Ma belle•Charles Leclerc (LIB...

By _byalma

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Nuevos lazos y comienzos, oportunidades y sorpresas... ¿Qué les deparará la vida a Allegra Wolff y a Charles... More

Introducción + Prólogo
Capítulo I
Capítulo II
Capítulo IV
Capítulo V
Capítulo VI ♡
Capítulo VII
Capítulo VIII
Capítulo IX
Capítulo X
Capítulo XI
Capítulo XII
Capítulo XIII

Capítulo III

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By _byalma

95 estrellitas + 25 comentarios para continuación de la historia⭐

🗓️ 4 de marzo de 2025
📌 Península Arábiga (Bahrein)

-¿Así que Gasly,huh?- le dije a la joven Sienna,mirándola de manera divertida.

-Oh,cállate. Fué una... Apuesta,digamos- la primogénita de Christian se aclaró la garganta, mirándome con cierto nerviosismo.

-Aha,yo dije lo mismo cuando estuve con Charles y,aunque saliese mal, terminé con él- le dí un golpe en el hombro,un gesto burlón de mi parte,tratando de restarle hierro al asunto y no incomodar a Sienna.

-Hablando de Charles... ¿Por qué no le dices que Charlie es su hija? Me refiero,si yo fuese él,querría saberlo- anunció la británica, apoyándose en una de las paredes de mi motor home,mirándome fijamente.

-No es el momento,y mucho menos se lo quiero decir cuando él ya tiene una familia con Alexandra. Precisamente,al tener una hija,como madre sé que esa clase de noticias "bomba" pueden afectar mucho a tu propio hijo,y no quiero que nada de esto repercuta en Juls- me encogí de hombros y me quité mis auriculares de radio.

-Agh,no me menciones a Alexandra,¡no la soporto!- se quejó Sienna,rodando los ojos al escuchar el nombre de la mujer del monegasco.

-¿Por qué?- dije mirándola con una pequeña sonrisa.

-Oh,vamos,no me jodas. Cada vez que escucho esos jodidos tacones suyos llegando al paddock,es como si a cada paso que diese un interminable dolor de cabeza me atormentase- concluyó mi compañera de equipo, consiguiendo hacerme reír.

Ella misma soltó una carcajada tras escucharse.

-A ver,no voy a negar que es un poco... Complicada,digamos pero...- antes de que pudiese terminar de hablar,la británica se adelantó a mis palabras, agolpando las suyas encima.

-Estoy segura de que tú serías muchísimo mejor para Charles de lo que jamás lo será ella- añadió Sienna,dejándome descuadrada y sorprendida con sus palabras.

Una pequeña estocada se clavó contra mi pecho al escuchar eso,ya que con ello traía recuerdos,no tan viejos,de mi antigua relación con el monegasco.

-¡Mami! ¡Mami!- irrumpiendo mis pensamientos y el silencio que se había instalado en esa pequeña sala,Charlie entró,corriendo con sus pequeñas piernas hacia mi.

-Angelito...- sonreí de boca cerrada al ver a mi hija y me agaché a su altura para cogerla entre mis brazos.

-¿Quién es ella?- preguntó la castaña de ojos verdes,señalando a Sienna y mirándola con cierta timidez.

-Oh,ella es Sienna Horner,es la compañera de mami en Red Bull- dije sonriente.

La nombrada sonrió ampliamente al ver a la pequeña Charlie preguntar por ella,y no dudó en acercarse a la menor y saludarla.

-Hola peque- habló la británica,mirando a mi hija enternecida.

-¡Hola!- respondió Charlie con esa famosa sonrisa tan característica de ella.

Una pequeña carcajada se escapó de entre los labios de ambas al escuchar la emoción en el módulo de voz de la pequeña.

En el marco de la puerta pude ver a Mason,el cual estaba apoyado contra la madera de ésta,en silencio,observando la situación con una sonrisa de oreja a oreja.

-Hola Mason- saludó la británica a mi marido.

-Vaya,empezaba a pensar que nadie se daba cuenta de mi presencia- rió ligeramente y se acercó a mí,abrazándome por la cintura mientras yo mantenía a Charlie entre mis brazos.

-Bueno,entiende que la prioridad es la princesa y luego el sapo- bromeé yo, apoyando mi espalda en el pecho del británico.

-Oh, ¿si? Tomaré nota para cuando quieras que haga la cena,los sapos no hacen nada de eso, ¿a qué no?- añadió el futbolista mirándome con un atisbo de diversión en sus ojos.

-Oh, cállate,lo harás igualmente- reí y le dí un dulce beso en la comisura de sus labios.

-¡Iugh!- escuchamos la mueca de Sienna y de Charlie cuando nuestros labios hicieron contacto,ambas haciendo ese sonido a la vez.

Ante la gracia de la situación,Mason y yo nos separamos y,cuando nos quisimos dar cuenta,la británica tenía una de sus manos puesta encima de los ojos de mi hija y la otra,la que le quedaba libre,en sus propios ojos, tapándoselos.

