Un hombre alzó el rostro, dejando ver su cabellera larga y andrajosa, unos ojos amarillos relucieron mientras sus pies estaban atadas con cadenas a la pared. Aquel tipo miró con suma furia y repudio al Duque Jeon Jungkook, quien se acercó a las barandas de aquella cárcel del sotano, se sentó esbelto sobre la silla.
—Después de tantos años aún tienes el descaro de verme de esa manera, señor Park.
Aquel tipo mostró sus colmillos de forma amenazante, el Duque sonrió gustoso. Hace 5 años que había sido la guerra interna de los cazadores hacía los quirópteros, sintió que el tipo había muerto demasiado rápido y no le iba dar el gusto de irse, consideraba que tenía cosas que pagar, como el ataque al pueblo de Santé y ser sentenciado por haber convertido a humanos en néofitos incontrolables, usando como experimentos a un híbrido.
Así que antes de pasar las 24 horas, mordió a ese tipo y lo transformó, después de haber hecho justicia y ser considerado inocente de aquel ataque, decidió torturar al impuro hasta que se aburriera. Por lo que cada día llegaba a romper algún hueso de su cuerpo o amputarle alguna mano, pie, dedo. Al ser un impuro se podía regenerar y así volver hacer el mismo ciclo.
—Maldito—gruñó aquel hombre.
—Te lo dije...ese día habrás deseado haber muerto—setenció aquel Duque que se cruzó de piernas y acomodó sus manos sobre su rodilla—¿Qué se siente convertirte en lo que más odias, antiguo cazador Park?
El tipo por supuesto había tratado de matarse sin exito alguno, ya que había una vigilante que impedía que se volara la cabeza. Además, Jeon Jungkook ahora era su amo y si rompía o no acataba una orden de él, su esclavo sufriría de un dolor por varias horas al negarse.
—¡Ya matame, hazlo!—gritó desesperado aquel hombre.
Jungkook hizo un leve movimiento con su dedo, el brazo de aquel hombre se retorció y pegó un grito desgarrador del dolor al sentir el hueso de su brazo romperse, sus labios estaban llenos de mordedura al tener varios ataques de ansiedad que solía obtener ante la desesperación.
—La muerte sería demasiado honor para alguien como tú—comentó con una sonrisa ladina Jeon Jungkook e hizo un leve movimiento con su cabeza, el tipo soltó otro grito cuatro sintió los huesos de sus cosquitllas fracturarses.
Jeon Jungkook trataba de no darle en sus sinos vitales, cerebro y corazón. Por eso podía torturar gustoso a ese hombre.
La puerta de aquel lugar fue tocada, el vampiro se giró, viendo a Mijoo que se hincó con respeto y le ofreció una leve sonrisa.
—Mi señor, es hora del almuerzo. Su familia lo esta esperando.
Jungkook agradeció al ser informado, se levantó y limpió sus manos, miró al tipo.
—Hincate.
El señor Park sintió una fuerte presión en su cuerpo y cayó hincado, escupió sangre y su cuerpo se paralizó, ese tipo tenía total control sobre él. Mijoo miró al prisionero sin ninguna pizca de simpatía o lástima alguna, sabía que su amo poseía total control sobre las demás vampiras; pero jamás había usado su voz de dominancia sobre ellas, por lo que había escuchado, era muy doloroso recibir una orden en mando.
Jungkook suspiró y empezó a subir las escaleras ya que era la hora del almuerzo y no podía faltar a ninguna de las comidas con su familia, era su momento especial.
Yoongi tocó su vientre, llevaba 9 meses de embarazo. La puerta del comedor se abrió y una gran sonrisa se transformó en su rostro, sus dos mellizos de cinco años fueron los primeros en entrar y al ver a su papi corrieron a gran velocidad hasta abrazarlo.
—¡Papi, papi! no sabes lo que aprendí hoy—comentó Wooshi.
—¡Yo también aprendí algo nuevo!—comentó Yeji la melliza.
—¿En serio? me gustaría escuchar al respecto—detrás de ellos apareció una hermosa niña de dos años y medio que al ver a su papi, corrió como sus piecitos dieron y extendió sus brazos.
—¡Api, api!—exclamó la pequeña que extendió sus pequeños brazos—¡Abasho!
—Mi pequeña Chae-rin—llamó su padre que quiso cargar a su pequeña pero el peso de su vientre se lo impidió—, me gustaría poder cargarte pero papi no puede en este estado.
