Pov Narrador.
1 semana más tarde.
Hermosas luces y decoraciones navideñas resaltaban en cada una de las calles, avenidas, negocios y hogares de todo Riverdale, la navidad estaba a solo un par de semanas y eso solamente significa una sola cosa… La competencia de decoración navideña había dado inicio, aquella era una festividad que todos los habitantes amaban, en especial la familia Lodge-Cooper y la gran familia Topaz-Davis, a pesar de ser mejores amigas para nadie era un secreto que para estas festividades Verónica y Toni competían cada año por llevarse el gran premio.
La familia Topaz-Davis cuenta con una repisa en una de las paredes de la sala principal en dónde acumulaban un total de 3 trofeos de primer lugar, mientras que La familia Lodge-Cooper acumulaban un total de 2 trofeos…
Sin embargo no todo significaba alegría y celebración en Riverdale, Olivia Williams llevaba alrededor de 3 días durmiendo en casa de Britta ya que Christinne había tenido una emergencia que la había obligado a salir de la ciudad dejando así a su única hija en casa de las esposas Topaz-Davis.
Sophia había notado un poco triste y distraída a Olivia, sin embargo no quería incomodar a la menor por lo que había decidido no preguntar nada, comentando esto solamente con la morena.
-Cariño, ¿te encuentras bien?- dijo Sophia mientras observaba a la menor por el espejo de su tocador-
-Si señora Sophia, solo estoy un poco cansada- le respondió apoyando su cabeza sobre el hombro de Britta quién suspiró buscando la mirada de su madre-
-¿Olivia, quieres llevar ondas en tú cabello?- preguntó la ojiazul tomando un mechón del cabello de su hija- Si deseas puedo hacértelas-
-¿Lo haría?- cuestionó la menor con una sonrisa tímida a lo que Sophia asintió, ambas niñas se estaban preparando para asistir a la fiesta de cumpleaños de una de sus compañeras del colegio, la ojiazul estaba por hablar nuevamente cuando Toni entró a la habitación disculpándose por interrumpir.
-Mi amor, enserio lamento mucho interrumpir en su conversación- dijo observando a su esposa- pero Olivia afuera está Heather y dice que quiere hablar contigo- la menor negó soltando así un suspiro, se disculpó con las tres y salió así de la habitación siendo seguida por Toni, llegaron juntas hasta la sala principal en dónde Anne se encontraba con el resto de los niños- Si quieres ayuda… solo grita y saldré- habló Toni haciendo que Olivia sonriera y finalmente saliera hasta donde su madre se encontraba-
Pov Heather.
-¡Vaya señorita, hasta que por fin apareces!- dije una vez Olivia salió de la casa-
-A mi también me da mucho gusto verte, Madre- respondió cruzándose de brazos, bufé ante su actitud-
-Deja las tonterías de lado, Olivia… quiero que llames a la tonta de Christinne y le digas que será mejor que me responda su maldito teléfono- hablé molesta-
-No le digas tonta y ella no va a responderte, está molesta y tú eres la única culpable, Mamá- dijo haciendo que mi enojo creciera- Si ella no responde es porque no quiere saber nada de ti-
-Olivia… será mejor que le digas lo que te he ordenado o ella lo lamentará- amenacé observando el miedo invadir sus ojos- dile a Christinne que tiene prohibido seguir gastando dinero en su maldita familia… Recuérdale que si ella continúa haciéndolo, tendrá que pagarlo a un costo muy alto, ¿Has entendido lo que le dirás?- pregunté tomándola del brazo haciéndonos quedar con nuestros rostros a un par de centímetros- ¿Entendiste Olivia?-
-Si… entendí, Mamá- susurró con un hilo de voz, solté su brazo y comencé a caminar en dirección hacia mi auto pero casi al mismo segundo me detuve y de nuevo me giré para observarla mientras una lágrima ya bajaba por su mejilla-
-Eres tan débil… te pareces tanto a Christinne que puedo jurar ambas son una maldición para mi- dije aún más molesta- Ni una palabra de esto a Toni y Sophia, porque te aseguro vas a arrepentirte- advertí de nuevo observándola asentir, finalmente subí a mi auto y salí de aquella propiedad escuchando la risa de mi acompañante dentro de mi auto-
-No te rías estúpida-hablé-
