–Estas diciéndome que golpeaste a tu padre con un bate de beisbol a mitad de la noche creyendo que era un criminal –dice Taylor y asiento
–Suena extraño cuando tú lo dices así
–Oh tal vez porque si es extraño –dice burlón Jo y lo miro molesta
–Por qué lo golpeaste –pregunta Evan mientras muerde un sándwich, para ser sincera este chico jamás deja de comer –digo tuviste más de una razón para golpearlo creyendo que era algún ladrón –dice con comida en la boca y lo miro asqueada
–Podrías por favor terminar de comer y después hablar, es asqueroso y una mala educación –digo pero él me abre su boca frente a mí y muestra su comida su sándwich masticado
–Eres un asco Harrison –digo mientras lo empujo
–Y tu un encanto chica fresa –dice Drake y lo miro –Ves como todo se puede en la vida princesa
–Cállate Drake y siéntate –le ordena su hermana y obedece mostrándole la lengua –Bien, ahora dinos porque golpeaste a tu padre, suena interesante –Dice emocionada Katie y sonrío
–Bueno, es la segunda vez que lo hago, no es que quisiera hacerlo solo que me confundí. Escuche un ruido y decidí ir a investigar, vi una sombra en la cocina y lo golpee, después escuche un gemido de dolor, mi nombre y después entendí que era papa buscando comida
–Vamos Emma, que clase de ladrón roba la comida en lugar de pertenencias –dice Sam y ríe
–Tal vez comía y juntaba fuerzas antes de entrar en acción –comenta Kendall y mira a Sam
–Mejor no opines Kendall –le dice Jessie y el rueda los ojos –además debes estar tan loca como para ir a investigar, cachar al ladrón y después golpearlo
–Vamos Jessie, como iba a saber que era de nuevo mi padre
–Y tu mama no dijo nada –pregunta Alex
–Oh claro que sí, se asomó para saber de quién eran los gritos, me vio con el bate, vio a mi padre tirado y se fue
–Auch, porque me golpeas bruto salvaje –dice Camille enojada y mira a su agresor: Evan.
–Lo siento tenías un bichito y creí que tal vez...
–No, no creas nada lo hiciste solo porque, porque, no sé porque lo hiciste pero eres un salvaje
–Camille cállate –le dice Austin pero ella niega
–No, acaso crees que no me ha dolido
–Ssshhh Camille –digo pero se niega a callar
–Disculpe señorita Blue, estoy dando la clase –regaña la profesora Roxana y nos mira con los brazos cruzados
–Y lo hace fabuloso –responde Jo animado y le sonríe
–Acaso su conversación junto con la de sus compañeros es más interesante que mi clase
–Sí –responde todos y los miro sorprendida, miro a la profesora que nos fulmina pero el timbre suena indicando que ya nos podemos ir, y agradezco por no llevarnos otro sermón del rector. Todos comienzan a levantarse y salen, antes de que nosotros salgamos la maestra nos habla y con miedo caminamos hacia ella
–Hola maestra, hoy se ve fabulosa –alaga Drake –tiene una cita
–Sí, si tengo una cita, pero ese no es el punto señor Pieterse –dice y lo mira seria –El punto es que, si vuelven a hablar en mi clase, Todos, absolutamente todos irán a detención, incluyéndote a ti rubiecita –dice señalándome y la miro con los ojos abiertos, jamás creí que un profesor me habla de esa manera –vamos chicos, los adoro pero si algún otro maestro los descubre, los levara con el rector y vamos no quiero que los castiguen más, está bien que ustedes –señala a los chicos –se la pasen haciendo cosas tontas, pero ustedes chicas
–Somos inocentes de todo acto echo por esos chicos –dice Alex defendiéndose y señalando hacia los chicos
–Gracias chicas, agradecemos su apoyo
–Cállate Austin –decimos al unísono
–Basta chicos –dice y la miramos –solo eviten hablar fuerte, y lo digo por usted señorita Blue, yo puedo adorarlos pero los otros maestros
–También nos aman, todos se enojan y se sienten satisfechos de enviarnos a la dirección, si les alegramos la vida –dice Kendall y no evito largarme a reír al igual que los demás incluyendo a la maestra
–Bueno, es hora de irnos –dice cantarina Katie y salimos del salón.