La pequeña hizo un puchero y miró un poco celosa el vientre de su papi, culpando el bebé que venía en camino por no ser cargada. Apareció otra doncella con un bebé de un año que hizo un viejito, arrugando su nariz y dejando a la vista unos pequeños pero ya filosos colmillos.
Jeon Jungkook ingresó al comedor y cuando sus hijos lo vieron, le saludaron con respeto, el vampiro se acercó a su pareja, tomó la mano de su amado y le ofreció un beso, luego se agachó un poco acariciando los cabellos de sus hijos. El pequeño de un año fue cargado por el Duque, quien se dirigió a su silla y sentó al más pequeño en su regazo. A los gemelos le acomodaron unas almohadas sobre las sillas, incluyendo a la de dos años, asi logrando alcanzar la mesa.
—Escuché que está haciendo unos tratados en el palacio—comentó Yoongi mientras los sirvientes empezaron a servir los platos de comida.
—El rey se encuentra muy enfermo, sabes que tiene 3 hijos, por lo que estoy apoyando al segundo principe. Es joven y quiere formar relaciones diplomaticas con los quiropteros—dijo tomando el tenedor, agarró con la cuchara un poco de pure y lo acercó a los labios del pequeño de un año—, come lento pequeño Jae-Beom...debes digerir bien la comida.
Yoongi miró con total orgullo al Duque, el Sangre pura se encargaba mucho de la crianza y la educación de sus hijos, aunque claro recibía ayuda de las nodrizas de cada pequeño. Pero cuando Yoongi quedaba en estado de embarazo, lo único que hacía era comer, dormir y pasear por los jardines para seguir haciendo el mismo circulo cada día. Yoongi consideró que cinco hijos eran suficientes, aunque el Duque parecía no pensar lo mismo y deseaba unos cuantos hijos más.
Pero Yoongi ya le había dejado en claro que él no tendría más.
—¿Sabes algo de la joven Boyoung?—preguntó el Duque para dar un bocado a su pedazo de carne.
Yoongi bajó su rostro y desvió la mirada. Cuando su amiga murió aquel día, Lee Jong Suk y la vampira híbrida se dieron cuenta que a la semana de la velación del cuerpo de la joven, este no se parecía marchitar, por lo que pensaron que la putrefacción de la carne sería más lenta dado que poseía genes de vampiro. Sin embargo, Jong Suk pensó que podía ser regresada a la vida si era transfomada a pesar de haber pasado más de 24 horas, por lo que empezó a buscar información e investigar, encontrando una respuesta en los experimentos e informes que el Señor Park, hizo sobre lo hibridos y entre sus crueles experimentos pudo descubrir que había una forma de regresar a su nieta.
Por lo que Wendy, la madre de Boyoung hizo una transfusión de sangre al cuerpo de su hija, al principio creyeron que no habían tenido exito y se dieron por vencido, pensando en donde enterrara; pero después de dos días, el médico al revisar el cuerpo de la joven, pudo escuchar unos leves latidos del corazón, eran lentos y palpitaban cada 1 minuto; pero era indicios que el cuerpo empezaba a recuperase con lentitud.
Pero eso hace cinco años y esperaban el dia que la joven Boyoung despertara. Asi que Yoongi le había prometido al Duque que se casaría solo cuando su amiga despertara, ya que deseaba que ella fuera su dama de honor. El vampiro aceptó, consideraba que la boda solo era una imagen formal y además ellos ya tenían un lazo de sangre que era lo oficial ante los ojos de los demás vampiros.
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Una joven abrió los ojos, respiró y se dio cuenta que se encontraba en un cuarto blanco, la escritora se giró y vio una mesa, sobre ella estaba el libro de Santé, se tocó la cabeza algo adolorida. Ella se estiró y lo tomó rápido muy preocupada. Pasó rápido las últimas páginas, empezó a leer el final, cubrió su boca y una gran sonrisa salió de su rostro.
—¡Si, lo hiciste maldita sea!—gritó aquella mujer; pero luego soltó un gran quejido por el dolor de su cuello.
La puerta del cuarto se abrió, ella alzó el rostro viendo a una enfermera que traía una bandeja con unos paños húmedos, la mujer al ver a la chica despierta pegó un grito, dejando caer las cosas al suelo y salió despavorida como si había visto un fantasma—¡Despertó la que fue atropellada por una vaca!—salió avisando la enfermera, avergonzando a la escritora.
