Capítulo treinta y tres
-- Entonces si sabes algo -- Respondí. Dejé que un suspiro exagerado saliera de entre mis labios -- Sabes que puedes decirme ¿No? Yo realmente no se lo diré a nadie. Solo dime quien fue quien lo ayudó a escapar.
Su respuesta me tomó desprevenida por completo, dos simples palabras que pudieron cambiarlo todo y me ayudaron a tomar una desición definitiva.
-- Fui yo.
No supe que hacer en ese momento.
Me quedé mirando el rostro de Andrew en busca de algo que dijera que sus palabras habían sido una mentira, pero no era así. Mantenía la mandíbula tensa y sus ojos estaba fijos en mi rostro. Yo no había pensado en ningún momento que él fuera el responsable de eso, me refiero a que, ¿Quién lo hubiera pensado?
Pero tenía mucho sentido su confesión. Para cualquier humano sería imposible escapar de una cárcel de hombres lobo cuestionada cada momento del día, los guardias no descuidarían su puesto a menos que alguien muy superior a ellos se los dijera, y la única persona que está sobre todos en este lugar, a quien todos deben obedecer es Andrew.
Recordé la llave que le habían robado a Andrew, con la que se podía tener acceso a la ciudad y a muchas mas zonas cerradas para la mayoría de los ciudadanos. Por un tiempo me había olvidado que eso existía y que me la habían ofrecido a cambio de mi ayuda que dí pero nunca recibí nada a cambio, ¿A caso eso era una mentira?
Pero con o sin llave él siempre sería el único que pudiera entrar y salir de la ciudad a su antojo, sin restricciones y podría sacar a cualquier persona con él y nadie podría interrogarlo acerca del tema. Nadie mas podía pasar desapercibido al pasar por esas puertas. Me sentí estúpida por nunca haber sospechado sobre lo que él había hecho cuando muchas cosas apuntaban directamente a él.
Y no pude sentirme como la peor persona del mundo por haber estado haciendo cosas en contra de él a sus espaldas cuando él en secreto me había hecho un favor el cual nunca le terminaría de agradecer, un favor por el cual yo nunca podría pagarle. Nadie mas haría algo tan grande por mí que mi propio compañero.
En ese momento, con esas palabras, yo ya había tomado una decisión y nada podría hacer que la cambiara. Tal vez algunos cambios irían bien, pero en esos momentos no estaba de acurdo con los métodos con los que casi había participado de una manera directa. Yo no seguiría conspirando en secreto contra Andrew.
Decidí seguir el consejo de Gee y alejarme de todas las cosas antes de quedar atrapada o hacer algo de lo que me arrepentiría. Me sentí bien al saber que no había derramado ningún secreto o algún tipo de información comprometedora, me di un poco de paz mental pero no me dejó con la conciencia tranquila porque yo estuve a punto de hacerlo. Estuve a una distancia minúscula de traicionar a la persona que había hecho algo que nunca podría olvidar por mí.
No estaba segura que él esperara que hiciera en ese momento, ¿Bombardearlo con preguntas acerca del tema? ¿Decirle que yo no le creía? ¿Qué lo tenía que probar? Yo le creía. Podía ver en sus ojos que no me estaba mintiendo en esos momentos.
Así que sin pensarlo dos veces, sin siquiera dudarlo un momento me tiré contra él para poder pasar mis brazos alrededor de su cuerpo y abrazarlo. Claramente él era mucho mas alto que yo, por lo que en vez de que mi rostro quedara en su cuello tenía mi oído contra su pecho, dejando que escuchara los latidos de su corazón.
-- Gracias...
Mi voz sonó baja y ahogada, pero estaba segura que él había logrado escucharme perfectamente y no le tomó mas que unos pocos segundos el recuperarse del shock de mi rápido movimiento afectivo y él también rodearme con sus brazos, pero no de una manera como si estuviera obligado a hacerlo, lo hizo como si quisiera haberlo hecho desde hace mucho, mucho tiempo.
-- No es nada, Gwendolyn -- Dijo inclinándose para poder hablar directamente en mi oído de manera cariñosa e íntima. Probablemente en otra situación, en otro contexto lo hubiera alejado de mi de un empujón antes de que sintiera algo en mi estómago por la cercanía, pero no pensaba hacerlo en esos momentos. Sentí que él valía la pena por primera vez.
Y en esto se pueden basar una futura relación. Él hizo algo por mi sin esperar que yo hiciera nada a cambio, lo hizo porque nació de él. Ni siquiera parecía querer contarme que lo había hecho. Y eso había hecho que en segundos, en lo que demoraban dos palabras de una sola sílaba cada un salir de la boca de una persona, mi opinión dio un giro completo.
