Sistema de Redención del Vill...

Von KumikoKazami19

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Shen Jiu sabe que la ha cagado desde el momento en que terminó en la prisión de agua, sometido a diversos cas... Mehr

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49

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Von KumikoKazami19

Capítulo 49

El Espejo Reflectante y la Espada Sanadora I

Luo Binghe no se veía nada feliz al descubrir lo que Qiu Jianluo le estaba queriendo hacer a su shizun, a pesar de que no sabía quién era ese hombre. Solo sabía que intentaba dañarlo y eso era suficiente para que Binghe quisiera arremeter contra ese cultivador.

Qiu Jianluo lo soltó cuando Binghe se lanzó hacia él, con XinMo en mano dispuesta a decapitarlo. Shen Jiu se sentó en la cama, buscando alrededor algo para ayudar a Luo. Su discípulo no podría contra ese demente de mierda que tenía un sistema corrupto que lo estaba ayudando. Por más que tuviera a XinMo y su halo de protagonista, no sabía qué tanto podría servirle eso si Qiu Jianluo tenía un sistema que le informaba sobre todo y le brindaba su ayuda. En ese caso, podría no ser un oponente contra el que Luo Binghe pudiera enfrentarse fácilmente.

Qiu Jianluo sacó una espada, cuya empuñadura era increíblemente brillante a la poca luz de la habitación, y se lanzó a atacar. Binghe usó a XinMo para repeler el ataque, una espada tan peligrosa como XinMo difícilmente podría ser igualada o superada. Pero, para sorpresa de ambos, la espada había sido igualada y el ataque hizo retroceder a Luo Binghe. ¿De dónde había sacado Qiu Jianluo esa espada? ¿Shang Qinghua habría escrito sobre la misma en alguna parte de la novela? ¿Habría sido alguna espada de la colección privada de Luo Binghe en su primera vida?

"¿Hay alguna manera de que puedas saber algo sobre esa espada?"

[Este sistema no está seguro, pero intentará averiguar todo lo que pueda para el usuario.]

Bien, al menos era mejor que nada.

Binghe se recompuso rápidamente y se quedó frente a Shen Jiu, protegiéndolo de los ataques de Qiu Jianluo. Cada ataque de Qiu era letal y salvaje, su cultivo no era extraordinario, nada fuera de lo usual como el de Luo. Pero la espada que tenía lo hacía invencible. Si le pudieran quitar la espada, Qiu no sería más que un fracaso como el Viejo Maestro de Palacio. Y en ese caso, Luo no necesitaría más de dos golpes para matarlo.

Tenía que pensar en una manera de quitarle la espada, alguna forma de darle la ventaja a Luo Binghe para poder escapar juntos de ahí. No había manera en que Shen escapara solo, estaba en la cima de una montaña, sin una espada la cual usar para irse volando. XiuYa estaba en posesión de Yue Qingyuan, por lo que usarla era imposible en ese momento. Tenía que ayudar a su discípulo a luchar contra Qiu Jianluo para que ambos pudieran escapar de ahí y regresar con los demás. Además, quitándole la espada a Qiu, podría llevársela para cuestionar a la rata de AnDing sobre su origen y saber por qué la maldita cosa podía luchar contra XinMo sin problemas.

Sin embargo, todavía tenía que deshacerse de las cuerdas de unión inmortal que suprimían su energía espiritual. Necesitaba buscar algo lo suficientemente capaz de destrozar esas cuerdas. O Binghe necesitaba tener un segundo libre para liberarlo. Lo que fuera que pasara primero.

Se acurrucó en un rincón cuando uno de los ataques pasó demasiado cerca de él. Sin su energía espiritual y atado de ambas muñecas, Shen Jiu difícilmente podría meterse en la pelea y hacer algo. En lugar de ayudar, terminaría por estorbarle a Luo Binghe.

—Tú...—dijo Binghe, apretando los dientes con molestia— ¡Te mereces la muerte por tocar a shizun!

