19: Luciérnagas
Ed Sheeran - Firefly
Los Ángeles, California
Rachel Berry, 18 años.
Lucy Quinn Fabray, 19 años.
-Te hare una pregunta y espero que me la respondas - decía Quinn mientras salían del dormitorio.
-Soy toda oídos así que dime.
-¿Estas saliendo con alguien?
-No - sonrió - no te negare que he tenido algunas citas pero sinceramente eso no es lo mío, no he encontrado a alguien que ponga mi mundo de cabeza.
-Entiendo, gracias por responder no quería parecer una loca psicópata por indagar en tu vida - le sonrió.
-Para nada. Además yo quisiera hacerte la misma pregunta.
-Pues no salgo con nadie también tuve un par de citas en estos meses pero no he encontrado a alguien que realmente me interese.
-Si es complicado, pero ahora me gusta cómo me siento ahora, todo está muy tranquilo y tenerte aquí a mi lado es un regalo.
-¿Por qué lo dices?
-Porque eres la única persona que siempre está en mi mente, pase lo que pase siempre estás ahí, desde que te conocí has convertido mi vida en una aventura.
¿En una aventura? - Comenzó a reír la rubia - vaya no sabía que era eso.
-Lo digo en el buen sentido - la empujo provocando la risa de la chica - es que nos han pasado muchas cosas en todos estos años, creo que a tu lado vi el rey León casi 100 veces - Quinn no podía parar de reír al escuchar a la morena recordárselo - te ríes porque sabes que estas obsesionada con esa película - la miro sonriendo - nos perdimos en un bosque solitario dios te juro que asuste muchísimo, hemos ido a la playa juntas, teníamos pijamadas casi a diario, la primera vez que me emborrache lo hice contigo...
-Mi primer beso fue contigo - la interrumpió Quinn.
-Mi primer gran amor eres tú - dijo la morena
Hay muchas primeras veces, cada una es especial ya que es la primera, así es el primer beso puede que haya resultado bien o mal pero es el primero, así también sucede con el amor, antes de tu primer amor no tienes ni idea de lo que significa querer a alguien, hay muchos sentimientos envueltos y cosas nuevas por descubrir, pero nada supera el dolor que te deja la primera decepción amorosa, seamos sinceros duele más que cualquier cosa, duele y afecta por lo que es un punto de transición en tu vida, es un momento en el que aprender lo maravilloso y doloroso que puede ser amor. Y todas esas sensaciones ya las habían experimentado tanto Rachel como Quinn. Dicen que el primer amor no es el definitivo que vas a conocer muchas más personas después pero las chicas querían más que nada en el mundo que ese amor que se tenían fuera el definitivo.
Rachel y Quinn caminaban juntas hacia la fraternidad, Santana las iba a esperar afuera de la misma, la latina llevaba casi un año saliendo con una chica pero lo mantenía todo a bajo perfil, lo único que sabía Quinn de aquella misteriosa chica es que hacia feliz a su amiga y eso era más que suficiente. La casa estaba llena de gente la música a todo volumen y claro las bebidas circulaban libremente por cada uno de los invitados.
-Bienvenidas chicas - salía Zac a recibirlas - espero que disfruten de la fiesta y cualquier cosa que necesiten no se olviden de buscarme.
-Gracias - dijo Rachel.
-De nada - le sonrió y volvió a donde sus amigos.
Santana llego de la mano de la chica que parecía ser su novia, se acercó a las chicas y las saludo animadamente, la chica era rubia alta, con un cuerpo de infarto y ojos azules.
-¿Britt? ¿Brittany S. Pierce? - pregunto la rubia sonriendo.
-Lucy Quinn Fabray - se rió y corrió a abrazarla - han pasado tantos años dios estas guapísima.
-¿Ya se conocían? - preguntaba la latina bastante confundida
-Pues sí, Britt estaba junto a mí en mi curso de guitarra cuando era pequeña la conocí allí y nos hicimos buenas amigas, luego tuve que marcharme y te conocí a ti San.
-El mundo es un pañuelo - suspiro Santana.
-Es bueno volverte a ver Britt - saludo la morena.
-También me acuerdo de ti - sonrió - te pusiste muy celosa cuando yo me acerque a Lucy.
-¿Berry celosa? - comenzó a reírse la latina - esto es demasiado bueno, desde pequeñas las dos ya se querían dios como es el amor.
-Santana cierra la boca - trataba de controlar a su amiga.
-Si era verdad - se encogió de hombros y miro a Quinn para sonreírle - creo que he sido un poco celosa y eso viene desde años atrás.
-Hacen una linda pareja - decía Britt abrazando a Santana - no tan linda como la mía con Sanny pero están muy bien - beso en la mejilla a su chica.
-Gracias Britt pero Rach y yo...