BoYung escuchó de parte del médico que había estado en cama por una semana después que un señor la encontró en carretera y la vaca que la había arrollado se había escapado de un matadero. Pero no se supo más de la vaca, le avisó que en tres días sería dado de alta ya que se encontraba en mejores condiciones pero que estarían al tanto de su salud.
La escritora contempló a la lejanía los altos edificios y el ruido de la ciudad, recordando que en el ducado de Santé solo se escuchaba a veces el cuchicheo de los pueblerinos, el sonido de algunos pajaros y era un paisaje abierto y hermoso, lleno de bosques espesos y un clima agradable.
Después de tres días de haber sido dada de alta, la escritora iba con sus muletas, en la verdad que extrañaba mucho a su amigo Min Yoongi y el mundo que ella había creado. Si le contara a alguien lo que había vivido, la tacharían de loca y de seguro la internarían, quería pensar que todo era un sueño; pero la vivencia de aquellos dias fueron fuertes.
Suspiró con pesar mientras en su cartera llevaba el libro de Santé. Había tenido un final feliz, por lo que estaba satisfecha, incluso había leido en algunos comentarios que había salido un nuevo libro spin off de Santé, ella no recordaba haberlo escrito pero de seguro el mundo intervino para que existiera en esa realidad. Ella prefería no buscarle respuestas a preguntas que no tenían un significado comprensible.
Mientras pasaba por la linea blanca del peatón, se preguntó como estarían los demás y que habría pasado después de la última página del libro de Santé, suspiró—¡Maldito Dios, todo lo arruinas! ¡Por primera vez era feliz en un lugar! ¡Y conocí un tipo guapo y traes de regreso!—gritó al cielo muy molesta, al recordar al Conde Kim Seokjin, entristeció un poco, se preguntó si ese hombre habría encontrado a alguien en su vida: "Sería feliz?", la escritora alzó de nuevo el rostro—¡Si las cosas iban a ser así mejor me hubieras matado de un solo!—la mujer sacó el dedo de enmedio al cielo y cuando ya había desquitado su ira, siguió caminando, cuando iba cruzando la calle escuchó un fuerte pitido, vio a su derecha y unas grandes luces amarilla cegaron su rostro.
Un camión arroyó a la mujer y murió...y esta vez sin salvación en ese mundo.
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La escritoria abrió los ojos con lentitud, se sentó un tanto abrumada, se bajó de la cama—¡Ah! maldita sea, que sueño mas horrible!—exclamó y rascó su cabeza, soltó un bostezo y se metió la mano bajo la camisa para rascar su vientre. La doncella que iba ingresando al cuarto con un plato hondo de porcelana con agua y un trapo húmedo para limpiar la piel de la joven BoYoung, dejó caer aquellos objetos.
La doncella pegó un grito y salió corriendo del cuarto a como dio lugar. Boyoung abrió y cerró los ojos pasando de largo por un espejo, en eso frenó y se regresó. Cuando vio su reflejo al rostro, se dio cuenta que había vuelto al libro de Santé. Soltó una risa cargada de sarcasmo y abrió la ventana aún creyendo que estaba de nuevo en un profundo sueño, se subió al marco de la ventana y una doncella ingresó rápido para tomarla de la cintura.
—¡Auxilio, mi señorita se quiere matar!—exclamó aquella mujer.
Por la puerta apareció un agitado Min Yoongi que se enteró a la hora del almuerzo que la escritora había despertado.
—Lo sabía...—musitó su amigo con una sonrisa, la doncella logró jalar hacía atrás a la señorita Boyoung, según ella, salvando su vida—.Bienvenida, de regreso.
—Yoongi...¡Yoongi estoy viva!—gritó euforica y corrió en dirección de su amigo y ambos se abrazaron y empezaron a dar vueltas hasta que el híbrido la agarró de la coleta y la jaló—¡Auch! ¡Me duele...¿Qué clase de bienvenida es esta?
—¡Tú, no sabes cuanto sufrí por tu ausencia! por suerte Lee Jong Suk tu abuelo, encontró una forma de regresarte a la vida, si no fuera por la sangre de tu madre, estarías bajo tierra!
—¡Pensé que estabas feliz de verme!—exclamó adolorida, bajó su mirada notando un vientre crecido en su amigo—¡Te engordaste!
—¡Estoy embarazado, tonta!
—¿Tan rápido?