—¿La muerte por tocarlo?—Qiu Jianluo rio mientras detenía con su espada el ataque de XinMo—Lo que me encontraste haciéndole no es ni la mitad de lo que le quiero hacer a tu hermoso shizun—con fuerza, desvió el ataque de XinMo—. Un hombre como él, se merece que lo marque de arriba abajo, ¿no lo crees? Para que todos sepan lo zorra fácil que es, capaz de abrirle las piernas a cualquier hombre que se le presente.

—¡Cállate!—gritó Luo Binghe indignado, comenzando a atacar a Qiu Jianluo con más salvajismo y ferocidad que antes.

Qiu rio, divertido de provocar a su oponente y verlo perder los estribos de esa manera. Era prácticamente una especialidad suya el decir cosas desagradables para provocar a la persona contra la cual peleaba.

Era una especie de placer sádico del cual disfrutaba mucho. Shen Jiu todavía lo recordaba, murmurándole palabras obscenas mientras lo tocaba, diciéndole cosas desagradables mientras profanaba su joven y maniatado cuerpo. Eso encendía el odio en Shen, que se intensificaba ante la imposibilidad de hacer algo al respecto. Recordaba en esos momentos dejarse llevar por su mente, dejando que su imaginación lo sacara lejos de ahí y le mostrara escenarios donde al fin se vengaba del cretino de Qiu Jianluo. Donde al fin le hacía probar un poco del dolor que le hizo vivir a Shen Jiu durante todo ese tiempo en la mansión Qiu.

Qiu Jianluo disfrutaba tanto de ver el odio en los ojos de sus víctimas. Pero amaba más ver la impotencia en sus ojos al darse cuenta de que no eran capaces de hacer algo al respecto. Era su mayor placer.

Necesitaban hacerle probar un poco de su propio placer. Mostrarle el dolor más profundo para él. Lo peor que pudiera ocurrirle y verlo sufrir. ¿Cuánto habría sido capaz de dar Shen Jiu en su juventud para lograr eso?

[Querido usuario, el poder de los sueños de Binghe sería perfecto para eso.]

—Binghe—llamó a su discípulo, que seguía enfrascado en su lucha contra Qiu Jianluo—, no olvides lo que aprendiste con Meng Mo.

Binghe no lo miró en ningún momento, pero hizo un ligero asentimiento de cabeza para darle a entender que lo había escuchado. Shen Jiu intentó buscar algo para deshacerse de las cuerdas de unión inmortal. Cuando Binghe atrapara a Qiu Jianluo en una ilusión, ganarían la batalla.

Sin embargo, las siguientes palabras de Qiu paralizaron a Shen Jiu.

—¡Así que te gusta meterte en mentes ajenas!—rio, su espada dejando la empuñadura más a la vista—¡¿Entonces por qué no vemos la tuya?!

Luo Binghe abrió los ojos cuando la espada dio un corte horizontal que produjo una luz tan brillante que Shen Jiu quedó ciego por unos segundos.

Cuando recuperó su vista vio un paisaje extraño. Era como si todo estuviera hecho de arena, frágil y efímera. Pero formaba imágenes, formaba paisajes, árboles, personas. Era el mundo onírico.

El mundo onírico de Luo Binghe.

—¡Binghe!—gritó, pero en ese lugar parecía estar solo él, sin estar atado de manos, completamente libre.

Caminó hacia el frente, sin querer tocar nada a su alrededor. Sabía que no arruinaría la mente de Luo Binghe siempre y cuando no lastimara a nadie dentro del paisaje onírico. Pero de todas maneras, quería tocar lo menos posible la mente del chico para evitar hacerle daño. Ya mucho daño le había hecho en su primera vida como para hacérsela en esta también.

