Sophia: Gracias por traerme. –sonreí-. ¿Te veré mañana?
Izzy: Sí. Estaré esperándote.
Se acerco a mí y me beso. Estaba de nuevo con él. No estábamos en el mejor momento –por el problema de Daphne- pero me ayudaba a sentirme mejor el estar con él. Nos alejamos y baje del auto. Entre a casa y vi a Lizzy correr hacia mí. Me abrazo fuertemente una vez que estuve a su altura. La tome como pude y la cargue. Mi madre, salio de la cocina y camino hacia mí.
Mamá: ¿Cómo te fue?
Sophia: Bien. –sonreí-. Decidimos intentarlo de nuevo.
Mi madre no dijo nada. Sólo suspiro resignada. Quizás ella creía que todos estos años me había dicho que me alejara de él. Camínanos hacia la mesa y nos sentamos a comer. Mi padre, no dijo nada sobre el hecho de que estuviera intentándolo de nuevo con Izzy. Al terminar de comer, fui a la habitación de Lizzy y la acosté en su cama. Espere a que se durmiera y mire por la ventana. Sentí un poco de miedo, así que la cerré. Antes de salir de la habitación preferí quedarme a dormir con ella.
Sentía un poco de miedo y quizás era por la situación en la que estaba Daphne. Ella aun no sabía controlarse y podía salir de casa para buscar a alguien y... matarlo. Quite esos pensamientos y cerré mis ojos fuertemente. "Olvídalo ya, Sophia", me dije a mi misma.
* * *
Vi que Lizzy aun estaba dormida. Me levante con cuidado y fui a mi habitación. Una vez ahí, entre al baño hice mis necesidades y tome una ducha. Al salir me arregle y encendí la televisión. Una noticia hizo que mi piel se erizaba. Habían encontrado a un chico... muerto. Se me hizo imposible no pensar en Daphne por la forma en que dijeron que fue asesinado el chico. Unas ganas horribles de vomitar llegaron a mí. Salí corriendo al baño y vomite. Ok, a mi futuro bebe le daba tanto asco cómo a mí. Lave mi boca y Salí del baño.
Camine a la habitación de Lizzy y al verla despierta la arregle. Ella debía ver a su padre y él debía verla a ella. Arme un pequeño bolso para ella, así llevaría algunos de sus juguetes. Una vez lista, deje una nota y salimos de casa. Tomamos un taxi y sólo esperamos llegar a la casa. Le pague al taxista y baje. Tocamos la puerta y nos abrió... Daphne.
Sophia: Hey. –sonreí-. ¿Te sientes mejor?
Daphne: supongo que sobreviviré. Siempre y cuando no salga al sol. –sonrió.
Sophia: Eso es bueno.
Ella se hizo a un lado y nos dejo entrar. Duff, venia saliendo de la cocina y en su mano estaba una bolsa de sangre. Le dije a Lizzy que fuera al jardín a jugar y ella me hizo caso. Me senté en el sofá a lado de Daphne.
Daphne: Ya me acostumbre al sabor. –sonrió-. Pero no me durara ni dos días más.
Sophia: ¿Y que vamos a hacer?
Duff: Izzy, fue por más al hospital. –Miro su reloj-. Debe estar por llegar.
Esperamos a que Daphne terminara de... "Alimentarse", se tomo dos bolsas y aun tenia hambre. Según Duff, era porque era nueva en esto y no sabia controlarse. Luego de unos treinta minutos llego, Izzy. Se sentó junto a nosotras.
Izzy: ¿Y lizzy?
Sophia: En el jardín. –sonreí-. Quise venir a ver cómo estaba, Daphne.
Daphne: Deja de preocuparte. –la mire-. Tus pensamientos me molestan. Sólo estas preocupada y no sabes que hacer. Aunque también te asusto un poco. –sonrió.
Sophia: Genial. –Dije de manera sarcástica-. Ahora tú lees mis pensamientos.
Daphne: Es lo bueno de esto.
Luego de estar un largo rato con Daphne, Izzy y yo salimos al jardín. Creo que Lizzy recordaba muy bien a su padre. Al verlo corrió hacia él y se lanzo en sus brazos.
Izzy: Sophia, ahora que estamos juntos los tres quiero pedirte algo. –sonrió.
Sophia: ¿Qué cosa, Izzy?
Izzy: ¿Quisieras casarte conmigo?
¡Demonios! ¿Acaso había escuchado bien?
Izzy: Es hora de llevar esto a otro nivel, ¿No crees?
Sophia: ¿Casarnos?
Izzy: Sophia, nada podrá separarnos. Sólo la muerte. –Se acerco más a mí-. ¿Qué dices?, quiero que estemos juntos. Tú, Lizzy, el futuro bebé y yo. Sin nadie que se intente interponer.
Era lo que había estado esperando quizás desde que lo conocí. Formar una familia a su lado. Sonreí como una tonta y bese sus labios.
Sophia: Acepto. –Él sonrió-. Acepto casarme contigo.
* * *
Entramos para darle la noticia a Daphne y a Duff. Duff, nos felicito y Daphne no pudo porque estaba en la habitación. me hubiera encantado que recibiera la noticia.. La tía de Duff, escucho la noticia y no parecía estar muy feliz. Ahora venia los mas importante, debíamos ir y hablar con mis padres. Izzy, fue en busca de Lizzy al jardín para irnos a casa de mis padres. Una vez que Izzy volvió con Lizzy, salimos de casa y entramos en su auto. Estaba muy nerviosa y mis manos me temblaban.
Izzy: Todo saldrá bien. –sonrió.
Sophia: ¿Y si no aceptan?
Izzy: No pasara. Además, no me iré hasta que acepten.
