En nuestra semana de vacaciones por la mitad del semestre Aria y yo habíamos decidido tener citas un poco más íntimas, a veces íbamos a mi departamento a ver películas o al suyo para que ella fuera feliz poniéndome de sus mascarillas de aguacate, no hacíamos demasiado, pero personalmente lo valoraba muchísimo.
Estar con Aria era una maravilla para mí.
Ese día en específico no pude pasar con ella porque Ami había propuesto una reunión de amigos para igualarnos de nuestras vidas porque había pasado un mes desde julio, mes en el que a duras penas nos habíamos dirigido la palabra debido a todo lo que teníamos que hacer para antes de que llegara el descanso.
Isla, por primera vez nos invitó a su casa, cortesía de sus padres y todos nos fuimos a reunir allá. Ami al parecer había pasado la noche con Isla porque se veía un poco más animada que las últimas veces que la vi. Michael llegó temprano por quién sabe qué razón, pero yo llegué al último junto a un cheesecake de frutos rojos que se me había antojado a mitad del camino.
Todos nos sentamos alrededor de una pequeña mesita que Isla tenía en el patio interno de su casa. Laika nos acompañaba sobre las piernas de Ami, quien acariciaba la cabeza de la perrita.
- bueno ¿quién empieza? -dijo Isla mientras servía el pastel que yo había comprado- siento como si no los hubiera visto en años -bromeó
- ¿qué tal el más desaparecido de todos? -dijo Ami y los tres asintieron
- ¿qué has hecho que ya no responde mis memes? -preguntó Michael y yo reí despeinando mi cabello
- no mucho, solo paso tiempo con Aria
- dios, ya cásense -dijo Ami con un tono burlón- ¿cuándo le dirás que sea tu novia?
- de hecho, ya es mi novia -dije y todos me miraron sorprendidos
- ¡¿YA SON NOVIOS?! -exclamaron al unísono y yo asentí con la cabeza
- ¡que bonitos! -chilló Isla y se levantó de su asiento solo para darme un abrazo- ¡felicidades! -reí mientras recibía su abrazo cariñoso y vi que Ami hizo un puchero
- que aburrido nene, podías haber elegido algo mejor -me molestó Ami
- déjalo ser feliz Ami, estoy muy feliz por ti Min -dijo Michael y golpeó mi hombro
Fue gracioso apenas percatarme del hecho de que llevaba un mes entero con mi novia y que mis amigos recién se enteraban de la situación, pero tampoco había sido algo que hice a propósito, realmente había estado muy ocupado con las cosas de la universidad e incluso había tenido poco tiempo para ver a Aria, pero las veces que nos habíamos reunido habían terminado en situaciones torpes en las que veíamos películas o ella intentaba seducirme para que fuéramos más lejos, cosas que nunca ocurrió.
Fuera de eso, mi tiempo iba principalmente a mis estudios y a la rabia que tenía porque mis profesores me dieran trabajos a último momento junto con exámenes cuyo único propósito parecía ser el de fastidiarme y quemarme el cerebro.
- yo también tengo algo que anunciar -dijo Michael y todos dirigimos nuestras miradas a él- parece que Max por fin me lo va a pedir -soltó animado y nuevamente Isla se levantó con felicidad de su asiento para llenar de abrazos a Michael
Ami lo miró sorprendida, pero unos segundos después le regaló una sonrisa de complicidad, le dijo que estaba muy feliz de que encontrara a alguien que lo conociera como persona y que esperaba lo mejor para ambos.
Yo también felicité a Michael, sabía que era algo que significaba muchísimo para él y me daba mucha alegría saber que por fin alguien encajaba correctamente.
Parecía que después de tanta tristeza y decepciones amorosas, la vida finalmente nos hubiera querido dar algo bueno.
Como si el sol saliera después de la tormenta.
