BIENVENIDOS A MI MUNDO IRREAL
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Mientras pensaba que estaba aprendiendo cómo vivir, he estado aprendiendo cómo morir -Leonardo da Vinci.
10 DE OCTUBRE DE 2025.
Londres.
Casa Grande.
―Hemos completado la toma de su declaración y contamos con las pruebas necesarias para proceder con la demanda. Le recomendamos regresar a su hogar, descansar y recuperarse, ya que el proceso será extenso.
Las palabras han estado dando vueltas en mi cabeza. Desde que salí de aquel oscuro pozo en el que me habían metido, lo primero que hice fue tomar un auto y huir en busca de esa persona que sabía qué hacer en caso de que yo no me comunicara: Grigori. Todavía recuerdo su abrazo al verme.
Lo hallé exactamente en el lugar que esperaba; al verme me abrazó, un gesto reconfortante que no sabía que necesitaba. Me sugirió que me bañara, me aseara y lavara todo lo que llevaba encima. Sin embargo, no lo hice. Desde que me dejaron salir, no me había limpiado, seguía sangrando, con quemaduras y restos de fluidos en mi cuerpo. No podía detenerme, debía continuar con el plan. Por lo tanto, decidí abordar un vehículo y acompañado por su presencia me dirigí a la autoridad policial, específicamente a aquella a la que sabía que acudiría, ya que fue mi primera acción al disponer de un teléfono móvil: comunicarme con dichas personas.
Sí, la única manera de desestabilizarlos es revelando toda la información que poseo. Debo desacreditar esa imagen pacífica que proyectan: de personas bondadosas, emprendedoras y salvadoras. Es necesario mostrar su verdadera naturaleza, y yo soy prueba viviente de ello. Al sumar la evidencia que he recopilado, los dejaré expuestos ante todos.
Posteriormente, regresé a esta residencia y fui recibida con interrogantes. Mi respuesta fue breve y concisa: «Asistí a un spa, ¿acaso no puedo hacerlo?». Aunque no expresaron dudas abiertamente, resultaba evidente que no me creyeron por completo.
Permaneceré por un tiempo mientras se revela todo lo que he expuesto. El respaldo proviene de Rusia, mis abuelos me dejaron esa clave con la que puedo comunicarme con las personas que iniciarán la próxima jugada. No podría contar con ningún otro gobierno con el que mi familia tenga asociaciones, pero Rusia siempre ha sido Inaccesible debido a mis abuelos. Sin embargo, cuentan con el respaldo de personas poderosas, como aquellos involucrados en el comercio ilegal de petróleo, tráfico de personas, narcotráfico, tráfico de armas y materiales nucleares, así como en el lavado de dinero. Mi familia también fabrica y vende algunos de estos materiales a estas mafias.
He estado tratando de contactar a Aleix, Brenda y Heba, pero parece que han desaparecido, ya que no logro dar con ellos. Me enteré de la desaparición de Cesare, luego de que Hilai descubriera que trabaja con el hombre de la máscara de gas, algo que se sospechaba, se escapó porque sabe la reputación del Demon King y mi ex no le perdonaría tal impertinencia. Por eso lo tenía de mi lado, ya que los enemigos cercanos y a la vista son mejores.
La familia de mi ex había cortado lazos y luego fueron asesinados. Hilai se encuentra refugiado en un lugar secreto, defendiéndose de los Baker, y me alegra que no haya soltado el trono. Además, es un fugitivo después de que se revelaran sus negocios, pero convenientemente no está vinculado con mi familia.
He comenzado a establecer alianzas con socios, entre ellos se encuentra Grigori, una de las figuras más influyentes en Rusia; a pesar de ser un fugitivo de la ley. Mi objetivo es expandir mi presencia en la mafia italiana y también asegurarme el apoyo de Wolflynn. Con este fin, planeo reunirme con las Alfas Violetas.
A pesar de haber transcurrido varias semanas, mi apariencia física no ha cambiado; mis huesos siguen visibles y aún tengo marcas de moretones y heridas que necesitan sanar.
Utilizo el maquillaje que disimula los moretones que están en proceso de desaparecer. Además, he decidido vestir prendas que cubran mis cicatrices, algunas de las cuales aún están en proceso de curación y requieren vendajes. Por otro lado, evitar moverme al máximo ha sido mi estrategia para evitar cualquier molestia en mis pies al caminar.
―Rápido, Daría ―la irritante voz de Cadmon se hace escuchar.
―Estoy lista ―suelto el brillo labial, dejándolo en la encimera.
Durante todo este tiempo, he caminado a su lado con una postura erguida, tratando de demostrar que estoy bien. He intentado ocultar las secuelas que me han afectado y he querido mostrar que sigo siendo la misma persona.
Accedo al espacioso salón mientras mi hermano se queda rezagado, indicándome con un gesto que pase adelante. Al entrar, me encuentro con la familia reunida en su totalidad, a excepción de Cala. Kai y una persona desconocida de cabello rubio y ojos azules están presentes. Me invitan a tomar asiento en la mesa y rápidamente me doy cuenta de que esa persona es Karim.
¿Cuál es la razón de la presencia de ambos individuos aquí? Es decir, Kai está actuando encubierto, pero Karim no lo está. El silencio se vuelve incómodo y percibo que todas las miradas están dirigidas hacia mí, hasta que el sonido de mi teléfono interrumpe la atención. Observo que es un número desconocido, por lo que decido rechazar la llamada.
La aproximación de Cala se anuncia con el sonido rítmico de sus tacones. Cada vez que escucho ese sonido, experimento un impulso incontrolable de tomar un arma y dispararles a todos en la cabeza.
―Iniciemos entonces ―habla mi madre y todos la ven.
―¿Ella ya lo sabe? ―reconozco la voz de Karim, esto me confirma que sí es él.
―No, ahora ya estás al tanto. Daria, te comprometerás con ambos, aunque desde el punto de vista legal se presentará que te has unido a uno de ellos. ¿Tienes alguna duda?
―Sí, ¿quién es él? Y ¿Por qué tengo que casarme? ―observo minuciosamente al individuo que supuestamente no tengo conocimiento de su identidad.
―Él es Bastian, quien se convertirá en tu esposo. Tendrás la oportunidad de conocerlo en profundidad con el tiempo, y dado que ya conoces a Kai, todo será más sencillo. Dejando de lado el tema del matrimonio, ambos se encargarán de encontrar a Hilai y finalmente podrás satisfacer tu deseo de venganza, ya que lo detestas tanto, tus futuros esposos lo asesinarán.
―Corrección: Madre, le odiaba en el pasado, pues posteriormente descubrí que tuviste responsabilidad en el fin de mi relación.
―Detalles irrelevantes ya que nunca te casarás con alguien como él, así que agradece que he elegido buenos prospectos.
―Claro, porque casarme con tu jefe de seguridad y un desconocido es sinónimo de prosperidad. Harás que vivamos felices para siempre, con tres perros y cuatro hijos. ¡Qué alegría, traigan el arroz!
―Muy graciosa, pero recuerda que harás todo lo que diga y siempre será así. Necesito que empieces a procrear nietos ―me atraganto con el whisky.