—Pasaron 5 años, mujer—le confirmó aquel híbrido.
—¿Papi?—se escuchó una voz, los mellizos de Yoongi se asomaron, el híbrido soltó rápido el pelo de la mujer y les ofreció una cálida e inocente sonrisa, tras ellos hizo sus otros dos hijos.
—¿Todos...ellos son tus hijos?—sorprendida contó a cada uno, incluyendo al que Yoongi llevaba en su vientre—Vaya...si que son animales en celo—exclamó sorprendida—¿Todos esos mocosos son tuyos? ¡Parece que parir no te duele tanto!
—No es mi culpa que a mi prometido le guste verme en estado.
—¿Eh? ¿No te has casado aún con el Duque?—preguntó con suma sorpresa—¿Por qué?
Yoongi negó y tomó las manos de aquella mujer.
—Resulta que mi dama de honor se encontraba dormida y además...no quería que faltara a mi boda—musitó ofreciendo una sonrisa.Boyoung al escuchar aquello sus cejas se enarcaron—. Estuve esperando por tí, escritora.
—¿Has sido muy feliz, Min Yoongi?—aquel híbrido afirmó y ella sonrió entre lágrimas cubriendo su rostro ante la inmensa alegria—. Pude ver en el último capitulo de Santé que habías logrado vencer al villano.
Unos pasos se hicieron presente, apareciendo Lee Jong Suk y Wendy, quien al ver a su hija, recogió la punta de la esquina de sus vestidos y corrió donde ella para ofrecerle un fuerte abrazo. Luego apareció Park Seojoon y su madre, ya que estaban de visita, solian ir todos los días al ver el cuerpo durmiente de la joven por si despertaba algún día.
La señora Park juntó sus manos un poco temerosa ya que sabía que la verdadera madre de Boyoung estaba allí.
—¿Mamá?—preguntó Boyoung contemplando a la señora Park, ella al escuchar aquel llamado alzó su rostro con sorpresa, viendo como su hija había extendido sus brazos para abrazarla, ella sonrió y corrió abrazarla por igual—Los eché de menos.
—Hermana—habló Sejoon acomodando sus manos tras la espalda.
—Muchos han esperado por tí, incluyendo a mi.
BoYoung se dejó abrazar por sus dos madres las cuales se contemplaron por unos segundos y luego soltaron a la joven.
El duque apareció por el marco de la puerta, se acercó a Yoongi y rodeó sus mano alrededor de la cintura de su pareja.
—Parece que hay una boda que celebrar ¿No?—inquirió con un tono divertido aquel Sangre pura. Yoongi afirmó con una gran sonrisa viendo como BoYoung sonreía y conversaba con sus conocidos—. Nosotros ya tenemos nuestra felicidad, supongo que es hora de que ella también empiece los capitulos de su propia historia.
—Me pregunto donde aprendiste hablar así—comentó con extrañeza el Duque, comentas como si vivieras en una novela.
—¿Pero qué tonterias dice, Duque?—forzó una sonrisa y soltó una carcajada—¡Eso sería loco!
El Duque solo enarcó una ceja y le ofreció un beso sobre la frente a Min Yoongi.
3 días después que Boyoung se había vuelto acomodar a su nueva vida, había optado vivir con su hermano y su madre que la crió desde bebé. Su madre biologica aceptó pero la iría a visitar cada dos días junto con Lee Jong Suk.
Por lo que por fin, el día de la boda de Min Yoongi con el Duque había llegado. Un velo rojo fue puesto sobre el rostro de Min Yoongi, quien alzó su mirada, sosteniendo unas rosas blancas en su mano, Sejeong miró con orgullo a su amo y terminó de acomodar un poco el velo, un pequeño niño de cinco años que era el humano que Mijoo había recogido en el bosque hace cinco años, ingresó al salón de preparación.
—¡Mami!—gritó el pequeño a Sejeong y le extendió una caja negra que traía adentro unas monedas de oro que eran parte de la ceremonia—, traje lo que me pediste.
El niño miró al joven Duque con suma maravilla. Jeon Jungkook había aceptado que el pequeño formara parte de los sirvientes y cuando se convirtiera en mayor de edad, lo convertiría a un impuro, solo si el joven lo deseara para ese momento. Habían investigado el origen del pequeño y por lo que llegaron a saber, su tia lo había abandonado ya que era una joven de un pueblo vecino, quien no había deseado desde un principio al bebé porque lo consideraba una carga para la familia, más cuando la madre biologica de este había muerto en el parto y sentía que sería una boca más que alimentar, por lo que lo tiró al bosque a su suerte.