Pasamos el resto del tiempo platicando respecto a otras cosas más, Ami decía que tal vez iría a visitar a su familia en Italia durante sus vacaciones y que si alguno quería podía acompañarla para que conociera Positano y probara la deliciosa pasta de su abuela, parecía que Isla se estaba animando a dicha idea, pero dijo que prefería quedarse a invernar durante todas las vacaciones; Michael dijo que tal vez iría, pero que todo dependería de si conseguía ahorrar el dinero suficiente para su boleto y con ello puso a la mesa la idea de que alguna vez hiciéramos un viaje como amigos, a lo que todos accedimos siempre y cuando organizáramos la idea con un buen tiempo de anticipación.
Por otro lado, Isla no nos contó absolutamente nada, ella se decidió a escucharnos y disfrutar del cheesecake que le había encantado.
Cuando empezó a caer la tarde Michael dijo que debía irse porque había quedado con Max para ir a comer sushi y después al cine a ver una película que a ambos les había llamado muchísimo la atención y eso produjo que Ami dijera que también debía regresar a casa, por lo que, me ofrecí a llevarla, pero se negó rotundamente a que lo hiciera.
Eso me dejó bastante confundido, pero lo dejé pasar cuando Michael dijo que la acompañaría hasta su casa.
- adiós -se despidió Isla desde la puerta de su casa
- guárdame un poco de sushi -bromeé para Michael y él rio a carcajadas, sabía que no me gustaba mucho la comida japonesa
Escuché a Isla suspirar una vez cerró la puerta de la casa- es una lástima que se hayan ido -dijo y la acompañé a recoger los platos de la mesita del patio
- Ami se comportaba extraña ¿o es idea mía? -dije y ella negó con la cabeza
- está así desde hace algún tiempo y tengo una teoría, pero no sé qué tan buena idea sea decirla -mencionó ella recogiendo los platos
- puedes decirme, sabes que guardaré el secreto -dije mientras recogía las tazas en las que Isla nos sirvió té
- es un tema delicado -dijo haciendo una mueca mientras iba a la cocina
La seguí de cerca y dejé las tazas sobre la isla de la cocina donde estaba el lavaplatos- déjame ayudarte -le dije mientras empezaba a lavar y ella me miraba algo dudosa
- no te lo voy a decir tan directamente ¿bien? -dijo y yo asentí- creo que Mimi está enamorada de alguien que no puede tener
Eso me hizo mirar a Isla confundido
- ¿de quién hablas?
- no te lo diré -dijo- solo sé que esa persona nunca va a poder ver a Mimi de la forma en la que ella lo ve
Esa pequeña revelación me hizo entrar en una duda inmensa.
Tal vez Isla hablaba de mí, a Ami no le agradaba Aria y definitivamente no estaba feliz con la idea de que ella fuera mi novia. Tal vez me lo ha estado intentando expresar de una manera muchísimo más explícita, pero como siempre he pensado en ella como mi hermana no lo había tomado en cuenta.
¿cuándo había ocurrido todo eso?
¿por qué nunca me lo habrá querido decir?
Tal vez por eso tampoco accedió a que la dejara en su departamento esa vez, pero ¿qué podía hacer yo con esa información? Yo adoraba a Aria y de corazón adoraba a Ami, pero no era el mismo sentimiento.
Tenía un mar de dudas entrando en mi cabeza, pero lo único que salió de mi boca fue un- ¿cómo llegaste a esa conclusión?
- presto mucha atención a su manera de mirar a las personas, no me refiero solo a su lenguaje corporal sino a su trato con todos, es diferente con esa persona -hizo una pausa- le trata con muchísima más calidez y cariño -aclaró- pero definitivamente él no se da cuenta y eso la pone mal
- pobre Ami -alcancé a decir con una gran sensación de culpa por no haber sido más atento a sus acciones y dejarle en claro que éramos amigos y nada más
- creo que incluso en nuestra última pizza se quejaba de los hombres por él -soltó- creo que no piensa que son horribles, solo le duele que ese chico no sea para ella y nunca lo vaya a ser -agregó
No podía imaginarme los sentimientos de Ami en ese momento, era una amiga a la que adoraba muchísimo y el hecho de tener en mente la idea de que yo podía ser el causante de tanto daño me daba malestar, quería ir con Ami y hablar con ella, aclarar las cosas quizás, pero ¿cómo iba a hacerlo? No podía solo aparecer en su departamento y decirle "ya sé que te gusto, no te correspondo, pero eres una excelente amiga y no quiero perder nuestra amistad".
