Los arco iris siempre son una buena señal.
Los colores te llenan de alegría y siempre se utiliza al arco iris como una referencia para el comienzo de un camino.
Ese día había aparecido un arco iris en el cielo.
A Isla se le había ocurrido que sería una buena idea que nuestras familias se conozcan, ella preparó a sus padre con mucha información sobre tradiciones coreanas y nuestras costumbres y yo procuré hacer lo mismo con mi familia, pero con las costumbres y tradiciones occidentales, más específicamente, con las mexicanas. Queríamos que el choque cultural no fuera tan fuerte para nuestras familias y por ello, madrugué para ir a casa de mi novia para ayudarla a preparar la comida y todo lo que planeamos para que saliera lo mejor posible.
En casa de Isla todo era exageradamente limpio por el TOC de su padre y por esa misma razón, ella tenía la costumbre de cambiar sus zapatos por pantuflas antes de entrar a la casa, a pesar de que eso ayudaba bastante, teníamos la barrera del idioma, mamá y papá hablaban escaso inglés, pero Jeong Min y yo lo hablábamos fluido, mi hermano por su trabajo y yo porque mudarme a un país extranjero significaba que tendría que valerme de dicho idioma; pero mamá y papá tendrían cierto déficit para comunicarse, por lo que, mi hermano y yo procuramos enseñarles la mayor cantidad de palabras en inglés para que ellos fueran capaces de comunicarse y no sentirse perdidos en la plática.
- ¿a tus padres les gusta la carne de res? Compré bastante para que podamos hacerla antes de que lleguen -dijo Isla con rapidez y la miré caminar en círculos en la cocina- tal vez no les guste el tequila, debería haber comprado soju ¿verdad?
Reí bajo y me acerqué a ella para rodear su cintura con mi brazo y con ello conseguir que fijara su mirada en mí- todo está bien cielo, no falta ni sobra nada, saldrá bien ¿sí?
Cielo.
Cielo era una palabra rara, Isla y yo escuchábamos una canción cuando la palabra cielo se escapó de sus labios.
"- ¿qué significa? -pregunté
- cielo -dijo en inglés
- ¿cielo significa cielo? -pregunté y ella asintió- pero en las canciones que tu pones suelen decir cielo para referirse a alguien -dije
- es una manera dulce de llamar a alguien, como cariño y amor -explicó
- ¿puedo llamarte cielo? -la vi parpadear con sorpresa para después incorporarse en el sofá y mirarme a los ojos
- ¿quieres llamarme cielo?
- suena lindo ¿no crees?
- odio que me hagas sentir tan cursi -dijo y reí divertido plantando un beso en su nariz- pero odio más que esa palabra se escuche perfecta cuando tú la dices -murmuró y besó mis labios con dulzura "
Entre recuerdos, cocina, risas y besos llegó el momento de ir a recoger a mis padres. Salí de casa de mi novia para buscar a mi familia en el hotel en el que se estaban hospedando, todos subieron a mi auto sin rechistar, pero en el camino podía ver la molestia de mi padre. Mamá se había hecho a la idea de que Isla era como mi alma gemela y que no quería ni planeaba dejarla ir cuando me había costado mucho entender que me gustaba, por su parte, papá no me dirigía la palabra todavía, pero Jeong Min y mamá ayudaban a contener su mala actitud.
Así llegamos a casa de mi novia, al entrar, Laika ladró por la presencia de desconocidos y mamá miró a la perrita con curiosidad.
- buenas tardes -saludó Isla con gran amabilidad
- buenas tardes -saludaron mis padres al unísono y se inclinaron
- es un gusto tenerlos aquí -dijo mi novia- por favor, tomen asiento -en ese momento mi labor como traductor inició y empecé a explicar en coreano todo lo que Isla decía
Laika seguía mirando a mis padres y a Jeong Min como a desconocidos, pero les olía los pies con muchísima parsimonia, hasta que llegó con mamá y ella la seguía mirando extrañada.
- ¿qué clase de perro es ese? -me preguntó
- una perrita salchicha mamá, mira -atrapé a Laika entre mis brazos y la cargué para que mi madre la viera de cerca, ella empezó a observar a la perrita con mucha extrañeza y me regaló una sonrisa en cuanto Laika lamió su dedo en señal de saludo
Los padres de Isla no tardaron en bajar y entonces, la comida empezó. Para mi sorpresa, el padre de Isla era bastante extrovertido con otros adultos y contaba bromas y se volvió muchísimo más carismático que como yo le conocía. No había rastro de seriedad en él y con ello también se llevó la molestia de mi padre.
