Los chicos me llevaron a mi casa. Izzy, me ayudo a subir por la ventana y yo entre a mi habitación. Me tire en la cama, pero no podía dormir. Mi mejor amiga, ahora era un vampiro y... quizás en este momento todos corríamos peligro. Espero Izzy y Duff logren controlarla, o todos terminaremos muriendo.
* * *
Mamá: Buenos Días, Sophia. Anoche te quedaste dormida, ¿No?
Sophia: Sí. –sonreí-. Mamá, necesito que te quedes hoy con Lizzy. ¿Puedes?
Mamá: Por supuesto. ¿A dónde vas?
Sophia: Hablare con... Izzy. –ella me miro-. El padre de, Lizzy.
Mamá: ¿Estas segura de que quieres verlo?
Sophia: Sí. Te aseguro que esta vez las cosas funcionaran. –sonreí-. Ya debo irme. Te quiero. Adiós.
Mamá: Adiós.
Salí de casa y tome un taxi. Le di la dirección a donde debía llevarme. Estaba tan preocupada por Daphne, necesitaba saber como estaba. Al llegar le pague al taxista y baje del taxi. Camine hacia la puerta y toque. Duff, me abrió.
Sophia: Hola.
Duff: Hey. –dijo serio.
Se hizo a un lado y me dejo pasar. Deje en el sofá mi bolso y me gire al escuchar a alguien bajar por las escaleras. Era Izzy.
Izzy: Sophia, que bueno que estas aquí.
Sophia: ¿Pasa algo malo?
Izzy: Daphne, esta encerrada en la habitación y no nos quiere abrir-. Miro a Duff-. Duff y yo creemos que quizás tú puedas hablar con ella.
Sophia: Tratare.
Los tres comenzamos a subir las escaleras. Una vez frente a la puerta, toque la puerta. Nadie respondía del otro lado.
Sophia: Daphne, soy yo. –dije y trate de no sonar nerviosa-. Déjame entrar.
Nadie respondió. Yo mire a Izzy y a Duff, esperando que ellos me dijeran algo. De pronto escuche abrirse. Duff, me hizo una seña para que entrara. Respire profundo y confié en el hecho de que mi mejor amiga no iba a hacerme daño. La habitación estaba oscura, Daphne se había encargado de cerrar todas las ventanas. La busque por toda la habitación y la vi en el piso.
Sophia: Hola, Daphne. –ella me miro-. ¿Estás bien?
Daphne: No lo estoy. Estoy convertido en un monstruo y lo seré siempre. –Se levanto rápidamente-. Al menos que... me claven una daga en el corazón.
Sophia: ¡Ni lo digas! Estoy segura de que Duff... va a ayudarte.
Ella no dijo nada. Se dio la vuelta y se alejo de mí. Espero y realmente Duff la ayude, porque no soporto verla en esa situación.
Daphne: Sal de aquí, Sophia. –dijo sin mirarme-. ¡Vete!
Sophia: ¿Qué dices?
En un abrir y cerrar de ojos ella estaba cerca de mí. Me tiro fuertemente hacia la pared y me golpee muy fuerte la cabeza. Coloque mi mano en esta y vi que salía sangre. Fue un momento de tensión. Daphne, me miraba y respiraba rápidamente. De pronto se acerco a mí y me tomo fuertemente de la mano.
Duff: Daphne, suéltala. –dijo desde la puerta.
Daphne: ¡Demonios, Duff!
Izzy: Daphne, es tu amiga. No quieres hacerle daño.
Daphne: No sé lo que quiero.
Izzy: Sólo suéltala.
Daphne, no dijo nada. Me miro fijamente a los ojos y de pronto me soltó.
Camine hacia Izzy, quien me tomo en sus brazos. Duff, tomo a Daphne e Izzy me hizo salir.
Izzy: ¿Estás bien?
Sophia: Sí. –Toque mi cabeza-. Solo fue un golpe.
Izzy: Sigues sangrando. Deberíamos ir a un medico.
Tomo mi mano y bajamos las escaleras. Tomo las llaves de su auto y salimos de casa.
***
Doctor: Por suerte no fue un golpe grave. –Dijo mientras terminaba revisarme-. Y eso es bueno.
Sophia: ¿Ya puedo irme?
Doctor: Sí. –sonrió.
Sophia: Gracias.
Al salir del consultorio vi a Izzy. Se levanto rápidamente al verme salir y camino hacia mí. Me abrazo fuertemente y no pude evitar llorar. Me dolía esto que le estaba sucediendo a Daphne. Ella era mi amiga.