Era la primera vez que le daba un abrazo a Andrew, lo había hecho antes pero no habían durado mas que unos pocos segundos y no habían sido reales, habían sido solo una forma de intentar ganar su confianza y ahora me di cuenta la diferencia de esos hipócritas abrazos con este, verdadero. La calidez del cuerdo de Andrew iba hacia el mio, sintiéndose demasiado familiar, por unos segundos incluso olvidé las miles de cosas que rondan mi mente y me distraen a cada momento.
Pero tenía que soltarlo para poder enfrentarlo cara a cara, necesitaba hablar con él. Así con juntando todo el el valor de mi cuerpo dejé que mis brazos cedieran y los suyos lo hicieron solo unos segundos después cuando se dio cuenta que yo quería separarme. Retrocedí un paso para poner un poco de distancia entre nosotros y él no pareció molestarse por mi acción.
-- ¿Cómo lo hiciste? -- Pregunté con mis ojos fijos en los de Andrew.
-- Fue mucho mas sencillo de lo que crees -- Respondió con una sonrisa en su rostro -- Solo llegué a la celda y me lo llevé, no tengo que dar explicaciones a nadie. Yo salgo y entro a la ciudad a mi antojo así que simplemente escolté a tu amigo hasta la puerta, le di un poco de comida y agua y lo dejé marcharse. No me costó nada hacerlo, Gwendolyn, pareciera que quieras hacerme un altar por haber liberado a ese chico pero no es para tanto.
Pero si lo era para mí. Esa había sido la prueba para mi que él tenía sentimientos y moral, si no hubiera pensado que estaba mal tenerlo ahí no lo hubiera dejado ir. Esa fue mi prueba para darme cuenta que ellos no son los monstruos que parecían ser o que querían demostrar ser.
Para él no pudo haber sido mucho pero para mi lo era.
-- Nunca voy a terminar de agradecerte -- Me respondí. No quería parecer desesperada así que intenté mantener la calma lo mejor que pude -- Pensé que no tenías interés en él o en dejarlo libre, ¿Por qué hiciste eso?
Andrew se quedó en silencio durante unos segundos antes de responder mi pregunta.
-- No te tengo que explicar el lazo que hay entre nosotros -- Comenzó a hablar él -- Pero para todo el tiempo que nos conocemos debió haber sido demasiado fuerte a esta alturas, pero no lo es. Es débil, casi inexistente. Y recuerdo tu rostro cuando lo viste en esa celda, me di cuenta que lo quieres mucho mas de lo que a mi me quieres, pero no te puedo culpar por eso. Lo dejé ir porque él es importante para ti. Y como tu te quieres alejar de mí, pero nunca te dejaré ir, lo mínimo que podía hacer es darle a alguien que quieres lo que nunca podré darte a ti.
-- ¿Lo hiciste porque a mi nunca me dejarás ir? -- Pregunté -- ¿Y eso por qué?
-- Porque te quiero, ¿Por qué mas va a ser? Nunca te dejaré ir porque cuando quieres a alguien no lo dejas ir. No dejas que se marche de tu lado -- Suspiró -- Le di a él lo que no te podré dar nunca.
Pero yo no necesitaba que él me dejara ir. Ya no había nadie para mi fuera, todos podían estar muertos y si escapaba yo iría por el mismo camino. Y yo sabía perfectamente que él nunca abriría las puertas y me dejaría marchar. Pero Andrew sentía que me debía libertad y se la había dado a alguien a quien quiero.
No pensé mis siguientes acciones, simplemente actué deseando que las consecuencias de mi acción no llegaran pronto. El paso que había tomado hacia atrás lo di hacia adelante, cerrando la distancia entre nosotros.
Me puse sobre las puntas de mi pies para tomar un poco mas de altura y con una mano en la cabeza de Andrew lo guié hacia abajo, todo el camino hasta que sus labios se juntaran con los míos.
Y en ese momento me di cuenta que tal vez seguir el juego al lazo que debía formarse entre nosotros no era tan malo.
Incluso me podría acostumbrar a eso.
Hey chicos! ¿Qué tal están? Espero que les gustara este capítulo.
Me gustaría que se pudieran pasar por mi nueva historia y me digan, de la manera mas honesta posible, que les parece, ¡No se arrepentirán!
Está dedicado este capítulo a Sarah_Valleau quien comentó mas veces seguidas.
Le dedico el siguiente capítulo a la persona que comente la frase, cita o cualquier cosa acerca de cualquier tema que tenga que ver con amor (Solo mencionaré a los que me parecieron mas interesantes y sin faltas ortográficas graves:)
Con amor...
-Valerie