BABY LOVER | Cuti Romero

By gallinaenamorada

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¿Hasta donde nos puede llevar el deseo sexual? Esta historia contiene escenas explícitas, lenguaje fuerte y c... More

BABY LOVER
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EPÍLOGO
BABY LOVER 2

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By gallinaenamorada

LONDRES

Antonella había llegado a soñar con lo que Cristian le había dicho en aquel mensaje "voy y te arranco eso con los dientes" se imaginaba una y otra vez que es lo que él le haría al verla de tal manera, la forma tan salvaje que tenía él de decir las cosas le provocaban muchas sensaciones a la vez, le gustaba sentir que podía provocarle algo a él.

Es por eso que los labios de ambos se entrelazaron ni bien Karen abandona la casa, las ganas que tenían de comerse se notaban y no podían haber aguantado ni un segundo más, desde la llegada del jugador se estaban comiendo con la mirada y por mas que trataban de ser lo mas dismulados posible, cualquiera podría darse cuenta, -cualquiera menos Karen- ,y es que con solo un encuentro ambos habían quedado con ganas de más porque eso que Nicolas había dicho era palabra sabia, los dos iban a buscarse, desearse y romper todo tipo de límites, a estas alturas eso era algo que ninguno de los dos podía ocultar, mucho menos negar.

Las manos de la rubia rodeando el cuello adverso mientras las contrarias pasean por sus curvas caminan hacia atrás dando pasos torpes hasta llegar al primer mueble, la campera de Antonella cae al suelo y tiempo después comienza a desprender la prenda inferior del defensor que apresura en bajar sus manos cerrandolas en las nalgas de la menor para subirla a la mesa, posicionada en aquel lugar, Cristian se pone entre sus piernas y alejando su boca de la ajena baja lentamente por su cuello, jugando con su lengua que pasea por la zona saboreandola, sus manos apretando aquellas partes que le vuelven loco, ella jugando con su pelo, era algo inexplicable lo que los dos sentían cuando estaban juntos, la casa se estaba convirtiendo en un horno que no iba a poder apagarse por ellos, pero si por ese ruido de timbre.

Cristian se aleja por completo abotonando su pantalón y después de pasar su diestra por su boca camina hasta la puerta observando quien está detrás—Es tu vieja—esboza con su voz agitada moviendo su mano pidiéndole a la rubia que baje de aquel mueble.

Antonella arruga su frente y baja acomodando su ropa, el morocho abre la puerta dejando pasar a la mayor que sonríe apliamente—Hola amo..res..—el tono de voz amable va bajando cuando ve algo raro entre ambas personas. Cristian con sus labios hinchados y su pelo un tanto despeinado, Antonella de la misma forma con una mini musculosa que deja ver a la perfección ese escote—¿Y Karen?—pregunta por último, observando a los dos para después ojear la casa.

El defensor aclara su garganta—Fue... fue a la plaza con Valen.

—¿Y vos te quedaste aca? ¿Los dos, solos?

Él asiente—Anto anda enferma ¿no le ve la cara?—esboza una sonrisa llevando una mano a su nuca—y yo na' llegue re cansado del viaje.

La mayor se acerca a su hija, asintiendo levemente toca la frente de Antonella y aquea sus labios—Estas media caliente ¿no tomaste nada?—ésta niega—me voy a fijar si hay algún remedio del bebé.. permiso—dice esto último y abandona la sala adentrándose al baño.

Antonella suspira y cerrando su campera se pone detrás de Cristian, que en esa corta charla aprovecho a cargar un vaso con agua.
Poniéndose de puntitas de pies, llega al oído del morocho y no duda mucho en susurrar—Capaz con tu leche me curo..

El defensor traga y gira sobre su eje empujando con delicadeza a la rubia—No para, ya fue boluda, ya ta'.

La menor arruga sus cejas y murmura por lo bajo un "¿Eh?" que dejan en la nada cuando su mamá vuelva a hacerse presente.

Gira su tenedor sobre la pasta sin quitarle la vista de encima, habían salido a comer en familia y no paraba de escuchar halagos hacia al cordobés, que el mejor central, que el mejor papá, que el mejor marido.
Sonreía para ella cada vez que escuchaba como Karen presumia lo mucho que se amaban,que él era el hombre de su vida y millonadas de cosas cursis que le cerraban el estómago a la rubia.
Lo único que le entretenía en estos momentos era ver como su sobrino prefería estar con ella antes que con su mamá, ella no lo veía, pero había cambiado mucho desde su estadia en Londres.