Cuando Mijoo la investigó para regresarle al bebé, ella cerró la puerta y les gritó que no quería saber nada de ese ser, ni siquiera sintió un poco de compasión. Cuando Mijoo le contó la historia al Duque, este sintió un poco de lastima y aceptó que se quedara en aquel lugar; pero todo sus cuidados y crianza sería responsabilidad de aquella vigilante.
—¡Se ve muy bonito, mi joven señor!—exclamó el más pequeño con sumo respeto, estaba siendo educado para ser el siguiente mayordomo de la mansión de Santé, ya que Dongwook en unos años llegaría a retirarse.
—Gracias Taehyung—afirmó aquel híbrido y se giró sobre sus talones, se bajó de la pequeña tarima en la cual lo estaban arreglando.
Sejeong tomó la punta del largo y rojo velo, empezando Yoongi a caminar para salir de aquel cuarto y así dirigirse al jardín de aquella mansión, donde sería llevada la ceremonia. Mijoo vio al joven Min salir de aquel cuarto y le saludó con respeto y sonrió.
—Felicitaciones por la boda, joven Duque, espero que su felicidad sea prospera con mi amo—comentó Mijoo y miró en dirección de Sejeong, quien al verse observada, desvió rápido la mirada.
Taehyung tomó la cola del velo y Sejeong se libero, debía ir a vigilar que todo estuviera bien en la mansión, más ahora que se había convertido en la nueva ama de llaves. El pequeño Taehyung iba feliz llevando la cola del velo. La impura se puso a la par de la vigilante, notando con orgullo como su amo se iba alejando a la lejanía y se casaría con el amor de su vida.
—¿No deberías estar vigilando sobre el techo?—le preguntó Sejeong juntando sus manos y un rostro serio.
—Vine a dejar a nuestro hijo, estaba muy emocionado con servir en el dia de la boda al joven Min.
—Si, el es feliz con la cosas más pequeñas—comentó viendo como su hijo iba meneando su caderas de lado a lado y tarareaba muy alegre de la vida—, ah...¿no tiene vergüenza ajena?
—Además te quería ver...estos días has estado muy ocupada—Mijoo acercó su nariz a la mejilla de la ajena y la olfateó, sintiendose satisfecha al poder tener de nuevo el aroma de su amada, le ofreció un beso y luego le pasó un gran lenguetazo.
Sejeong abrió los ojos en par y le soltó un suave gruñido.
—¡Tú, ten pudor...estamos en un lugar público! pueden vernos, te veo más noche.
Dicho eso la ahora ama de llaves caminó recto con elegancia con el rostro elevado dejando una perfecta postura; pero su corazón latía agitado por la emoción por el beso de aquella mujer. Quien iba decir que al fina de cuentas terminaron juntas de una y otra forma, si no hubiera sido por esa noche que se emborrachó en celebración que el Duque había ganado la guerra, no hubiera aparecido juntas en la cama.
Y vaya que Mijoo la dejó mordida por todas partes, como si fuera un pedazo de comida. Solo en ese momento entendió el "Quiero comerte" de esa mujer loca.
Sejeong se detuvo y se giró para ver a la vigilante, la cual le guiñó el ojo de forma coqueta y sonrió ladina, la ama de llaves le ofreció una gran sonrisa sarcastica hasta dejar a la vista su dedo de enmedio.
Min Yoongi llegó por fin al jardin, Jeon Jungkook se giró a verlo, viendo aquel enorme velo rojo y como se podían ver unas rosas blancas. La escritora se giró por igual, viendo aquel joven y sonrió con sumo orgullo, juntó sus manos viendo como el omega caminaba hacía el altar, su amiga tomó ahora la cola del velo, dejando al niño de cinco años, quien se hizo a un lado para otorgarle el permiso.
Después de unos segundos, Min Yoongi había llegado a estar a la par del duque. Ambos se contemplaron de forma intensa; pero el híbrido al sentirse demasiado observado, se ruborizó y bajó su rostro con sumo nervios. No entendía porque se sentía así, la emoción en su interior era intensa, se estaba casando con su personaje favorito. Con Jeon Jungkook, el Duque del libro de Santé, a quien le lloró su muerte en el libro pero ahora podía verlo allí, con su cabellera echa hacía atrás, dejando su frente al descubierto y olía muy bien.