-¿Ya habéis terminado ese momento de enamorados en San Valentín?- preguntó la joven Horner,abriendo una ranura entre sus dedos para comprobar que ya no nos estábamos besando.

-¿Por qué tan renegada a las muestras de cariño y amor,Sienna Horner?- dije entre risas.

-Porque el amor es una mierda- sonrió ella de manera irónica.

-¡Hey! ¡No se dicen palabras malas!- la regañó Charlie,mirándola con una sonrisa juguetona.

-Te lo ha dicho- agregó Mason, encogiéndose de hombros,refiriéndose a Sienna.

-Cierto, cierto. Lo siento peque- carcajeó la británica ante el recalque de mi hija.

-Mhmhm... Te perdono si me compras unas galletas de chocolate de la cafetería- dijo Charlie,mirando a Sienna con los ojos entreabiertos,como si estuviesen cerrando una especie de trato.

-Hecho- aceptó la mujer de apellido Horner,extendiendo su mano hacia la castaña que aún seguía entre mis brazos.

Sonriente,Charlie alcanzó la mano de Sienna y la estrechó cual negociador cerrando un trato importante.

Mason y yo no pudimos evitar reír a carcajadas al presenciar esa escena y dejé a mi hija en el suelo ante su insistencia por ir con la británica a por esas galletas prometidas.

En cuanto ambas se fueron de la mano,me giré quedando de cara a mi marido y agarré su mano,jugando con ella.

-Oh,no. Esa sonrisa no...- rió entre dientes,echando su cabeza hacia atrás.

-¿Qué sonrisa?- pregunté mirándolo divertida.

-Esa sonrisa ladina que siempre pones cuando me vás a pedir algo- me volvió a mirar con un gesto burlón.

-Es que... Sienna y yo hemos hecho una carrera increíble y para celebrarlo hemos decidido salir por ahí de fiesta...- dije sin perder la sonrisa,poniendo mi mentón en su pecho.

-Aha... Déjame adivinar: quieres que me quede con Charlie y que la cuide mientras tú estás celebrando tu vuelta a este mundo del caos con Sienna y el resto de pilotos, ¿me equivoco?- inquirió mirándome con una ceja alzada.

-¡Exacto! ¡Premio para el señor Mount!- reí y pasé mis brazos por sus hombros- porfi,porfi,porfi...- hice un puchero,mirándolo con ojos de cordero.

-¡Agh! ¡Vale! Pero que sepas que después de esto me deberás algo- advirtió señalándome con su dedo índice.

-Si,si,si... Ya discutiremos los términos del acuerdo más tarde- dije divertida, acercándome a sus labios para dejar un tierno y casti beso sobre ellos.

-¡Lo digo en serio Allegra Lilith Wolff!- repitió,intentando mantener un semblante serio,poniendo todo su empeño en disimular su propia risa.

-Oh, vamos,no digas mi nombre completo,sabes que lo odio- rodé los ojos- bien,dime,¿qué quieres a cambio de cuidar de ese pequeño duendecillo durante un par de horas,huh?

-Primero de todo,no te pases con la bebida,por favor,no quiero que llegues al hotel y tener que meterte en una bañera de agua helada.

-¡Hecho!- respondí rápidamente,
separandome de él,a punto de irme y escabullirme de esa clarificación de los términos de nuestro trato.

-¡Quietecita señorita Wolff!- agarró mi brazo,tirando de mí hasta dejarme de nuevo frente a él.

-Vale,vale. Sigue hablando- bufé,cruzándome de brazos,mirándolo con atención.

-Segundo, nada de seguir las locuras de Lando y/o Sienna. No quiero tener que buscarte un abogado porque termines en la comisaría de Bahrein.

-¡Oh,vamos! ¡Le quitas toda la diversión!- dije riendo.

-Allegra...

-Vale,vale,lo pillo. Nada de locuras,soy una mujer madura y adulta- terminé por decir.

-Y tercero... A cambio aceptarás el regalo que te daré por nuestro aniversario y sin rechiste alguno- ante esta última petición,una pequeña sonrisa se formó entre sus finos y delicados labios.

-Mason,sabes que odio los regalos y las sorpresas- dije seriamente.

-Lo sé,por eso me estoy aprovechando de la situación,para que no seas un grano en el culo cuando llegue el día y te lo dé- rió y colocó su mano en mi mejilla- vamos... Solo es un regalo en una fecha especial.

-De acuerdo... Pero que sea la ultima vez,¿eh?- en esta ocasión,fuí yo quien lo apuntó con el dedo.

El británico carcajeó y asintió ligeramente.

-La última,te lo prometo- sonrió y posó sus labios sobre mi frente,dejando un cálido beso sobre ella.

-¿En serio te estás quejando porque tu marido te quiera hacer un regalo por vuestro segundo aniversario juntos? ¿¡Es que estás loca!?- exclamó Sienna,mirándome con asombro mientras yo me terminaba de arreglar.

