Laila Scamander Y Las Reliqui...

By fanfics_and_fandom

47.2K 6.5K 1.9K

#7 «A matar a Voldemort» Las cacerías han comenzado en el mundo mágico. Laila Scamander junto con sus amigos... More

Sinopsis + TRAILER 1
1: El camino de la Nostalgia
2: Tonks
3: Angustiosas horas
4: Por Ojoloco
5: Preparativos
6: Los Delacour
7: Scrimgeour...otra vez
8: Testamento
9: Una boda de ensueño
10: Escape
11: Fugitivos
12: R.A.B
13: El Relicario
14: Kreacher
15: Una terrible reunion
16: Inútil Ayuda
17: Primera Plana
18: La calma antes de la Tormenta
19: Ministerio
20: Obsesión
21: No se deben decir mentiras
22: Escape poco exitoso
23: Gregorovitch
24: No son vacaciones
25: Inesperados visitantes
26: Separación
27: Carroñeros
28: La vida en Londres
29: El Refugio
30: El Plan
31: Avalon
32: Bola de Luz
33: Reencuentro
34: Una muy enojada Hermione
35: Lovegood
36: Las Reliquias de la Muerte
37: Emboscada
39: Greyback
40: La Mansión Malfoy
41: Dobby, el elfo libre
TRAILER 2
42: Las Secuelas
43: Griphook y Ollivander
44: Un curioso trato
45: Padrinos
46: La horripilante poción multijugos

38: Pottervigilancia

580 67 8
By fanfics_and_fandom

Me hallaba acostada en la cama de Morgana en su castillo, por lo que ahora debía estar en mi subconsciente, ósea muy inconsciente y probablemente desmayada. 

Oh bien, estas despierta— Morgana sonrió apareciendo a mi lado en una silla con las piernas cruzadas, se encogió de hombros. Oh bueno, despierta en tu subconsciente.

Siendo que era mi subconsciente no sentía dolor por el pedazo de techo  y la madera que me cayo encima por lo que me levante de inmediato de la cama y abrase con fuerza a Morgana quien inmediatamente envolvió sus brazos a mi alrededor de una manera casi maternal.

— Se llevaron a Luna... temblé, un sollozo escapándose de mi garganta.

 Lo se cariño Morgana me cepillo el cabello con los dedos—. Pero tu amiga Luna es una chica muy fuerte, que se puede enfrentar a la adversidad con ingenio. 

Asentí, sabiendo que tenia razón, Luna no podia estar muerta... Luna no podia perder su sonrisa soñadora y su mirada perdida en sus raros pensamientos. 

Me senté con Morgana a la pequeña mesita donde tomábamos el te y hablábamos como podíamos siendo que nadie me iba a molestar en la vida real por hablar con la nada misma siendo que ellos no podían verla. No pude evitar preguntarle sobre las reliquias de la muerte y ella hizo una mueca, como recordando algo vergonzoso;

— Te seré sincera anwyll, nuestra varita no es de sauco pero es de pluma de thestral, el mismo núcleo que la varita de sauco.

 Entonces existe sonreí sorprendida pero ella hizo un gesto con la mano como si espantara una mosca.

— Es un mito, un rumor que se ha corrido alrededor de los años. hizo un gesto como si estuviera espantando una mosca, sin embargo yo alze una ceja un poco curiosa por su comportamiento, de como no quería hablar de esto—. No existe, créeme.

— ¿Por que tan segura?— la vi extrañada—. ¿Que no me quieres decir?

— Yo.... yo tal vez....  extrañaba a mi hermana Morgause...y tal vez y solo tal vez busque a Beedle el bardo y  solo, solo tal vez lo secuestre para que me dijera donde estaba la piedra de la resurrección.

Abrí la boca y luego la cerré, sin saber que decir.

— ¡Di algo!— Morgana me insistió con una expresión ahora avergonzada.

—  Estoy tratando de procesar que atrapaste, y conociéndote seguramente torturaste a Beedle el Bardo— acerque la taza de té hacia mis labios— . ¡M, eres genial! 

Su mueca de vergüenza cambio a una suave sonrisa, y note que se sonrojó un poco, complacida de no sentirse rechazada de sus acciones pasadas, siendo que ahora estaba tratando de redimirse.