―Lo que digas madre, siempre es así ―me pongo de pie y empiezo a alejarme.
―¿A dónde vas?
―A dormir, ¿no puedo?
―Tienes que planear una boda ―la mirada de todos recae sobre mí.
―Yo no haré tal cosa. Si quieres que sea perfecta, organízala tú. Yo me encargaré de procrear a los nietos que quieres ―tomo las manos de cada uno de mis supuestos futuros esposos y los arrastro fuera de la sala.
―Daria, deja que te explique... ―dice Karim, no le permito hablar, ya que lo pellizco.
―Cállate, te van a oír ―susurro.
Me dispongo a acompañarlos al vehículo y comienzo a conducir, al mismo tiempo que activo un dispositivo que bloquea la señal. A pesar de sus intentos por comunicarse, les solicito que mantengan silencio. Al mismo tiempo, abro un sobre que contiene una carta de Grigori que confirma: "Lo tenemos". En este caso, se refiere a Cesare.
―No importa lo que planeen hacer, no funcionará, ya que en una o dos semanas ya no seré parte de los Baker. ¿Desde cuándo una boda es una opción para Wolflynn?
―¿Qué hiciste? ―la voz fría de Kai causa que sonría.
―Algo que no es de su incumbencia; yo no trabajo con ustedes, soy solista en esta banda.
―Eres investigada, ¿lo olvidaste?
―No podría olvidarlo, pero ahora estoy limpia porque no he hecho nada, y cuento con el respaldo de Rusia.
―¿De qué hablas?
―De que su entidad de mierda la uso para limpiarme el culo ―detengo el auto―. Bajen.
―No ―dice Karim―. No vas a arruinar este proyecto.
―No hay ningún plan, entiendan que ya no estaré más en esa casa.
―Vas a huir a Rusia, que cobarde, ¿dónde quedo lo de hacer pagar a los monstruos? ―expresa Karim, recordando aquella conversación.
―Nunca dije que voy a huir ―enciendo el vehículo y el sistema de seguridad tecnológica se activa, permitiéndome devolver la llamada al número que me estaba contactando.
―¡Joder, niña! ¿Qué fue lo que hiciste? ―Kai inquiere, sin embargo, opto por ignorarlo.
―Te queremos ayudar. Kai te ofreció su ayuda cuando tus padres te encerraron y tú no aceptaste. Ahora pretendes arruinar esto, cuando por fin tenemos a tres infiltrados en esa casa ―Karim menciona apuntándome con su dedo.
―Espero que no esté incluida en ese grupo ―giro el volante y todos nos movemos al lado izquierdo por el movimiento.
―Lo estás, sabes que de Wolflynn solo se sale muerto.
―Muerta he estado desde que entré, mejor deberían proteger a su hermanita y alejarse de los Baker.
―¿Qué sabes?
―Nada ―afirmo sin dejar de ver la vía. Kai intenta tomar mi mano, pero la esquivo, por lo que ahora me apunta con su pistola en la cabeza. Sus amenazas no logran afectarme, y me resulta risible que crean poder intimidarme.
―¡¿Qué mierda sabes, Daria?! ―sigo conduciendo e ignoro todas sus preguntas, ahora me estoy dirigiendo donde Aleix, me llegó un mensaje que dice que está en el hospital y no sé la razón.
―Te dije que con ella no se podía ―dice Karim, cruzándose de brazos en el asiento trasero con una actitud algo irritada.
No puedo evitar sonreír al observar a estos dos hermanos, su forma curiosa de ser y relacionarse me resulta intrigante y despierta mi interés por conocer más acerca de ellos.
El imponente edificio cuenta con un detector de metales en la entrada, lo que me obliga a desarmarme antes de ingresar. A pesar de que varias personas me observan, mi atención se centra en la recepción. En ese momento, un niño tira de mi gabardina, captando mi atención.
―Hola ―el pequeño exhibe una expresión facial que refleja ternura, con un leve gesto de puchero en sus labios. Además, posee una mirada muy dulce, unos ojos marrones de gran belleza y un cabello rubio hermoso. En su mano sostiene una hermosa flor que me ofrece.
La mujer que aparenta ser la madre exhibe un cabello muy liso, sedoso, brillante y de tonalidad negro; un cuerpo voluptuoso y curvilíneo. Al igual que unos hermosos ojos color café que comparten similitud con los de su hijo.
―Disculpe, es un niño muy hablador y le gusta charlar con las personas y dar muchos regalos, se nos ha escapado a su padre y a mí ―es notable su vergüenza.
―Tranquila ―me inclino a él y tomo la flor que me extiende―. Muchas gracias, que guapo eres, tu mamá debe sentirse orgullosa.
―No quiero la vacuna ―sus ojos se humedecen y logro comprender la razón por la cual decidió ocultarse de sus padres. Un hombre de aspecto agitado se acerca, su presencia es imponente y tengo la sensación de reconocerlo: lo he visto en la portada de una revista de un equipo de fútbol.
―Aquí estás Campeón ―alza a su hijo y toma la mano de su esposa―. Disculpa si te molestó.
―No es así, no se preocupen. No te dolerá, pero a que si aceptas la vacuna tus padres te llevarán a comer mucho helado y a ver flores para que las regales.
―¿Si mami? ―el pequeño observa a su madre.
―Claro.
―Gracias ―el hombre se retira junto a su familia y no puedo evitar notar al niño, quien me trae a la memoria a Daren, que se comportó de manera similar o incluso peor cuando le administraron la vacuna.
―¿Qué hacemos en este sitio? ―Kai pregunta.
―Casi olvidé que estaban aquí, ¡o no! Sí los olvidé.
―¿Qué hacemos aquí? ―Karim se interpone en mi camino.
―Yo, en mis asuntos; ustedes, no tengo ni la menor idea porque nadie los invitó ―sigo avanzando hacia la recepción sin prestar atención a quienes me están siguiendo.
Ahora tengo dos perros, lo que faltaba.
Antes de permitirme visitar a Aleix, las enfermeras me realizaron una serie de preguntas, además de informarme que ya estaba acompañado. Pretender ser su novia ha facilitado la situación, ya que siguen mostrando dudas debido a mi ausencia durante tanto tiempo. No tenía conocimiento de que llevaba tanto tiempo ingresado, esta revelación ha generado más temor y preocupación. ¿Qué le ha sucedido a Aleix?
Mis acompañantes logran seguirme, simulando ser mis guardaespaldas. Aunque tenía la intención de refutarlo, la verdad es que no me importa demasiado si están aquí o no.
Al entrar por la puerta, me encuentro con la persona acostada en la cama, rodeada de numerosos aparatos e incluso un respirador. Es imposible que esté en coma, esta posibilidad debería ser la última consideración, no la primera. Todo indica que mi suposición inicial no es la correcta, aunque se encuentra muy mal.
―No sabes lo que le pasó, ¿cierto? ―me pregunta Karim.
―Acabo de salir de un pozo, literalmente, ¿creen que estoy enterada de lo que pasó puertas afuera? ―ruedo los ojos. Como odio no tener el control de todo.