Avanzó lentamente, teniendo cuidado por si Qiu estaba escondido en algún lugar. Sentía al sistema tenso también, como si se estuviera preparando para recibir un ataque. No tenían armas a mano y Luo Binghe no estaba cerca como para crearle una o defenderlo. Así que, como en los viejos tiempos, tenía que hacerlo todo solo.

Caminó hasta que el paisaje frente a él cambió, de repente ya no estaba en un lugar desconocido, sino en una aldea desconocida. Escuchaba niños burlándose de otro y no necesitó mirar para saber que se trataba de un recuerdo de la infancia de Luo Binghe. Algo de lo que se había enterado durante su encierro había sido sobre su infancia. Aunque solo supo que pareció ser molestado de la misma manera que en QingJing. Esto era algo que no iba a cambiar en esta vida.

Siguió de largo, buscando al Luo Binghe que él conocía. Al adulto Luo Binghe que parecía irremediablemente enamorado de él.

El paisaje entonces cambió al bosque de bambú, vio de reojo a varios niños cavando pozos en la tierra con sus manos, pero no se detuvo. Esto lo conocía, fue el día que Luo Binghe eligió QingJing, el día que envió a Ming Fan en lugar de ir él mismo. No se iba a detener en algo que ya conocía.

[¡Usuario! ¡Mire hacia allá!]

El sistema no tenía manos para señalar, pero sí podía indicarle dónde mirar con un ligero tirón en su cabeza. Shen Jiu dejó que lo guiara, moviendo su cabeza hacia donde los maestros de pico estaban mirando a los niños cavar pozos. Ahí, con Ning Yingying prendida de su cintura, estaba él mismo, mirando sin mucho ánimo a los niños.

Espera...

¿Por qué estaba él ahí? ¡Él recordaba perfectamente en esta vida no haber ido al día de selección y enviar a Ming Fan!

Caminó hacia el frente, para pasar al siguiente recuerdo. Necesitaba seguir viendo.

Escuchó burlas de voces del pico que le resultaron conocidas. Voces de sus discípulos. Ling Yi, Ming Fan y una menos estruendosa, la de Mu Sheng.

En medio del bosque de bambú, ellos estaban golpeando a Luo Binghe. Un pequeño Luo Binghe, sucio y desaliñado, que tenía las manos lastimadas por recoger la leña que al final quedó tirada a su lado cuando los más grandes comenzaron a molestarlo.

Ming Fan...Ming Fan no hubiera hecho esto... ¿o lo hizo cuando él no veía? No...no tenía sentido. De ser así, jamás hubiera dado su vida para salvar la de su shidi. Ling Yi había sufrido el que Binghe hubiera terminado en el Abismo sin Fin. Mu Sheng no era un idiota. Entonces... esto... ¿qué...?

[Usuario, avance, creo que más adelante obtendremos la respuesta.]

Shen hizo caso del sistema. Avanzó hacia adelante, salteándose muchos recuerdos similares como este. Muchos donde discípulos de QingJing golpeaban a Luo Binghe, lo molestaban, le daban sus tareas. Luo Binghe siempre estaba sucio, golpeado y ocupado, incapaz de ir a las clases y aprender a ser un cultivador. Pero esto no había pasado. Shen Jiu recordaba a Binghe en todas sus clases, como un niño molesto, y a Ming Fan pegado a él, cuidándolo y ayudándolo. Estos recuerdos no tenían sentido.

Luo Binghe no era golpeado en QingJing, ni acosado de ninguna manera. Era el shidi al que malcriaban. Al que Yang Chen se colgaba cuando paseaban o al que Ming Fan invitaba a comer melocotones, ambos sentados en la rama alta del melocotonero.

Estos recuerdos...parecían estar mal.

O tal vez no.

Cuando avanzó, a una zona más oscura de los recuerdos, descubrió que llegó a la prisión de agua. El goteo constante y la humedad del ambiente se podían sentir incluso en ese paisaje onírico. Frente a él había una puerta que no estaba seguro de querer abrir. La observó por largo tiempo, considerando si lo mejor era dar media vuelta e irse o seguir adelante. Pero había algo dentro de él que le advertía que lo mejor que podía hacer era irse, retroceder y buscar a Binghe. Pero entonces, una mano abrió la puerta. Mangas negras envolvían esos brazos, una túnica que Shen jamás pudo olvidar.