Izzy: Todo estará bien. –Dio un beso en mi frente-. Saldremos adelante.
Sophia: ¿Qué va a pasar si no podemos ayudarla?
Izzy: Buscaremos la manera de hacerlo.
Daphne necesitaba un poco de sangre para alimentarse. Sé que Duff, no la dejara salir para que mate a alguien, pero yo estaba en un hospital. Quizás Izzy y yo pudiéramos robar algunas bolsas de sangre.
* * *
Daphne: ¡¿Ves lo que acabo de hacer?!, casi mato a mi mejor amiga. –Me tire en el suelo.
Duff: No lo hiciste, Daphne. –él se inclino frente a mí-. No es tu culpa nada de esto.
Daphne: No los quiero cerca. No quiero hacerles daño. –Comencé a llorar. Me sentía tan culpable de todo-. Enciérrame en algún lugar.
Duff: Se que es difícil, pero aprenderás a controlarte.
Tome a Duff, del cuello de su camisa y lo acerque a mí. Su sangre, eso era lo que quería en este momento. Él me miraba y por su mirada, él estaba seguro de que no iba a hacerle daño. Se acerco lentamente hacia mí y unió nuestros labios. Me aleje rápidamente porque su sangre sólo me daba más hambre.
Daphne: Soy un peligro para ti. –murmure.
La puerta se abrió y por ella entraron Sophia e Izzy. Me levante rápidamente y observe como Sophia, retrocedió un poco.
Daphne: Lo lamento. –dije verdaderamente arrepentida.
Sophia: Lo sé, Daphne. –sonrió.
Izzy: Te trajimos algo. –sonrió-. Necesitas alimentarte. Tenemos una forma de que no lastimes a nadie.
Sophia, salio un momento y luego entro con su bolso. Se la dio a Izzy y este camino hacia mí. Del bolso, saco una bolsa de sangre. Esas que le sacan a las personas y las tienen para donarlas. Me la entrego y al tenerla en mis manos, rápidamente las abrí y sólo fue cuestión de segundos para acostumbrarme al sabor.
Duff: ¿De donde la sacaron?
Sophia: Las robamos. –Yo los mire-. Del hospital. Es la mejor manera, Daphne.
Daphne: Estoy de acuerdo. –sonreí.
Izzy: Creo que trajimos los suficientes. Al menos para tres días.
Me senté en la cama y seguí con lo que estaba haciendo. Alimentarme.
* * *
Izzy: ¿Quieres dormir un poco? –Me abrazo por la cintura-. ¿Sigue doliéndote la cabeza?
Sophia: Quisiera dormir, pero estoy en la misma casa que mi amiga chupasangre. –reí-. ¿Me cuidarías?
Izzy: Claro que lo haré.
Me acosté en la cama y a mi lado se acostó él. Coloque mi cabeza en su pecho y él pasaba su mano por mi espalda.
Sophia: Creo que debes ir y hablar con mis padres. Es decir, que ellos sepan que estamos juntos.
Izzy: Sí, también lo pensé. –suspire-. Sólo espero que me acepten. Es decir, creen que te he hecho mucho daño.
Sophia: Tú no me has hecho daño. –lo mire-. Me has hecho muy feliz.
Antes de que pudiéramos decir algo mas escuchamos un ruido proveniente de a fuera. Pensé que era Daphne, pero luego escuche gritos. Nos levantamos rápidamente de la cama y salimos. En el pasillo vimos a Katherine, Marie y Duff.
Marie: No podemos tenerla aquí. ¡Debemos encerrarla, Duff!
Duff: ¡No voy a encerrarla! ¡Es mi novia!
Marie: ¡Es algo distinto a nosotros, Duff!
Izzy: ¿Qué sucede?
Katherine: Es Daphne. No puede quedarse con nosotros.
Izzy: ¿Por qué?
Marie: Se ha convertido en un peligro. –Me miro a mí-. Últimamente hay muchas personas que nos ponen en peligro.
Izzy: Esta es mi casa. Por lo tanto, Daphne se queda.
¡En sus caras, perras!
Marie: Izzy, es un riego... -él la interrumpió.
Izzy: Es mi amiga. Daphne, se queda. –Me tomo de la mano-. Nosotros nos encargaremos de ella.
Katherine y Marie se fueron, dejándonos solos. Duff, le agradeció a Izzy.
Izzy: No permitiremos que le pase algo. –sonrió.
Sophia: Duff, yo debo irme. Hay mas bolsa de sangre abajo. –El asintió-. Cuídala, por favor.
Duff: Lo haré.
Izzy: Vamos. Te llevo, amor.
Bajamos las escaleras y salimos de casa.