[Mimir POV]
Por fin había llegado.
Como ese hombre había dicho que lo haría.
Alex y Thor se habían unido.
"Bien hecho, Mimir",
"Hice lo que me dijiste que hiciera", respondí, cuando el hombre que me había estado visitando durante los últimos años entró en mi humilde morada.
"La broma de que tu cuerpo está en la tintorería, hmm, beso del chef", respondió el hombre, riendo.
"Esa fue tu broma, me dijiste que lo dijera", respondí, preguntándome una vez más, cómo alguien tan poderoso podría ser tan infantil al mismo tiempo.
"Lo sé, por eso fue una broma perfecta", se rió el hombre, moviendo un poco la mano, manifestando una lata de coca, "¿Quieres una?" Se ofreció.
Lo miré y le respondí: "A menos que me viertas la bebida en la boca, no lo creo", sin un cuerpo, las cosas eran difíciles, el único lado bueno de todo esto era el conocimiento que todo me trajo, el conocimiento que parecía ser inútil cuando se trataba de este hombre, lo sabía todo, sobre todos, excepto él, o Alex.
"¿Por qué no lo dijiste?" El hombre sonrió, chasqueando los dedos, y así, en un abrir y cerrar de ojos, me encontré con un cuerpo.
Todo sucedió tan rápido que ni siquiera pude registrar lo que hizo. En un momento mi cabeza estaba tirada en el suelo, y al siguiente, estaba de pie, mirándolo con incredulidad, "¿Quién eres tú?" Me atreví a preguntar.
"Un hombre, haciendo cosas de hombre", el hombre se encogió de hombros, tirándome una lata de coca.
Cogí la lata en el aire y me reí, ¿cómo no? Tenía las manos... Podía sentir las cosas una vez más, todo era tan... increíble, "Lo atrapé", murmuré, mirando la lata con asombro.
"Ahora, bébelo", sonrió el hombre, tomando un sorbo de su bebida.
Me reí, antes de darme cuenta de que esto no duraría, nada bueno estaba destinado a ser, al menos no para mí: "¿Cuándo desaparecerá este cuerpo?"
"Bueno, esa fue una respuesta más deprimente para la que estaba preparado..." El hombre suspiró, rascándose la parte posterior de la cabeza.
"Nada viene gratis", respondí, era un ejemplo vivo de esto.
"Bueno, eso es cierto", asintió el hombre, con el dedo índice presionado sobre sus labios, "Peroooo, ya pagaste el precio, supongo... Quiero decir, quería que guiaras a Alex, y lo hiciste, así que... el cuerpo como recompensa".
¿Una visión simple, y me había devuelto todo lo que perdí? "Veo". No importaba cuánto quisiera creerlo, todo parecía irreal.
"Estás subestimando tu mano amiga", se rió el hombre, casi como si estuviera leyendo mis pensamientos, "Los estoy leyendo", agregó con una risa, "El punto es, darte un cuerpo, o una coca, es técnicamente lo mismo para mí, hago el mismo esfuerzo por ambas cosas... las ventajas de ser omnipotente y mierda, así que no te preocupes, trata de fingir que eres una cabeza cuando el chico regrese, aunque no quiero que cuestione demasiado las cosas".
Asentí con la cabeza, puede que no lo entienda, o por qué hace lo que hace, pero no rechazaría esto, después de todo, si voy a estar atrapado en el pozo del conocimiento, también podría tener un cuerpo: "¿Crees que tendrá éxito en las raíces?" Pregunté.
"Sin lugar a dudas", respondió el hombre, su voz sonando casi... orgulloso, ¿me pregunto por qué?
"Estoy orgulloso", confirmó el hombre.
Correcto, puede leer mi mente, "Ya veo, pero ¿por qué?"
"No lo sé, lee mi mente", guiñó un ojo el hombre.
"No puedo", suspiré, él sabía la respuesta a eso.
"Eso suena como un problema tuyo", se rió el hombre.
"Supongo que lo es", asentí con la cabeza, abriendo mi lata de coca para beber, mi primera bebida en unos pocos milenios. Me pregunto cómo sabe, quiero decir, sé cómo sabe gracias a mi infinito conocimiento, pero saber algo en teoría y en la práctica son dos cosas diferentes.
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[Emily Walker POV]
Papá estaba una vez más ocupado en una misión importante.
¡Así que dependía de mí! ¡Asegurarme de que su regreso estuviera lleno de amor y calidez!
Es por eso que actualmente estaba de camino a la cocina para empezar a hornear algunas galletas, las galletas previas a la llegada de papá, que tuve, después de todo, probarlas antes de que papá llegara.
¿Por qué?
Bueno, tuve que seleccionar los mejores para él.
Y para eso tuve que probar algunas recetas que había encontrado en un libro.
¡Unos cientos de recetas!
¡Mi determinación no conocía límites!
¡No había ninguna frontera de galletas que no cruzaría!
¡Conquistaría esa montaña de galletas! ¡Y entregaría a papá las mejores galletas que ha comido!
¡Porque yo era su hija!
Nat también, pero yo amaba más a papá.
El punto es que ¡me aseguraré de que papá esté contento con mis galletas! ¡No importa qué!
"¡Hora de hacer unas galletas!" Declaré, abriendo de par en par las puertas de la cocina, para encontrar a una chica de mi edad, con el pelo castaño y ojos rojos fuego vibrantes que ya usaba la cocina real asgardiana.
"¿Qué tipo de galletas?" La chica preguntó.
Parpadeé: "Bueno, ¿de todo tipo?" Respondí con una risa.
"Eso son muchas galletas", se rió la chica, "¿son para alguien especial?"
"Sí", asentí con la cabeza, después de todo, ¡papá era la persona más especial de todo el universo!
"Ya veo, ya veo, entonces las galletas son imprescindibles", asintió la chica, aplaudiendo, "Lo sé, ¿qué tal si te ayudo? Me han dicho que hago unas galletas deliciosas".}
tarareé antes de preguntar: "¿Por cuántas personas?" Quiero decir, tenía que asegurarme de que ella sabía lo que estaba haciendo, ¡papá solo se merecía lo mejor!
"Más de diez", ofreció la chica.
¡¿Más de 10?! ¡Es mucha gente! "¡Está bien, estás dentro!"
"¡Sí!" La chica sonrió.
"¿Cómo te llamas?" Pregunté, acercándome a mi nuevo amigo, un amigo forjado a través del poder de las galletas.