— ¿Y? — pregunte interesada— . ¿Te dijo algo sobre la piedra de la resurrección?

—  Me dijo que era real y que no debía buscarla y me explico su cuento y bla bla bla— puso los ojos en blanco como si no fuera importante la enseñanza del cuento—. Estuve días torturándolo con legeremancia pero el tipo era un muy buen oclumante, eso no te lo dicen en sus cuentos, también olía bastante feo, digo, si, era el medioevo, pero era un mago entendía lo que era el agua y el jabón! el olor de su sangre en el suelo era mucho mejor que...

—  M, menos tortura, mas información útil.— insistí.

—  Corta historia; logro escapar. — hizo una mueca—. También te doy un consejo Laila; nunca secuestres y tortures a un bardo. Después va a dispersar historias de que eres una bruja fea sin corazon y malvada. Cantar canciones de lo feo que es mi rostro, y como me como a niños huérfanos inocentes.

— Puedo entender lo de malvada digo, torturaste al hombre ¿pero fea? — apunté—. Eso es ya ser un inescrupuloso mentiroso. 

— Exacto!— ella gruñó sin embargo movió la cabeza como si acabara de escuchar algo, la vi curiosa.

— ¿Que sucede?

— Estas despertando. 

Cuando abrí los ojos lo hice despacio, y tuve que pestañear muchas veces para poder enfocar bien mi visión. Lo primero que vi fue el rostro de Harry y Ron, el ultimo inmediatamente se levanto de su asiento y gritó ruidosamente;

— ¡Hermione, esta despierta! 

— ¿Cómo te sientes?— pregunto Harry preocupado y yo solo pude hacer una mueca sintiendo algo pegajoso en mi cabeza; un montón de vendas y sangre seca y un poco pegajosa. Mi novio me ayudo a sentarme en la cama con cuidado y me queje como debía porque aunque ya no era el dolor extremo, aun estaba el rastro de lo que dejaba el sentimiento de que te cayera literalmente un techo en la cabeza.

— ¿Es que ninguno de ustedes sabe sanar decentemente?— me quejé.

— Nuestra experta sanadora fue la que recibió un pedazo de yeso en la cabeza— Ron se encogió de hombros con Hermione llegando detrás de él.

Suspiré y los vi a los tres, notando cierta lejanía entre Harry y Hermione.

— ¿Discutieron, no es asi?—  Hermione abrió la boca y luego la cerró, y Harry encontró sumamente interesante las agujetas de sus zapatos—. Vamos, escúpanlo, quiero seguir durmiendo y mis hermosos ojos quieren cerrarse.

Ambos empezaron a hablar a la vez y luego se callaron ya que en cualquier momento volverían a discutir, así que Hermione en simples palabras dijo que nuestro enfoque eran los horrocruxes y olvidarnos de ese cuento para niños. Harry sin embargo pensaba que las reliquias de la muerte eran algo crucial, Voldemort de seguro estaba en busca de la varita de sauco y que deberíamos agregarlo a nuestra lista de prioridades.

— Ugh... mi cabeza da vueltas, detesto esto, solo déjenme dormir estaba mejor con Morgana hablando.— me subí de nuevo las tapas de la cama pero esta vez hacia la cabeza, aún así mi novio me destapó con curiosidad.

— ¿Morgana te dijo algo sobre las reliquias de la muerte?— Harry preguntó interesado, sabiendo que de seguro había hablado con la bruja.

— Cuatro ojos, no te va a gustar lo que tengo que decirte--- suspiré viendo ya la sonrisa triunfal de Hermione sobre que al parecer  ella tenia razón ahora mas que una bruja de hace 500 años lo habia confirmado— . Morgana dice que solo son rumores, que nunca las ha visto, estuvo mucho tiempo buscando la piedra de resurrección para traer de vuelta a su hermana Morgause pero nunca la encontró, Trato de torturar a Beedle el bardo pero...

— ¿Que?— Ron me interrumpió.

—  ¡¿Morgana conocía a Beedle el bardo?!— Hermione exclamó jadeante.