No parecía importar realmente la barrera del idioma, se entendían en una extraña fusión entre inglés y coreano, pero aquello había vuelto ameno el tiempo entre ambos.
Mamá conversaba con la madre de Isla sobre recetas de cocina coreana y, por el contrario, la madre de Isla le compartía recetas de cocina mexicana, pero ese tema no duró demasiado porque a mamá le gustó la manera en que la madre de Isla tenía una proyección para su futuro y sus viajes con su esposo y parecía siempre mantener muy despierta esa llama del amor que algún momento de la vida los unió.
Jeong Min, Isla y yo nos dedicamos a comer y de vez en cuando intervenir para traducir algo, pero no parecían realmente necesitar de nuestra ayuda así que conversábamos entre nosotros.
No diría que todo fue perfecto, pero conseguimos un punto medio en el que nuestras familia se entendieron y papá parecía estar mucho más tranquilo con el tema de Isla o eso supuse cuando el padre de mi novia y él se dieron un apretón de manos en señal de despedida.
Los llevé en mi auto de regreso al hotel.
- Min Yoon Gi -me llamó papá, como una señal para mi mamá y para Jeong Min para bajar del auto después de despedirse- conduce -dijo y yo acaté su orden extrañado
Pasamos varios minutos en completo silencio, la noche consumía todo a nuestro alrededor, las luces de los postes apenas nos iluminaban, pero podía sentir una gran tensión en el ambiente.
La tensión entre ambos era demasiado pesada.
- para
Me estacioné frente a uno de los varios miradores que había en la ciudad y él salió del auto, lo seguí con curiosidad y su paso fue enlenteciéndose hasta el punto de parar.
Podía sentir el frío calarme hasta los huesos, pero la imagen de la ciudad bañada en luces nocturnas hacía que todo valiera la pena. Ese bello paisaje estrellado con colores amarillo y blanco me fascinaba y era lo que admiraba siempre desde mi habitación.
Era mi momento favorito de la noche, ese en el que la ciudad se callaba junto a mis pensamientos y solo existíamos la luna, las estrellas, las luces artificiales y yo.
- ¿qué te dije cuando quisiste tener una novia por primera vez?
Miré a papá confundido, recordaba que cuando tenía quince me había gustado una chica, se lo había contado y todo, pero...
- dijiste que no estaba listo -eso era lo que me había obligado a empezar a esconderles cosas a mis padres y guardarlas para la burbuja de los hermanos Min
- ¿y qué fue lo que hiciste?
- salir con ella en secreto
Solo el sonido del viento nos acompañaba en ese momento, ese silbido fácil de reconocer porque era gélido y se mezclaba con el del movimiento de los árboles.
- te dije que tener una novia te indicaba un cambio, habías dejado de querer juguetes porque querías libros de historia, empezaste a preocuparte por lo que te ponías en lugar de escoger camisetas de dragones y las niñas finalmente habían dejado de darte asco y las empezaste a ver de una manera diferente -dijo y me miró- ahora has crecido más de lo que yo hubiera imaginado, pero sé que no olvidaste tus raíces, solo te adaptaste al nuevo mundo al que viniste a vivir y eso me da un orgullo gratificante
Sentí la necesidad de mirar a mi padre con sorpresa ante esas palabras.
Nunca me habían dicho que se sentían orgullosos de mí, ni siquiera cuando gané mi beca, siempre imaginé que les hacía las cosas más fáciles, pero nunca pensé que podía estar dándoles orgullo.
Eso me desmoronó bastante.
- ahora mi hijo es un hombre que vive cada día mejorando como ser humano y profesional y consiguió a alguien que lo ame de la manera en que nosotros lo hacemos, queriendo que cumplas tus metas y todos tus sueños -me percaté de que papá se giró hacia mí y se arrodilló
Nunca se disculpaba conmigo, pero esa vez lo hizo.
Nunca más ocurrió, pero esa vez sí lo hizo.
Papá finalmente se disculpó conmigo.
Para lo que quedaba de la noche ambos nos dedicamos a mirar la ciudad, hasta que el frío se volvió insoportable y tuvimos que ir al hotel.
