Eli, luego de su escapada hacia la casa de Stilinski, había notado a su padre un poco más tenso de lo normal. Su padre parecía una persona con un palo en el trasero la mayor parte del tiempo, pero para ese momento, parecía tener al menos diez.
Aún así, el joven no se quejó. Tampoco volvió a tocar el tema de Stiles. Comprendió, por primera vez, porque el castaño era un tema delicado. Había escuchado parte de la conversación que ambos adultos habían tenido la noche antes de volver que Beacon Hills. Y su padre lucia miserable todo el viaje de vuelta.
Tal vez nunca debió meterse en donde no lo llamaban. Pero él sólo quería ayudar.
(...)
Stiles suelta un suspiro, sus manos presionando el volante de su automóvil mientras sus ojos están fijos en el frente. Solo estaba esperando que la valentía lo golpeara porque los nervios le estaban ganando.
Maldiciendo en su interior, divisa a la persona que estaba buscando ingresar a la comisaria. Toma una respiración profunda y sale del automóvil, apresurado.
Se dirige hacia la comisaría e ingresa, saludando de manera rápida a los ayudantes. Divisa a Isaac detrás de uno de los escritorios y el oji-azul lo observa con sorpresa y luego con pánico hacia la oficina del padre de Stiles.
El castaño lo ignora y sigue su camino hacia donde el moreno había ingresado un par de segundos antes. Cuando se encuentra frente a la puerta, golpea dos veces.
-¡Pasa!.-Escucha a su padre gritar y obedece de inmediato. Entra y ve la espalda de Derek, quien se encuentra sentado frente al Sheriff. El mayor de los Stilinski le sonríe con cariño y eso parece llamar la atención del moreno, ya que gira su rostro hacia la puerta.
Bueno, no parece contento con la presencia de Stiles allí, a decir verdad.
-Es bueno verte de nuevo, hijo.-El sheriff se pone de pie y Stiles se acerca para poder abrazarlo. Luego retrocede un par de pasos, girando para mirar hacia Derek. Le sonríe pequeño, el moreno ni siquiera disimula su disgusto. O incomodidad. Stilinski realmente no sabe que es lo que sucede con él.-Bueno, no necesito presentarlos.-El Sheriff señala a ambos y luego le indica a Stiles que tome asiento junto a Hale.
El castaño obedece aunque teme por su vida por un momento. Siente que Derek lo asesinara en cualquier momento. Y tenía muchos años de conocerlo y de haber superado ese miedo, pero, al parecer, estaba volviendo.
-Broma innecesaria, papá.-Stiles dice, casi entre dientes.
El sheriff rueda sus ojos y luego tamborilea sus dedos sobre el escritorio.-Crei que las cosas ya estaban bien entre ustedes.
-No.-Stiles dice mientras Derek miente descaradamente contestando:
-Por supuesto.
Si las cosas estuvieran bien entre ellos, Derek no lo miraría con decepción. Odio o, ugh, lo que sea.
El Sheriff eleva sus cejas pero luego niega con su cabeza.-Bien.-Dice, poco convencido.-Como te estaba diciendo, Derek, necesitamos que trabajes con alguien del FBI.-Señala a su hijo.
-Ese soy yo.-Dice de manera tímida Stilinski. Esta tan incómodo. Hale la da una mirada plana antes de mirar al Sheriff y asentir.
-Esta bien. Había hablado contigo sobre eso, sabía que necesitaba algo de ayuda. Se ha complicado demasiado en poco tiempo.-Murmura. Stiles observa el perfil del peli-negro, deteniéndose en su marcada mandíbula y la silueta de sus labios. Se gana una mirada reprobatoria por parte de su padre cuando éste se da cuenta de que no está prestando atención.
Tienen una pequeña reunión donde solo el Sheriff y su hijo hablan. Derek hace pequeños aportes pero parece haber agotado su batería social por el resto de su vida y querer huir de allí cuanto antes. Cuando el mayor de los Stilinski está seguro de que los otros dos adultos comprendieron que deben trabajar en equipo y a qué es a lo que se están enfrentando, los deja solos en su oficina con una pobre excusa sobre que Parrish lo estaba llamando.
