"Por mi bebé..."
No sabía exactamente a dónde iba, pero escuchó unos gritos provenientes de una de las salas de reuniones, frunció el ceño entrando al lugar, interrumpió la discusión de Fury y Maria.
– ¿De qué te enojas si esto era justamente lo que querías? – Emitió Natasha queriendo acabar con todo el drama que había traído esto
– No era como lo planeado, Maria tenía instrucciones de...
– ¡Pero no lo hizo! Y agradezco que sea así... y discutiendo no vas a remediar lo que ya pasó – Dijo Natasha sintiéndose exhausta
– Si vamos a tomar la situación así, entonces ¿Cuando vuelves a tomar tu puesto? – Se sentó en una de las sillas
– No hablaré de eso ahora – Se alejó hacia la puerta – Hablaremos después de esto, tengo demasiado que resolver ahora y también necesito cuidarme – Se llevó la mano al vientre inconscientemente – Con permiso – Salió del lugar
Natasha caminó por el pasillo pensativamente, no sabía qué hacer, estaba confusa de todo, era como si hubiera tomado un largo viaje y acababa de llegar, no sabía que quería hacer primero o lo que debía.
– ¡Natasha! – Volteó viendo a Maria correr hacia ella, la verdad recordarla le dio una clase de alivio, porque siempre que estaban cerca tenía una sensación de añoranza, y ahora entendía porque – Yo... sé que no quieres hablar de nada relacionado a mí, pero ya te recordé, justo como tú a mí y tengo una sensación extraña de perder a mi mejor amiga, sé que yo era Marie y no sabía quien eras tú exactamente, pero ahora tengo una mezcla de emociones indescriptibles y estoy segura de que quieres hablar con todos tus amigos, pero lo que dije antes, sobre lo nuestro, yo quiero que lo dejemos en el olvido, tú no eras tú y yo no era yo
Natasha abrazó a Maria con fuerza, sonrió sintiéndose en casa, era de sus mejores amigas y la había extrañado, una sensación así era la que tenía, no sabía cuántas veces se repetiría que era todo tan confuso.
– Maria, veamos que pasa... por ahora estoy de acuerdo contigo de dejar a Marie y Natalia atrás... porque no éramos nosotras – Asintió alejándose un poco viéndola a los ojos
– Gracias, Nat – Sonrió ligeramente
– No hay de qué... quiero que todo sea como siempre, ya veremos lo que sucede... – Sintió a Maria volver a abrazarla y creyó que sabría cómo componer su vida poco a poco
...
Abrió la puerta y vio a Wanda llorar en el piso con los brazos en la cama, se acercó y la tomó de la cintura levantándola, besó su cabeza y la recostó en la cama, ella se veía afectada, se abrazó a su cuello, así que Vision se tuvo que recostar con ella, no había estado presente en el momento que sucedió todo, pero sí había escuchado lo que pasó.
– ¿Quieres cenar, querida? – Creía que lo mejor era distraerla que seguir dando vueltas con lo mismo – Tal vez no aquí, podríamos ir a cualquier lugar que desees – Acariciaba su espalda alejándose un poco de ella para verla a los ojos
– No, Vis, gracias – Susurró intentando calmarse
– Podemos hacer lo que tú quieras o ir a dónde sea... sólo debes decirlo y estaremos de camino al destino de tu elección – Juntó su frente a la de ella
– No puedo irme, debo de seguir aquí – Respiró profundamente queriendo tranquilizarse
– No tienes porque, Natasha volvió a su vida normal, ya no tienes que quedarte aquí por ella – Acarició su mejilla
– No es por ella – Suspiró no queriendo decirle del bebé aún
– Tú y yo podemos irnos lejos a que te despejes un rato de todo lo que está pasando
– No, Vis... – Se alejó un poco de él – Quiero estar aquí
– De acuerdo, puedes contar conmigo para todo – Se acercó a besarla
Wanda se removió alejándose – Quiero estar sola un rato ¿Puedes volver en unas horas?