―Fueron tus padres.
―¿Por qué razón? Mi familia tiene una buena relación con la suya, ya que su padre se encarga de entrenar a los niños del Oráculo. Él no tenía conocimiento de mis acciones, por lo que no sería acusado de traición, ¿cuál es la razón para que esté así?
―Optaste por involucrarte con él, de forma sentimental, lo que provocó que se enamorara y, posteriormente, se enfrentó a tu familia cuando desapareciste.
―Eso no es cierto.
―¿Qué parte? ―interviene Kai.
―La posibilidad de que él se haya enamorado. En caso de que supuestamente esto sucediera, él se enfrentaría a la desaprobación de su padre; este no lo permitiría, a menos que lo hiciera en secreto.
―Ring, ring, ring, así pasó ―Kai se mofa, al instante mi gesto refleja el desagrado hacia su persona.
La puerta es abierta dejando ver a Brenda, que al instante frunce su ceño.
―¡¿Dónde putas estabas, Daria?!
―¿Qué le pasó? ―contra ataco.
―Las preguntas las hago yo ―la ojiverde me recrimina.
―¡Joder Brenda!, no querrás saber dónde estaba, pero dime: ¿qué le pasó?
―¿Ellos quiénes son? ¿Bueno, él quién es?
―Bren, deseo sinceramente poder explicarte todo en detalle; requeriría de mucho tiempo. Puedo asegurarte que no me fui por decisión propia. Ahora, por favor, ¿podrías informarme qué sucedió?
―Te fuiste, lo cual llevó a que Aleix descubriera ciertos hechos y se enterara de tus acciones contra tu madre. Él confrontó a tus padres, lo cual resultó en un atentado en su contra y ha permanecido en coma durante ocho meses. Supuso que tus padres te habían asesinado, pero no, ¡volviste a huir como siempre y mira lo que pasó!
―¡No me fui! Y ni siquiera soportarías si te contara todo ―no puedo evitar enojarme con ella, me acusa como si fuera mi culpa.
―No me digas débil, no lo soy. ¡Mierda Daría!, ¿cuándo entenderás que soy tu amiga?
He realizado un análisis en ella y he llegado a la conclusión de que posee una gran fortaleza en términos de poder, pero también muestra debilidad frente a las personas que le importan. Un ejemplo claro de esto es este momento, cuestionando mi responsabilidad con lo que le pasó a Aleix. Si le cuento todo lo que viví este año, va a sentir culpa y no la tiene.
―¡¿Qué hace ella aquí?! ¡Sáquenla! ―la voz del padre de Aleix me provoca a estar alerta, si no me causan daño mis progenitores, estoy convencida de que él lo hará si algo le sucede a su hijo.
Cuando intenta avanzar hacia mí, Kai y Karim se interponen. La situación se vuelve tensa y el hombre, con los mismos ojos de Aleix, muestra ira en ellos. Estoy segura de que, de no haber intervenido, me habría hecho daño. Conozco el profundo amor que siente por su hijo, por lo que si quiero ganarme su apoyo, debo revelar un secreto que he mantenido oculto.
―Las flores se marchitan, pero se multiplican ―menciono esas palabras que hacen que el hombre retroceda un paso, asombrado.
―¿Cómo...? ―su voz casi se corta.
―Me lo dijo su esposa antes de morir, Cala la mató para que te unieras a ella.
―¡No es cierto! Ella fue asesinada por mis enemigos. Te metiste con mi hijo y a tu madre no le gustó. Se lo advertí: tú eres un problema; así que vete o no me importará que tus padres me eliminen por asesinar a su pequeña princesita.
―No miento, ahora dígame: ¿seguirá con ella o hará justicia por la mujer que ama?
―No puedo creerte, ya que el simple hecho de expresar esas palabras no garantiza la veracidad de tus afirmaciones.
―¿Qué gano con mentir? Lo único que quiero es que mi familia pague todo lo que ha causado. Si quiere hablar, contácteme por medio de Grigori.
Abandono la habitación, dejando al hombre en un estado de reflexión. Debo regresar y averiguar qué le sucedió a Aleix. Todo apunta a que mi madre está involucrada en esto, y la razón por la cual él se encuentra en coma es para mantener alejado a su padre. ¿Pero por qué? Eso lo tengo que descubrir.
...
15 DE OCTUBRE DEL 2025
Irlanda - Dublín
The temple bar
Un viaje.
Sí, mi madre se las dio de la más familiar y organizó un viaje. Uno donde toda la familia está reunida. Sin embargo, decidí acudir a este establecimiento para degustar whiskys, ya que mi organismo lo requiere. Hemos llegado hace una hora y es de mañana; no soy la única que busca alcohol a tan tempranas horas, el establecimiento está lo suficientemente lleno.
Mi mano se dirige hacia el diminuto relicario; hace algunos días encontré el pequeño colgante que le obsequié a mi hermano, estratégicamente sé que fueron ellos quienes lo dejaron a la vista, y ahora lo llevo conmigo.
He evitado encontrarme con mis posibles futuros esposos. Es imprescindible que me dirija a ver a Grigori, dado que Cesare se ha mostrado reacio y no ha revelado ninguna información sobre el enmascarado; aunque sé que no posee conocimiento alguno al respecto a quién es el sospechoso enmascarado, que finja saber algo me resulta irritante. Requiero que me proporcione detalles acerca de todas sus interacciones con él, ya que esas pistas me resultan de gran utilidad.
―Dame una copa de The Macallan Fine and Rare Collection 1926.
El caballero me atiende y comienzo a saborear el exquisito sabor del whisky, al mismo tiempo que observo a las personas presentes en el entorno. Turistas en su mayoría, junto con algunos residentes locales. La visión de sus cabellos pelirrojos me resulta desagradable.
Lo más sorprendente de este período de tiempo distanciada del mundo es descubrir que Ali es en realidad una Kobayashi y, además, una infiltrada de esa familia en la nuestra. O al menos lo era, ya que ellos no saben que ella sigue viva y mis padres creen que la he matado y su familia cree que fue descubierta. Se trata de una generación de yakuzas altamente capacitados, pertenecientes a una pequeña y letal organización que pasa desapercibida. Lo más importante es que sienten un profundo odio hacia Cala Baker, la asesina del anciano líder de esa familia.
La incorporación que realizó Grigori a nuestro equipo es una ventaja significativa. Hasta el momento no he tenido la oportunidad de enfrentarme a ella, ya que temo que, al verme, no dudará en utilizar su katana contra mí y atravesar con ella mi corazón. Además, el ex de mi madre no reveló que trabaja para mí, por lo que hemos programado una reunión de socios en los próximos días para discutir la siguiente fase de nuestro plan.
―¿Un trago? ―un desconocido se acerca y desliza su mano desde mi hombro hasta mi brazo, mientras puedo percibir su respiración tan próxima a mi mejilla.
Siento un escalofrío y un profundo temor que me invaden, enseguida vienen a mi mente los recuerdos de los hombres que abusaron de mí; sus jadeos, palabras y roces en mi piel. En ese instante, mi cuerpo reacciona alejándose del desconocido.