Si no fuera porque estaba embarazado, se tiraría sobre aquel hombre: "¡Mio, mio...ese hombre es mio!" tarareó en su interior moviendo un poco sus caderas por la felicidad. Jungkook trató de contener su risa al ver aquella reacción. Ambos vieron al frente, notando al casamentero, quien era Park Jimin, este les ofreció una leve sonrisa y empezó hacer el ritual.
—Te ves hermoso—susurró Jungkook que había logrado ver parte del rostro por la tela traslucida.
—¿Puede decir eso sin haber visto muy bien mi rostro? además, con mi embarazo este traje no se ve muy elegante que se diga.
—No necesito ver tu rostro para saber que eres hermoso, Min Yoongi.
El omega sonrió tras aquella tela, Jimin trató de hacer oidos sordos a lo que escuchaba.
Boyoung se fue a la banca de la izquierda, ya que de ese lado se encontraba los invitados de Min Yoongi, pero la mayoria eran conocidos del Duque. Ella al ver a Kim Seokjin, se quedó en silencio y apretó los labios, el conde enarcó una ceja y acomodó sus manos tras la espalda.
—Señorita Boyoung.
—Conde.
Ambos se dieron un leve saludo con un suave cabeceo. Boyoung volvió a poner su vista sobre aquel tipo y miró sonrojada al frente, recordando el beso que le otorgó aquel vampiro cuando estaba en su lecho de muerte.
—Me dijeron que estuve dormida cinco años—musitó ella apretando sus manos y desvió la mirada—¿Conoció a alguien en ese tiempo? debe haberse casado para esta edad, cuanto años tendría...¿35?
—Conocí muchas mujeres—comentó aquel vampiro Sangre pura con tono serio.
—Oh...por supuesto—dijo algo nerviosa la más joven y bajó su rostro.
—Y me casé.
Boyoung al escuchar aquello le miró con ojos tristes y pasó con dificultad su saliva.
—felicidades por su matrimonio—forzó una sonrisa.
—Así que ya que despertó debemos consumar nuestro matrimonio.
—Si ya que desperte vamos a consumar nuestro matrimonio...—la escritora reaccionó, abrió los ojos en par y le miró de un golpe—¡¿Eh?!
Todos se giraron a verla al escuchar aquel grito, Jimin miró de forma aniquiladora a esa mujer gritona, quien se empezó a disculpar muy avergonzada. Jimin y Jungkook miraron de nuevo al frente para seguir escuchando las palabras de aquel hombre.
—¿Por qué reacciona así? usted me pidió un beso, así que decidi que se responsabilizara de sus actos. Además, tu familia aceptó el matrimonio y firmaron un acuerdo nupcial.
—¡Que clase de loco bastardo hace eso!—siseo viendo al vampiro sin salir de su sorpresa.
—Señorita, usted no puede besar a alguien y fingir que no pasó nada. En esta sociedad ese tipo de intimidad solo pueden hacerlo los amantes, así que solo seguí las reglas.
—¿Se caso...conmigo a pesar de estar en ese estado? ¿Qué tal si despertaba en cien años?
—Iba esperar el tiempo necesario.
—¿Y si nunca despertaba? ¡Uf! jamás había conocido a un pervertido como usted—ella se cubrió el pecho con sus manos y se encogió—¿Acaso...usted-...
—¿Qué percepción tiene de mí, cree que me gusta tener sexo con un cadaver?—gruñó amenazante—. Como sea, ya mandé hoy a unos sirvientes para que recojan las cosas de su casa y cumpla su papel como esposa.
—¡Ah! ¡Jamás aceptaré este matrimonio que mi familia decidió sobre mí!—le susurró muy molesta y se cruzó de brazos.
—Que mal, porque los divorcios para la aristocracia no están permitidos—Jin solo enarcó una ceja y sonrió un poco con ironía—, llevemonos bien....esposa mia.
Boyoung miró de un golpe a Yoongi, el cual al sentir una mirada aniquiladora hacía él, se giró con suma inocencia, notando como la escritora mostraba un ojo amarillo y otro rojo. Yoongi le ofreció una sonrisa: "¡Ay, está tan emocionada!" pensó para volver su mirada al frente.
A todo esto: "¿No había olvidado decirle algo importante a su amiga?" bueno, no tenía tiempo para pensar en algo así, más cuando Jungkook tomó el anillo de la alianza y agarró su mano con sumo cuidado, introduciendo aquel anillo para pronunciar las tan esperadas palabras.