Stiles se hunde un poco en su asiento, conteniendo su aliento por un momento.
-Entonces...¿Sabias vendría aquí para trabajar contigo?.-Pregunta el oji-marrón. Derek esta tecleando de manera furiosa en su teléfono pero tiene la decencia de mirarlo cuando esta por contestar.
-No.-Lo observa por un momento.-¿Tú lo sabías?.-Pregunta, Stiles supone que por amabilidad.
-Sip. Me emocionaba poder trabajar de nuevo juntos, como cuando éramos manada.-El castaño dice, una pequeña sonrisa tira de sus labios.
-Sabes que aún podrías ser de la manada.-Comenta el oji-verde y Stiles esta por contestar cuando el hombre sigue hablando.-Pero comprendo que ahora tienes a...tu alfa, tu propia manada.-Finge descaradamente una sonrisa.-Aun así, la manada de Scott te adoptara por el tiempo que estés aquí.
-No..yo, uhm.-Demasiadas cosas por aclarar vienen a su mente y se bloquea por un momento cuando ve a Derek ponerse de pie.-No tengo que pasar tiempo con la manada. Ya sabes...no quiero incomodar.-Es lo primero que sale. Ni siquiera tendría que haber dicho eso, tendría que haber hablado de Roger, el alfa que Derek había conocido. Stiles se patea mentalmente.
-No incomodas. Todos te quieren allí.
-Tú no pareces quererme allí. Ni en ningún otro lado.-Stiles dice.
Derek resopla, guardando su celular en el bolsillo de su campera.-Tengo que irme. Nos vemos mañana.-Contesta y sale de la habitación.
Stiles suelta un quejido, dejando caer su rostro contra sus manos. Tal vez volver a Beacon Hills no había sido una buena idea. Pero pensó que si Derek no iba a volver a buscarlo, él podía esforzarse aquella vez.
Tal vez se equivocó.
(...)
-Primer día en Beacon Hills y ya estás bebiendo.-La voz de Isaac resuena detrás de él cuando le da un último trago a su cerveza. El rubio se sienta a su lado y palmea la espalda del castaño. Stiles le sonríe pequeño antes de pedir una cerveza más al bartender, el oji-azul pide lo mismo.
-Me gusta beber de vez en cuando.-Eleva sus hombros, restandole importancia
-Como por ejemplo un martes a las once de la mañana.-Isaac mira su reloj de muñeca y hace una mueca, Stiles resopla.
-Tú también estás aquí bebiendo.
El rubio lo observa por un momento antes de asentir lentamente.-En realidad no bebo demasiado. No me agrada. Pero te vi entrar aquí y quise pasar a saludar.-Tiene aquella mirada, Stiles no sabe como explicarlo, pero la ha visto antes.
-Querras decir que saliste de tu trabajo para seguirme hasta aquí.-Corrige Stiles mientras acepta la cerveza que el bartender le acerca. Da un sorbo lento, saboreando por un momento. Los ojos de Isaac están a un segundo de perforarle el rostro y el castaño se estaba incomodando.
-El Sheriff siempre pide que alguien patrulle los bares. Ya sabes, por las peleas entre ebrios.-Le sonríe al bartender mientras acepta la bebida.
Stiles suspira, rendido.-Vamos, ya dime qué es lo que te trae aquí.
Lahey sonríe de manera lobuna.-Siempre tan inteligente, Stilinski.-Le guiña un ojo. Stiles rueda sus ojos.-Quería hablar de Derek.
Stilinski suspira de alivio.-¡Al fin! Alguien hablará sobre lo molesto que es Derek y lo raro que se comporta conmigo.
Hay un gruñido bajo y, cuando el castaño mira a Isaac sus ojos son dorados.
-Bien, creo que no hablaremos mal de Derek.-Murmura el oji-marrón.
-No, no hablaremos mal de él. Todos han hablado mal de él porque pensaban que te había lastimado demasiado.-Stiles lo interrumpe.