-No me gustan las sorpresas,y no me grites,un respeto a tus mayores- le respondí divertida,terminando de colocarme adecuadamente mi vestido frente al espejo.

-Habló la cincuentona- rodó los ojos la británica- apenas me sacas un dichoso año... No,espera,ni siquiera eso- añadió y se puso a contar con los deditos- me sacas apenas siete meses.

-¿En serio te has puesto a contar eso con los dedos?- alcé ambas cejas,mirándola con diversión.

-Cállate,las mates nunca fueron lo mío- carcajeó y me dió un pequeño golpe.

Ambas reímos y terminamos de preparnos. Después de eso,caminamos en dirección la salida del hotel,donde nos estaba esperando una vieja conocida mía.

-¡Venecia!- dije felizmente al verla,acercándome para abrazarla.

-Me alegro de verte de nuevo Allegra- habló la italiana, envolviéndome entre sus brazos.

Tras ese pequeño reencuentro,me alejé de ella un poco y miré a Sienna.

-Sienna,ella es Venecia Ferrari,la nueva directora ejecutiva de la Scuderia Ferrari. Venecia,ella es Sienna Horner,mi compañera de equipo en Red Bull- las presenté a ambas.

Con un gesto amable,ambas dejaron las presentaciones formales de lado y se dieron un par de besos en sus respectivas mejillas a modo de saludo.

-¿Ferrari?- preguntó Sienna,mirando a la italiana de cabellos castaños con cierta confusión y curiosidad en ambas cantidades.

-Es una historia demasiado larga. Vayamos a esa fiesta,dadme un par de copas y,cuando esté borracha,te la contaré- bromeó Venecia, comenzando a caminar hacia su coche.

-¿Lo de tener un Ferrari de coche es por el apellido o como?- añadí yo divertida, metiéndome en el asiento del copiloto, mientras Sienna se colocaba en el asiento de atrás y la dueña del Ferrari sf90 stradale entraba en el asiento del conductor.

-Se puede decir que es parte de mi herencia- las tres reímos tras escuchar eso y comenzamos a charlar animadamente todo el trayecto hasta la discoteca en la que habíamos quedado con algunos pilotos para celebrar esa noche en Bahrein.

Cuando llegamos,las tres bajamos del coche,entrando,sin pararnos, hasta llegar dentro del local. Dentro el ambiente estaba plagado de juventud, ánimo e,incluso,se podría decir que lujuria.

-¡Vaya,vaya! Pero, ¿a quién tenemos aquí? Si son las dos chicas Red Bull y la nueva chica Ferrari- exclamó de manera divertida Lewis al vernos aparecer a las tres.

-¿Y tú qué haces aquí?- sonreí al ver al británico allí.

-Que me haya retirado no significa que vaya a desaparecer del mapa- me respondió abrazándome con fuerza- te eché de menos mientras no estabas,¿lo sabías verdad?

El corazón se me encogió al escuchar a mi ex-compañero de equipo.

A pesar de todo lo que pasó durante mi estancia en Mercedes,Lewis siempre había estado ahí junto a mí,y esa relación profesional se había terminado por convertir en una bonita amistad.

-Yo también te eché de menos grandullón- murmuré contra su pecho.

Cuando me separé de él,no pude evitar reír al ver el panorama que había ante mis ojos.

Sienna estaba sentada en el regazo de Pierre,y parecía realmente cómoda en esa posición.

-¡Gasly!- llamé al francés,el cual me miró directamente al escuchar mi voz- cuidado con las manos o te las corto.

Copy!- respondió él carcajeando.

Sienna por su parte me miró divertida y me sacó el dedo del medio antes de volver a dirigir su atención al piloto de Alpine.

Cuando intenté volver a darme la vuelta para buscar a Venecia,mi cuerpo impactó con el de otra persona, haciendo que chocásemos y que su bebida se desparramase por mi vestido.

-¡Joder!- exclamé mirando la mancha que había en la tela brillante que cubría mi cuerpo.

-¡Lo siento! ¡Lo siento!- se apresuró a responder una voz con notable acento francés.

En específico,esa voz...

-Charles...- murmuré cuando levanté la mirada y lo observé.

-Destinados a encontrarnos tirándonos algo por encima,¿eh?- rió ligeramente, marcando esos terriblemente preciosos hoyuelos a ambos lados de su cara.

¡Hello,hellooooo! ¡Felices reyes y feliz año nuevo para todos!💋💋

Por ciertooo,si queréis conocer quién es Venecia Ferrari... ¿qué hacéis aquí aún? Id a leer Serendipia•Lando Norris (publicada en mi perfil) y ahí descubriréis a esta nueva chica que tantas cositas interesantes nos vá a traer.

ANYWAYS...Allegra y Charles están destinados a encontrarse siempre tirándose algo por encima,eso está claro,pero... ¿qué consecuencias traerá esa escena entre ambos nada más llegar a la discoteca?

Si os ha gustado el capítulo ya sabéis que una estrellita, un comentario y un follow siempre ayudan mucho.

Atte: Alma <3

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