— ¡Ay ya es agua pasada!— Morgana se apareció a mi lado como si fuera una persona real aunque sabia que por haberme salvado la vida el año pasado, al tocarla sería como atravesar un fantasma al contrario de los otros años. 

— Pero se le escapo y vivió una vida feliz por el resto de sus días— levante las manos cómo si a mi me culparan— . Morgana ahora es una mujer distinta! ¡Esta siendo buena! .... ¿Cuanto tiempo llevo inconsciente?

— Todo el día.— respondió Hermione—. Temimos que no despertaras por un momento.

— Todo el...— me busque en los bolsillos desesperadamente y vi a mi alrededor alarmada, sintiendo como mi corazon se empezaba a acelerar brutalmente—. ¿Donde esta Castiel? Oh por Morgana cuando me cayó ese pedazo...

— Tranquila, esta aquí— Harry se dio un poco la vuelta viendo como mi bowtruckle aparecía por su hombro con toda la tranquilidad del mundo.

— ¡Cas!— el bowtruckle salto del hombro de Harry a mi mano y yo lo acerque a mi mejilla con cariño—. ¡Si algo te pasara me suicidaría!

Mis otros tres amigos se me quedaron viendo con una ceja alzada y yo rodé los ojos.

— Ay por favor sus vidas no se pueden comparar a las de un bowtruckle... ¡Conozco a Cas de toda la vida!

— ¡Te conocemos hace 7 años!— Ron exclamó.

—  ¡Pues Castiel hace nueve!—  yo respondí.

Por la mañana ellos recogieron la tienda y yo no pude hacer mucho esfuerzo debido a mi herida, aunque no me quejaba. Lo malo fue que la lluvia nos persiguió hasta la costa, donde de nuevo montaron ellos la tienda esa noche.

 Ahora estaba sentada en una de las sillas con las piernas estiradas hacia el regazo de Harry, con una revista de modas que robe en mi tiempo en Londres con Ron, no pude evitar fijarme en una pareja de recién casados, era en realidad el foco de atención el vestido blanco de la novia al parecer eran unos artistas muggles, actores que estaban celebrando su boda, el catalogo mostraba distintas fotos del vestido de la novia. Luego vi a Harry de reojo, más tiempo del que me hubiera gustado y pase la pagina sintiéndome una niña tonta y ahora observando un lindo vestido de lentejuelas verde. Además solo trataba de distraerme estando más débil de la cabeza mi legeremancia era mas difícil de controlar y podia percibir el deseo de Harry de encontrar las reliquias de la muerte y como pensaba que Hermione y Ron estaban obsesionados con los Horrocruxes. En ese momento me sentí tentada de darle una patada.

— ¿Te atreves a acusarnos de obsesivos? —le espetó Hermione una noche con fiereza, cuando Harry cometió el error de emplear esa palabra después de que ella le recriminara el poco interés que mostraba por localizar los otros Horrocruxes, cosa en lo que la apoyaba. No podíamos ir tras algo de lo que apenas estábamos seguros— . ¡Los que estamos obsesionados no somos nosotros, Harry! ¡Nosotros sólo estamos haciendo lo que Dumbledore deseaba!

Al él estaba convencido de que Dumbledore había dejado el símbolo de las reliquias en el libro para que Hermione lo descifrara, y además había escondido la Piedra de la Resurrección en la snitch dorada. «Ninguno de los dos podrá vivir mientras siga el otro con vida...», «señor de la muerte...»

—«El último enemigo que será derrotado es la muerte» —citó Harry con serenidad la siguiente noche.

— Poniéndonos poéticos no resolverá nada, cara rajada.—  me di la vuelta para ver a mi novio antes de volver a fijarme en Ron que trataba en vano de hacerme un antiguo hechizo de sanación como le estaba enseñando —. Por ultima vez Ron se pronuncia mo bith  B-I-T-H  no es tan difícil! 

— Perdóname pero no tengo una bruja oscura que me dio el regalo de una marca que me hace hablar unos cinco idiomas!— él me grito de vuelta.