Era la misma túnica que el Luo Binghe de su primera vida siempre usaba. Una que nunca le vio usar a su Luo Binghe.

Shen alzó la mirada entonces y se vio a sí mismo, colgado de cadenas como un animal descuartizado, convertido en una vara humana, con rastros de sangre cayendo de la cuenca vacía de su ojo y otro rastro cayendo de su boca.

Dio varios pasos hacia atrás, impactado por la escena frente a él. Atravesó el recuerdo de Luo Binghe, que avanzó hasta ingresar a la prisión de agua.

Si esta era la mente del Luo Binghe al que cuidó...cómo era que podía tener esos...

[Yo...Usuario, ahora lo entiendo. Ahora entiendo qué era lo que sentía que estaba mal con Luo Binghe.]

"Explícate."

[Efectivamente había algo mal en él. El alma de este Luo Binghe es la misma que la de su primera vida. Este Luo Binghe es el Luo Binghe que lo torturó en su primera vida.]

La realización impactó de tal manera a Shen Jiu que sus manos temblaron. ¿Cómo ese loto blanco que ingresó a QingJing, tan feliz de formar parte de su pico, era ese mismo...?

No, tenía sentido. Ahora todo tenía el puto sentido. Luo Binghe recordaba su vida pasada, por eso eligió QingJing, a pesar de que Shen Jiu no estaba ahí para elegirlo. Por eso a veces tenía tratos hacia él que le resultaban incómodos. Como la vez que se comportó como un amante preocupado por su pareja, aquella noche en que casi lo saca de la casita de bambú de una patada.

¡Claro que iba a comportarse así un señor de harén experimentado! ¡Claro que un niño de catorce años con el alma de un adulto de más de treinta se comportaría de esa manera!

¡Luo Binghe recordaba todo desde el momento en que...! ¿Por qué fue por él? ¿Qué era lo que quería de él? ¿No le parecía suficiente con torturarlo en su primera vida que ahora quería volver a molestarlo en esta?

—¡Shizun!

Shen dio un respingo por el susto, girándose casi automáticamente hacia la voz de su discípulo. Binghe lo miraba, sus ojos abiertos, tan grandes y amplios, su rostro tan pálido y asustado.

—Bestia—dijo, más como un reconocimiento que como un insulto.

Este Binghe no era el niño que se suponía que cuidaría en esta vida. Este Binghe era la bestia que torturó en su primera vida.

Los ojos de la bestia comenzaron a llenarse de lágrimas, sus manos temblando mientras daba un paso hacia Shen.

—Shizun, yo...este discípulo puede explicar—la voz le temblaba, pero Shen no podía dejar que siguiera llorando.

—No quiero escucharte, no ahora—aclaró acercándose a Binghe—. Solo quiero la respuesta a una pregunta, ¿quieres hacerme daño?

—No—respondió de inmediato Binghe.

—Bien, entonces explicas luego y me ayudas a salir de esto ahora.

Caer en el pánico, pelear con Binghe sobre lo que se ocultó, lo que no, era estúpido teniendo todavía en cuenta que tenían que salir de ahí y seguir enfrentándose a Qiu Jianluo. Shen Jiu debía mantener la cabeza fría y estar tranquilo para continuar, no dejarse caer en la desesperación y planear una manera de poder salir de ahí, luchar contra Qiu y regresar con los demás. La verdad sea dicha, tenía cosas más importantes en las cuales pensar que en el hecho de que este Luo Binghe era en realidad el Luo Binghe que lo torturó en su primera vida. Mientras el chico no quisiera lastimarlo, entonces estaba bien. Todavía tenía oportunidades para salir con vida y entero de ahí.