Es una verdadera locura, pero sigo sin poder creer que llevo dos meses aquí, ¡Sí! Dos meses. Sé que es tan poco tiempo pero he aprendido a sobrevivir estando cerca de estos chicos y también estoy un poco enojada porque ni Beck ni Lily, nadie me ha venido a ver y lo prometieron.
La última vez que fueron a visitarme solo fue para saber de estos chicos y tengo un mal presentimiento en ello. Y en estos dos meses no ha habido otro viernes trece, intente con un martes trece, pero para ser sincera todo lo que hice ese día me salió peor. Así que esperare hasta que legue el día.
–Emma te llevo o te iras sola –pregunta Katie y niego
–No. No gracias, esta vez iré caminando
–Nos vemos mañana fresita –dice el señor gruñón y le sonrió
–Oh tú también eres un encanto –digo sarcástica y me giro para caminar, solo escucho su risa y el auto arrancar.
Es la cuarta vez que decido ir caminando hasta mi casa, por lo regular Katie siempre es la que me lleva, pero esta vez no, no puedo siquiera tener una conversación sin distraerme y pensar en que tal vez Beck y los demás se están divirtiendo sin mí en una escuela que es ¿Normal?. ¿Extraño mi antiguo colegio? Creo que... tal vez, ahí solamente todos creían que mi vida era perfecta por ser popular y tener el novio más deseado y las "amigas" más sensacionales, pensándolo bien ahora, nada de eso me importaba, tal vez ser admirada sí, pero ahora, con estos chicos y en la escuela todos se hablan, se apoyan y aunque se molesten siguen siendo amigos. Tal vez estoy celosa porque lo que ahora tengo jamás lo tuve mientras estaba con Beck y los demás, una buena relación y diversión. Y ese tonto de Austin, aunque siempre este provocándome un enojo y que tal vez la bilis se me suba hasta la garganta, me agrada, sus ojos son bonitos y es fuerte, podría jugar futbol y es muy guapo, esperen qué dije, ¡No! Emma tranquila, pero que mierda, estaba pensando en Austin y... hay caminar, me afecta, si debo dejar de caminar cuando haga mucho sol.
Llego a casa más rápido de lo que pienso, valla, pensar si hace que el tiempo avance rápido, tomo mis llaves abriendo la puerta y entrando a casa. El silencio reina, será mejor ir a mi habitación y esperar a que regresen. Me tumbo en la cama y doy un fuerte suspiro.
– ¡Estoy aburrida! –grito alzando mis brazos y haciendo que en la casa se escuche un eco, justo cuando creo que moriré de aburrimiento, mi celular suena y salgo corriendo hasta la sala para poder contestar, llego torpe hasta mi bolso y lo tomo, no conozco el numero pero no dudo en contestar
–Hola quien habla
–Ahora eres amable y educada chica fresa
– ¿Austin? Que quieres
–Sí, soy yo, y ahí viene la verdadera Emma, no tengo tu tiempo, ni siquiera quería llamarte así que...
–Entonces por qué llamaste
–Lo hice porque... -"Solo dame el teléfono" –escucho una voz femenina cerca de él, creo que es Jessie –espera estoy hablando –"Austin, Austin, Austin dámelo" le escucho hacer berrinche a Jessie, hasta que el gruñendo le da el celular, ven porque le digo señor gruñón
–Jessie –digo y ella riendo dice mi nombre
–Hey Emma, crees que puedes venir ahora a Manhattan Mall, necesito de tu ayuda
–Hum, claro que sí, llegare en media hora, me queda un poco lejos y dependiendo del trafico creo que...
–Hay tranquila Emma. Sam va por ti
– ¡Que! Sam –grito y no solo yo, Austin también ha gritado, una de las cosas que he aprendido en estos dos meses es en jamás, JAMAS, darle el volante a Sam, es muy... brava al conducir
–Por qué Sam y ¿Katie? donde esta ella
–Oh está aquí, al lado de Austin pero ocurrió un pequeño problema que realmente evita que valla por ti
–Qué paso
–Cuando llegues te cuento, Sam debe estar es tu casa en... -y antes de que termine de hablar se escucha un auto estacionarse salvajemente fuera de mi casa y un grito diciendo mi nombre –Ahora
–Que dios me cuide –Musito y suspiro
–Suerte –dice Jessie y cuelga.