-No puedo creer que esa niña sea tú hija, es tan débil… Aún no entiendo ¿cómo pudiste casarte con la estúpida de Christinne?- preguntó aún riendo-
- Fue la opción más rápida que encontré… Además ni su propia madre la amaba, la vendió por un par de miles de dólares- negué recordando que obtener una esposa había sido el trato más fácil de mi vida…-
~ FLASHBACK ~
-Mamá, ya estamos en casa… Mi maravillosa prometida está aquí para conocerte- dijo Christinne mientras ingresábamos a lo que ella llamaba hogar, sentí mi estómago revolverse después de haber caminado por aquel barrio tan sucio, lleno de personas perdidas en la miseria-
-Así que usted es la mujer que quiere robarme a mi hija- dijo de pronto la voz de una mujer mayor que dejaba muy en claro su adicción a la bebida- Martha, un gusto- saludó extendiendo su mano la cuál tomé con asco-
-Heather Williams… también es un gusto conocerla-dije- me gustaría hablar con usted, sobre su hija y nuestro compromiso- la mujer río mientras movía su cabeza en modo de burla-
-Sígame vamos al jardín, mientras tú sírvenos unos tragos- dijo Martha hacia Christinne, caminamos por un estrecho pasillo hasta llegar a lo que ella llamaban jardín- Lamento que este palacio no sea de su agrado, pero imagino que al enamorarse de una mujer como mi hija ya se imaginaba como sería nuestro hogar-
-¿Enamorarme de su hija?- le pregunté mientras sonreía- a ver Martha no se haga la tonta conmigo… Usted y yo sabemos muy bien la razón por la cuál estoy aquí- dije tocando el tema de interés para ambas-
-Directo al grano … eso me agrada- dijo sacando un cigarrillo barato del bolsillo de su abrigo y le prendió fuego para comenzar a fumar- Christinne es la única que trae dinero a casa, también es mi única hija así qué no te la daré tan fácil- estaba a punto de responder cuando ella apareció con lo que su madre le había pedido, dejó la charola con ambas bebidas en la pequeña mesita y se acercó a mí-
-Bebé, estoy hablando con tu madre, ¿nos podrías dejar a solas?- pedí sintiendo como ella se aferraba a mi cintura mientras negaba- Christinne, por favor…-
-Hija, por favor obedece a tu prometida- intervino Martha observándola- Además la señora Esther vino a buscarte hace una hora, dijo que necesitaba hablar contigo- Christinne suspiró, dejó un beso sobre mis labios el cuál correspondí y finalmente se marchó dejándonos solas- ¿Y bien? ¿Cuánto dinero trae ella después de cada noche?-
-$400- respondió- y ese dinero es solamente para mí, así que debes de hacerme una mejor oferta para llevártela-
-Un millón…- solté haciendo que ella comenzara a ahogarse con el humo del cigarrillo mientras una sonrisa aparecía en su rostro-
-De haberlo dicho antes...-
-Ah, pero escucha muy bien lo que te diré… te daré un millón de dólares a cambio de Christinne, pero vas a olvidarte de ella por completo, no la buscarás, no llamarás y mucho menos le pedirás dinero, ella dejará de ser tú hija para convertirse en mi mujer, en mi esposa … haré que una vulgar mujerzuela se convierta en toda una mujer de clase, así que ¿qué me dices? ¿Aceptas?- pregunté-
-En este mismo momento empacare sus cosas- volvió a sonreír y corrió había el interior de la casa mientras yo soltaba un suspiro, finalmente había conseguido a la mujer correcta para casarme y conseguir mi herencia…-
~FIN DEL FLASHBACK~
-¿Heather? Tierra llamando a Heather- repitió ella moviendo su mano frente a mí-
-Lo siento, me perdí en mis pensamientos… ¿Qué decías?-
-Dije que me alegra mucho que al final esa niña no lleve nuestra sangre porque sería todo un deshonor para nuestra familia- habló a lo que yo asentí- oye y ¿haz pasado estas últimas noches con Cheryl?-
-Cada maldita noche de esta última semana ha sido totalmente maravillosa- sonreí al recordar nuestros encuentros- es por ese motivo que Christinne se molestó, ella sospecha que sostengo una aventura con alguien y hace unos días me confrontó y claro, no lo negué-
-Toda una Williams… si tía Teresa estuviera viva sería la mujer más orgullosa de ti- desvíe mi mirada hacia ella y ambas sonreímos- Amo ser tú prima-
- Y yo amo que ser la tuya- contesté mientras continuaba conduciendo hasta llegar a nuestro destino-
Pov Cheryl.