Binghe se recompuso tan rápido como le era posible, intentando recobrar la calma que había perdido cuando Shen Jiu descubrió su secreto. Su mente parecía perturbada, incapaz de terminar de procesar todo a su alrededor. Esperó lo que parecieron horas pero que debieron ser segundos. Estaba tan desesperado por querer salir de ahí que el tiempo se distorsionaba.

—Yo...—Binghe iba a hablar, cuando una risa retumbó en el paisaje onírico.

—A-Jiu, A-Jiu, A-Jiu, ¿en serio confiaste durante tantos años en este niño que, al final de cuentas, resultó ser tu verdugo de tu vida anterior? ¿Cuánta mala suerte puedes tener, mi pequeño A-Jiu?—Qiu Jianluo se acercó, sonriendo con diversión— Creo que debe quedarte claro ya que no puedes confiar en nadie. No pudiste confiar en ese chico que te abandonó en mi casa, ¿en serio confiaste en este que te arrancó los brazos y las piernas como si no fueras nada? Ah, tan tonto, A-Jiu. Siempre tan tonto.

—¡Cállate!—gritó Luo Binghe, arrojándose sobre Qiu Jianluo para atacarlo.

Pero este, ya previendo el golpe, lo esquivó ágilmente. Su sonrisa sin flaquear en ningún momento. Su expresión, su mirada, tornándose más burlona con cada segundo que pasaba sin poder ser golpeado.

No podían seguir ahí, en el paisaje onírico, en los recuerdos de Luo Binghe. Si este, por error, atacaba alguno de ellos entonces solamente se haría daño. Y aunque una pequeña parte de Shen Jiu quería que se dañara de esa manera por haberlo lastimado tanto en el pasado, otra parte de él, mucho más grande, esperaba que el chico saliera tan sano como pudiera de esa situación.

—¡Binghe! ¡Tenemos que salir de aquí ahora!—gritó Shen Jiu, viendo a ambos hombres luchar a unos metros de distancia de él.

Todavía en el recuerdo de la prisión de agua, todavía en un recuerdo de Binghe.

Binghe apretó los dientes, retrocediendo y evitando continuar con sus ataques. XinMo temblaba en su mano, casi a un paso de descontrolarse por completo. Shen Jiu no creía conveniente que enloqueciera en un lugar como ese, menos estando él tan cerca. No quería volver a pasar por ningún ataque de esa jodida espada nunca más en su vida.

—No es fácil, shizun—dijo Binghe, el dorso de su mano con las venas marcadas por el esfuerzo—. No puedo romper el paisaje onírico. No sé cómo lo logró o cómo lo mantiene, pero no puedo hacer nada.

—Binghe, tienes que hacerlo. No importa cómo, solo hazlo.

—¡No puedo!—gritó Binghe frustrado—¡No puedo concentrarme!

Maldita sea, debió sospechar que Binghe no lograría dejar de lado lo que pasó para concentrarse en el problema actual. El niño se sintió tan afectado que ahora no podía concentrarse lo suficiente para salir de su propia cabeza. Su mente debía ser un completo caos en este momento, pensando en bucle sobre el hecho de que su shizun había descubierto que no era el loto blanco que creyó, sino el maldito loto negro que lo mutiló en su primera vida.

¿Qué se supone que debía hacer para ayudarlo? ¿Cómo calmaba la agitada mente de Luo Binghe para que rompiera el maldito paisaje onírico y lo salvara de Qiu Jianluo? ¿Qué haría que el niño recobrara la calma?

—Binghe, escucha, tienes que calmarte—habló tan amable como ese momento tenso le permitía—. Tenemos que salir de aquí, tenemos que alejarnos de él y volver con los demás.

Binghe cerró los ojos con fuerza, sacudiendo la cabeza de un lado a otro.

—¿Y por qué salir?—preguntó Qiu Jianluo— ¿Por qué no quedarse aquí? ¿Acaso solo estás usando al niño para volver con los demás y así conseguir que te mantengan a salvo de él?