Incluso el misterio de la cierva plateada, del que en realidad yo le recalcaba a Harry que era demasiado importante, el lo hacia a un lado, como si no fuera importante el hecho que alguien nos estaba siguiendo. Pero también había otra cosa que importaba: volvía a molestarle la cicatriz. Se esmeraba en ocultárselo a los otros dos, y siempre que le dolía se retiraba para estar solo, pero yo si podía notarlo. En un momento en el que estábamos durmiendo (yo me habia subido a su litera sigilosamente, pero en realidad no hubo mucho merito en el sigilo siendo que Ron abajo roncaba a boca abierta) él se habia tocado la frente y se había quejado pensando que yo estaba dormida a su lado, sin embargo yo me di la vuelta y ambos quedamos frente a frente. Siendo que Ron y Hermione estaban dormidos me explico entre susurros que las visiones que compartía con Voldemort habían perdido calidad: se habían vuelto borrosas y movidas. Y supe por cómo se expresaba que aunque temía su conexión con Voldemort, también la valoraba demasiado para poder guiarse. 

— Quedan tres Horrocruxes —Ron interrumpió un día—. ¡Vamos, necesitamos un plan de acción! ¿Dónde no hemos buscado todavía? Volvamos a repasarlo. El orfanato...

El callejón Diagon, Hogwarts, la mansión de los Ryddle, Borgin y Burkes, Albania... Ron y Hermione enumeraban sin cesar todos los lugares donde Tom Ryddle había vivido, trabajado o matado, o que había visitado. La verdad Albania me interesaba mucho mas que ir a ver un orfanato lleno de huérfanos tristes o una mansión abandonada. 

— Debemos tener cuidado de los carroñeros, están peor que nunca— le advertí sobre su incentiva de mantenernos en marcha por tantos sitios.

— Si bueno, tienes razón, algunos son peores que los mortifagos. — Ron asintió—. ¿Recuerdas cuando en «Pottervigilancia» comentaron...

— ¿Qué demonios es eso? —preguntó Harry.

— ¿El qué, «Pottervigilancia»? Ah, ¿no les había dicho cómo se llama? Es ese programa que intento sintonizar en la radio, el único que dice la verdad de lo que está pasando. Casi todos los demás siguen la línea de Quien-tú-sabes, pero éste no. Me encantaría que lo oyeran, aunque no es fácil localizarlo.

La siguiente semana Ron seguía intentando encontrar la contraseña correcta, murmurando una sarta de palabras elegidas al azar.

—Por lo general las contraseñas guardan relación con la Orden —les expliqué mientras ponía una compresa fría  contra atrás de mi cabeza para reducir la inflamación—. Bill era un especialista en adivinarlas.

El paso del invierno realmente fue duro para mi, pude lograr que Hermione estudiara los hechizos de sanación que Morgana me habia enseñado (después de asegurarle que no era magia oscura) y alguna que otra runa para la herida en mi cabeza, pero aun así me dolía mover un poco el cuello, al menos habia logrado eliminar todos los moretones y hematomas que habia dejado ese pesado mueble cayéndose en mis piernas.

 Pero no fue hasta el mes de marzo cuando la suerte por fin sonrió un poco. Fue un día que yo estaba tirada en mi cama, casi llorando viendo mis fotos con mis abuelos a quienes extrañaba demasiado, a menos que anunciaran sus muertes, asumía que estaban vivos. El solo hecho que los ataran a mis abuelos Newt y Tina, que los interrogaran y torturaran para saber mi paradero... yo los habia hecho objetivos. La culpa cada día me comía aun mas.  

—¡Ya la tengo! ¡Ya la tengo! ¡La contraseña era «Albus»! ¡Vengan!

Deje las fotos, y pestañee tratando de ahuyentar las lagrimas y salí de un salto yendo y arrodillándome juntos a mis amigos frente a la radio de la cual empezó a salir una muy reconocida voz:

«... que nos disculpen por nuestra ausencia temporal de la radio, debida a las diversas visitas a domicilio que últimamente han realizado esos encantadores mortífagos en nuestra zona.»

—¡Pero si es Lee Jordan! —exclamó Hermione.

—¡Sí, es él! —corroboró Ron, radiante de alegría.

«... Ya hemos encontrado otro refugio —iba diciendo Lee—, y me complace comunicarles que esta noche me acompañan dos de nuestros colaboradores habituales. ¡Buenas noches, chicos!»

«¡Hola!»

«Buenas noches, Río.»

