente la puerta se abrió. Abrí los ojos rápidamente y vi a mi tío (a mi padre) parado en la puerta.
-¿Vale puedo hablar un momento contigo?
-Sí.-musité.
Se acercó a mí y se sentó en el borde de la cama un poco nervioso.
-Sé que no es el mejor momento, Rayan acaba de llamarme para contarme lo que pasó pero no creo tener otra oportunidad de decírtelo.
-Está bien.-sonreí para que se relajara, tomó aire mi miró a los ojos.
-Me quiero casar. Me quedé sin palabras, claramente quería que mi padre hiciera su vida pero me resultaba un poco extraño hablar del tema.
-Ahhhh
-Quiero pedirle a Karla que se case conmigo.-sonrió buscando mi aprobación.
Esperen un momento ¿Karla? ¿La madre de Patrick?
-¿La mamá de Patrick?-pregunté.
-Emmm si.... Desde que ustedes se conocieron salimos un par de veces y... pues...... quisiera que fuera mi esposa.... Quisiera saber qué piensas al respecto.-sonrió.
-¡Pues claro que sí! Sería genial.-sonreí.
-¿Hablas en serio?
-Claro que sí.-dije dándole un fuerte abrazo.- upss lo siento olvide que no te gustan los abrazos.-reí.
Se puso de pie y se dirigió a la puerta.
-¿Tío?-musité.
Por alguna razón me sentía extraña al decirle padre así que preferí llamarlo tío.
-¿Sí?
-¿Sabes dónde está Rayan?-pregunté al recordar que antes de dormirme me dijo que en unas horas teníamos que hablar de algo importante.
-Sí, me dijo que vendría en unas horas.
-Ahhh, gracias.-sonreí. Me incorporé con cuidado y me acerqué al espejo, me encontraba echa un desastre, mi pelo estaba alborotado y tenía el maquillaje corrido. Me dirigí cansada al baño y me metí en la ducha, al salir mis piernas me dolían un poco así que tomé un par de shorts y una blusa sencilla para estar en mi casa.
Tocaron la puerta de mi habitación y Patrick entró, corrió a abrazarme y le devolví el abrazo.
-¿Estás bien?
-Sí, gracias por llamar a la policía Pat.-musité contra su cuello.
-Me preocupé mucho.-murmuró.
-Definitivamente eres mi mejor amigo.-dije soltando un pequeño sollozo. Se apartó de mí y limpió una lágrima que descendía sobre mi rostro.
-Tu padre me dijo que sería bueno que me quedara hoy contigo ¿Te parece bien?
-Sí.-sonreí; me dirigí hasta la puerta y le hice una señal para que me siguiera, bajamos las escaleras y me senté sobre el sillón.
-¿Qué te parece ver una película para matar el tiempo?
-Pero yo la escojo.-dijo guiñándome un ojo mientras me arrebataba el control del televisor.
-¡No! Ya sé qué clase de cosas piensas poner. Sonrió y prendió el televisor, como esperaba puso una película que se llamaba "Amigos con derecho"
-Mira que linda película.-río; se sentó a mi lado y me dio un leve empujón.
"Somos amigos sexuales no novios solo amigos sexuales."-dijeron en una parte de la película.
-¡Quita eso!.-dije matándome de la risa.
-¡Sé que te encanta!-río con más intensidad.
Rayan:
Al dejar a Valeria dormida, decidí que debía irme, su padre querría pasar unos momentos con ella y no era prudente que yo estuviera ahí, quería hablar con ella y proponerle que viviéramos juntos pero eso podía preguntárselo después (Aunque ya no aguantaba las ganas de vivir con ella), llegué a mi casa y como de costumbre mis padres no estaban. Dejé mis cosas sobre la mesa del comedor y me dirigí a la sala en busca de un cuaderno de la Universidad.
Al entrar vi a Christian..... Sentado en el sillón con las piernas cruzadas.