Sonaba tan tonto en mi cabeza que me daba más malestar la idea de no saber cómo responder eso.
- ¿estás bien? -preguntó Isla cuando notó que dejé que el agua corriera
- es que me preocupa Ami -dije con honestidad
- también a mí, pero no hay mucho que podamos hacer si ella no nos lo dice
Segundos después el celular de Isla empezó a sonar, ella respondió la llamada caminando hacia el patio, seguida de Laika y yo terminé de lavar los dos platos que me faltaban. Para ese momento Isla regresó a la cocina conmocionada y con una evidente molestia.
- ¿qué pasó? -pregunté
- era Michael -dijo molesta- dijo que Mimi estaba mal, no le entendí, solo vámonos
Asentí, Isla les avisó a sus padres, quienes estaban en su estudio, y ellos le pidieron que llamara en cuanto supiéramos qué estaba pasando con Ami.
Juro que la culpa me estaba comiendo vivo en ese instante, pero me llegó la reflexión respecto a las palabras de Isla, si bien ella decía que Ami trataba con calidez y cariño a esa persona, eso nos minimizaba a Michael y a mí.
Ami trataba a Michael mejor que a mí.
- a Ami le gusta Michael -dije sorprendido en un semáforo en rojo y me percaté de que Isla me vio con una mezcla entre sorpresa y burla en su rostro
- ¿cómo es que no te diste cuenta antes? -preguntó
- pensé que hablabas de mí, a Ami no le gusta Aria
- sí, pero a Mimi le gusta molestarte
Por lo menos, la culpa había abandonado mi cuerpo, pero no dejaba de sentirme mal porque era demasiado consciente del hecho de que Michael realmente nunca se iba a fijar en ella. Michael le tenía muchísimo cariño y le gustaban las chicas como Ami, pero simplemente le gustaban más los chicos, él adoraba a Max.
Tardamos poco tiempo en rondar calles hasta encontrar a Michael y a una Ami completamente ebria, ambos subieron al asiento trasero del auto.
- ¿cómo diablos se embriagó? -preguntó Isla
- compré una cerveza para llevarla con Max y se la tomó, pero no fue la cerveza Mar -dijo Michael
- ¿cómo que no fue por la cerveza? ¿tomó algo más? -pregunté
- un vodka y algo más
- ¿de dónde sacó todo eso? -preguntó Isla
- no tengo idea, cuando la vi ya estaba así
- pero tú estabas con ella
- fui al baño ¿ok? -se excusó Michael
- pero ¿acaso fuiste a comprar todo eso en una discoteca?
- en la licorería -aclaró Michael
Ya con molestia, Isla sugirió que dejáramos a Mike cerca de su casa y lleváramos a Ami a su casa para que descansara, porque gracias a que cantaba alguna cosa sabíamos que estaba consciente.
Cuando estábamos cerca de la casa de Michael, lo dejamos, Isla se fue al asiento trasero junto a Ami y la acomodó de manera que si llegaba a vomitar no se asfixiara con ello. No me importaba si Ami vomitaba, me preocupaba que llegara bien. Tomé el desvío en dirección a la casa de Isla y mientras tanto escuchábamos a Ami completamente mal de fondo.
- espero que pueda superar a Michael -dije sin pensar
- lo va a hacer, pero creo que le va a costar demasiado -escuché a Isla decir
Una vez en casa de Isla, la ayudé a llevar a Ami a la habitación de invitados, dijo que ella se haría cargo de todo y que podía ir a casa con tranquilidad. Para ese momento, el sol había caído completamente y el cielo nocturno era todo lo que decoraba el cielo.
Regresé a mi departamento y me fijé de que no tenía ni un solo mensaje, no me pareció extraño que Aria no me hubiera escrito, a fin de cuentas, ya no hablábamos seguido por chat, pero por lo menos nos quedaban nuestras llamadas.
En su lugar, recibí el mensaje de Isla junto a una foto en la que se veía a Laika lamiendo el rostro de Ami.
"ya se durmió, espero que la resaca no le pegue fuerte mañana, en serio la ha estado pasando mal"