―Le pido que no vuelva a tocarme y no deseo aceptar su oferta ―volteo mi rostro y hago caso omiso al hombre que me observa fijamente en la barra.
Una vez más, siento una mano posarse en mi hombro y la retiro con determinación. Furiosa, me giro para recriminar al hombre.
»¡No escucho que no...! ―detengo mi discurso al percatarme de la presencia de Kai y Karim frente a mí, lo cual me hace reír al observar detenidamente a uno de ellos―. En realidad, el cabello rubio no te favorece.
―Estoy en búsqueda de la persona que pidió tu opinión ―el hombre contraataca y yo levanto mi ceja mientras llevo el vaso a mis labios para tomar un sorbo.
―¿Qué hacen aquí?
―Venimos a pasar informes, dado que hasta el momento no nos ha permitido explicar detalladamente la situación, y también para informarle sobre otra misión pendiente.
―Primero que nada, quiero aclarar que ya no soy una agente, me he retirado. Antes de que comiencen con su discurso ineficiente y amenazante, debo informarles que ya he concertado una cita con el señor alfa negro. En segundo lugar, ¿no se supone que ambos están trabajando de incógnito y no pueden tener misiones aparte de esta?
»Antes Karim era mi supervisor, ¿quién es ahora el supervisor de ustedes dos? ¿Se ha eliminado esa extraña regla de que no pueden realizar dos tareas a la vez, o te han destituido de tu cargo como alfa azul? Además, me gustaría preguntar, ¿cuál es la función de los Alfas como infiltrados en mi casa? ¿Acaso les faltan agentes? Es posible que todos hayan huido debido al fracaso de su organización.
―Tenemos un permiso especial, y deja de ser tan preguntona ―expresa, Karim.
―Nunca. Preguntas es mi segundo nombre. Y Kai, eres un alfa Blanco, por consiguiente, no se dispone de ninguna información sobre ti, tu hermano fue quien proporcionó esa escasa cantidad de datos al lograr relacionarlos.
―Deja de espiarnos ―se enoja Karim.
―¿Por qué? ¿Va a amenazarme otra vez? ―tenemos un pequeño duelo de miradas, hasta que su acompañante interrumpe.
―Si, ese es el cargo que porto, entonces no hallarás más nada que lo que sabes, eso tenlo por seguro ―dice Kai.
―Tampoco me interesa investigarlos, ya no me sirven ―el camarero me sirve otro vaso que al instante comienzo a consumir.
―Sabemos todo ―Kai me observa sin cortar el contacto visual—. Y todo es todo.
―Sé más específico, no sé de qué hablas.
―Tenemos conocimiento acerca de tus abuelos, de las acciones de tu madre y del incidente del robo del motor a la Nasa.
―¿Hay algo más que deba yo saber? Dado que estuviste presente, Kai, obviamente sabes lo que me hicieron mis padres. En cuanto a los negocios, es evidente que están al tanto, ya que Kai es prácticamente su mano derecha ―ironizo.
―No respondas, necesita saber qué más sabemos ―relata Karim y lo veo analizar su celular.
―No me interesa en absoluto lo que puedan saber, y si desean compartirlo conmigo, adelante. También puedo compartirles lo que sé, aunque dudo que su agencia tome alguna acción, ya que no intervienen sin pruebas. Por lo tanto, mi palabra no tiene ningún valor ―poseo las evidencias, sin embargo, no las entregaré a ellos; las revelaré de manera pública ante la mirada del mundo.
―¿Qué sabes? ―Kai se aproxima a mi rostro.
―¿Qué quieren saber? ―observo a su hermano.
―Todo ―expresa el hombre de ojos grises.
―Ya saben que mi familia se involucra en actividades ilícitas como el lavado de dinero, la venta de armas, tecnología y fármacos, así como en negocios políticos y el tráfico de órganos. Además, lamentablemente, también se han registrado casos de maltrato intrafamiliar ―río, por la pequeña broma interna ―. Desconocen los experimentos en humanos realizados por mis padres y los descubrimientos significativos que harían cambiar las normas del mundo, incluso las creencias.
―Los experimentos no son válidos si no se basan en testimonios o denuncias de las víctimas, así como en pruebas que respalden los resultados, los cuales pueden ser alterados por los gobiernos. Además, los descubrimientos científicos pueden ser influenciados por leyes.
―Les informé que no son de utilidad para mí. Podría eliminarlos sin dejar rastro y así saldar mis deudas con ellos y ustedes ni enterados.
―Pero quieres torturarlos, la pregunta es de qué forma ―la proximidad de Kai al tomar la copa de mi mano y beber su contenido cerca de mi rostro me hace recordar el día en que me comió el coño en ese consultorio.
―Solo queremos una cosa ―interviene Karim―. El tiempo que estés aquí, antes de lo que sea que vayas a hacer, apóyanos y finge que estás de acuerdo con la boda.
―A veces pareces idiota. Eso es exactamente lo que he hecho en todo este tiempo.
―Es necesario actuar con mayor falsedad, ya que tu madre está planeando reemplazarnos. Parece ser que no somos de tu agrado y ella lo nota, y mi identidad está en peligro, con numerosas lagunas que tu madre pronto descubrirá.
―Lamento la situación que están atravesando, me resulta difícil comprender por qué debo brindarles esa ayuda. Parece que han olvidado que fui quien les advirtió sobre las sospechas que recaían sobre Kai, e incluso tuve que recurrir a un beso para despistarlo, ¿lo olvidó, Karim? Ambos se burlaron de mí, no les debo nada.
―Tú no podías tener conocimiento de otro infiltrado, así que usamos esas medidas.
―¿Que tu hermano se metiera entre mis piernas también forma parte de esa medida? ―Kai se muestra impasible al exponerlo, mientras su hermano lo mira con el ceño fruncido.
―¿Qué hiciste Kai? Siempre causando problemas.
―Ne tvoye delo, chto ya delayu ―no puedo evitar lo graciosos que son ambos cuando están juntos, se diferencian sus comportamientos a cuando estoy a solas.
―Zapreshcheno svyazyvat'sya s agentom
―Ty znayesh', ya ne sleduyu pravilam, brat
Ambos me observan y perciben que los miro con confianza, mientras una sutil sonrisa se asoma en la comisura de mis labios.
―Nos entendiste, ¿cierto?
―Sí, sin embargo, acabo de verificar algo.
―Deja el ego que no me gustas ni un poco ―Kai comenta. Resulta difícil confiar en esas palabras dado que constantemente me mira con intensidad y sus gestos indican que siente cierto interés hacia mí.
―Eso no es lo que decías, pero me da igual, escucharon el apellido: Zhukova.
La simple mención desencadena en los individuos una ira tan intensa que uno de ellos agarra firmemente mi brazo, mientras que el otro, de manera discreta, me apunta con un cuchillo. Ambos intentan intimidarme, pero yo simplemente me divierto con sus reacciones y el hecho de que siempre responden a mis preguntas sin necesidad de hablar.
