Les informo que este extra se remonta luego de que Kuroko entrara a Seirin, los acontecimientos anteriores son iguales al anime. Dicho esto, espero que disfruten ;)
**NarraKuroko**
-Hey... ¿Escuchaste el rumor?
-Si, si... Ese del club de básket ¿Verdad?
-¡Si, ese! Escuché que ingresó un miembro de la famosa generación milagrosa de Teiko.
-¿¡Teiko!? ¿¡"Ese" Teiko!? ¡No lo creo, increíble!
-¿Verdad que si? Y eso no es todo, ¡dicen que es nada menos que el sexto hombre fantasma!
-¿¡Eh, encerio!? ¿Ese que fue reconocido por los 5 prodigios?
-¡Si! Debe ser súper genial~
-¡Uwhaaa~! ¡Que envidia! Quiero conocerlo...
El rumor se expandió por toda la escuela en tan solo unos pocos meses. Por donde quiera que pase escucho los susurros y risas de los chismosos y chismosas que solo quieren conocer al tan afamado "Sexto hombre fantasma"
Odio ese título.... Me duele ser llamado así....
Planeaba dejar el básket, ya que para mi no había sentido jugar si a las personas más importantes para mí ya no les divierte jugar. Mi deporte favorito, aquel en el que me esforcé tanto para poder jugar a la par con ellos, les aburría. Hacían apuestas de ver quién anotaba más puntos solo para entretenerse con rivales "Débiles"
Llegué a odiar el básket, pero al ver como un chico y una chica esperaban con ánimo que alguien se inscribiera a su club, al ver como otros pocos alumnos repartían volantes de dicho deporte con tanta insistencia.... Al ver ese brillo en sus ojos que indicaba lo mucho que les gustaba jugar, no pude resistir... Quería jugar nuevamente.
Luego de inscribirme, conocí a un chico interesante, "Kagami Taiga". Tenía la mirada de un tigre salvaje, y en la cancha era simplemente impresionante... Al principio, lo vi como un reemplazo de Aomine-kun, pero eso no estaba bien. No platicamos mucho, pero luego de comprobar su fuerza por mi mismo, decidí convertirme en su sombra.
Seirin se volvió mi nuevo equipo, un equipo muy unido. Las charlas, las risas y el ambiente agradable me hacían feliz, pero aveces me llenaba de melancolía al recordar los tiempo en que "Nosotros" también éramos un equipo...
"Generación milagrosa", odiábamos ese título, pero si eso significaba que debíamos estar juntos, no nos importó en nada ser llamados así. Recordaba a menudo lo efusivo de Kise-kun, los cuidados de Midorima-kun, los almuerzos con Murasakibara-kun, el apoyo y alegría de Aomine-kun. Y, también, recordaba esos momentos con Akashi-kun, cuando estaba triste o desanimado, él se quedaba conmigo, me daba consejos o simplemente se sentaba junto a mi, transmitiendo su apoyo en silencio.
Le conté a Kagami-kun mis penas. Al ser mi nueva luz, nos volvimos amigos muy cercanos y siempre está tratando que sonría más seguido. Confiaba mucho en él, por lo que decidí probar su consejo de esperar un tiempo antes de hacer cualquier cosa.
Un día, nos enfrentamos a Kaijo, la escuela donde estudia Kise-kun. Él dijo "Denme a Kurokocchi por favor", y también "Volvamos a jugar básket juntos" mientras extendía su mano hacia mi. Quería aceptar esa mano, ansiaba que volviera a abrasarme, pero no podía traicionar a mi equipo, no quería hacerlo. Ese día, ganamos el partido de práctica. Kise-kun lloró, pero luego volvió a sonreírme diciendo que a la próxima no perderían, verlo tan alegre como siempre me hizo feliz.
Kagami-kun no quería a Kise-kun, él decía que era demasiado empalagoso e idiota. Dijo que era mejor que no esté a solas con él, ya que no sabía si en cualquier momento saltaría sobre mi, cosa que me pareció tonta, porque somos muy grandes como para jugar a "Saltos de rana". Kagami-kun palmeó su frente, colocó una mano en mis cabellos y murmuró un "Olvídalo" mientras sonreía como siempre.
Días después de ver a Kise-kun, el sentimiento de nostalgia perforaba en mi pecho con más fuerza. Quería vernos a todos juntos otra vez. Aunque sea solo un momento, quería hablar con ellos, quería verlos juntos aunque sea por última vez.
Desobedecí el consejo de Kagami-kun, y a las 21:08 pm, me encontraba en el medio de una casi abandonada cancha de básket, con la generación milagrosa esperando frente a mi. Estaban todos: Midorima-kun, Kise-kun, Murasakibara-kun, Akashi-kun e incluso Aomine-kun. Todos estábamos juntos, otra vez...
-Habla de una vez, Tetsu. ¿Para qué nos llamaste? -La voz de Aomine-kun era más fría de lo que recordaba. Su tono, que nos hacía parecer solo un par de desconocidos, me hizo agachar la mirada.
-Yo... quería hablar con ustedes... Decirles algo... -Digo mientras tomo el borde de mi camisa mangas largas con ambas manos.
-¿Eh~? ¿Solo por eso~? No quiero que me llamen por algo tan tonto~. No me importa si es Kuro-chin, pero ya no somos un equipo~. Qué desperdicio de tiempo~ -La voz de Murasakibara-kun era igual que siempre. Floja y pesimista.