—«Río» es Lee —explicó Ron—. Usan todos los nombres en clave, pero normalmente sabes...

—¡Shhh! —dijo Hermione.

«Pero antes de escuchar a Regio y Romulus —prosiguió Lee—, vamos a informar de esas muertes que la cadena Noticiario Radiofónico Mágico y El Profeta no consideran dignas de mención. Con enorme pesar hemos de informar a nuestros oyentes de los asesinatos de Ted Tonks y Dirk Cresswell.»

La sonrisa de mis labios desapareció en un segundo, sentí las piernas congeladas y pesadas, tuve que sentarme por completo en el suelo con cuidado pues mis piernas no me iban a sostener por mucho tiempo.

«También han matado a un duende llamado Gornuk. Todo parece indicar que Dean Thomas, hijo de muggles, y otro duende, los cuales presuntamente viajaban con Tonks, Cresswell y Gornuk, lograron huir. Si Dean nos está escuchando, o si alguien tiene alguna idea de su paradero, que lo comunique, porque sus padres y hermanas están desesperados por saber algo de él.

— Oh dios, Dean.— palidecí y quise vomitar en ese mismo instante, la preocupación hizo que mi corazon solo se acelerara.

»Entretanto, en Gaddley, los cinco miembros de una familia de muggles también han sido hallados muertos en su casa. Las autoridades muggles lo han atribuido a una fuga de gas, pero miembros de la Orden del Fénix me han hecho saber que fueron víctimas de una maldición asesina. Ésa es otra prueba más, por si no teníamos ya suficientes, de que la matanza de muggles se está convirtiendo en poco menos que un deporte recreativo bajo el nuevo régimen.

»Por último, lamentamos informar a nuestros oyentes que se han encontrado los restos de Bathilda Bagshot en El Valle de Godric; todo parece indicar que la bruja murió hace varios meses. La Orden del Fénix nos ha comentado que su cadáver presentaba inconfundibles heridas producidas por magia oscura.

» Queridos oyentes: quiero invitarlos a guardar con nosotros un minuto de silencio en recuerdo de Ted Tonks, Dirk Cresswell, Bathilda Bagshot, Gornuk y los muggles anónimos, pero no por ello menos recordados, asesinados por los mortífagos.»

Se produjo un silencio, y agarre con fuerza la mano de Harry con en realidad tanta fuerza que creo que le enterré las uñas en la mano pero él no dijo nada. Respiré un poco temblorosa, mi tío Ted.... ¿habia muerto? sentí la mano de Hermione en mi hombro en consolación al igual que Ron pero apenas las sentía.  Mi tia...., Tonks... Tonks iba a tener a su bebe y ahora su padre habia muerto...

«Gracias —dijo la voz de Lee—. Y ahora vamos a hablar con nuestro colaborador habitual, Regio, para que nos ponga al día de cómo el nuevo orden mágico está afectando al mundo de los muggles.»

«Gracias, Río», dijo una inconfundible voz, grave, comedida y tranquilizadora.

— ¡Es Kingsley! —saltó Ron.

— ¡Ya lo sabemos! —masculló Hermione y le ordenó que callara.

«Los muggles todavía no saben cuál es el origen de sus padecimientos, pero mientras tanto continúan sufriendo muchas bajas —dijo Kingsley—. Sin embargo, seguimos conociendo historias verdaderamente ejemplares de magos y brujas que han puesto en peligro su propia seguridad para proteger a sus amigos y vecinos muggles, muchas veces sin que éstos lo sepan. De modo que desearía hacer un llamamiento a nuestros oyentes para que sigan su ejemplo; quizá los ayudarían realizando un encantamiento protector a todas las viviendas de su calle. Si tomáramos algunas medidas tan sencillas como ésa, podríamos salvar muchas vidas.»

«¿Y qué les dirías, Regio, a esos oyentes que argumentan, dado que estos tiempos son tan peligrosos, que deberíamos "dar prioridad a los magos"?», le preguntó Lee.

«Pues les recordaría que sólo hay un paso entre "dar prioridad a los magos y los sangre limpia" y luego acabar diciendo: "dar prioridad a los mortífagos" —contestó Kingsley—. Pero hay que tener en cuenta que todos somos humanos, ¿no? Y por tanto, todas las vidas tienen el mismo valor y hay que protegerlas por igual.»