Antonella siempre fue la nena mimada de la casa, nunca había escuchado un "no" salir de la boca de sus papás, es por eso que en estos momentos le costaba no sentir celos por su hermana, por mas de que ella seguía  siendo la bebé de la casa para sus papás y para Karen, ella sentía que la mayor tenía la atención absoluta de todos, pero lo que en realidad le molestaba era que esa "atención" era la de Cristian.
Porque dentro suyo quería que todos supieran que Cristian también le correspondía, demostrar de alguna manera que ella podía tener siempre a todos comiendo de la palma de su mano y que era en verdad poderosa con simplemente existir. En estos momentos no poder hacerlo la estaba matando por dentro y mas aún al ver como el morocho pasea sin parar su mano por el muslo de su hermana mientras ella le sonríe como tonta.

—Me parece que se hizo—dice Antonella refiriendose a Valentino, la pareja la mira y antes de que Cristian se ofreciera en ir a cambiarlo, lo hace Karen estirando sus brazos, era mentira, no podría suponer eso por que en realidad ella no estaba pendiente al menor, pero quería romper ese acercamiento antes de volverse loca.

Llevando la copa de vino a su boca, mira hacia otro lado evitando la vista del defensor cuando su celular suena, le basta con ver aquellos tres mensajes para dejarlo en visto y dejarlo en la mesa boca abajo, pero éste vibra dos veces mas y aunque quería ignorarlo, termina levantando el dispositivo.
Esconde una sonrisa al ver los últimos mensajes apagandolo nuevamente.

—Porfin sonreís hija—exclama el papá de las rubias cuando claro, volvió a sonar su móvil, esta vez dejándola satisfecha con ese "cuando lleguemos,hablamos" imaginandose que tipo de charla sería la que iban a tener.

El camino a casa es silencioso, solo se escuchan las voces de Cristian y Karen pero por su parte, ella va muy callada con su sobrino en brazos mira la ciudad iluminada, el ruido no era algo característico de Londres y eso lo estaba notando ahora, el morocho cada tanto mira por el retrovisor buscando los ojos de la rubia pero ella no se percata de ello por estar sumida en el camino.

—Bue me la va' hacer giratoria maquina—exclama Cristian descansando a Antonella cuando ésta baja cerrando con mínima fuerza ganandose una de sus peores miradas—mentira anto..

—¿Qué le pasa?—pregunta Karen al ver la mala onda que emanaba su hermana,él se encoje de hombros y finalmente entran detrás de la menor—gordo voy a bañar a Valen, ¿venis a dormir?

Cristian manda un mensaje y guarda su celular en su bolsillo—Eeh, no, tengo que hacer unas cosas aca y subo.

Karen asiente para después acercarse a él, dejar un beso y encaminarse a la escalera, el morocho ojea los escalones hasta que su mujer y su hijo desaparecen de ellos, chequea su celular y sonríe victorioso al ver la respuesta de Antonella.

—¿Qué te pasa a vos?—pregunta alzando su mentón cuando la ve bajar, ya vestía su pijama de seda que dejaba demasiado a la imaginación, pero en estos momentos trataba de mantener su mente fria, ella pasa por su lado murmurando un "nada" pretendiendo seguir el camino hacía el living, pero la mano de Cristian se encarga de frenarla apretando su brazo—¿y por qué te pones así de ortiva? al final, te trato mal y te enojas, te trato bien y te enojas igual.. que onda—larga sin más, Antonella quiere responder, pero no podía decir nada, Cristian estaba diciendo la verdad.


Ella solo asiente—Tenes razón..—dice casi en un susurro—¿vamos a terminar lo que empezamos hoy o me voy a dormir?

Cristian ríe negando y mira por encima de la rubia para después chistar—La dejamos aca Anto.. posta—la expresión de Antonella es de confusión y busca alguna de vacilo en la cara ajena pero no la encuentra—ya ta, ni besos ni nada ¿bueno?

Soltando el brazo de la menor,Cristian despeina su cabellera rubia y gira decidido a subir.


Si bien ella sentía que tenía poder sobre él,la realidad era otra y solo el tiempo iba a demostrarlo...















HOLAA

hermosas si el cap llega a 200 el finde les hago maratón, aprovechenme!

las quiero hermosuras<3

tenía ganas d hacer fifa pt2(dybala) así q seguro suba emtre hoy y mañana..

besitoss no se olviden d votar y comentar q aca la esquizofrenia se lleva adelante en grupo!!!

💋

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