Binghe apretó los puños contra su cabeza, como si quisiera callar una voz que solamente él estaba escuchando.

—Cierra la boca, bastardo—siseó Shen Jiu, mirando con tanto odio a Qiu que, de haber podido, esa sola mirada lo hubiera prendido fuego.

—Es la verdad, ese chico ni siquiera te importa. Solo lo acogiste y trataste bien porque temías que volviera a hacerte lo que te hizo en el pasado. Incluso piensas que hubiera sido mejor que muriera en el Abismo sin Fin, ¿verdad? Por eso lo arrojaste a ese lugar, si moría tú evitarías ese destino horrible otra vez.

—¡Eso no es verdad!

Él no quería muerto a Binghe. Ni siquiera a aquel que lo torturó. Sí lo quería lejos y sí quería que una parte de su dolor fuera destinada a ese demonio cruel que le causó sus mayores dolores. Pero matarlo...no. Shen Jiu realmente ya no quería matar a Luo Binghe. Incluso a pesar de saber la verdad, aun no quería matarlo. Este Binghe, al igual que él, arregló sus errores del pasado. Volvió y cambió. Volvió y se volvió un shidi, un hermano, un shixiong. Volvió y protegió a sus hermanos marciales, a su maestro, a Shen Fu.

Binghe fue un hijo de puta. Pero en esta segunda oportunidad que tuvo, no repitió su destino y, en su lugar, simplemente buscó ser feliz.

Igual que Shen Jiu hizo.

Al parecer, no eran tan diferentes después de todo.

—Binghe, no lo escuches—susurró, atrapando las manos que seguían duramente presionadas contra la cabeza del chico—. Él solo te quiere provocar para que me hagas daño. Él solo dice mentiras.

—¿Es...una mentira...que no te importo? Shizun...

No le importó en su primera vida y al inicio de esta solo le importaba superficialmente. Solo lo cuidó y trató bien en un inicio porque no quería sembrar el odio en Binghe. No quería volver a convertirse en una vara humana, en el culpable de que Yue Qingyuan muriera.

Pero cuando superó eso, cuando comenzó a ver a Binghe como su discípulo, como un niño más, como un humano, eso cambió. Binghe comenzó a ser importante para él, incluso cuando no quería pensar mucho en eso. Ese tonto e impulsivo mestizo era importante para él.

—Lo es, Binghe sí es importante para este maestro—aseguró Shen Jiu, las manos de Binghe comenzaban a aflojarse.

—¿Incluso si le causé tanto dolor?

—Yo te lo causé a ti primero.

Los ojos de Binghe comenzaban a abrirse, un rojo profundo y brillante. Pero se veían atormentados, como si su mente todavía le jugara en contra.

—¿A shizun no le molesta que este Binghe se quede a su lado? Incluso sabiendo quién soy, ¿shizun me quiere a su lado?

Esa pregunta, a pesar de que Shen Jiu no quería responderla de la manera en que Binghe quería escuchar, sabía que tenía que hacerlo si quería tranquilizar al chico y regresar vivos y bien a la realidad.

—Este maestro quiere a Binghe a su lado—aseguró, y aunque una parte de él lo hacía porque quería calmar al niño, otra parte de él estaba siendo sincero.

Binghe dejó de sostener su cabeza para atrapar a Shen de los hombros y acercarlo. Sus labios chocaron contra los del chico, en un beso profundo y cargado de sentimientos para el que no estaba preparado. No lo había estado para nada.

Era un beso lleno de anhelo, de un dolor profundo, de una necesidad tan grande que abrumaba. Fue como si Binghe hubiera esperado toda su vida para besarlo de esa manera, como si lo hubiera extrañado y hubiera deseado con todo su corazón ese reencuentro. Sus brazos lo aferraron de tal manera que parecía incapaz de soltarlo otra vez. Y Shen estaba seguro de que no lo haría jamás, incluso si él mismo se lo pedía. Estaban unidos, Binghe se encargaría de que siempre se encontraran de alguna manera.