—Min Yoongi, yo Jeon Jungkook, te doy este anillo como símbolo de mi amor y fidelidad,te entrego mi corazón y mi alma" y terminó de ponerlo para ofrecerle un beso sobre la mano.
Yoongi tomó el anillo que le iba a dar al Duque y tomó aquellas manos, notó que por los nervios estaba temblanco y tenía pena que alguien lo notara, pero Jungkook le sujetó la otra mano para darle la fuerzas necesarias.
—Jeon Jungkook, yo como Min Yoongi, te doy este anillo es una muestra de mi amor. Me caso con este anillo, con todo lo que tengo y todo lo que soy.
Jungkook se hincó y beso su anillo y luego el de su esposo.
—Llevaré este anillo para siempre como una señal de mi compromiso y el deseo de mi corazón. Elijo que seas mi esposo desde este día y para siempre—le ofreció una sonrisa y recostó su mejilla sobre la mano derecha de su amado.
Yoongi inhaló con profundamente al sentir que su cuerpo se empezaba a tranquilizar.
—Por este presente—interrumpió Jimin— y como nuestros invitados de testigo, yo, los declaro esposos. Duque...puede besar a su amado.
Jeon Jungkook se levantó e hizo hacía atrás el velo de Min Yoongi, se acercó al Híbrido y lo atrajo hacía él, ofreciendo un beso sobre los labios de su ahora esposo. La escritora pegó un grito de emoción y aplaudió dando brincos, sobresaltando a los demás aristócratas que la vieron como una mujer que no estaba bien de sus facultades mentales.
Yoongi frunció el ceño y pegó un grito al sentir una fuerte contracción, tomó de los cabellos al Duque y respiró con profundidad, Boyoung también pegó un grito al ver a su eamigo en ese estado, tomando a su esposo del cuello de la camisa y lo sacudió.
—¡Ah, creo que ya viene el bebé!
—¡Respira Yoongi, que no cunda el panico!—la escritora soltó al Conde y salió corriendo sin destino alguno ingresando a la mansión.
Jungkook logró soltarse del aferre de su esposo y lo cargó entre sus brazos, apresuró su caminar, empezando a dirigirse al cuarto de su amado para que el médico y la partera lo atendiera. Los demás invitados se miraron ente ellos empezando a conversar. Sejeong y Mijoo siguieron a sus amos en silencio para apoyarlos en cualquier situación.
Cuatro horas después, todos esperaban un poco desesperados la llegada del quinto hijo del joven Duque Min Yoongi. Boyoung salió del cuarto y rompió a llorar, los presentes se levantaron de sus sillas asustados, la chica ingresó al cuarto de nuevo, los demás se miraron entre ellos y se sentaron de nuevo tratando de calmar sus nervios.
Minutos después, Boyoung volvió a salir llorando, los demás se pararon por segunda vez, ella limpió sus lágrimas con su pañuelo e ingresó al cuarto sin decir más, los invitados empezaron a sentir sus nervios en punta e imaginando lo peor.
La joven salió por tercera vez, Jin esta vez se le acercó. Ella en la verdad solo estaba tratando de imitar una escena de una pelicula que le gustó de pequeña llamada: "orgullo y prejuicio" y le pareció que hacerlo en ese momento, sería divertido. Limpió sus lágrimas y alzó el rostro.
—¿Qué sucedió?
—¡Es una sana niña!—exclamó sonriendo espléndida—¡Nació bien!
—¿Y por qué estás llorando, mujer?!—le alzó la voz Jin.
—¡Estoy emocionada! ¡Acaso ahora ya no puede uno llorar, además, Yoongi me pidió que fuera la madrina...ay, es el mejor—juntó sus manos y Jin se dejó caer en la silla sintiendo por fin su cuerpo relajarse.
¡Esa mujer lo iba a dejar loco!
Min Yoongi tarareaba una canción a su recién nacida, el Duque se le acercó a su esposo, ofreciendo un beso sobre la frente.
—Buen trabajo, Min Yoongi.
Yoongi le contempló muy cansado, con sus ojos negros dado que el maquillaje se le había corrido y lo dejó un caos, Su pelo incluso estaba desaliñado y no solo el de él, también el de Jungkook que en algún momento dejó de estar hacía atrás para que estuviera parados y las puntas de un lado a otro, debido a que Yoongi lo zarandeó a la hora de pujar.