Con miedo tomo un pequeño bolso, guardo mi celular, tomo dinero suficiente y salgo para acompañar al diablo, digo a Sam
–Hola Emma, lista para sentir adrenalina extrema –pregunta burlona mientras subo al auto
–Ah, creo
–Vamos tranquilízate Emma, solo son varios kilómetros
–Es por esa razón que me preocupo, este auto solo tiene un cinturón de seguridad – digo abrochándome el cinturón y mirándola mientras ella se larga a reír
–Tienen razón, eres demasiado dramática y da risa, me agras Emma Roberts, eres demasiado agradable, para ser fresa
–Gracias... creo
–Bien, lista para tener un viaje decente
–No
–Fabuloso –dice y arranca el auto a toda velocidad, solo siento el maldito aire en mi rostro y tratando salvajemente a mi cabello, si logro salir viva de esto, pensare seriamente en comprar un auto, Sam es... muy... agradable y nada peligrosa cuando no se acerca a un auto.
–Dime Emma, entonces te gusta tu nueva escuela –pregunta y la miro
–Creo, es un cambio para mi aun no lo sé
–Bueno, qué opinas de Drake, ¿guapo no crees?
–Sí, un poco vanidoso pero agradable
–Y qué opinas de Austin –dice picara y me limito a mirarla
–Es... solo Austin
–Solo Austin –dice y suelta una carcajada –enserio Emma, vamos debe haber algo más –dice y nos miramos
–A qué quieres llegar –digo seria –Vamos Sam, a Austin no le agrado mucho, en realidad creo que no le agrado nada –digo y volteo hacía enfrente pero ella me sigue mirando
–Claro que le agradas de hecho...
– ¡Cuidado Sam! –grito como loca cuando entramos a un túnel, ella asustada mira hacia enfrente y trata de no chocar con los autos que van pasando, grito, lo que menos quiero es morir de esta manera, merezco algo fashion para morir, por ejemplo: Morir de emoción en un desfile de modas. Ser Reina, Miss Universo.
–Sam por Dios, sino morimos aquí te juro que te matare después –digo, pero el peligro ya se ha ido, hemos salido del túnel y sigo viva
– ¡Idiotas! –grita asomada por la ventana y enseñando el dedo de en medio
–Sam, déjalos y la vista al frente –indico y obedece. Quedamos en silencio. Claro un silencio encantador que no dura ya que es quebrado por la risa maniática de Sam, la miro con el ceño fruncido y ella me mira feliz y mira de nuevo hacia al frente
–Qué te da tanta risa –pregunto, ella me vuelve a mirar –La vista al frente –insisto y señalo
–Acaso no sentiste esa adrenalina en el túnel –pregunta emocionada y ruedo los ojos
–Si hablas de ese temblar que tenía mi cuerpo cuando esquivabas los autos y con el temor de no querer morir, entonces Sí, si lo sentí.
–Vamos Emma, debes salir más, sentir el peligro, no solo dramatizar cuando el labial se te acabe o cuando tus uñas se quiebren
–Esas si son verdaderas crisis, el mundo realmente se acaba, se nota nuestras diferencias
–Hay Emma... no piensas cambiar verdad –pregunta en tono burlón y niego riendo –Bien, hemos llegado
–Eres salvaje al conducir, deberías ir a clases –digo mientras busca lugar en el estacionamiento
–Todos mis maestros han llegado al hospital, supongo que ya se rindieron conmigo
–No solo están... cansados y adoloridos –digo mientras ella se estaciona torpemente, apaga el auto y me mira
–No iré a clases, conduzco bien, ahora vallamos con las chicas –bajamos del auto y caminamos hasta entrar al centro comercial. Cruzamos las puertas y sonrío, tenía tiempo que no visitaba este sitio, la última vez fue... hace dos meses con Lily y Eleanor.
–Oh están allá –dice jalando de mi muñeca y llegamos con las chicas, Jessie nos ve y se para sonriéndonos, pero Katie no.