―¿Por qué siempre nos amenazas y te empeñas en meter las narices donde no debes? ―nuevamente la voz fría y seca de Karim se hace escuchar.
―Yo no he dicho nada, solo pregunté, y aquí los que meten las narices son ustedes, perros falderos.
La presión en el brazo duele y me quejo expresándolo en mi rostro, al observar el brazo que él tenía sujetado puedo ver que la camisa empieza a mostrar el líquido rojo. Me acaba de lastimar la herida.
―La sujetaste muy fuerte, Kai ―su hermano le recrimina.
―No es así, solo que se me ha soltado el punto. Actuaré porque debo mantener mi papel, no porque ustedes me lo soliciten. Además, dejen de reaccionar tan defensivamente cuando descubro algo sobre sus identidades. Ustedes saben todo sobre mí y no me quejo al respecto.
―Lamentamos lo de tu hermano ―la sola mención me hace fruncir el ceño.
―Wolflynn decidió no incluirlo en sus protegidos debido a que solo era un agente, y eso es algo que no puedo ignorar, por lo tanto, no me importan sus lamentos.
...
Todos nos encontramos finalmente en la residencia, disfrutando de una agradable tarde de verano. Algunos se encuentran tomando el sol, mientras que yo me resguardo bajo una mesa con una sombrilla, deleitándome con un exquisito vino. Si no me controlo, acabaré embriagada.
No sé cuándo podré volver a lucir un traje de baño, ya que estas heridas se abren constantemente. Necesito recuperarme, pues no estaré al cien por ciento cuando comience la guerra que se avecina.
Mientras llevo la copa a mis labios, no puedo evitar observar a los dos caballeros que se desplazan con una apariencia digna de un filme de salvavidas, luciendo pantalonetas y exhibiendo sus torsos desnudos. La imagen de Kai sin ropa se proyecta en mi mente, pero la aparto al instante. Karim ostenta un tatuaje de serpiente que se extiende desde su brazo hasta su pecho, es tan realista que estoy segura de que no es parte de su identidad fabricada.
Lo más desafortunado es que ambos se acercan directamente hacia mí, uno se sitúa a mi lado y me besa en la mejilla, mientras que el otro coloca su mano en mi hombro. En un instante, no puedo evitar temblar y derramo todo el contenido de mi copa. Parece que la presencia de alcohol en mi organismo me ayuda a lidiar con la avalancha de recuerdos que insisten en manifestarse, así como con la sensación de que todo está ocurriendo de nuevo.
―Ya no están viendo para acá, suéltame ―muestro mi descontento mientras intento sonreír, mirando a Kai con la esperanza de que retire su mano de mi hombro.
No debería tener estos espasmos en mi cuerpo ante el contacto con hombres, antes no los tenía y había pasado por lo mismo, debo controlar mis emociones.
―Tu hermano aún está viendo ―acerca su rostro a tal punto que nuestros labios se rozan―. Ya nos habíamos dado besos antes, no te incomoda, ¿cierto?
Kai mueve sus labios en un juego de roces lentos, hasta que los une en un dulce beso. Desliza sus manos sobre la amplia bata de baño que llevo puesta, la cual cubre la mayoría de las heridas.
―Ya dejó de ver, quítate ―lo empujo y me empiezo a servir más vino.
―Tengo una buena crema para cicatrices, te la puedo recomendar si quieres ―ignoro sus palabras y sigo bebiendo, hasta que él viene y me quita la copa.
―Tu exnovio tiene orden de captura y ahora mismo van a ir por él ―me cuenta Karim. Contemplo cómo ingiere agua mientras recoge su cabello rubio teñido hacia atrás con delicadeza, peinándolo al mismo tiempo.
―Lo sé, pero no va a estar ahí.
―Qué linda, la pareja ha vuelto ―se burla Kai, saco mi celular en busca de la imagen que lo hará enfurecer.
―Qué linda es ella, ¿no?
Desde mi dispositivo móvil, exhibo una imagen de una encantadora infante con ojos marrones y cabello de un intenso tono azabache. En el momento en que intenta confiscar mi teléfono para raptármelo, empleo mi agilidad para esquivarla y me alejo de su alcance. Puedo percibir sus quejas junto a su hermano, quienes comienzan a llamarme; sin embargo, opto por hacer caso omiso a sus palabras.
La luz del sol me alcanza, y aunque anhelo sentir su calor, me contengo para ocultar mis heridas. Desde mi lugar solitario, mirando al cielo, pronto se unen Adriel y Cadmon. No los determino ignorando su presencia y saludos, mientras llevo a mi boca una patata que acompaño con vino.
―¿Qué tal estuvieron tus vacaciones? ―el sarcasmo en las palabras de Cadmon es evidente.
―¡Excelente! La mejor parte fue conocer a tus amigas, las ratas. ¡No, mentira!, conocer a tu verdadera familia biológica, ratas como tú.
―Maldita ―el enojo es evidente y se ve opacado por la risa del mayor: Adriel.
―Jaque mate, te mató, Cadmon.
―¡Cállate, Adriel! ―se retira diciendo alegatos que ignoro, dejándome en compañía del primogénito.
―No quiero tener que matarte, Daría ―rompe el largo silencio―. Así que compórtate y cumple lo que se te dice.
―¿Te importo yo?
―Aunque no lo creas, sí ―una risa irónica se mezcla con el sonido del chapoteo del agua mientras Cadmon y Kai se lanzan juntos a la piscina.
―Tu concepto de preocupación está completamente equivocado. No te importó abandonarme en ese bosque ni todas las cosas que los demás me hicieron; por lo tanto, morir resulta menos lamentable.
―Soy consciente de que nuestra familia no es perfecta, pero considero que lo que hemos logrado a través de las dificultades ha valido la pena.
―Realmente han logrado influir en tu forma de pensar. Anteriormente los consideraba malvados; ahora los compadezco y creo comprender las razones detrás de sus comportamientos.
―No puedes vencer esta fuerza, Daría; por lo tanto, es mejor que vivas a tu manera sin intentar destruir algo que es superior a ti. Has hecho el intento y has fracasado, no tendrás otra oportunidad para sobrevivir. En esta ocasión, sí te van a matar.
―No existe edificación indestructible, siempre hay grietas, cimientos débiles, material no resistente o mucha carga.
...
15 DE OCTUBRE DEL 2025
Londres
Fortaleza de Daria.
El viento fuerte me envuelve mientras mi vestido largo se mueve en armonía con su dirección. Avanzo rápidamente hasta llegar a la imponente entrada de este lugar, donde puedo apreciar que Grigori ha seguido meticulosamente todas mis instrucciones en cuanto a la estructura y las instalaciones que deben estar presentes en el edificio, incluyendo las habitaciones para los soldados, campos de entrenamiento y armería.
Al transitar, varios hombres me observan, pero guardan silencio, lo cual me hace suponer que él les ha instruido desde el principio sobre mi identidad. Finalmente, llego a la zona más remota, destinada a las confesiones o, más precisamente, a las torturas para obtener información. Visitar este lugar es como mi proyecto personal, mi propio pentágono.