-Son mis Faberry y pronto van a volver a estar juntas - interrumpió la latina.
-Eso espero - acoto la morena.
Quinn sonrió y miro a Rachel quien tenía las manos en sus bolsillos y la miraba sonriendo, se veía completamente adorable, había decidido vestir un jean una chaqueta al igual que la rubia y claro una blusa simple color blanca, su cabello suelto y maquillaje sencillo, adoraba a Rachel más aun cuando era capaz de confesar sus sentimientos.
Las chicas entraron a la casa y lo primero que recibieron fue un coctel de bienvenida, era algo muy simple sabor a frutas por lo que lo disfrutaron, rápidamente Zac y Nick les ofrecieron un shot de tequila, Rachel fue la primera en rechazarlo ya que nunca lo había probado.
-Oh vamos Rach - se reía Quinn - beberé contigo además te prometí que te iba a cuidar, no es tan malo como lo has escuchado solo debes hacerlo bien...mira tienes el limón un poco de sal y el tequila.
-Si esto sabe mal te juro que me las vas a pagar.
-No te tengo miedo Berry - se rió y se acercó a darle un beso en la mejilla - bien vamos una dos y tres.
Rachel imito lo que la rubia hizo y probo por primera vez el tequila afortunadamente lo había hecho bien y aunque el sabor era un tanto fuerte lo disfruto.
-Horrible no lo haré de nuevo - se reía - pero gracias por enseñarme.
-A ti por intentarlo.
Era la primera vez que Rachel probaba esa bebida y si no había sido tan malo. Junto a la rubia las cosas siempre parecían más sencillas y mucho más placenteras.
La fiesta trascurrió con normalidad, Rachel y Zac comenzaron a hablar animadamente al igual que Quinn con Nick los chicos era muy divertidos y amables lo cual era difícil de encontrar en un hombre, ambos estudiaban psicología y estaban en tercer año, además pertenecían al equipo de natación, se la estaban pasando muy bien no se podían quejar, Zac le pidió a la morena bailar con él y ella acepto, tomo de su mano y la llevo al centro de la sala en donde todos los chicos estaban bailando, la música era muy buena y Rachel se movía sensualmente.
Quinn la veía desde lejos mientras seguía conversando con Nick, era un chico divertido y con un sentido del humor bastante bueno lo que le encantaba a la rubia, pero no podía despegar su mirada de la morena que continuaba bailando junto al muchacho.
-Hola chicos - llegaba Santana a interponerse entre la morena y Zac - que linda noche gran fiesta chico.
-Gracias - le sonrió - pero si me disculpas ahora estamos bailando.
-Te la robo un minuto ya sabes problemas de chicas - tomo a la morena de la mano y la llevo fuera de la casa. En donde pudieran hablar tranquilas.
-Primero, el chico está muy lindo segundo te tiene ganas y tercero estas rompiendo mi corazón.
-¿Qué dices? - Se rió - lo sé está muy lindo pero porque he roto tu corazón.
-Porque amo la pareja que tú y Quinn hacen, sé que no es de mi incumbencia pero igual daré mi punto de vista, ustedes dos se aman y no sé si ya se dijeron te amo, pero es obvio que lo hacen se les nota a kilómetros cuando ustedes estaban saliendo nunca vi a Quinn tan feliz y mira que la conozco hace muchos años, fui la primera a la que le dijo que le gustabas y estaba tan emocionada cuando supe que estaban saliendo, de repente - hizo una pausa tratando de coger un poco de aire - rompen y mi corazón se rompe si ustedes rompen, mira qué bonito hasta me salió una rima.
-Santana entiendo lo que dices pero Quinn estuvo de acuerdo en darnos un tiempo, ir despacio y parece que si es la mejor opción.
-Ella siempre va a anteponer tu felicidad a la suya siempre ha sido así.
-Santana, ella es todo para mí lo entendí cuando tenía 15 años y creo que desde que tengo seis años siempre he pensado que lo siento por Quinn va más allá de un simple amor, de esos que se te olvidan en unos meses, Quinn no es algo que quiera para uno o dos meses ni tampoco para un par de años y que luego todo se termine lo que quiero con ella es un para siempre, ella siempre va a pertenecer a mi vida...
-¿Por qué separarse de alguien que te hace bien?
-No lo sé - sonrió - ella quiso un poco de libertad no quería atarse, y yo pensé que lo mejor era vivir experiencias por separado, aprender de nuestros errores, vivir.
-Está bien - suspiro - vive, equivócate, ríe y obvio sigue rompiendo mi corazón.
-Oh vamos todos sabemos cómo va a terminar esta historia.
-Por favor dime que tú y Quinn estarán juntas y yo seré la madrina de su boda.
