estábamos cerca de las fiestas y tenía la nostalgia a flor de piel, extrañaba demasiado a mi familia y amigos. ya se habían cumplido dos meses desde que ingresamos a la casa y no podía pensar en otra cosa que no sea verlos.
hacia unos días, justo después de la final del mundial, habían ingresado dos nuevos participantes a la casa. la verdad que no podía decir mucho sobre ellos, no me había sentado a hablar para poder opinar debidamente. aunque de lejos se los podía observar a ambos, camila y ariel, como buenas personas.
habían varios momentos de tensión en la casa, más que nada cuando ariel y alfa estaban en la misma habitación. también cuando julieta y romina se nos acercaban a mi y a coti, en el último tiempo había entablado una linda relacion.
me encontraba en el patio tomando sol con marcos a mi lado, el calor que estaba haciendo últimamente en buenos aires me destrozaba pero como no había otra cosa para hacer nos la pasábamos casi todo el tiempo haciendo lo mismo.
- ¿que estará haciendo messi ahora? - me preguntó marcos con la tranquilidad que lo caracterizaba
me giré para mirarlo riendo en voz baja, él seguía con los ojos cerrados.
- ¿de verdad estas pensando en messi ahora que estas conmigo? - le pregunté esta vez yo a él
abrió los ojos para mirarme, me impresionaba lo lindo que era al sol. en todos los ámbitos en realidad pero cuando estaba al sol y su piel brillaba por la misma me encantaba.
- siempre pienso en vos y en messi
no pudimos evitar reírnos, claramente me lo estaba diciendo en joda.
antes de que alguno pudiera decir algo se sentó en el espacio que quedaba en medio de ambos camila. la mire un poco extrañada, nunca habíamos hablado más allá de saludarnos a la mañana o cuando se presentó.
sabía que ella se había relacionado un poco más con marcos, más que nada porque hacía donde iba el salteño ella estaba detrás. no me gustaba mucho esa actitud, para ser sincera incluso me daban celos. ella sabía de toda la información de afuera, estaba segura, por más que dijera que nunca había mirado el programa.
era conciente de lo que yo tenia con marcos así que por eso no entendía por qué se esmeraba tanto en querer pasar todo el tiempo con marcos, una cosa era amistad pero otra eran sus intenciones.
marcos la miró serio, casi inexpresivo, pero no con mala cara para luego mirarme a mi. él ya sabía lo que yo creía que estaba sucediendo, se lo había planteado apenas lo pensé. si realmente quería que esto funcionara íbamos a tener que hablar las cosas.
- ¿de que hablaban? - preguntó camila lanzándome una mirada fugaz para luego centrarse completamente en marcos, sentí esa punzada conocida en el pecho, ya estaba celosa
- estábamos tomando sol noma' - respondió marcos volviendo a cerrar los ojos, estaba diciendo indirectamente que no quería hablar
ella en ningún momento dejó de mirarlo, parecía que literalmente no existía. quería ser buena con camila, no había hecho nada malo todavía y casi nadie hablaba con ella porque recién había ingresado, entendía que podía ser feo que la tratasen así.
- ¿ya te acostumbraste a todo esto? - le pregunté dándole una sonrisa con la boca cerrada, quería que deje de mirarlo
por fin su mirada se centró en mi y me sonrió genuinamente. no creía que sea mala persona pero igualmente no me cerraba todo lo que estaba haciendo.
- es un poco loco, la verdad, pero es como un sueño. todavía no entiendo bien dónde están las cámaras pero seguro me voy a ir acostumbrando en eso con el tiempo
- olvídate, yo que estoy hace dos meses a veces me olvido de las cámaras y no tengo idea donde están todas. es re loco
ella asintió sonriendo y volvió a girar la cabeza para mirar a marcos. ya me estaba molestando, estaba siendo muy evidente que no quería hablar conmigo.
no iba a estar en un lugar donde no me sentía cómoda.
- me voy adentro, amor - le dije a marcos en voz alta ignorando por completo a camila, quien ahora si me observaba expectante
marcos abrió los ojos y me sonrió, me incliné un poco para dejarle un corto beso en los labios, el cual él recibió gustoso.
una vez entre a la casa fui a buscar a coti o nacho para no estar del todo sola, me había alejado de bastantes debido a la pelea de los últimos días. no por algo personal pero algunos estaban más del lado de julieta.
los encontré justamente a coti y nacho junto con alexis en la habitación de mujeres, estaban tomando mate. me coloque una remera de marcos que había separado y me quedaba lo suficientemente grande para luego sentarme con ellos.
- no estabas con tu novio vos - me preguntó nacho a mi lado, por suerte habíamos arreglado bastante la relación de ambos, me sentía bien al volver a tenerlo como amigo
tomé el mate que coti me estaba extendiendo con una media sonrisa.
- primero, no es mi novio. segundo, se metió camila en el medio y lo único que hacía era mirarlo a él, literalmente ignoraba mi presencia - les respondí sacando un poco la bronca que tenia dentro
- ¿y vos los dejas solos, loca? - me preguntó coti, ella siempre reflejaba mis pensamientos más profundos que yo no expresaba
- ¿que puedo hacer yo? además, confío en marcos, no va a hacer nada con ella
- el primo te re quiere, es imposible que haga algo para lastimarte
me sentí bien cuando escuché esas palabras, saber que otros veían lo bien que estábamos entre ambos y lo mucho que nos queríamos me llenaba de felicidad. marcos me daba paz.
charlamos un rato más, estábamos todos ansiosos por las fiestas. para muchos eran las primeras lejos de nuestros familiares así que iba a ser muy difícil. agradecía por lo menos tener a gente que realmente quería conmigo.
luego de un rato me dirigí hacia la parte donde estaban los lavamanos para poder lavarme la cara y despejarme un poco, me lo encontré a marcos lavándose las manos.
- acá estas, amor - me dijo envolviendo sus brazos alrededor de mi cintura
- ¿terminaste de hablar con ella? - le pregunté sin devolverle el abrazo, en si me estaba haciendo un poco la enojada pero también estaba celosa
- no hablamos nada, se quedó ahí en silencio mientras yo tomaba sol
- eso es peor, se quedó mirándote todo ese tiempo. la quiero matar
él se rió y me dio un beso logrando que sonría un poco. siempre sabía como cambiarme el humor.
- sabes que a la única que quiero es a vos
cedí ante el abrazo, me hacía muy feliz.
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