Dos hombres custodian la puerta de la habitación, abriéndome paso para que pueda entrar.
―¿Ha dicho algo? ―el repiqueteo de mis pasos y el sonido de las cadenas que el italiano intenta soltar es persistente.
Al oír mi voz, Cesare, que tenía la cabeza gacha, ejerciendo fuerza como si pudiera romper las cadenas, alza su rostro y me mira con desprecio, indicando que el hombre que me propuso una tregua de unión ya no está presente. Así que se ha ido el idiota con cara de ingenuo para que aparezca otro idiota que no cree ser ingenuo, pero es mucho más de lo que imagina.
―Daria, que bueno tenerte aquí. Y no, ni una sola palabra ha dicho, afirmó que hablaría hasta que tú estuvieras frente a él ―me cuenta el ex de mi madre, y le da un puño en el rostro.
―Pues aquí estoy, su Majestad, el heredero de la mafia italiana. Cuéntamelo todo ―me burlo descaradamente.
―Sigues creyendo que no te están usando.
―A diferencia de mí, es posible que no te percates, pero al menos yo soy consciente cuando se aprovechan de mí. No obstante, parece ser que siempre te utilizan y tú ni siquiera te das cuenta.
―Estás bajo las faldas de tu madre, ¿qué dice eso de ti?
―Error. Aver... escúpelo todo, ¿por qué me odias tanto si no te he hecho nada? Déjame adivinar; tu papi dice que yo maté a tu madre, ¿no es así?
―¿Lo hiciste?
―Esa pregunta deberías responderla tú, sabes la respuesta, pero te niegas a ver la verdad: es como querer hacer ver a un ciego.
―Me mencionas esto para sembrar dudas, fuiste tú quien quiso vengarse porque él te violó, es tu forma de actuar. Observa cómo estás repitiendo el mismo patrón con tu familia, pero ellos te manipulan, el enemigo está muy cerca de ti.
―No, lamento informarte y abrirte los ojos, no causo daño a personas inocentes. Mi objetivo es ir directamente tras el responsable; y sí, tu madre podría haber sido una opción para desahogar mi dolor; sin embargo, personas como tu padre solo se preocupan por sí mismos, ni tú ni tu madre podrían satisfacer mi sufrimiento. Por lo tanto, decidí despojarlo de su imperio, lo cual lo llevó a la locura y finalmente a su muerte. Corrijo, hice que mi hermano lo eliminara de manera dolorosa.
―¡No es cierto! Hasta el enmascarado sabe que tú lo mataste.
―Tienes la verdad frente a ti ―libero las ataduras y presento una prueba que demuestra que el padre fue el responsable del fallecimiento de la madre. Ve las imágenes con dolor―. El enmascarado me envió a ti porque creyó que yo te eliminaría; sin embargo, eso no está dentro de mis planes, ya que no tengo intención de hacerlo. Ahora, quieras o no, trabajarás para mí y vivirás bajo mi supervisión, ¿comprendes? ¡¿Me has entendido?!
―¡Sí!
―La rapidez con la que todo ha sucedido es sorprendente. A pesar del empoderamiento que has adquirido, con solo tres palabras vuelves a ser tú mismo, un fiel sirviente ―sujeto su cabello, elevando su rostro para que me mire―. Te ofreceré algo que nunca has deseado: la corona del rey de la mafia italiana. Debes tener en cuenta que soy yo quien dicta las órdenes, tú eres la cara visible, pero yo soy la mente maestra detrás de todo. Si alguna vez intentas traicionarme de nuevo, ten en cuenta que no permitiré que experimentes una muerte rápida, será lenta y dolorosa.
―Si te digo que sé quién es el enmascarado, ¿qué me harás?
―Eres un estratega deficiente, un líder ineficaz y careces de inteligencia. No sé cuántas veces tendré que repetirlo para que finalmente entiendas que no puedes manipularme ni extorsionarme. Sería ingenuo darte poder, a diferencia de ese misterioso hombre que claramente es astuto. Todos en este lugar sabemos que no tienes idea de quién es él, incluso el soldado de la entrada demuestra ser más inteligente que tú.
―¿Me dejas vivir porque quieres a la mafia de tu lado?
―Dos más dos es igual a cuatro. Hay un pequeño error, no quiero a la mafia de mi lado, la quiero a mi disposición y siguiendo mis órdenes. Camina que tenemos trabajo que hacer.
Veo cómo los hombres lo arrastran, mientras yo camino por las instalaciones, terminando de recorrerlas: por fuera es degradante y pon dentro un gran palacio, la fachada perfecta.
―¿No es hermoso? ―señala el lugar―. Que una mujer no pueda liderar es completamente falso, y menos una Baker.
―No considero que se deba a ser mujer con ese apellido. Siempre se ha demostrado que las mujeres son más inteligentes que los hombres que actúan impulsados por sus pitos. También debo reconocer que tuviste tu parte en esto.
―No, únicamente cumplí con las instrucciones que usted me dio; esto es resultado de su sacrificio.
―No me agrada ser tan modesta y atribuirme todo el mérito, que sé que en su mayoría me corresponde, pero no puedo ignorar su contribución, señor Grigori.
―¿Señor? Soy una uva pasa, más respeto.
―Está bien, Grigori.
Nos preparamos para llevar a cabo el plan de ataque, logísticamente ideado por Grigori, él se encargó de que sus hombres investigaran. Hoy tomaremos la residencia del líder actual y exhibiremos su cabeza como un acto de protesta; además, aprovecharemos para despojar a Cala Baker de uno de sus tentáculos.
Con dificultad trasladamos al individuo que apenas puede caminar debido a los golpes recibidos, luciendo elegante y con un peinado impecable. Mientras los soldados restantes se retiran en camionetas, los demás se encuentran a pocos metros de la residencia que nos disponemos a atacar.
Porto un pasamontañas y vestimenta militar. Al alcanzar la cima del edificio, el ruido de las hélices y el viento nos golpea. Los tres nos embarcamos en un breve vuelo hasta llegar a la zona donde nos aguardan.
Al descender, fui recibida por los líderes de cada pelotón, quienes me mostraron las cámaras de los drones que ya estaban sobrevolando la zona, además socializan el plan de acceso a la extensa propiedad, confirmando de esta manera todas nuestras previsiones. Di la orden para que comenzaran el ataque. El sonido del fuego cruzado y de las granadas resonaba en el aire, demostrando que el enemigo estaba dando batalla, lo cual era previsible dado que la mayoría de sus hombres habían sido entrenados por el padre de Aleix.
Avanzamos hasta llegar a la entrada, mientras por el audífono me informan que planean evacuar al hombre al techo. A mi lado, tanto Grigori como Cesare me siguen.
Fuimos abordados por un grupo de seis individuos, quienes al vernos comenzaron a dispararnos. En respuesta, lancé una granada que los obligó a buscar refugio. Aprovechando el sonido de la explosión, salimos de nuestro escondite y abrimos fuego, logrando eliminar a dos de ellos. Decidí dejar mi arma de fuego y opté por utilizar una eléctrica, lo cual causó que uno de ellos se convulsionara al recibir la descarga. Mientras tanto, Grigori estaba golpeando brutalmente a otro de los atacantes, y Cesare le clavó una navaja en el pecho al último. Aparentemente uno salió huyendo.