—Ah...siguen siendo feos como ratas recién nacidas—musitó Yoongi enarcando una ceja.
Jungkook se sintió superado y puyó divertido la nariz de su esposo. En eso Sejeong ingresó con una bandeja y una botella de vino, Yoongi sonrió feliz y sin soltar a su bebé, tomó la copa, Mijoo le entregó la otra copa a Jungkook, quien no comprendía que estaba sucediendo. La ama de llaves vertió el vino con cuidado y Yoongi alzó la copa.
—¿Joven Min? ¿Está bien que tome alcohol después de dar a luz?
—¡Santé!—gritó con suma felicidad e hizo un brindis. Puso a su bebé sobre los brazos de Mijoo, se puso de pie sobre la cama y como si fuera un borracho empedernido amante del vino, se lo tragó de un tajazo.
Jeon Jungkook vio como su esposo empezó a bailar y mover sus hombros y caderas con suma emoción como si minutos antes no estuvo gritando y maldiciendo por dar a luz, el Duque soltó un largo y pesado suspiro dando con suma delicadeza un sorbo al vino. Su rostro serió desapareció y de último, alzó la copa con una gran sonrisa.
[10 años después]
Boyoung abrió la puerta del cuarto de invitados de Min Yoongi, sonrió espléndida y enarcó ambas cejas, Yoongi bajó su libro.
—¡Hemos venido tio Yoongi!—gritaron unos trillizos que hicieron de lado a su madre y luego aparecieron otros cuatro niños.
Yoongi vio como aquella sala se empezó a llenar de niños y su amiga ingresó pavoneandose con un hermoso vestido y se sentó ya que recién había publicado una novela en ese mundo, siguiendo su trabajo como escritora y deseaba saber la opinión de su amigo. Kim Seokjin ingresó de último, cargando a un bebé de 6 meses.
Min Yoongi solo enarcó una ceja viendo a los 8 hijos de su amiga, se giró a ver al jardin, observando a sus ya adolecentes gemelos que cabalgan y hacían competencia en caballos en el gran jardín y a sus otros hijos que ya estaban más grandes, las niñas disfrutaban hacer picnic y los niños competían entre ellos.
—Niños, vayan a jugar al jardín—ordenó su madre.
Los siete afirmaron y salieron despavoridos casi llevando a rastras a Kim Seokjin, sintiendo a su último hijo que se aferró a él.
—Disfruta tu visita con el joven Min—le comentó Seokjin que entregó su bebé al cuidado de Sejeong, quien sonrió feliz al ver al pequeño entre sus brazos—, yo iré con el duque a hablar del trabajo.
Ella afirmó y la puerta de la sala se cerró, dejando a ambos en su propia compañía. Yoongi dejó a un lado el libro que leía.
—¿Y? ¿Qué te pareció mi nueva novela?
—Escritora...¡Hoy si te mamaste!—la felicitó con una gran sonrisa. Boyoung soltó un grito de emoción cubriendo su boca—, no pude quitar el ojo de esta historia, incluso Jungkook se puso a leer conmigo y eso que no es un fan de las novelas. Ahora que lo pienso...¿Cómo fue que regresaste a la vida? cuando yo morí y tú también, estuvimos en un cuarto ¿Estuviste allí todo ese tiempo?
—Oh no, yo solo estaba en coma y desperté, el tiempo de allá y aquí no es el mismo. Aora que recuerdo...maldije a Dios y luego fui atropellado por un carro.
—¿Eh?
—¿Eh?
—¿Acaso maldeciste a Dios? escritora...¿Nunca te has preguntado si tal vez nosotros somos personajes de un libro dentro de otro?
—¡Pero que tonterias estás diciendo Min Yoongi—rió nerviosa aquella mujer y rascó su cuello.
En eso los dos alzaron su rostro y fruncieron el ceño viendo el techo, soltaron una carcajada.
—Naaaaah~
Agregaron de último para seguir conversando sobre lo que habían hecho en esa semana y sentirse orgullosos hasta donde habían llegado, habían entrado como personajes extras, pero se convirtieron en los más importantes y se dieron cuenta que a veces maldecir a un Dios, no estaba del todo mal.
¿O sí?
FIN
Dom-12-febrero-2023:
Y hoy si, ya quedó cerrado por completo esta historia, espero que les haya gustado y muchas muchaaas gracias por su infinito apoyo.