–Hey, chicas eso fue rápido, me alegro que sigas viva Emma
–Y a mí, qué le pasa a Katie y Austin –pregunto mientras miro a Katie
–Oh, Austin fue con los chicos a tomar un café y ella –señala hacia Katie, quien se encuentra de espaldas- no está en condiciones para mirarte
–A que te refieres con eso –digo y camino hacia Katie, la miro y hago una mueca cuando ella levanta la mirada y me mira sonriente
–Hola Emma, cómo estas
–Que te paso –pregunto mientras las demás chicas se acercan a nosotras
–Hay Katie, te ves terrible –le dice Sam y ella la mira fulminante
–Fue tu culpa –regaña y señala a Sam
–Fue un accidente
–Que paso Jessie –pregunto resignada y con las manos en la cadera
–Estábamos comiendo un helado Sam se emocionó al ver a un chico trato de decirnos quien era, pero la emoción le gano y le dio un codazo a Katie
–Era un chico muy lindo –recuerda Sam emocionada y mira a Katie
–Y es imposible que ella conduzca, apenas y logra ver
–Te he oído Jessie –dice enojada y señalando hacia la derecha, error ahí no hay nadie Jessie se encuentra frente a ella, tomo su dedo apuntando y lo dirijo en donde se encuentra ella
–Gracias Emma –dice pacifica
–No es nada –digo y sonrío aunque sé que no puede ver –ahora me dirán por qué me han llamado
–Oh claro, bueno, queremos un cambio de look, pero necesitamos ayuda y creímos que....
–Déjenmelo todo en mis manos, vamos –digo emocionada y tomo a Jessie de la muñeca saliendo corriendo, Sam pisándonos los talones, pero nos detenemos al escuchar una voz conocía y alejada de nosotras
–Chicas están ahí –nos volteamos y vemos a Katie, quien se ha parado y está caminando hasta una fuente
–Deberíamos decirle que hay una fuente frente a ella –digo pero ellas burlonas niegan, solo vemos como se cae en la fuente y escuchamos el pequeño grito de Katie y salimos corriendo hacia ella
–Estas bien Katie –pregunta Sam
–Cuando logre volver a ver, te matare Sam –dice molesta Katie y Sam junto con Jessie la ayudan a salir
–Vas a ayudar o no Emma –pregunta Jessie y la miro frunciendo el ceño
–No, me mojare y eso arruinaría mi ropa –digo y miro a las tres, ambas me miran y ruedan los ojos. Logran sacar a Katie.
–Vamos chicas la belleza y el fashion las llama –digo feliz y camino hacia las escaleras, me siguen y corriendo llegamos a mi tienda favorita "Tony", me giro para verlas, las tres tiene el ceño fruncido
–Chicas que sucede –pregunto y pongo mis manos en la cadera
–No podemos entrar ahí, todo es muy caro –dice Jessie y niega con la cabeza
–Vamos chicas todo ahí adentro es bello
–Sí, lo sabemos Emma, pero... -dice Sam y calla sin terminar de hablar
–Tranquilas, el dueño es mi Tío –digo feliz y entro a la tienda
–Eso es bueno, ¿No? –pregunta Katie y giro para ver a las chicas, las tres entran y abren sus ojos como platos al ver el lugar
–Por Dios, estamos en el cielo –musita Jessie y juro que casi babea
–Emma, Emma bella –escucho la voz de mi Tío y me giro para verlo
–Hey Hola –lo saludo besando su mejilla y reímos
–Oh nuevas amigas –dice levantando las cejas divertidas, mi Tío Hugo, es mi favorito y es muy divertido, además de que en joven y guapo –Son bellas pero son un poco, bueno les falta
–Lucirse –completo y asiente, olvidaba mencionar que le gusta que todos vistan a la moda
–Hola chicas son muy bellas –dice coqueto, teniéndole la mano y ellas accediendo sonriendo, a excepción de Katie, quien le tiende la mano a un maniquí, mi Tío la mira dudoso y me mira
–No preguntes
–Ok, si son hermosas, pero esa ropa no les ayuda en nada –dice señalándolas de pies a cabeza y enseguida ellas bajan la sonrisa
–Gracias –dicen entre dientes
–Crees que puedes descontarnos algo
–Bromeas, amigos tuyos, amigos míos, llévense lo que quieran –dice y ellas sonríen al escuchar eso, las miro victoriosa –Gracias, eres el mejor
–Lo sé hermosa, ahora, iré a atender a ese bombón y señalando –dice observando pícaro hacia la puerta, una mujer más o menos de su edad ha llegado, guapa, es lo que hace mi Tío, mujeriego pero feliz.
–Vamos chicas –digo y seguimos caminando.
Iniciamos con la búsqueda de las prendas correctas pero estas chicas están en contra de colores llamativos, prefieren los colores oscuros pero, me reusó a salir de esta tienda sin algo realmente alegre.