-Estás loca - la abrazó - amo a Quinn no sé cuándo seremos capaces de aceptarlo y de volver a estar juntas pero no tienes por qué preocuparte, ella siempre será la mujer más importante en mi vida...ella sabe lo que significa para mí, espero que entienda que a pesar de todo y que aunque las cosas cambien a nuestro alrededor hay algo que jamás va a cambiar y eso es lo que siento por ella.
-Bueno - camino junto a la morena de vuelta a la fiesta - tu eres la única que sabe cómo hacer a Quinn realmente feliz enana no lo olvides y disfruta de la fiesta.
Rachel entro a la casa y observo a Zac quien le hacía señas para que acercara, en ese instante vio a Quinn quien se dirigía a la cocina, se acercó al muchacho y se excusó, tenía cosas más importantes que escucharlo, hablar con Santana le había hecho bien, adoraba a Quinn y si quizás estaba el miedo de intentarlo nuevamente y fracasar, pero la quería, ya no aguantaba más estar lejos de ella, Quinn era todo lo que quería, pensó uno y otra vez lo que le había dicho santana era verdad no había motivos para continuar distanciadas, amaba a Quinn y está dispuesta a confesárselo.
La fiesta seguía y las chicas se estaban divirtiendo mucho tanto como Rachel y Quinn habían bailado con diferentes personas al paso de la noche, era genial poder divertirse un poco pero claro Quinn quería bailar con la morena y Rachel quería bailar con Quinn.
La rubia estaba en la cocina disfrutando de unos nachos con queso cuando la morena se acercó hacia ella, Rachel estaba bastante feliz.
I fell in love next to you
Burning fires in this room
It just fits
-Quiero ir a un lugar contigo - la señalo - ¿podemos?
-¿Qué? - se rió ya que la morena le sonreía muy animada.
-Si Lucy quiero ir pero contigo - se encogió de hombros y la chica sonrió amaba que le dijera por su primer nombre.
-No me digas Lucy que me convences inmediatamente.
-Lucy - se aferró a la chica colocando sus brazos alrededor de su cuello - Lucy por favor te lo pido llévame a ese lugar.
-Eres completamente adorable - la miro fijamente, si existiera una mirada de amor esa sería la que la rubia le estaba regalando a Rachel - claro que te llevo, contigo voy a donde sea.
-Genial - beso su mejilla - vamos que se nos hace tarde.
-Pero dime a donde iremos - coloco su brazo alrededor de sus hombros acercándola a su cuerpo
-No - sonrió - es una sorpresa así que mejor se paciente
-Soy la persona más impaciente del mundo.
-Lo sé por eso esto será un reto para ti.
-Eres mala
-De hecho soy muy buena - se acercó y le dio un beso en la mejilla.
Las chicas salieron y pidieron un taxi, Rachel simplemente le dio la dirección al conductor y después de unos quince minutos habían llegado a su destino, era uno de los tantos miradores que existían alrededor del campus, aquel se encontraba en una colina, existía un lugar para que los autos se estacionaran y también una zona especial para que las personas lograran disfrutar de la vista. Aquella noche de un 4 de octubre el cielo estaba completamente despejado lo que permitía disfrutar de las estrellas y la luna. Los Ángeles era una ciudad hermosa, perfecta para las chicas pero lo que más disfrutaban era esa calma que podían darles ciertos lugares como aquel mirador.
Caminaron en silencio hasta llegar al punto más alto, allí Rachel se giró para mirar a Quinn.
-¿Qué te parece?
-Es un lugar hermoso, mira se ve la mayor parte de la ciudad me encanta.
-Lo recordé en la fiesta mi papi me trajo aquí para despedirnos él fue quien me trajo a esta ciudad tu sabes lo mucho que lo amo y lo especial que es para mí.
-Lo se Rach - le sonrió y camino para colocarse a su lado.
-Bueno es punto es que este lugar me dio paz, además me encanto la vista es sinceramente espectacular, pero lo que más me sorprendió es esto - le extendió su mano - ven acompáñame.
Llegaron hasta el filo de la colina, la morena le pidió a Quinn que se sentara a su lado y esperaron en silencio unos minutos hasta que finalmente sucedió.
-¿Qué son esas luces? - pregunto la rubia
-Son luciérnagas - explicaba la morena pasando su mano atravesó de su cabello - a cierta hora de la noche se hacen visibles, son criaturas increíbles y mira nos brindan un espectáculo único de repente el vacío se empieza a llenar de estas amiguitas que nos brindan un poco de luz. Es sin duda fascinante como en medio de la oscuridad ellas son capaces de brillar, siempre he pensado que todos deberíamos ser así, cuando la noche sea más oscura más debemos brillar de esa forma encontraremos el camino adecuado para volver a donde pertenecemos
There's a firefly loose tonight
Better catch it
Before it burns this place down
And I lie
If I don't feel so right
But the world looks better
Through your eyes
-Cuando hablas de esa manera juro que me cautivas - le sonrió y es que era verdad, disfrutaba escuchar a la morena cuando le explicaba algo respecto a la naturaleza - Esto es asombroso, gracias por traerme a este lugar.
