Narra Álvaro
No entiendo por qué me he comportado como un estúpido con [tu nombre]. Quiero alejar a [tu nombre] de mí pero no puedo. No puedo dejar de pensar en ella, no puedo dejar de pensar que está con otro, no puedo dejar de pensar que está con otro en otra parte del mundo.
A veces he pensado en cometer una locura e ir a verla por sorpresa, pero no sé cómo le sentaría. Las veces que hemos visitado Londres no he querido acercarme por miedo. Por miedo a que se sintiera presionada.
Carlos tiene razón, estoy enamorado de [tu nombre]. ¡Qué capullo es! Siempre acierta en todo.
Podría seguir el consejo que me dio Blas e ir sin pensarlo, pero siempre encuentro un pero.
No puedo competir con su primer amor, con Mathew. No puedo competir con la persona que le da su todo.
La cuestión es que sé que vuelve a España. Los conciertos, amigos y familia me han ayudado a despejarme. Aunque se me ha hecho súper duro no verla durante tres años. Tres años en los que ella ha querido ponerse en contacto conmigo, y yo no he querido para no intervenir en su vida.
Sé que me ha escrito tweets y me ha llenado el móvil de mensajes, lo cuales yo no abría, los leía en la pantalla del móvil cuando salía la notificación.
Sé que así lo único que he hecho quizás es preocuparla, pero también sé que sabe que estoy bien. Cuando hablaba con los chicos le preguntaba por mí y ellos le contaban. Mientras yo, lleno de impotencia, me la pasaba reflexionando, pensando en todo lo que sentimos aquella noche antes de su marcha.
Ahora que vuelve, si me la encuentro por la ciudad, hecho que es muy probable, no dudaré en abrazarla como la última vez, tan fuerte que pude sentir su respiración. Si por algún motivo no quise hablarle o contestarle fue por ese; si lo hacía sólo querría abrazarla y no soltarla nunca.
Narra David
Faltan dos días.
Dos días para que mi pequeña [tu nombre] vuelva a Madrid. No puedo esperar a verla. Últimamente ha sido un gran apoyo para mí y aunque ella tenga hecha su vida, no la quiero perder por nada del mundo. Me ha ayudado tanto... Que no podría imaginar un día sin hablar con ella.
Espero que Álvaro, si tiene noticias de esto, no se enfade. él sabe que esta chica me encanta, me encanta desde el primer momento, sin embargo sé que la conexión que tiene con Álvaro no es la misma que yo y ella me ve como un amigo.
Dani me dijo que tuviese cuidado, que no me metiera en líos, que la cuidara igual que a una hermana. Y sé que Dani y ella son muy buenos amigos, así que seguramente han hablado algo de mí y por eso me aconsejó.
Es una pena, pero ahora que vuelve todo puede pasar. Todo puede suceder. Y tengo una sugerencia para cuando vuelva que seguro que no puede rechazar.
————
Un día antes de tu vuelta a la ciudad, en el piso de Carlos...
Ana: Sí, amor. De verdad que no va a faltar una fondue de chocolate en la fiesta de bienvenida, te lo prometo!!!
Carlos: Como llegue y no esté, me voy! Jajaja
Ana: Si te atreves a irte, te lanzo un pastel a la cara! - dijo con cara desafiante
Carlos: Si después me limpias tú la nata... - dijo con expresión sensual
Ana: Carlitos, no me pongas esa cara que..
Carlos calló a Ana con un beso.
Hacía ya varios años que tomaron su relación en serio, aunque no era una pareja empalagosa, era una pareja divertida llena de frescura, cada día que pasaban juntos parecía como el primero; lleno de risas, miraditas y mucho cariño.
Carlos: Anda ven, tonta.. - rodeándole con sus brazos
Ana: No puedes ser más adorable, con o sin chocolate jajaja
Carlos: Me des o no me des chocolate, yo te voy a seguir queriendo igual o incluso más.
Ana: ¡¡Qué ñoño te pones cuando quieres!! Jajaja
Carlos: Lo que me pone es otra cosa, o más bien otra persona...
Ana: Ah, ¿ sí..? Y, ¿ se puede saber quien? - Con mirada picarona
Carlos: Una chica, que lleva una camisa roja la cual voy a quitar ahora... - dijo deslizando sus dedos por el cuerpo de Ana provocando una delicada caricia.
Ana: ¡Atrévete!
