Narrador.
Un día cotidiano en Konoha, el hokage está haciendo su papeleo, hasta que llega un mensajero.
-Lord Hocage.- hace una reverencia.
-¿Es sobre los hermanos Uchiha?- dijo sin despegar la vista de sus papeles.
-Si, es hora de que sepan de su existencia.-
-Bien.-lo miró.- ¿Cuándo se les dará la noticia?-
-Hoy mismo mi señor.-
-Perfecto, dale una semana, después pasada tal semana Oyuky vendrá a ver a Sasuke, pero dependerá de ella si se quiere quedar aquí, nos otros le daremos un departamento o se quedara con Sasuke, como ellos se sientan cómodos.- dijo con una sonrisa.
-Bien, una semana.-
-Hasta entonces.-
El mensajero se fue.
Narra Oyuky.
Estaba leyendo un libro cuando Naomi (una vieja señora que se encarga de mi y unos cuantos niños más, es como una "tutora") se acerca a mi.
-Hola Oyuky.-
-¿Si?-
-Bueno.- suspiro.- necesito darte una noticia.-
-Dilo ya, estoy ocupada.- mostré el libro.
-Tómalo con calma.-
-Naomi.- dije un poco disgustada.
-Tu... Tú tienes un hermano.-
-¡¿Un hermano?!-
-Si, es tu hermano gemelo h se llama Sasuke.-
-Pe...pero yo.- estaba totalmente en shock.
-Lo veras dentro de una semana.-
Seguía en shock, sólo miraba el piso.
-No es posible.- dichas estas palabras mis ojos se inundaron de lagrimas y lleve mis manos a mi boca intentando ahogar mi llanto.- un hermano.- dije en susurro...
Narra Sasuke.
El hokage me mandó llamar, es muy raro, él nunca me manda llamar.
-¿Me llamo?- entré en su oficina.
-Si Sasuke, necesito darte una noticia, siéntate.- apuntó a una silla frente a su escritorio.
-¿Qué es lo que pasa?-
-Veo que quieres que sea directo.-
-Si es posible.-
-Sasuke, tienes que prometer que lo tomaras con calma.-
-¿Qué pasa?- sus palabras me hicieron sudar.
-Tu tienes una hermana.-
-¿Una hermana?- me levante le la silla como un resorte.- pero si soy el único de mi clan... También Itachi...-baje la mirada.
-Toma aire.-
-¿Cómo es que nunca la vi?-
-Eso te lo podrá responder ella, la verás dentro de una semana su nombre es Oyuky-
Salí de ahí corriendo, todo esto es una locura, Itachi no me mató a mi, ese día no había nadie más. Nunca vi a una niña en casa, nuca me dijeron tal cosa, donde pudo estar durante todo ese tiempo, ¿por qué mis padres me ocultaron su existencia?
Decidí caminar e irme a casa, necesitaba tranquilizarme, estaba en shock, sin poder creerlo todavía.
Me recosté en mi cama viendo al vacío repitiendo su nombre en mi cabeza hasta que el cielo oscureció, intente dormir, pero me fue imposible.
Gracias por leer, espero les guste, pronto subiré el segundo capítulo.