Siempre fui o soy de las personas más soñadoras del mundo, muchas veces imaginé que algo pasaría y que no era malo, sino, de encontrar al hombre de mi vida; aquel, que me apoyará en mis sueños y yo apoyarle. Aquel que con solo una mirada o un mensaje; sonría.
Toda mi vida, mis padres me habían inculcado el respeto, el amor, los valores y muchísimas cosas más, pero lo que me repetían, era que: un amor, no te resta, un amor de verdad le suma a relación. Debes encontrar a alguien que en verdad sienta lo mismo que tú, una persona que no le dé pena gritar a los cuatro vientos que te ama.
Y ahí estaba, mi amado Julian Edelman; a quien conocí años atrás y ciertamente, no me lo podía creer, cuando mostro interés hacía mí. Simplemente, era un sueño del que jamás quisiera despertar, Julián no solo es mi amado novio, es quién me hace sonreír, reír y quién me apoya en todos mis sueños y proyectos. Es mi mejor amigo, mi compañero en el crimen y con quien disfruto cada momento de mi vida.
Juls, ha estado para mí, como yo para él. A decir verdad, aunque no existen las personas perfectas, Julián, lo es para mí. Su locura; hace que mis días no sean una monotonía. Su manera de ver la vida, su manera en la que me mira y sonríe; dicho por mis amigas y familia.
Desde que llegó a mi vida todo dio un giro significativo, mi grupo de amigos creció y ciertamente la locura también. Aunque estén algo locos, les sigo queriendo.
—A ver cuenta—escucho la voz de Angie desde el altavoz, mientras me termino de acomodar mi cabello.
—No seas chismosa An—Le regaña su hermana.
Iba a responder, cuando veo a Juls con su traje. Que lo hace ver cada vez más ardiente—¿Lista?
Asiento con mi cabeza y cuelgo la llamada, pidiendo disculpas por colgarles.
—¿Me veo bien?
Me acerco y acomodo su camisa—eres el hombre más ardiente que conocí.
—Y el único—Me mira, haciendo que me ría.
Me toma de la mano y salimos de la habitación—¿Y si nos quedamos? Digo, a los chicos no les importará que no estemos.
—Les prometimos ir.
—Es solo, que...quiero estar contigo, solos.
Sonríe y negué con mi cabeza—les prometimos...
—Lo sé, pero quiero pasarla solo contigo. Poder abrazarte—realiza las acciones al mismo tiempo que las narra.—Besarte—deja varios besos sobre mi mejilla.
—Bien, me convenciste. Voy por helado y tu pide algo para comer, muero de hambre.
La sonrisa de Julián crece.
—¿Te dije que te amo?
Solo me reí y negué con mi cabeza. —Eres de lo peor.
Me sonríe y eleve sus hombros, como si de un niño se tratase—me amas, lo sé—y sin más, se marcha.
Me retiro mis zapatos y entro a la cocina para ir por el helado. Al regresar encuentro a Juls sentado en el sofá buscando una película para ver—Hola guapo—me siento a su lado y coloco el heleado sobre la mesa de centro.
—La pizza viene en quince minutos—apoyo mi cabeza sobre su pecho y dejo mis piernas sobre el sofá.
—Creo que será el mejor año nuevo del mundo.
—¿Por qué lo dices?
—Porque estás aquí conmigo hermosa y eso es lo que importa.
Mientras comíamos y veíamos la película de navidad, la puerta suena—debe ser la pizza—digo.
—Voy—me acomodo, para que se pueda levantar e ir por la pizza.
Pero, al abrir la puerta—chicos—escucho su voz nerviosa.
Me levanto del sofá—a ver, quién fue el de la idea de dejarnos plantados—dice Angie, enojada.
—Me dolía un poco la...pierna.
—Buena excusa niño lindo—dice Fer.
Al acercarme—Se supone que sería el mejor fin de año, pero ambos decidieron tener sexo antes...
—¡Angie! —Le regaña Jess—intente detenerlos, pero sabes cómo son—dice apenada.
—Seguimos aquí—dice Jack Jack, golpeando el brazo de Jess.
—¡Auch! —Se queja Jess.
—Adelante chicos—dice Juls.
Todos ingresan y dejan sobre la mesa de comedor la comida para la cena de fin de año.
—Después de todo no será un fin de año tranquilo—me susurra Juls, haciendo que me ría.
—Desde que los conocimos, nada es tranquilo—le digo sonriendo.
Pasa su brazo sobre mis hombros—lo bueno es que estamos vestidos—brome Juls.
Golpeo ligeramente el pecho de mi chico—cierra la boca.
—¿Se quedarán ahí todo el tiempo o vendrán? —Nos invita Gigi.
—Ellos querían tener su noche divertida y nos los dejamos—se queja Tania.
—Pero ya estamos aquí—dice Maps.
—¡Que comience la fiesta! —Dice Andy.
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Holaaaa, esté es un regalo que le debía a la hermosa MARI ♥
Lamento la demora y si ven algún error no duden en decirme.
Espero que les guste, un abrazo y feliz año.
Se despide de ustedes con mucho cariño, JPPERMARCH