-De nada sabía que te iba a gustar...tu un día me diste un regalo hermoso - le mostro aquel collar que la rubia le había regalado tiempo atrás - nunca me lo he quitado es como tener un recuerdo valioso cerca de mí, de esa forma no lo olvido, ese día me dijiste lo mucho que me querías y me demostraste lo cursi que puedes ser - sonrió - Quinn yo ya vi el mundo sin ti, ya salí me divertí conocí personas y no quiero seguir buscando algo que ya lo tuve, algo que ya sentí a tu lado, no quiero seguir caminando por la vida tratando de buscar a alguien que me haga sentir lo que tu logras en mí, esta noche lo comprobé mientras bailaba con Zac lo único que quería era salir corriendo hacia ti y decirte que él no significa nada para mí que tú eres la persona con la que quiero bailar, tu eres la única persona a la que quiero besar y la única a la que desearía hacerle el amor tú y solo tu nadie más, no quiero seguir negando lo que siento, es inevitable es la conexión que nos une y creo que llego el momento de decirte todo lo que siento todo lo que significas para mi Lucy, nunca en mi vida había sentido algo tan fuerte por alguien y ese alguien eres y siempre vas a ser tú, la mujer que mueve mi mundo que me hace feliz, la persona que me enseño como ser fuerte esa eres tu Lucy.
Quinn no dijo nada solo se acercó a la chica y la beso, la volvió a besar luego de meses en los que no había podido probar su labios, el beso era lento y pausado, con su mano la tomo del cuello y la acerco más a ella sus lenguas se encontraron rápidamente dejándose llevar por lo que sentían, sus ojos permanecían cerrados disfrutando de la sensación
-Te amo - susurro la morena - te amo Lucy.
Y finalmente lo dijo, aquella frase que para la morena significaba tanto, finalmente fue capaz de decírsela sin miedos, la amaba todo lo que englobaba aquellas palabras ella lo sentía por Quinn, era feliz a su lado, amaba cada parte de su personalidad, amaba como la hacía sentir, amaba su valor, amaba su perseverancia, la amaba a ella.
And hold me tight
Don't let me breathe
Feeling like
You won't believe
Rachel estaba completamente segura de lo que sentía ¿para qué esperar más? Se conocían de toda la vida y si de algo estaba segura era de que quería que ella, Quinn, la chica que había llegado a su vida para hacerla tan feliz supiera cuanto la amaba.
-Te amo Rach - le sonrió mientras acariciaba su mejilla - creí que nunca lo ibas a decir.
El corazón de la rubia latía muy rápido y estaba a punto de desmayarse no podía creerlo al fin habían hablado sobre lo que sentían, al fin habían decidido dejar los miedos y las dudas a un lado
-Siento la demora - se rió - te amo Lucy y espero que me permitas hacerte feliz.
-¿Eso es una propuesta? - Sonrió - debes pedírmelo formalmente.
-Bien - se levantó y la miro - Lucy Quinn Fabray me harías el honor de ser mi novia, de permitir que te cuide que te amé, te haga sonreír y sobre todo me permitas estar a tu lado cuando más lo necesites ¿Quieres ser mi novia?
No, Rachel no quería esperar más, para que hacerlo si lo único que quería era ser su chica, era vivir nuevas experiencias a su lado, así que finalmente se lo pidió.
-Déjame pensarlo - la morena la miro sorprendida - era broma te amo claro que quiero ser tu novia - se levantó para abrazar a su chica y llenarla de besos - te amo.
-Y yo a ti boba.
-No más de lo que yo te amo a ti.
-Oh dios no puedo creerlo - sonreía la morena - ahora eres oficialmente mi novia.
-Y no te vas a librar tan fácilmente de mi Berry - la abrazo.
-Pues no quiero librarme de ti, de hecho quiero un para siempre.
-¿Cuánto dura un para siempre?
-Mientras tú estés a mi lado - se acercó a besarla nuevamente - mientras estemos juntas para mi ese es un para siempre.
-Me vas a matar de amor - susurro - ¿Al fin encontraste al dinosaurio perfecto? - le decía muy emocionada.
-La encontré cuando tenia cinco años, te amo Lucy - le dijo lanzándose a sus labios.
Y esa fue la historia de cómo aquellas dos niñas ahora convertidas en mujeres decidieron darse la oportunidad de ser felices, decidieron dejar los miedos a un lado y darse una oportunidad de amar, de sentir, esa fue la historia de la primera vez que se dijeron "te amo".
But the world looks better
Through your eyes
Me encantaría que comenten :)