-¿Qué haces aquí?- fue lo primero que escuché salir de la boca de mi madre una vez se encontraba frente a mí-
-Madre, a mi también me alegra mucho verte- contesté, la observé cruzarse de brazos y yo solté un suspiro mientras observaba los espacios vacíos en los lugares dónde recordaba estaban mis fotografías en la sala de su casa-
-No sigas husmeando mis paredes, no encontrarás ni una sola foto tuya en esta casa-contestó- Vuelvo a repetirlo ¿Qué haces aquí?-
-Bueno yo… ¿Sabes de alguna casa que esté a la venta?- pregunté- Yo necesito comprar una, hace unos días Polly me sacó de su hotel y al parecer me veto del resto de ellos, he estado pasando estos días en casa de una amiga-
-Esa amiga es Heather y no, no has estado pasando los días en su casa… Haz estado pasando los días en su 2da casa a dónde lleva a todas sus mujerzuelas- dijo con desprecio, sentí un nudo formarse en mi garganta- porque su casa es en dónde están su esposa y su hija-
-Mamá, por favor… no estoy aquí para tus reproches ni nada de esas cosas- dije firme- ¿Sabes o no sobre alguna casa en venta?-
-Talvez, pero no creo que alguien quiera venderte una casa. Sophia es una mujer muy querida y respetada aquí en Riverdale, es una mujer que hace mucho por todas las personas… Incluso hace muchísimas cosas por los niños sin familia- dijo y comenzó a acercarse a mí- y así como hace cosas por los niños sin familia, de la misma manera hizo mucho cuando… cuando nos enteramos de mis nietos-
-¿Tus… tus nietos?- pregunté en un susurro bajo su atenta mirada-
-Así es… Sophia se encargó de los hijos que tú no quisiste- soltó mientras sus ojos se cristalizaban-
-No sé de qué hablas, Mamá- será mejor irme- dije, tomé mi bolso dispuesta a caminar hacia la salida pero su voz me detuvo-
-Hablo de los bebés que tú decidiste abortar… Y sé que los recuerdas- mi mirada se cristalizó mientras un nuevo nudo se formaba en mi pecho- Siempre me pregunté ¿Cómo pudiste hacerlo? ¿Cómo podías acostarte junto a Toni después de haber hecho eso? ¿Cómo podías decirle te amo después de matar sus más grandes deseos?-
-Eran sus deseos… no los míos- le respondí con un hilo de voz-
-Tienes razón, pero ahora llega una nueva pregunta… ¿Qué creíste que obtendrás luego de tener sexo y no utilizar protección? ¿Creíste qué sólo sería placer, orgasmos y más placer?... Te desconocí en ese momento, me sentí decepcionada de ti, pero luego comprendí que lo único que tú amabas en ese instante era la boutique pero aún eso lo dejaste tirado, dejaste a todo tú personal en la calle, las mujeres que día a día te ayudaron a crecer, dejaste a las mujeres que creyeron en ti… Poco te importó la preocupación que llegaría a sentir luego que desapareciste, traté de buscarte por mucho tiempo junto con Anne pero después de un tiempo comprendí que desaparecer de nuestras vidas era lo que tú querías y deseabas… Y te concedí el deseo, porque así como me deshice de todos tus retratos, así también todos te arrancamos de nuestras vidas… Comprende que Toni ya no es tuya, comprende que ella ya es muy feliz con alguien más... Ahora Cheryl, por favor quiero que te vayas de mi casa, por el momento no eres bienvenida- La observé sin poder creer en sus palabras, mi propia madre me estaba sacando de la que por años fue también mi hogar, la mujer que tanto me amaba y me había dado la vida era la misma que ahora me comenzaba a destruir lentamente con sus palabras…
Pov Toni.