―¡Muévanse, se nos va! ―Grigori nos indica la escalera, evaluamos el perímetro y seguimos ascendiendo.
Al llegar a la cima, se produjeron disparos por parte de ambos grupos, hasta que se escucharon las hélices de un helicóptero que se acercaba, anunciando que venía por el hombre que debíamos eliminar. Corrí y me moví de un lado a otro, contando con el apoyo de los dos hombres que protegían mi espalda. Al encontrarse solo acompañado por tres hombres, logré deshacerme de ellos: empujé a uno de ellos, haciéndolo caer desde varios pisos de altura, a otro le disparé directamente en la cabeza y al último le propiné una ráfaga de tiros en todo su cuerpo, salpicando sangre por doquier.
Hago que el líder actual se arrodille, mientras que los soldados de nuestro bando traen a algunos de los hombres que debían obedecer las órdenes del líder anterior y proteger al legítimo heredero; es decir, Cesare.
―Pagarán por esto, cuento con protección ―lo silencio dándole una patada en sus partes íntimas y otra en su estómago.
―Córtale la cabeza ―Grigori le ofrece un machete, el italiano duda al tomarlo, pero le transmito con la mirada que es imprescindible, prácticamente le insinúo que es una cuestión de supervivencia, ya sea su cabeza o la de él.
Le propina un golpe con el machete en su cuello, lo que provoca salpicaduras de sangre, lo cual se hace evidente a través de los gritos y quejidos constantes. Continúa golpeando repetidamente hasta lograr separar la cabeza del cuerpo. Luego, señala la cabeza que ha rodado a unos metros de distancia y la toma por las hebras de cabello. La atención de todos los presentes está puesta en él.
Intento comunicarle mediante mis gestos las acciones que debe llevar a cabo; por lo tanto, se dirige hacia el helicóptero estacionado, donde mis soldados apuntan con sus armas a la cabeza del piloto y a los dos hombres que se encuentran detrás. Les entrega la cabeza, lo cual los deja horrorizados y sin palabras.
―Díganle a Cala Baker que el único líder soy yo, Cesare Capelletti.
Con dichas palabras, el helicóptero se aleja, los hombres hacen gestos de sumisión, uniendo sus fuerzas al líder legítimo y único de la mafia italiana.
...
20 DE OCTUBRE DEL 2025
Londres / Puente de Westminster
Ruta Magical Merlink, parada: London Eye
―Hola, hermosa ―dejé de prestar atención al entorno al sentir las manos de Hilai en mi cintura y su voz tan cerca de mi rostro.
―No contacto físico ―expreso y separo los brazos de mi cuerpo. Al instante los observo detenidamente; sus ojos, nariz, pómulos y mechones de su cabello―. ¿Cabello rojizo? Admito que sí te queda.
―Y tú vuelves a ser tú, y eso me encanta ―intenta tocar mi cabello, pero retrocedo―. Entiendo, no tocar.
―¿Cuál es el mensaje que deseas comunicarme? Confío en que sea relevante, ya que ambos estamos tomando un riesgo al estar aquí.
―Es Heba, tu madre causó desacuerdos con los japoneses o coreanos, no estoy seguro. Me han informado de que la tienen y sé que la están torturando. Anteriormente, intentaba entablar un diálogo para llegar a un acuerdo y hacer negocios con ellos, pero me consta que Cala los tiene bajo su control o en su nómina y no desean colaborar conmigo para evitar conflictos.
»Probablemente, le apliquen el Yubitsume y la dejen libre; con tu madre vigilando y ella sola y sin apoyo, estará en peligro en cuanto deje de estar bajo posesión de ellos, no tardarán en llenarla de balas. Heba se independizó y eso no le gustó a tu madre.
―He intentado establecer contacto con ella y ahora comprendo porqué no logré localizarla. Me encargaré de resolver esta situación y no permitiré que sufra daño alguno. Si me lo permite, claro; sé que es muy orgullosa y es posible que no desee aceptar mi ayuda.
―Hice el intento de liberarte de la influencia de tus progenitores, lamentablemente no tuve éxito. Lamento mucho no haberlo logrado.
―No tienes que hacerlo, estoy bien, nada ha pasado.
―Seguir fingiendo que te creo no está en mis planes.
―Ese no es mi problema, Hilai. Ahora tengo que irme, ¿o tienes algo más por contar?
―Además de la traición de Wolfynn, quienes me dieron la espalda, estoy siendo perseguido y tengo una orden de captura y extradición; sin olvidar que hay otros que quieren mi cabeza. La situación no es agradable. ¿Has recibido noticias sobre Aleix?
―Sí, he sido informada de la situación y espero sinceramente que mejore. En caso contrario, confío en que su padre estará de mi parte o me ganaré un balazo por causa suya, al menos eso es lo que creo.
―Nos vemos entonces en la reunión que organizaste ―intenta partir, pero tomo su mano, deteniéndolo.
―Lamento lo de tus padres, sé cuanto los quieres ―me acerco a su pecho dándoles un gran abrazo.
―Fue horrible, los torturaron y los dejaron en la calle con una nota ―su voz denota furia.
―Cadmon suele hacer eso, de verdad que lo siento.
―No te disculpes por algo que tú no hiciste.
Me aparto de su pecho para observarlo detenidamente. Su rostro está inclinado hacia abajo, ya no es el chico animado y bromista de antes. Puedo notar claramente que la pérdida de sus padres le ha afectado profundamente.
―Tengo la certeza de que el Demon King hará que reciban su merecido.
―¿Creía que odiabas ese apodo?
―Detestaba tus acciones inapropiadas, pero ahora mi percepción de lo correcto y lo incorrecto ha cambiado. Sería contradictorio de mi parte juzgarte, considerando que fui responsable de la muerte de mi padre y contribuí indirectamente a la pérdida de mi hermano. No somos ángeles a los cuales pedir milagros.
―Pero sí demonios para hacer pactos ―ambos nos miramos durante unos instantes, como si aquel afecto comenzara a renacer, como si los años perdidos hubieran sido olvidados y simplemente retomamos desde donde lo dejamos.
La escena se torna sombría al presenciar el vuelo de un helicóptero que nos ilumina con su haz de luz.
―¡Mierda! ―rechina y lleva su mano al porta armas, preparándose para disparar.
―Hilai Dempster, queda arrestado por tráfico de estupefacientes, terrorismo y crimen organizado; tiene... ―la presencia del individuo que surgió detrás de nosotros es ignorada, dado que este comienza a escapar, y los disparos del helicóptero no tardan en llegar.
―Kai y Karim, ¿en serio me usaron para dar con él?. Creí que no volvería a ser utilizada por su inepta organización ―entrelazo mis manos con gesto de disgusto y lo examino con desdén.
―Lo siento preciosa, así es la ley ―expresa Kai, dando pasos hacia mí.