-¡N-no es eso! ¡Es importante! -Exclamo mientras levanto la cara para poder verlos. Mis cejas estaban curvadas mientras pensaba que decir. Los ojos de todos me miraban fríamente, quería llorar.
-Habla de una vez, Tetsuya. No quiero perder mi tiempo con ustedes. -Akashi-kun fue el que más cambió, sus ojos fueron los primeros en volverse tan fríos.
No quería eso, no quería que estemos separados. Antes éramos inseparables, y el que ahora nos tratemos como simples conocidos me molesta.
-¡Eso es de lo que quería hablar! -Exclamo mientras frunzo el ceño- ¿¡Por qué ahora estamos tan distanciados!? ¿¡No les importa acaso estar juntos, nunca les importó que fuéramos amigos!?.... Conocí nueva gente, incluso una nueva luz. Soy feliz con ellos pero.... ¿Pero por qué no puedo ser feliz con ustedes también? ¿Acaso ya no podemos ser amigos?... Odio esto... Odio la promesa, odio ser llamados como nos llaman... Yo quería jugar con ustedes. No, mejor dicho... No me importa si somos compañeros o no, tampoco me importa si es dentro o fuera de la cancha pero... Lo único que quería era estar junto a ustedes... ¿Hay algo de malo en eso? Quiero que seamos amigos otra vez... No quiero estar solo...
Probablemente, esa fue la vez en que dije la mayor cantidad de frases en la vida. Mis lágrimas no paraban, me encontraba sollozando lastimeramente mientras intentaba en vano secar mi cara con las manos. De repente sentí unas manos en mi camisa.
**Fin narración**
Aomine fue con rapidez frente a Kuroko y lo tomó con fuerza del cuello de la camisa, rompiendo todos los botones y dejando su pecho y torso al descubierto. Algo en su interior se rompió al ver a su amado Tetsu llorar, y sabía que los demás pensaban lo mismo, ya que todos compartían los mismos sentimientos hacia la pequeña sombra.
-¡Detente, Tetsu! ¡No llores! -Aomine no sabía como consolar a alguien, por lo que sus gritos solo aumentaron las lágrimas de Kuroko- ¡O-oye! ¡Basta, basta! ¡Mira, todo está bien, no llores!
Sus intentos no solo fracasaron en dar frutos, sino que también asustaron al pequeño Kuroko, era la primera vez que le gritaban, y el que sea Aomine le dolía aún más.
-¡Apártate, idiota! ¡No sabes consolar a nadie, mono brusco! -Midorima interfirió justo a tiempo para apartar a Aomine y arrodillarse frente a Kuroko, tomando sus manos con suavidad- Hey... Oha-Asa predijo que hoy sería un día de alegrías para los de tu signo, así que no debes estar triste. Escuchamos tus palabras, y tus sentimientos lograron transmitirse con éxito. Volveré a ser tu amigo, así que no llores, ¿Si? -Murmura con suavidad mientras seca sus lágrimas con una mano.
-¿E-en serio?... ¿Me... entienden?... -Murmura Kuroko entre pequeños hipos mientras se restriega los ojos con los puños.
-Kuro-chin no llores~ Yo también seré tu amigo~. Siento haberte gritado~ -Habla Murasakibara mientras se acerca a Kuroko para extender una paleta frente a él- Toma~
-¡¡Yo seré tu amigo fiel, Kurokocchi~!! -Grita Kise a todo pulmón antes de tirarse sobre Kuroko derramando lágrimas.
-¡Aparta, idiota! -Grita Aomine enojado mientras empuja lejos a Kise.- Ven aquí, hace frío. Toma esto. -Dice mientras se quita su chaqueta para colocarla sobre el cuerpo de Kuroko, tapando su pecho- Supongo que no tengo opción, no quiero que llores... -Murmura mientras voltea la mirada.
Akashi se acerca a Kuroko lentamente, dejando tiempo a los demás para apartarse y colocarse detrás del pelirrojo. Este hace una profunda reverencia frente a Kuroko antes de tomar una de sus manos.
-En nombre de todos me disculpo por hacerte esto. No pensamos que te dañaría tanto. Desde ahora todo volverá a la normalidad, así que ya puedes volver a sonreír. -Dice con voz cálida antes de besar suavemente la mano del peliceleste- Ven, Tetsuya. Sonríe una vez más para nosotros. Vamos a sonreír juntos hoy, mañana, el día después y todos los demás días.
Kuroko miró a todos y cada uno de ellos sorprendido. Nunca esperó esa respuesta por parte de todos ellos. Con una bella y cálida sonrisa, Kuroko asiente con fuerza mientras los demás empiezan a reír alegres. Después de todo, no pueden mantenerse lejos de Kuroko, no pueden dañarlo.
Después de todo, ellos están hechos para mantenerse unidos. No por amistad, sino por el único y pequeño chico capaz de doblegarlos a todos a su voluntad, sin ser siquiera consciente de eso.
Días y días pasaron. Su relación volvió a la normalidad y todos disfrutaron a Kuroko por mucho, mucho tiempo.
Hey~ Aquí lo prometido. El origen de esto es que algunos preguntaron si la historia era después de la Winter Cup. En realidad, como pudieron ver, es en un tiempo-espacio donde las cosas son bastante diferentes.
Bueno, hasta aquí llegamos. Espero que esto haya resuelto sus dudas y esperen los especiales con Hard Sex para ustedes :D