–Emma, vamos esto es inútil, no encontraremos nada para nosotras
–Claro que sí, anímense, Jessie, a ti te queda súper bien el amarillo, verde y azul. Sam, te queda muy bien el rojo, o azul, nada de rosa y Katie te queda estupendo el negro. –digo y miro hacia toda la ropa que tenemos alrededor, veo algunas prendas y veo a las chicas, creo que son las perfectas, así que sonrió
–Que tienes en mente –dice Jessie y la miro victoriosa
–Saldrán de esta tienda irreconocibles –digo y corro hacia los vestidos, pantalones y shorts que encuentro. Regreso hacia las chicas y al verme con todo tragan saliva y niegan, pero yo las empujo hacia los vestidores y las obligo a ponerse la ropa. Está claro que algunas de las cosas que traje no son muy buenas para ellas pero la mayoría sí y eso es un avance. Jamás en mi vida había tardado tanto en ayudar a elegir el atuendo perfecto, y al ver salir a estas chicas me hace feliz, se ven hermosas con lo que elegí
–Mírense, chicas –digo y me paso de la banca acercándome a ellas, mientras se miran en el espejo –se ven casi perfectas –digo y ellas sonríen, es un alivio que Katie haya recuperado un poco la vista, claro que no por completo pero al menos ya sabe ubicarnos
–Casi –dicen y yo asiento
–Por supuesto, no creerán que solo con ropa linda se verán hermosas o ¿Sí?, falta visitar a un estilista –digo, ellas se miran y se largan a reír y las miro seria y se callan
–No bromeas verdad –pregunta Sam y niego.
–Tengo el presentimiento de que dolerá –dice Katie y sonrió.
Llegamos a la estética y enseguida pido a las empleadas que haga lo posible para transformar a las chicas, todos se miran y las chicas asustadas tratan de salir corriendo pero las empleadas no las dejan, y yo tampoco así que las amarramos a las sillas e inician con la transformación
–Esto es ilegal –dice molesta Jessie
–Hacerte un cambio un cambio de look –pregunto confundida y con el ceño fruncido
–No. El amararnos a las sillas, es ilegal ¿No?
–Vamos Jessie, no puede ser tan malo –anima Sam, pero al ver que una de las estilistas se acerca con unas pinzas comienza a gritar –Ah, ¡Ayúdenme! ¡Auxilio!
–Esto será divertido –digo tomando una revistas y sentándome a esperar la transformación de las chicas.
En toda la hora que he estado esperando y leyendo, he escuchado los gritos de las estilistas junto con la de las chicas, amenazas, insultos, gritos, es todo lo que logro escuchar. Hasta que todo queda en silencio.
–Hicimos lo que pudimos –dice una de las estilistas tirándose a una silla y dejando reposar su cuerpo, bajo la revista y me levanto. Sonriente veo a las chicas y quedo anonadada al verlas. Se ven estupendas, son irreconocibles.
–Chicas mírense, por Dios se ven hermosas
–Enserio porque dolió mucho –dice Katie acariciando su cabeza y río
–Que es esa mancha en su brazo –pregunto a otra de las estilistas y mira la mancha señalada
–Oh, es solo sangre señorita, la rubia es muy agresiva –dice señalando a Jessie quien solo sonríe
–Bueno chicas, debo admitir que se ven bien, ahora si Kendall no dejara de verte –le digo picara a Jessie y cubre su rostro con ambas manos, mientras nosotras reímos. Las chicas pagan por el servicio y salimos de ahí, dirigiéndonos con los demás.
Me apresuro por llegar al restaurante y por suerte veo a los chicos reunidos aun, entro y corro hacia ellos y los saludo sonriente
–Que tal chica fresa, cómo estas
–Hay cállate Austin –digo ignorándolo y viendo a los demás
–Dónde están las chicas –pregunta Kendall y le sonrió
–Están listos para ver a las chicas, nuevas, sexy y...
–Solo dinos dónde están –icen todos al unísono y los miro molesta
–Ustedes sí que no aprecian mis comentarios, ¡Pasen chicas! –grito sentándome y todos voltean hacia la puertas al verlas entrar, wow, debo admitir que se ven geniales, Alex junto a sus amigas las miran molestas y sorprendidas, mientras los chicos están a punto de soltar la baba
–Hola chicos –dice Jessie sonriente y mira a Kendall, quien esta tonto y sin contestar
–Vamos hablen –digo burlona, pero al no recibir respuesta alguna, golpeo la mesa y los chicos regresan a la realidad –Qué opinan de su cambio de look –pregunto mientras las chicas buscan lugares para sentarse
–Se ven, increíbles –dice Alex y me mira –Tú las ayudaste
–Claro, hice un buen trabajo ¿No?