— Todas las vidas tienen el mismo valor— Morgana a mi lado imitó a Kingsley en un tono burlon y yo le hice uan seña de que se callara.

«Muy bien dicho, Regio. Si algún día salimos de este lío en que estamos metidos, te garantizo mi voto para ministro de Magia —prometió Lee—. Y ahora, Romulus presentará nuestro popular espacio "Amigos de Potter".»

«Gracias, Río», dijo otra voz que también resultó familiar; Ron quiso hacer un comentario, pero Hermione se lo impidió con un susurro:

—¡Ya sabemos que es Lupin!

Aun con lagrimas en los ojos sonreí un poco ante el apodo de mi tio Lupin y el hecho de que aun seguía con vida.

«Dime, Romulus, ¿sostienes todavía, como has hecho todas las veces que has participado en nuestro programa, que Harry Potter está vivo?»

«Sí, así es —respondió mi padrino sin vacilar—. No tengo ninguna duda de que los mortífagos divulgarían la noticia de su muerte por todo lo alto si se hubiera producido, porque eso asestaría un golpe brutal a la moral de los opositores al nuevo régimen. El niño que sobrevivió continúa siendo un símbolo de nuestra causa: el triunfo del bien, el poder de la inocencia y la necesidad de seguir resistiendo.»

Me daba un poquito de risa que aun llamaran a Harry "el niño que vivió" porque delante de mi estaba de todo excepto un niño; viéndole el cabello azabache mas largo y desordenado, además de la incipiente barba que se la habia formado en las semanas, solo yo y sus cercanos podríamos ver aun al niño de 11 años con ropa demasiado grande. 

«¿Y qué le dirías a Harry si supieras que nos está escuchando, Romulus?»

«Le aseguraría que estamos todos con él en espíritu —afirmó Lupin, y vaciló antes de añadir—: Y le aconsejaría que obedeciera a sus instintos, que casi nunca fallan.»

—Ay, ¿no les había dicho? —exclamó Ron—. ¡Bill me contó que Lupin volvía a vivir con Tonks! Y por lo visto ella se está poniendo enorme.

«¿... y las últimas novedades sobre los amigos de Harry Potter, que tanto sufren por su lealtad?», iba diciendo Lee.

«Bueno —respondió Lupin—, como sabrán nuestros oyentes habituales, algunos de los más destacados defensores de Harry Potter han sido encarcelados, entre ellos Xenophilius Lovegood, incansable editor de El Quisquilloso».

—¡Al menos vive! —masculló Ron.

— ¡Cierra la boca!— lo callé.

«También hemos sabido en las últimas horas que Rubeus Hagrid —a cada uno se nos erizo los vellos del cuerpo y con la otra mano agarre a Ron con tanta fuerza que dio un jadeo—, el famoso guardabosques de Hogwarts, se ha librado por los pelos de que lo detuvieran en los mismos terrenos del colegio, donde se rumorea que celebró una fiesta en favor de Harry Potter. Con todo, no llegaron a apresarlo, y creemos que en estos momentos huye de la justicia.»

«Supongo que, a la hora de escapar de los mortífagos, debe servir de ayuda tener un hermanastro que mide cinco metros, ¿no?», comentó Lee.

«Sí, eso te coloca en una posición ventajosa —concedió mi tío Remus con seriedad—. Pero permíteme añadir que, aunque aquí, en "Pottervigilancia", aplaudimos el temple de Hagrid, instamos incluso a los más devotos seguidores de Harry a que no sigan el ejemplo del guardabosques, porque las fiestas para apoyar a Harry Potter no son muy prudentes, dada la coyuntura actual.»