– De acuerdo – La vio darle la espalda, dejó un beso en su cuello y salió de la habitación
Wanda no sabía qué haría ahora, claro que quería conocer a su bebé y estar junto a Natasha en este proceso, pero todo había pasado tan rápido, se había desmontado todo en unas pocas horas, tenía miedo que algo le pase a su esposa, que pronto dejaría de serlo, se sentía realmente abrumada, la amaba y también creía que lo mejor era estar lejos.
...
Abrió los ojos sintiendo besos en la mejilla, sonrió al ver a Vision que le traía el desayuno a la cama, se sentó un poco y se hizo a un lado para que esté con ella.
– Buenos días – Sonrió Wanda dejándole un beso
– Buenos días, querida
Wanda tomó del jugo de naranja y todo lo que había pasado el día anterior golpeó su mente, era cómo si hubiera olvidado todo hasta ese momento, se quedó estática y pensativa.
– ¿Todo bien? – Preguntó Vision
– Sí, gracias – Trató de sonreír, volviendo su atención al desayuno – Sé que esto es común en ti, pero en serio gracias por traerme el desayuno – Sonrió besando sus labios, debía actuar lo más normal posible, no quería más cambios abruptos, todo debía ser como cada día
– Es un placer
Sintió el brazo de Vision rodearla y quiso estar cómoda centrándose en el momento, en la televisión y la comida, sintió besos en su mejilla y volteó a corresponder con sus labios, cerró los ojos entregándose a la acción sentía sus manos atraerla a él y Wanda se acercó más a él rodeando los brazos en su cuello.
Unos toquidos resonaron en la habitación.
– ¡Pase! – Exclamó Vision y Wanda se separó rápido
– Disculpen... – Era Natasha que entró a la habitación, pero quitó la mirada rápido de ellos – Wanda, necesito que hablemos... ¿Puedes venir a mi habitación un momento?
– Sí, claro – Vio como salió rápido, se sintió muy incómoda, como si la hubiera descubierto engañándola, pero lo cierto es que no eran nada, que claramente no lo serían, así que debía seguir con su vida, necesitaba su rutina y sabía que Natasha tenía a su bebé en el vientre, pero eso de alejarse no sonaba a una tan mala idea – Ya vuelvo – Salió de la habitación cerrándose mejor la bata de dormir y se dirigió con Natasha
Wanda entró a la habitación de su esposa, pensando qué pasaría ahora, la situación la estresaba, pero debía afrontarla.
– Buenos días, Natasha ¿Qué pasó? – Se cruzó de brazos viendo a su esposa, era realmente bella, la había extrañado demasiado
– Buenos días – Intentó sonreír, era cierto que estaba dolida con Wanda, pero entre toda la confusión, creyó que quien la buscaría sería ella y que tal vez pueda abrazarla por la situación o su bebé o lo que sea, pues era alguien importante en su vida, no esperó verla esta mañana en la cama con Vision ni con nadie más, sentía algo horrible en el estómago, pues para Wanda pasó el tiempo, pero para ella no, para ella su relación había terminado ayer – Esto será rápido – Emitió más recuperada – El bebé que tengo es nuestro, no sólo mío, así que no actuaré de manera inmadura porque no es justo para nuestro hijo, debemos actuar de manera responsable, es un bebé mágico o lo que sea, así que también tengo preguntas...
– Claro Nat, tú pregúntame lo que gustes y mil gracias por querer que sea parte, sé que no lo merezco y...
– ¿Que se haya retrasado el desarrollo del bebé lo perjudica en algo? – La interrumpió no queriendo escuchar de ella más de lo necesario
– No – Agachó la mirada – No es un bebé tradicional, aunque en la ciencia los embriones se pueden quedar congelados por años y aún así nacer, pero en nuestro caso no es que se haya retrasado, estaba ahí, pero a la vez no, no sé cómo explicarlo en términos normales, pero es magia... – Se encogió de hombros – El punto es que nuestro bebé está bien
– De acuerdo – Suspiró segura posando la mano en su vientre – ¿Va a tener poderes?
– No lo sé
– Wanda – Endureció la voz – Tienes que tener estas respuestas o fingir al menos que las sabes, malyshka
Wanda quiso sonreír por el apodo, pero sabía que era por la conversación y a la vez remover mucho del pasado – Láska, yo no lo sé, ni siquiera sé que sexo es el bebé, porque sólo quise que tengamos un bebé, no me centré en esos detalles, lo podría averiguar, pero quiero mantener la sorpresa ¿Sabes? – Jugó con sus manos de manera nerviosa, ayer ni se imaginaba que tendría esta conversación
– Dijimos que no queríamos un bebé con poderes...