―Entiendo, así estamos jugando ―comienzo a efectuar disparos y persigo al hermano, impidiendo que siga a mi ex pareja y otorgándole una ventaja para que logre escapar.
―Lo siento, me entrego voluntariamente por haber interferido ante la ley ―levanto mis manos en señal de sumisión. Karim tiene la indecisión de seguir a mi ex o detenerme a mí, al final decide seguirlo y me quedo sola en el puente. Ambos hermanos se marcharon tras Hilai.
Cojo mi teléfono móvil y me dirijo en sentido opuesto. En el primer tono, la llamada es respondida.
―Sí, jefa ―dicen al otro lado, me adentro en la camioneta que me espera.
―Necesito que ayuden a Hilai.
―¿Qué hay de usted?
―Ayúdenlo y déjame con tres de tus hombres, no puede ser atrapado, ¿entendido?
―Fuerte y claro.
...
Años atrás, narrador omnisciente.
―Heba, ¿qué es lo que haremos? ―la pequeña pelinegra preguntó.
La belleza de esa niña siempre ha sido indescriptible. Sus ojos son tan oscuros como un bosque a media noche y su piel tan blanca como las nubes, casi pálida. Cualquiera podría pensar que es una belleza sacada de un libro de fantasía, donde la protagonista es una vampira de épocas prehistóricas expulsada del Olimpo. Desde su nacimiento, Daría ha causado un gran impacto. Es como un emisario de la oscuridad, una pantera con un alma perversa.
―Vamos a tomar una de esas armas y disparar ―le respondió una versión más joven de Heba. La belleza de la niña no pasa desapercibida, con sus ojos grises que resaltan en contraste con su piel morena radiante. Aunque solo se pueda apreciar su rostro, es evidente que bajo esa túnica se esconde una niña de gran belleza.
―Benyamin dice que no debo tomar armas ―hizo un puchero y cruzó sus brazos.
―Ya lo hiciste antes, ¿tienes miedo? ―era un hecho verídico que ya se le habían asignado múltiples asuntos que no eran adecuados para su edad.
―Sí, pero debo obedecer a mi hermano. Él me cuida, eso siempre me dice.
―Qué tonta, ¿tú sí vienes Brenda? ―las dos niñas estaban muy pendientes de la respuesta de la niña de cabello rizado y ojos tan verdes que parecían transportarte a un bosque lleno de vida, donde el color verde se extiende sin límites.
―¡Sí, qué divertido! ―una infanta animada se hizo escuchar.
Finalmente, las tres niñas decidieron tomar un arma de la armería que se encontraba en la casa de forma clandestina. Daría decidió acompañarlas para evitar quedarse sola, mientras que Brenda las siguió por diversión, aunque no tenía intención de disparar, no iba a decirlo para no sonar cobarde.
Por otro lado, Heba, quien ya estaba siendo entrenada, no temía a nada y disfrutaba de la adrenalina y lo desconocido. Existe una conexión especial entre estas tres niñas, la cual está relacionada con la herencia que recibirán y la responsabilidad que implica llevar el apellido que cada una de ellas lleva consigo.
Daria continúa siendo educada por su madre con el objetivo de crear un ser excepcional. A pesar de que sus hijos han sido un experimento fallido, mantiene la esperanza de que su hija logre convertirse en la mujer más poderosa del mundo, sin importar las consecuencias que esto pueda acarrear para ella, incluso si la destruye en el proceso.
Heba está desafiando los límites establecidos al convertirse en la primera mujer en liderar. Como la primera mujer nacida en la familia Khalil, se encuentra rodeada de machismo, pero aquellos que la rodean confían en que se ganará su lugar.
Brenda es una persona enérgica y vivaz; sin embargo, ser engañado por su amabilidad y humildad sería un error. Sus arrebatos de ira podrían tener consecuencias devastadoras, como lo demostró al provocar un motín en su escuela solo para poder visitar a su amiga de la «casa negra», como ella llama a la familia de Daria.
―¡Dispara ya, Brenda! ―el rostro que antes mostraba gratitud, gracia y diversión, ahora reflejaba temor. La niña que sostenía el arma estaba al borde de las lágrimas y el colapso, en cualquier momento dispararía por error.
―No, ya no quiero.
―¡Que lo tomes, aceptaste! ―le recrimina la niña que porta una larga túnica.
―¡No quiero, no quiero! Ya no quiero jugar ―Heba estaba ejerciendo presión y agarrándola del brazo, mientras la niña de cabello rizado se resistía a obedecer.
―¡Yo lo haré!, ¡déjala Heba! ―intervino Daría, quitándole el arma a su amiga.
La niña supo cómo proceder: recargó el arma, se aseguró de apuntar hacia donde deseaba, tomó el gatillo y disparó. Su mano retrocedió ligeramente, ya que el retroceso era fuerte pero no lo bastante como para dominarla.
―¡Genial! Otra vez ―la niña de ojos azules, que hace poco estaba llena de miedo, ahora se encuentra aplaudiendo. Esta niña tiene la particularidad de experimentar cambios extremos de emociones, pero la alegría es la emoción que más destaca en ella.
Según las niñas, estuvieron entretenidas jugando hasta que la presencia de uno de los hermanos de la chica de cabello oscuro interrumpió su diversión.
El joven de cabello rojizo se presentó, arrebatándoles el arma a las niñas, quienes protestaron y comenzaron a dar excusas como cualquier niño cuando descubren su travesura. Sin embargo, el chico tenía su atención centrada en su hermana menor.
―¡Te dije que no debes tocarla! Mucho menos usarla.
―Lo siento ―la niña bajó la cabeza.
―Nada de "lo siento", quiero que estés bien. Tienes muchas muñecas y los abuelos te llevan a patinar. Eso es lo que debe hacer una niña como tú, ¿entendido?
―Sí. Perdóname, Benyamin, no lo volveré a hacer ―habló sin verlo a los ojos.
―Nunca la cabeza baja ―su hermano alzó su rostro y se sumergió en sus ojos oscuros, los cuales poseían una singularidad que los hacía únicos: eran la combinación perfecta entre el infierno y el cielo.
Benyamin ha dedicado su vida entera a proteger a su hermana menor desde el momento en que la vio por primera vez. Se ha asegurado de mantenerla a salvo de las crueldades que su madre les impone a todos, incluyéndola a ella. Para Benyamin, su hermana es su máxima prioridad y la protegerá siempre mientras viva.
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Traducción:
Ne tvoye delo, chto ya delayu: No es asunto tuyo lo que hago
zapreshcheno svyazyvat'sya s agentom: Esta prohibido meterse con agentes
ty znayesh', ya ne sleduyu pravilam, brat: sabes que no cumplo reglas, hermano
Empezamos fuertes, la muchacha regreso con toda.
Algo que no he recalcado mucho es lo que fue la relación de Hilai y Daria, eran algo así.
Mi Aleix esta medio muerto, tristeeee.
Todos queremos que D salga rápido de esa casa.
Que cosita con los hermanitos, quien es su fav hasta el momento?
Este cap estuvo muy dinámico, mucha interacciones con casi todos los chicos.