Han sido horas y horas de sufrimiento, tienen todo listo para mi muerte, me tienen prácticamente crucificada.
La noche por fin ha llegado, me vistieron de blanco, este color indica traición al clan.
-Ariadna Vlachos, eres condenada a muerte por exponer a tu clan, darle de tu sangre a esta humana y declarar una guerra ante el líder.
Miro hacia la luna que se asoma, entrecierro mis ojos llorando.
-Fue lindo haber sido parte de este clan, muchos me odiaron por ser una mujer fuerte y ahora están disfrutando de haber cometido el error de enamorarme, pero les digo que no me arrepiento, porque el amor es la única cosa que te hace estar vivo de verdad, ni aunque te bebas toda la sangre del mundo te va a hacer sentir bien como lo hace esa persona que quieres.- hablo en mis últimas palabras.- En cuanto a ti Elián no te guardo rencor a pesar de ser un traidor.
-Bien, llegó la hora de matarte, traigan a la chica.
Un guardia llega con Zoe, corre hacia mi abrazándome, la sacan de inmediato.
-Perdóname colmillito.- susurra entre llanto.
Le doy un pequeña sonrisa pronunciando un te amo de mi boca.
Toman unos cuchillos y cortan mis muñecas, la sangre negra comienza a caer, entre tres vampiros agarran a mi abejita y le hacen un corte en la palma de su mano, bañan la estaca de plata.
Dimitri la toma dirigiéndose hasta estar frente a mi.
-Nooo.- grita Zoe y le entierra una estaca en la espalda.
-Perra.- la golpea.
De pronto aparecen los chicos liderados por Paloma, se comienza a armar una guerra, la estaca se pierde entre el alboroto hasta que veo que Elián la toma en su poder.
Zoe corre a mi clavando otra estaca de plata, todo quedan en estado de shok, el amor de mi vida me traicionó.
Mi cuerpo empieza a temblar, me doy cuenta de que la estaca sale bañada de mi sangre, Elián corre con la otra estaca para darsela a Dimitri pero entonces cae desplomado al piso, tiene en su pecho la estaca que acaba de sacar Zoe de dentro de mi, de apoco su cuerpo se empieza a hacer cenizas.
-Hermano.- hablo aturdida sollozando.
-Elián era un hijo de puta pero siempre amo a su hermana, siempre te quiso a ti y lo descubrí anoche cuando me capturó.- me mira Zoe apenada.
Un guardia se gana detrás de ella y le parte el cuello.
-Noooo.- grito desde lo más adentro de mi corazón.
La acaban de matar, está desplomado ante mis ojos, es tanto lo que siento que saco fuerzas de no se donde y me quito de las amarras y estacas que tengo, me gano a su lado, su corazón ya no late, lloro en su pecho desconsolada, Dimitri solo nos observa espantado.
Me abalanzo sobre él intentando pelear pero soy incapaz de hacerlo.
-Estarás contento ahora.- lo miro con mis ojos sangrando.- Ni siquiera me vas a poder matar porque por tu culpa mataron al amor de mi vida.
-Vete antes de que me arrepienta.
La tomo en mis brazos huyendo con ella hasta las montañas, abrazo su cuerpo frío y pálido, odio no sentir el calor que siempre me daba.
Beso su frente, caen y caen lágrimas con sangre de mis ojos, estoy viviendo lo mismo que pasé hace montones de años atrás pero esto es mucho peor.
Pongo mis manos en su pecho, cierro mis ojos concentrandome en todos los momentos felices, así ella podrá descansar en paz libre les sufrimiento.
De pronto comienzo a ver visiones, es ella junto a Paloma, es el momento en que Elián la llega a buscar, ambos pelean pero él consigue llevarla, de pronto dejo de verlas, maldición algo raro está pasando.
Me la llevo a la mansión para arreglarla y entregarla a su familia, se merece todo el descanso eterno, la dejo sobre la alfombra.
Paloma me espera algo ensangrentada en el sofá con la cenizas de Elián.
-No puedo creer que estén muertos.- se toma la cabeza.
-Mi hermano y mi amada lo están, todo por la maldita envidia de nuestros corazones, jamas creí que Elián moriría con mi sangre.
-Él amaba a su hermana, traje sus cenizas para que hagas algo con ellas.- se detiene a mirarme.- Tus ojos están con sangre.- me mira asustada.
-Es normal, ella está muerta.
-Gérard me contó lo que le mandaste a pedir a Tiáloc y utilicé ese recurso.
-Estas de broma?.
-Presentía que Elián te iba a tracionar, él nunca juega limpio.
-Que fue lo que hiciste?.- pregunto furiosa.
-Ve por ti misma.- indica a Zoe.
Me llevo las manos a mi pecho de la sorpresa, está sentada sobre la alfombra con sus ojos color rojo.
-La convertiste?.- me altero.
-Supuse que por eso pusiste sangre de Tiáloc en ese collar, así que hice que se la bebiera antes de que llegara Elián.
-Mierda, ella me dejó una carta donde decía que me amaba y que nunca debía permitir de que la convirtieran en vampiro.
-Ya es tarde, ahora es una tenebris bastante poderosa.
Cierro mis ojos, estoy feliz y a la vez enojada, no sé como va a reaccionar Zoe.
-Dónde está?.- observo la sala.
-Juro que estaba aquí recién, debe estar con hambre.
-Por lo menos va a necesitar unas diez personas para estar satisfecha, tenemos que buscarla.
-No.- me detiene.- Deja que experimente por ella misma y si no le gusta pues saco un poco de tu sangre y la mato.
Apreto mis manos conteniendo las ganas de responderle.
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Tomo las cenizas de mi hermano, me traslado hasta el río Limago. Lloro a las orillas de este, extrañaré las veces que tenía que quemar cadáveres que me dejaba sobre la alfombra o cuando traía a chicas y luego tenia que yo borrar su memoria, la veces que huimos de ciudad en ciudad.
Siempre te voy a recordar hermanito, nunca quise una muerte así para ti.
Lanzo sus cenizas al río, veo como desaparecen en el agua.
Ha sido un día de mierda, primero la desaparición de ella, luego la traición de Elián, la muerte de él a manos de Zoe y ahora ella es una vampira que no tengo idea como va a reaccionar cuando se de cuenta.
Esto me pasa por ser una tenebris, la maldición cayó sobre mi.
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Uh como se lo irá a tomar Zoe!!