* * *
Narra Duff.
Entre a la habitación. Daphne estaba recostada sobre la cama, la figura de su cuerpo descansaba, se veía inocente.
Daphne: ¿Ya se fue Sophia?
Duff: Ya, Izzy se fue con ella.
Daphne: Me alegro por ellos. Merecen ser felices.
Duff: Sí... ¿Sabes quienes merecen ser felices también?
Me acerque a ella lentamente, me subí a la cama con la esperanza de que no se alejará, esta vez accedió y se quedó quieta. La abracé con delicadeza.
Duff: Nosotros.
Me incline para besar su cuello y se alejó rápidamente, hacia donde estaba nuestro balcón. Maldita velocidad.
Daphne: No, Duff
Duff: ¿Por qué, Daphne? ¿Por qué no podemos? -le pregunté acercándome a ella. La tome por la cintura de manera firme y la apegue a mi cuerpo.
Daphne: Porque yo soy un vampiro -comencé a besar su cuello delicadamente mientras acariciaba con una mano derecha la curva de su cadera y con la izquierda la sostenía contra mí.
Duff: ¿Y eso qué?
Daphne: No quiero hacerte daño -musitó con la respiración cortada.
Duff: ¿Recuerdas que puedo hacer que la gente haga lo que yo quiera?
Daphne: Conmigo no, me alimento con sangre humana, no me pueden detener, nada que no sea una daga al corazón.
Duff: Vamos, Daph. Necesito sentirme, necesito oírte jadear por mí, necesito verte debajo de mi cuerpo...
Daphne: Duff, deja de excitarme. No pasará, no quiero hacerte daño.
Sonreí al saber que mi chica vampiro seguía excitándose bajo mis palabras. Acaricie su vientre con sensualidad, el camisón rojo que tenía puesto me daba una excelente vista de su cuerpo. Ella era perfecta. Baje mi mano hasta su feminidad y comencé a acariciarla. Su respiración se agitó.
Duff: ¿Ahora somos como Edward y Bella? -dije para luego morder su oreja.
Daphne: En todo caso, yo sería Edward y tú Bella, además, eso es estúpido.-Su voz sonaba suave y hablaba con pausas.
Duff: ¿Por qué?
Daphne: Porque los vampiros no tenemos ojos dorados, además, una embestida y el humano muere. No quiero hacerlo contigo.
Duff: No soy inmortal, pero mis poderes me hacen fuertes, te necesito. Te amo, Daphne. Te necesito más que nada, por favor.
Luego de decirle aquello, vi como colocaba sus pequeñas manos en el barandal de metal que estaba frente a ella, lo apretó y doblo completamente ese pedazo de metal, gimió cuando abrí sus labios vaginales y la acaricie más profundo. Se giró de golpe, quedamos frente a frente, acaricio mi rostro y me estremecí al sentir la frialdad de su tacto. Me gustaba. Me miró fijamente a los ojos, esos que cuando se convirtió en vampiro se tornaron de un gris metálico, profundo y brillante.
Daphne: Soy indomable -susurró sin dejar de mirarme.
Duff: Me encanta -respondí con la voz ronca.
Se acercó a mis labios y comenzamos a besarnos, me tomo por los hombros y me jaló más hacia ella. Sonreí sobre sus labios, si que tenía fuerza. La tome de las caderas y con cuidado, le fui subiendo ese lindo camisón. Mordió mi labio inferior y sentí que algo caliente brotaba de este. Sangre. Me aleje apenas de sus labios, ella pasó su fría lengua quitando todo rastro de sangre.
Daphne: No tengas miedo, tu sangre es demasiado dulce para mí, estarás bien. Volví a tomar sus labios y, luego de unos minutos, le quité el camisón, gruñí cuando la vi semi desnuda ante mí. Se alejó de mí y en un latido de corazón, me aventó hacia la cama, un indicio de dolor punzante de estableció en mi espalda, y sentí que el concreto que estaba detrás mío se cuarteaba. Daphne sonrió, una sonrisa perversa y hermosa que provoco que mi erección creciera más. Ahora mi respiración se agitó, mi vampireza camino hacia mí y esa sonrisa no se borraba, de nuevo, de manera rápida, la tenía sentada a horcajadas sobre mí. La bese, la bese y la bese hasta quedarme sin aliento. Mi camisa fue desgarrada con sus manos, luego mi pantalón y por último mi bóxer.
Daphne: Así, así me gusta tenerte.
Sonreí y de manera desesperada, le quite el sosten y sus pequeñas bragas, trague con fuerza al verla así sobre mí, mi pene comenzaba a doler por estar dentro de ella. Levantó un poco las caderas y fue tomando cada centímetro de mí. Una vez que estaba totalmente llena, comenzó a moverse de manera lenta, sus gemidos me aceleraban a un más, cerré los ojos y eche mi cabeza hacia atrás, siseando de placer. No sé cuanto tiempo estuvimos de esa manera, sólo importaba la manera en la que movía sus caderas de adelante para atrás, de forma circular y esos empujones en seco que hacían que me clavara más en ella. Dolía en un principió pero luego lo disfrutaba. Daphne se levantó y me tomo del cuello, la tome por los muslos y, sin salir de ella, camine hacia el ventanal. Se bajó de mí, se dio la vuelta y se clavó de nuevo en mí, gruñí profundamente al sentirla así. La pegue contra el gran cristal y la penetre con más fuerza, sin miedo a lastimarla.
Duff: Te amo -le dije al oído para luego tomarla por la caderas y empalarme más en ella. Dio un grito y un fuerte golpe hizo que el cristal cayera frente a nosotros. Daphne: Y yo a ti. Quiero la ducha, Duff.
***
Perdón por la demora. :c