Mamá y Jeong Min habían preparado todo puesto que su vuelo era el de la una de la madrugada y a esa hora yo podía llevarlos al aeropuerto y aprovecharía para despedirme de ellos.
Un último adiós y una promesa de volvernos a encontrar pronto fue lo que selló mi tiempo con mi familia.
Jeong Min dijo que volvería pronto.
Mamá me pidió que fuera a Corea pronto.
Papá me pidió que siguiera adelante y que diera todo de mí, no había un pronto en lo que papá me pedía, solo un deseo en que su hijo saliera adelante y palabras llenas de cariño que decían que yo era capaz y que confiaba en lo que hiciera con mi vida de ahora en adelante, porque sabía que había criado bien a Yoon Gi, pero era momento de dejarlo salir al mundo sin temer a lo que pudiera pasar.
Él y yo sabíamos que siempre estaría ahí para darme una mano cuando cayera, pero también sabíamos que ese momento era el cambio en el que mi vida había dejado de ser nuestra para convertirse en solo mía.
Vi como los tres desaparecieron por las escaleras eléctricas y emprendí mi camino de regreso a casa.
No puse música para que me acompañara, decidí que el silencio era un buen amigo para que mis pensamientos fluyeran con normalidad y tranquilidad.
Llegué a casa con la oscuridad de la noche y caminé torpemente de la sala a mi habitación sin encender la luz, hasta que choqué con mi cama y tuve que dar luz a mi habitación.
Sobre mi cama, mamá había dejado una funda de regalo junto a una carta, en la funda había una bufanda gris tejida a mano, que imaginé ella habría hecho en su taller, la acomodé alrededor de mi cuello y me senté en mi cama para leer la carta.
Para mi pequeño gatito,
La vida ha sido muy extraña desde que partiste de casa hace seis años, no escuchar tu piano en tu habitación me revuelve el estómago y trae a mí ese amargo sabor de saber que no estás conmigo, las mandarinas que compro en el mercado ahora duran meses porque ya nadie las devora en una sola semana y ya nadie me dice que mi flor favorita ha brotado porque nadie las observa con cuidado durante todo el año. Hijo querido, la vida sin ti ha sido difícil, pero he tenido que aprender a entender que no te has ido para hacerme sufrir, tu padre y yo hemos aprendido que tu partida ha sido en busca de un mejor futuro y que lo has estado haciendo muy bien en todos estos años tú solo. Eras un chico muy responsable, cuidadoso e inteligente y nos alegra infinitamente que hayas florecido y te hayas convertido en un hombre con valores y metas fijas en su camino.
Sabemos que todo es mejor para ti en tu nuevo hogar, sabemos que la vida se encarga de hacernos pasar por altibajos extraños, pero todo eso te ayudará a ser mejor y lo sabemos porque siempre lo has hecho así, nunca te dejarás vencer por nada y siempre lucharás con la frente en alto, pero mi Yoon Gi, cuida al niño dentro de ti, recuérdale lo mucho que lo amamos y cuanto lo extrañamos.
Con esto no quiero decirte que regreses hijo, quiero que abras tus alas y vayas lejos hacia el futuro, porque eso es lo que siempre quisimos para ti y lo que realmente vale. Al final del día, el tiempo nos hará más viejos, pero siempre veremos tus logros, siempre te escucharé decirme cuando mi flor favorita brote y siempre te terminarás las mandarinas que compre en el mercado.
Te amo muchísimo y espero que con esta bufanda recuerdes que tu familia siempre te tiene presente, nunca olvides eso.
Con cariño,
Mamá
" – Yoon Gi, es hora de entrar a casa -decía mamá desde la puerta de mi casa
- ¿mamá has visto la flor que tanto te gusta? Por fin ha brotado
- la veo Yoon Gi -rió mamá sentándose a mi lado
- ¿por qué se tardó tanto mamá?
- porque las flores son como las personas Yoon Gi, algunas brotan antes de tiempo y se marchitan rápido, pero esta se tomó su tiempo, se nutrió como debía, tomó mucho sol y mírala, es una flor maravillosa
- es tan bonita como tú -la escuché reír
- vamos adentro hijo, papá te compró mandarinas
- me las voy a comer si no entras rápido -se quejó Jeong Min desde la puerta
- no Jeong Min, eso es trampa -me quejé y entré corriendo a mi casa "
La vida cambia, yo cambié y aun así te sigoamando igual que ayer.