—No te vayas... No lo hagas —eleva la voz Chase. Miro a ambos lados y noto que todo el mundo nos mira. Sonreí sin mostrar mis dientes.—. No quiero que vayas, pero soy egoísta lo sé
—Chase... ¿Te piensas que dejaré que andes de fiesta en fiesta, mientras yo no estoy? Oh no, vaquero. Tengo a mis espías ultra secretos.
Por lo menos cambie de tema. O eso intenté.
Me di media vuelta y les guiñe un ojo a Lauren y Sean, que estaban parados pero separados. Se que estuvieron en algo antes. No sé, cosa de ellos. Sé que Lauren me mantendrá al tanto de todo mediante mensajes.
—El vuelo 2145 partirá en 15 minutos, repito, señores pasajeros, el avión con destino a Londres partirá en 15 minutos
Chase me miro suplicante, pero no puedo... No puedo quedarme.
—Siempre estaré para ti, Chase —dije acercándome a él y llevando mi mano a su mejilla
—Nunca te olvidare —dijo él
—Eso ya lo veremos —susurro mientras empiezo a caminar para tomar mi vuelo, solo que voy hacia atrás, para así poder ver a mis amigos y a mis padres. Levanto mis manos y la agitó, despidiéndome. Me doy la vuelta y empiezo a caminar normalmente.
Adiós, mi chico iPhone.
Fin.
——
Nada para decir