-Lo hizo. Rompió mi corazón por follarse a Jennifer.
-Se un adulto y superalo. Sabes que estuvo con ella antes de estar contigo.-Le recuerda el oji-azul.-Deja de actuar como si Derek no te hubiera aclarado eso.
Stiles presiona sus labios juntos.
-Supongo que sigues sosteniendo eso de Derek porque, de otra forma, tendrías que aceptar que fuiste un gran imbecil con Derek. Y que todo lo que le dijiste aquella vez fue demasiado.-Hay ira en su mirada y el castaño se está arrepintiendo de volver a Beacon, nuevamente.
-Tal vez.
Isaac asiente.-Bien, pero eres un maldito adulto. Por primera vez en tu vida, saca la cabeza de tu trasero y observa a tu al rededor.-Dice Isaac.-Las veces que has vuelto a aparecer en la vida de él lo has arruinado. No lo escuchas, o lo ilusionas y luego desapareces.-Su mano se presiona con un poco de fuerza sobre la rodilla de Stilinski, el castaño lo observa con advertencia.
-Él tampoco es inocente.
-No, claro que no. Y también puede defenderse por su cuenta. Pero cuando todo terminó entre ustedes, no volvió a buscarte. Puso distancia entre ustedes para que pudieras ser feliz, para que estuvieras tranquilo.-Isaac comenta.-Tú, en cambio, cada que volvías y te emborrachabas ibas a visitarlo. Lo besabas o tenías sexo con él y luego le recordabas lo feliz que estabas con ti pareja, cuando claramente no era así, porque de serlo, no seguirías buscando a Derek.
Stiles suspira, paseando una mano por su cabello.
-Lo sé, ¿bien? Pero no se como no cagarla con Derek. Intenté...-Lo interrumpe.
-No me importa que intentaste. Cada vez que lo hiciste, él tuvo que volver a armarse, fingir que estaba bien y cuidar de su niño.-Recrimina.-Y ni siquiera es capaz de estar molesto contigo, ese maldito imbecil.
-Me odia en este momento.-Sentencia Stilinski e Isaac no lo niega.
-Te lo mereces.
-Lo se, Isaac.-Gruñe con cansancio el castaño.-¿Qué quieres que haga, que me vaya de aquí?.-Pregunta resignado.
-No, no puedo pedirte eso.-Niega con su cabeza.-Sólo te pido que no seas egoísta por una vez en tu vida y no intentes meterte con Derek. Ve con la manada, pasa tiempo con nosotros, pero no ilusiones a Hale. Tampoco a Eli. Ambos son buenas personas.
Stiles da un sorbo a su bebida, luego asiente. Isaac entonces acerca su botella de cerveza hasta la de Stiliski, para brindar. El castaño choca sus botellas.
-Que bueno que pudimos entendernos sin demasiado problema.-Isaac sonríe.-Temia que no me hicieras caso y entonces Cora quisiera hablar contigo.
Stiles lo observa con espanto.-¿Son algo así como la mafia?.
Isaac ríe mientras se pone de pie, dejando algo de dinero sobre el mostrador.-Claro que no, hermano. Solo cuidamos a nuestra familia y ellos dos son importantes, ya sabes.-Le guiña un ojo, luego remueve el cabello del castaño.-Fue un placer verte de nuevo, Stiles.
El oji-marrón lo ve alejarse sin decir nada más y suspira con alivio cuando sale del bar.
Bueno, mierda, su plan de intentar resolver las cosas con Derek acababa de ser cancelado. Al menos si quería conservar sus huesos sanos.
¡Buenas buenasssss! ❤ Aquí el capitulo que tendría que haber subido el fin de semana. Aunque tomo este capítulo como que cumpli, ya que en Argentina es fin de semana largo.
A partir de ahora no habrá más recuerdos. Al menos no por el momento y si lo hay, será uno de vez en cuando. Y también a esta historia no le quedan tantos capítulos, así que espero la estén disfrutando 🥰
Ya son más de 800 votos en la historia y se los agradezco mucho, al igual que sus bellos comentarios ❤