«Muy bien. Ahora Puedes asegurar a nuestros oyentes sobre la verdad e Laila Scamander? Varias personas debido al miedo ya están casi temblando por el nombre— al decir temblar pude escuchar un tono burlón en la voz de Lee que me hizo sacudir la cabeza con una pequeña sonrisa, recordando cuando comentábamos juntos los partidos de Quidditch

Mi tío Remus dio un respiro algo tembloroso, como si estuviera emocionado y preparándose para algo, y es que yo notaba que lo estaba y yo no pude evitar sentir aguar mis ojos con las siguientes palabras:

"Laila Scamander no es una bruja oscura, es una fuerza de la naturaleza, imparable, dispuesta a proteger su mundo y su hogar, los mortifagos tienen miedo de su poder, de su conocimiento, de su magia y han esparcido mentiras sobre ella en todos lados en busca de una recompensa. Pero Laila Scamander Black no es nada menos que una bruja que no puede ser controlada por nada ni nadie, como dije imparable, ella es el sol, y lo mas importante; es que ella lo sabe"

No sabia si estaba llorando o riendo, pero unos raros sonidos me salieron de adentro la igual que las incesantes lagrimas en mis ojos.

«Tienes razón, Romulus, ella lo sabe desde antes de poner un pie en Hogwarts—coincidió Lee—. ¡Así que les sugerimos que sigan demostrando su lealtad al chico de la cicatriz en forma de rayo escuchando "Pottervigilancia"! Y ahora, pasemos a las noticias relacionadas con otro mago que está demostrando ser tan escurridizo como Harry Potter. Nos gusta referirnos a él como el Gran Mortífago, y para ofrecer desde aquí sus opiniones sobre algunos de los más descabellados rumores que circulan sobre él, me gustaría presentar a un nuevo colaborador: Roedor.»

«¿Cómo que Roedor?», dijo otra voz, también familiar.

— ¡Es Fred! —gritaron Ron, Hermione y Harry a la vez.

— ¿Seguro que no es George?— fruncí el ceño alzando una ceja.

— Me parece que es Fred —dijo Ron acercándose más a la radio, mientras uno de los gemelos decía:

«¡Me niego a que me llamen Roedor! ¡Te dije que quería que me llamaran Rejón!»

«Está bien, está bien, pues Rejón. Vamos a ver, ¿podrías abordar las diversas historias que hemos oído últimamente sobre el Gran Mortífago, por favor?»

«Claro que sí, Río —dijo quien creía era Fred—. Como ya deben de saber nuestros oyentes, a menos que se hayan refugiado en el fondo del estanque de un jardín o en algún sitio por el estilo, la estrategia de Quien-tu-sabes es de permanecer oculto está creando un considerable clima de pánico. Pero, naturalmente, si diéramos crédito a todos los que aseguran haberlo visto, tendría que haber como mínimo diecinueve Quien- tú-sabes por ahí sueltos.»

«Y eso le conviene, por supuesto —intervino Kingsley—. Esa aureola de misterio está dando lugar a más terror que si se dejara ver.»

«Estoy de acuerdo —corroboró Fred—. Así que ya lo saben : hay que calmarse un poco. La cosa ya pinta bastante mal para que encima nos inventemos historias como, por ejemplo, ese nuevo rumor de que Quien-tu-sabes es capaz de matar con una simple mirada. Eso lo hacen los basiliscos, queridos oyentes. Pero es fácil hacer la prueba: observen si ese personaje que los mira tiene piernas; si las tiene, no hay peligro en devolverle la mirada, aunque, si de verdad es Quien-tu-sabes, probablemente eso será lo último que hagas.»

Por primera vez en muchas semanas, Harry rió al mismo tiempo que se le aligeraba el peso de la tensión.

«¿Y esos rumores de que lo han visto en el extranjero?», preguntó Lee.

«Bueno, ¿a quién no le gustaría tomarse unas vacaciones después de haber estado tan atareado? —replicó Fred—. Pero amigos, no se relajen demasiado pensando en que se ha marchado del país. Quizá lo haya hecho, o quizá no, pero lo cierto es que, si quiere, puede desplazarse más rápido que Severus Snape cuando le enseñas una botella de champú. Así que, si planean correr algún riesgo, no cuenten con que esté demasiado lejos. Nunca creí que diría algo así, pero ¡la seguridad es lo primero!»

«Muchas gracias por tus sabias palabras, Rejón —dijo Lee—. Queridos oyentes, con esta intervención llegamos al final de otro episodio de "Pottervigilancia". No sabemos cuándo podremos emitir de nuevo, pero les garantizamos que volveremos. No dejen de buscarnos en el dial; la próxima contraseña será "Ojoloco". Protéjanse unos a otros y no pierdan la fe. Buenas noches.»