Shen Jiu no sabía si sentirse halagado o asustado.

El paisaje onírico comenzó a resquebrajarse poco a poco, como la estabilidad mental de Shen Jiu luego de que Binghe lo besara de esa manera.

Como un cristal cayendo al suelo y destruyéndose, así se rompió el paisaje onírico. Cuando volvió a la realidad, Shen Jiu descubrió que estaba todavía en la cama, atado. Binghe se recompuso pronto al regresar y arremetió hacia adelante, donde Qiu se levantaba todavía despertando del gran sueño.

La sangre manchó el suelo cuando XinMo atravesó el cuerpo de Qiu Jianluo.

Una herida mortal. 


Juro que me aguanté las ganas de decir Sí, sí es cada vez que mencionaban a Bingge en los comentarios, porque sí, este Binghe fue siempre el Bingge y nunca el Bingmei, por eso en las etiquetas pongo Bingge y no Binghe o Bingmei solamente. 

Ahora que se descubrió la identidad secreta de Binghe, puedo hablar más de los extras uwu Aunque pude decir de algunos antes pero bueno era mejor esperar a esto para contar bien los extras jajajaja

Todo lo que pasó Bingge y cómo terminó en el mismo mundo que Shen es algo que se verá en el primer extra. Todo tiene una historia y una explicación, así que ahí se verá bien uwu

Los extras serán los siguientes:
*La travesía de Luo Bingge: los 4 primeros estarán destinados a Bingge, cómo terminó ahí, cómo vio él el trato de sus hermanos marciales, qué piensa al respecto, cómo fue su estadía en el Abismo y lo que pensó al regresar. Todos desde su punto de vista. Aquí estará el plan que diseñaron los discípulos de CangQiong para salvar a sus maestros y cómo lo llevaron a cabo.
*¿La familia de shizun y el emperador?:El 5º extra es un extra inspirado en el capítulo en que Shen Yuan termina en el paisaje onírico de Luo Binghe por error.
*Regreso a la infancia: el 6º, como no puede faltar, es el Regreso a la infancia uwu Ahi volveremos a ver a un Luo chiquito y la reacción de todo QingJing al verlo.
*Un  cuento de amor: El 7º estará dedicado exclusivamente a Tang Huaying.

*El Transmigrador y el Rey de Hielo: Los seis que siguen serán extras exclusivos del MoShang.

*El verdadero Shang Qinghua: el 14º será un extra especial dedicado al Shang Qinghua original, el personaje que siempre termina siendo ignorado por el hermano Avión. 

*El pequeño cachorro sometido por el blanco gatito:15º es el extra especial porque es la primera vez del Bingjiu.
*La balada de la luciérnaga: 16º es un extra especial donde se ve la historia de Yang Chen y Mu Sheng de la primera vida de Shen. (Spoiler: es un capitulo sad)
*La canción del hermano perdido: 17º será la vida y la reacción de Ming Fan, Lu Song, Ling Yi, Chen Mei y Chen Lin respecto a la caída de Luo Binghe al abismo.

Y esos son todos los extras. No los tengo a todos escritos :v de los cuatro primeros me faltan los dos ultimos jajaja Los del transmigrador y el rey de hielo no tengo ninguno :V El del verdadero Shang y el 15 están en proceso. Ya los demás, los tengo a todos uwu

Espero lograr escribirlos en la semana para ir trayéndoselos , en el proceso también estoy escribiendo los resumenes de los capitulos del siguiente ff Bingjiu que tengo en mente uwu, dentro de este mundo de Sistema del villano escoria uwu

Mañana capítulo 50: El Espejo Reflectante y la Espada Sanadora II

Ya nos acercamos poco poquito al final uwu

Nos vemos!!! Besos :D

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