–Oh pero claro que si –dice Evan mirándolas –Me pregunto si también serán chicas fresas, ahora serán insoportables como Alex y sus amigas o dramáticas como Emma –dice desesperado –Auch, y el golpe por qué –Pregunta sobándose el hombro Evan y mira a Katie –Auch y golpe ahora por qué fue –pregunta mirando a Taylor
–Por decirnos fresas, y esa es tu respuesta –le dice victoriosa Sam
–Y por decirnos a nosotras insoportables –le dice Taylor y él molesto se cruza de brazos y con puchero
–Te ves bien Jessie –le dice Kendall y ella tímida agradece, me mira y me contengo a largarme a reír
–Eres fabulosa Emma –dice Camille
–Para ser dramática –bromea Dylan pero ambas lo miramos molesta y el simplemente baja la sonrisa y deja de mirarnos.
–El martes vendremos a comprar ropa, será genial que nos acompañes –prepone Alex y feliz asiento
–Genial, será fabuloso –aplaude Taylor y come de su helado.
Un empleado se acerca a nosotras y pregunta que es lo que ordenaremos, las chicas ordenan y antes de que yo pueda hablar mi celular suena, lo caso de mi bolso y contesto
–Qué pasa Papá –pregunto mirando al mesero y le indico que en un momento ordenare –no crees que es muy temprano para marcarme
–Emma, necesitamos que vengas a casa
– ¿Mamá está contigo?, creí que hoy trabajarían todo el día, además estoy con unos amigos y...
–Es urgente Emma, Molly ira por ti, solo dime en donde estas
–Estoy en Manhattan Mall
–Excelente, llegara por ti en media hora –dice y cuelga, dejo mi teléfono en la mesa y me quedo mirado a la nada dudosa
–Qué sucede chica fresa –pregunta Austin y lo miro seria
–Mi mamá vendrá por mí, me tengo que ir –digo levantándome
–Espera por qué –pregunta Jessie y me mira
–No lo sé, los veo mañana –digo y sonrío –Funciono, Kendall te está mirando-digo feliz en su oído y ella ríe
–Eres la mejor ¿Sabías?
–Sí, gracias por recordármelo, adiós –digo y me voy.
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Cuando mi mamá llego por mí, la note diferente, trate de entablar una conversación agradable en el auto como es de costumbre, pero no logre hacerla sonreír y para ser sincera es incómodo este momento.
Al fin hemos llegado a casa, pero no me siento bien, sé que algo anda mal, pero me limito a preguntarme a mamá. Bajamos dela auto y entramos a la casa.
–Mamá, todo está bien –pregunto y ella suspirando, trata de regalarme la mejor sonrisa pero le falla y camina hacia la cocina y la sigo. Papá se encuentra ahí, sentado en la silla sin mirarnos, sin hablarnos, solo está sentado. Mi mamá también toma asiento y jala una silla, indicándome que me siete, obedezco dudosa y el silencio se apodera de la situación.
–Qué sucede –pregunto al fin y me miran –No me digan que volvieron a tirar todo mi equipo de maquillaje porque esta vez yo no...
–Nos hemos divorciado Emma –dice en seco mi padre, lográndome callar y los miro perpleja. Siento el latir de mi corazón acelerarse y mis ojos comienzan a cristalizarse. Bebe ser broma una pésima y estúpida broma.
–Qué –digo con la voz quebrada y me levanto de mi asiento
–Emma, tu padre y yo... nos hemos separado, esto se acabó –dice seca y suspira. Esto no puede ser verdad mis padre no pueden separarse, son la pareja perfecta, esto debe ser una sueño. No. Una pesadilla esto es demasiada... Mala suerte.
¡Mi día no puede terminar así!
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Quinto capitulo >u< espero y les guste y si es así voten y comenten :3 por favor comenten, me gustaría saber qué opinan sobre este cap. Que les gusto.
Gracias 😊
Lily en multimedia
@JuliaAixiuMuozLucena tu capitulo xD espero y te guste