El dial de la radio giró por sí solo y las luces detrás del panel se apagaron. Harry, Ron y Hermione estaban radiantes, sin embargo yo en realidad tenia una mezcla de emociones dentro mio que no sabía como sentirme realmente. No habia una palabra para expresarlo. Estaba sumamente triste por la muerte de mi tio Ted, habia pasado semanas viviendo en su techo, escuchando su tocadiscos, tratando de entender sus raros libros muggles, comiendo a la mesa con él... Sin embargo también albergaba un sentimiento de alivio y esperanza; mi tio Remus estaba vivo, Fred, Lee, y ojala Dean estaban vivos. Además escuchar otras voces que no fueran las de Harry, Ron o Hermione era reconfortante, como despertar de un largo sueño, como si mañana tuviera que ir a Hogwarts y entregar mi tarea de Transformaciones.

— Muy bueno, ¿verdad? —dijo Ron, risueño.

— ¡Genial! —repuso Harry.

— ¡Qué valientes son! —suspiró Hermione con admiración—. Si los encontraran...

— Bueno, no cesan de trasladarse, ¿no? —dijo Ron—. Igual que nosotros.

— Ojala sigan a salvo— suspiré.

— Pero ¿han oído a Fred? —dijo Harry, emocionado; ahora que había terminado la emisión, volvía a concentrarse en su única obsesión; las reliquias de la muerte—. ¡Está en el extranjero! ¡Sigue buscando la varita! ¡Lo sabía!

— Harry...

—Vamos, Hermione, ¿por qué te empeñas en no admitirlo? ¡Vol...

—¡¡No, Harry!!

—... demort va tras la Varita de Saúco!

Fue demasiado tarde cuando le cubrí a la fuerza la boca con las manos, el nombre ya estaba dicho, y ya estábamos en la mira, busque mi varita por todos lados; la habia dejado arriba en mi cama.

—¡Ese nombre es tabú! —bramó Ron, y se puso en pie al mismo tiempo que un fuerte «¡crac!» sonaba fuera de la tienda—. Te lo dije, Harry, te lo dije, ya no podemos pronunciarlo. Tenemos que volver a rodearnos de protección. ¡Rápido! Así es como encuentran...

Pero no terminó la frase, se oyeron voces, más y más cerca, voces ásperas y ansiosas... quise ir corriendo hacia mi cama pero Ron me detuvo haciendo  un gesto de que hiciera silencio, tal vez, por un milagro, no nos escucharían y pasarían de largo. Mi amigo pelirrojo se sacó el desiluminador del bolsillo, lo accionó y se apagaron las luces.

—¡Salgan de ahí con las manos arriba! —gritó una voz bronca en la oscuridad—. ¡Sabemos que están ahí dentro! ¡Hay un montón de varitas apuntándolos y no nos importa a quién maldigamos!

Continue Reading

You'll Also Like

1.1M 49.2K 95
Maddison Sloan starts her residency at Seattle Grace Hospital and runs into old faces and new friends. "Ugh, men are idiots." OC x OC
872K 40.4K 61
Taehyung is appointed as a personal slave of Jungkook the true blood alpha prince of blue moon kingdom. Taehyung is an omega and the former prince...
Fake love By :)

Fanfiction

113K 2.6K 42
When your PR team tells you that we have to date a girl on the UCONN women basketball team and you can't say no to it... At first you don't think too...
431K 17.5K 61
╰┈➤ *⋆❝ 𝐢'𝐝 𝐫𝐚𝐭𝐡𝐞𝐫 𝐧𝐨𝐭 𝐥𝐨𝐬𝐞 𝐦𝐲 𝐜𝐨𝐟𝐟𝐞𝐞 𝐭𝐚𝐛𝐥𝐞 𝐚𝐬 𝐚 𝐫𝐞𝐬𝐮𝐥𝐭 𝐨𝐟 𝐲𝐨𝐮 𝐩𝐢𝐬𝐬𝐢𝐧𝐠 𝐨𝐟𝐟 𝐭𝐡𝐚𝐭 𝐭𝐢𝐦𝐞-𝐛...