– Dijimos que no queríamos que corra peligro y por como es este mundo si los tiene o no igual corre peligro – Se cruzó de brazos volteando hacia otro lado
Natasha rodó los ojos hacia un lado – Okay, veremos que pasa con eso entonces... – Suspiró
– El bebé va a estar perfecto y lo será también – Sonrió acercándose a ella, apartando un mechón de su cabello rubio – Claro que el color de tu cabello no lo podrás mantener por los químicos, pero si quieres puedo hacer que siga así con magia
– No, gracias – Suspiró – Sé que nuestro bebé es prácticamente un milagro, pero no quiero rodearme de más magia, quiero que mi bebé me conozca como soy...
Wanda rio con ligereza – ¿Recuerdas cuando Mason no te reconocía con el cabello rubio?
Natasha asintió riendo como ella – Sus pequeños ojos confundidos eran adorables... – Sonrió apreciando saber que estaba bien y que era un lindo niño ahora – Sobre el divorcio... – Dijo a los segundos y vio a Wanda no sólo tensarse y estar seria, si no también notaba su mirada dolida, ambas estaban heridas, no lo negaba, y aunque estaban en esta situación por ella, tampoco se negaría que no le dolía verla así – Haremos todos esos papeles cuando el bebé nazca, tengamos resuelto sus cuidados y tenerlo con nosotras
– Okay – Aceptó nerviosa, sabía que el confort de ser una buena madre sólo se lo podría dar Natasha, pero ahora estaba sola prácticamente
– Bien... hoy tengo la consulta para ver al bebé, sé que sabes que está perfecto, pero quiero hacer esto de la manera tradicional, puedes venir conmigo si quieres – Se encogió de hombros
– Me encantaría – Sonrió
– Es hoy a las cuatro de la tarde
– Perfecto – La vio a los ojos con duda – ¿Desayunaste?
– Estoy por hacerlo – Vio su antigua habitación creía que debía ordenarla – Estaré con Clint en el comedor
– Bien... ¿Le dirás?
– Tal vez cuando terminemos, no quiero que esté encimoso toda la mañana
– Okay – Mordió su labio inferior – Bueno, ve a comer que se hace tarde y debes alimentarte bien – Asintió seria – Y Nat... no importa la hora que sea o dónde esté yo puedes pedirme lo que quieras, lo que necesites, lo que se te ocurra o se te antoje, yo voy a estar para ti y no quiero que te preocupes de nada
– Gracias, Wanda – Sonrió ligeramente – Lo aprecio
Sonrió de igual manera – Ve a comer ahora
– Bien – Salió de la habitación
Wanda se sentó al borde de la cama, casi nunca estaban en ese lugar en el pasado, desde que Natasha se quedó a dormir con ella hace años no se habían separado hasta ir a su propia casa, sentía que no había procesado bien las cosas, ella debió buscarla por la noche para asegurarse de que duerma en un buen lugar, en una buena cama, no sólo dar por hecho que lo haría, estaba embarazada de su bebé, debía tener esa clase de consideraciones, ya no importaba lo que había hecho o no, ni si habían pedazos suyos por recoger, debía estar para Natasha porque estaba embarazada.
Se fue hacia la puerta, y decidió tomar una ducha rápida, arreglaría la habitación de Natasha, haría que sea lo más cómodo posible para ella, traería su ropa y todo lo que la tenga tranquila, la situación avanzó de manera rápida y atropellada, pero ahora debía ser una adulta responsable, tenía un bebé en camino y llevaría todo de manera cordial con Natasha, se aseguraría de que ella esté bien, no podía remediar el pasado, pero ahora sí podía hacer las cosas mejor.
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holi!!! Muchas gracias por sus votos y especialmente sus comentarios <3
Me gusta la tensión y que Wanda le está dando su espacio, pero a la vez quiere estar para ella, Nat está demasiado confusa :c
Bye...