-Y aquí tienes tú copa, amor- dije entregándole la copa con vino a Sophia-
-Gracias mi amor- me respondió, sonrió, unimos nuestros labios en un beso y tomé asiento junto a ella. Eran un poco más de las 10:30pm y nuestras hijas e hijo más pequeños ya dormían en sus habitaciones mientras que Britta y Olivia aún no llegaban a casa de la fiesta de su compañera, le di un sorbo a mi copa y la coloqué sobre la mesita de cristal que se encontraba en el balcón de nuestra habitación- Amo las noches en el balcón- dije mientras Sophia dejaba su copa sobre la mesita y se acurrucaba junto a mi-
-Hace varios meses no teníamos una cita aquí- habló tomando la pequeña manta caliente para cubrirnos a ambas, con mis uñas comencé a dejar leves caricias a lo largo de su brazo mientras un cálido y cómodo silencio inundaba el ambiente… La noche estaba estrellada y la luna en su mejor resplandor, la cálida brisa hacia bailar las hojas en los árboles de nuestro gran jardín, el canto de los grillos acompañaba la noche, mientras que en mi mente miles de escenarios se recreaban una y otra vez haciéndome imaginar toda nuestra vida juntas, de pronto una cálida sensación abrazo mi corazón… fue la misma sensación de amor, de compañía, de seguridad que lleno mi vida el día en que decidí amar a Sophia con cada parte de mi cuerpo y de mi alma. Abracé su cuerpo para unirlo más al mío, dejé un beso sobre su hermoso cabello y cerré mis ojos dejando que las lágrimas que en estos se habían acumulado escaparan- Te amo… te amo… te amo- susurré aún con mis ojos cerrados, la sentí removerse entre mis brazos y segundos después sus manos se posaron sobre mis mejillas-
-Amor… ¿Porqué lloras? ¿Sucede algo?- preguntó, abrí mis ojos para encontrarme con los de ella, los cuáles reflejaban preocupación-
-No sucede nada… sólo estoy muy feliz- respondí con sinceridad- Te amo, mi hermosa Sophia- sus ojos se achinaron gracias a su sonrisa-
-Te amo mucho más, amor… Eres lo mejor que pudo llegar a mi visa junto con nuestros hijos- unimos nuestros labios dando así inicio a un beso cargado de amor, al terminar nuestro beso ambas nos sonreímos-
-Sophia… ¿Quieres ser mi novia?- le pregunté recibiendo una mirada llena de confusión-
-Amor, pero si ya soy tú esposa- me respondió de modo burlón-
-Lo sé, pero eso no es ningún impedimento para volver a reconquistarte - le contesté- Así que, ¿Qué dices… aceptas ser mi novia de nuevo?-
-En ese caso… sí, acepto ser tú novia de nuevo- respondió con una amplia sonrisa, tomé sus mejillas y uní nuestros labios una vez más pero está vez en un beso lleno de amor y deseo. Llevé mis manos hasta su cintura haciéndola sentarse a horcajadas sobre mi, mientras el calor de nuestros cuerpos comenzaba a aumentar- Amor, no… Britta y Olivia… llegarán pronto- me susurró con su respiración un poco agitada-
-Bueno, en ese caso tendremos ser muy rápidas, mi amor- le respondí para después colocarme de pie y tomarla entre mis brazos hasta llegar a nuestra cama…