Carlos empezó a quitarle la ropa a Ana primero la camisa, después los shorts y con mucha calma la ropa interior.
Ana: Y ahora, ¿Qué le vas a hacer a esta pobre chica? - le dijo poniendo ojitos y morritos
Carlos no dijo nada, le agarró de las muñecas poniéndolas al nivel de su cabeza y comenzó a besarla por todo el cuerpo.
Ana llevaba unos días con mucho estrés y Carlos siempre era la persona idónea para transmitirle lo que ella necesitaba: paz, alegría y tranquilidad.
Estaba organizando la fiesta de bienvenida para ti y Mathew. Todos los chicos estaban invitados, pero ¿irían todos?
Último día en Londres
Mathew: Gracias por todo lo que me has dado estos días. Significas mucho para mí. Sé que han pasado cosas entre los dos que no ha estado bien pero en su momento es lo que sentíamos. Espero que sigamos en contacto y nos volvamos a ver pronto, Brenda.
Brenda: Yo te estaré esperando y lo sabes. Eres un chico fantástico y no te voy a olvidar fácilmente. Empecé siendo tu compañera para un proyecto de Arte y nos dejamos llevar por nuestros sentimientos, sé que tienes a tu chica y no le quieres hacer daño, por eso lo nuestro seguirá siendo secreto.
Mathew: Te lo agradezco muchísimo. Tú eres muy importante para mí y [tu nombre] también lo es, pero he encontrado en ti algo que en ella no; ahora que nuestros caminos se separan, es un honor haberte conocido. Yo termino aquí mis estudios y mi carrera, espero que tú consigas ser una buena historiadora del arte el año que viene; no lo espero, sé que lo serás.
Brenda: Eres un sol. Estos meses han sido los más especiales para mí y es duro que te vayas... Porque yo te quiero Math...
Mathew: No, por favor, Brenda, hoy no me digas esto. Voy a echar de menos decírtelo día a día y escucharlo de ti.
Mathew abrazó a su "compañera" y no se paró a pensar en besarla.
Brenda: Eres el mejor.
Mathew: Tú eres la_
Tú: Hola chicos!!! ¿Despidiéndoos? - llegas interrumpiendo a Mathew
Mathew: Dios, me has asustado! Jajaja.. - dice muy preocupado mirando a Brenda
Tú: ¿Asustarte? ¿Por qué? - le dices abrazándole fuerte - si eres lo mejor del mundo se dice y punto, ¿no? - dices guiñando a Brenda
Mathew: Jajajaja..
Brenda: Wow, chicos espero que la vuelta vaya bien y no echéis mucho de menos esta ciudad tan gris.
Tú: Lo que más deseo ahora mismo es ver el sol, ir a la playa y estar allí durante tooooooooodo el verano...
Mathew: Jajaja ilusa..
Tú: Ehh! - pegándole un puñetazo en el brazo - al menos en la piscina - dices haciendo una pucherito
Mathew: Por supuesto - sonríe
Brenda: Nos vemos después en la fiesta de despedida!
Tú: Qué triste suena "Fiesta de despedida", quiero llorar!!
Mathew (abrazándote): No seas exagerada, da pena dejar esto y a toda su gente (dice mirando a Brenda) pero quédate con lo bueno que has vivido, con quien lo has vivido y mira hacia el futuro, Madrid nos echa de menos, cariño. Digamos que es una fiesta de "Hasta Pronto"
Tú: Mejor, mucho mejor.. - dices dándole un beso
Brenda se sentía muy mal. Ella no te conocía bien pero sabía que tu amor por Mathew era real, tanto como el de ella.
Brenda se fue a su habitación de la residencia tenía mucho que preparar antes de esta noche.
Mathew y tú estábais terminando de arreglar las maletas.
Mathew: Dime, ¿qué es lo primero que quieres hacer al pisar Madrid?
Tú: Pues... Me encantaría... Mmm..
Mathew: Yo quiero llegar a casa, que vengas conmigo y comerte a besos.
Tú: Ay, Math, cuando quieres eres un romántico!!
Mathew te agarró por la cintura y te tumbó en la cama, comenzó a besarte apasionadamente.
*Piiip, piiip*
Te acababa de llegar un mensaje privado. Te pilló por sorpresa porque normalmente hablas por los grupos, a los que les tienes puesto otro sonido.
Cogiste el móvil. Abriste WhatsApp y...