Jungkook vio al humano salir por una puerta, había extendido su pañuelo para ayudar a limpiar al tercer amante; pero este salió corriendo y llorando por alguna razón, contempló a la sirvienta y suspiró un tanto aturdido por la situación.
—¡Tú, niña!—gritó la jefa de las sirvientas que se acercó a la joven que había botado las copas de vidrio, al contemplar al Duque, se disculpó con sumo respeto, presionando la cabeza de la joven y haciendo que hiciera una disculpa de 90 grado—¡Lo siento mucho, esta sirvienta es nueva y no sabe como hacer su trabajo! ¡Estás expulsada, vete!—gritó aquella humana.
—¿Eh? ¡Por favor señora, no me haga esto, tengo una familia que mantener y-...—la protagonista se hincó casi llorando—¡Señora!
—¿Sabes a quién has ofendido?
—Da igual—comentó Jungkook metiendo su guante en el bolsillo de su saco—. No pasó a mayores—el vampiro contempló a los demás hombres con los que había estado hablando—. Caballeros, me retiro.
El Duque se dirigió a la puerta donde había visto ingresar a Min Yoongi. Al entrar, pudo ver al mayor, que se encontraba hincado y se abrazaba a si mismo, llorando desolado en aquel enorme pasillo. Desvió la mirada y se quitó su saco hasta tirarlo sobre el humano, cubriendo al chico por completo, Yoongi soltó un quejido cuando uno de los botones de aquel pesado saco le golpeó, movió un poco aquella prenda, contemplando con sus ojos negros al vampiro, quien tenía su manos metidas en los bolsillos de su pantalón.
—Límpiate—le extendió el pañuelo sin verlo.
—Lo siento, por arruinarlo todo—musitó el omega que se levantó con lentitud y cubrió su ropa sucia para luego limpiar su rostro y cabello con aquel pañuelo.
—No es la gran cosa, tercer amante.
—¡Tengo un nombre, es Min Yoongi no tercer amante!—reclamó algo molesto.
—Anteriormente ni siquiera te atreverías a verme y ahora tienes el descaro de alzarme la voz y renegar—Jungkook suspiró—, de todos modos, me diste una excusa para irnos de este aburrido lugar, camina—le ordenó haciendo un gesto con rapidez en dirección de la puerta.
Mijoo al ver a su amo, se camufló en la pared, si el vampiro se daba cuenta que estaba allí, su cabeza podía ir rodando.
Yoongi estaba a punto de abrir la puerta del salón, en eso unos brazos lo tomaron y lo cargaron, el omega se sobresaltó ante aquella acción, Jungkook cubrió bien al chico e ingresó, se hizo espacio entre las personas que miradaban consternados dado que el Duque no era un tipo que se interesaba en otras personas, Yoongi al sentir algunas miradas, se hizo el desmayado de forma dramática.
"¡Preferible esto que pasar vergüenza, porque entre ser y no ser, yo soy". En eso vio a la protagonista que recogía los pedazos de vidrios y limpiaba el suelo, el omega sonrió ladino y le sacó la lengua, acción que la joven vio y le hizo fruncir el ceño. Yoongi se volvió a ser el desmayado, gustoso de ser cargado por aquel hombre.
Incluso la tristeza se le había ido.
Al llegar al carruaje, Jungkook lo bajó con cuidado, el omega subió al transporte y se sentó con un poco de sueño, iba a ser 3 horas de viaje hasta regresar al castillo, dado que ya era muy noche, el sueño empezaba hacer de las suyas, por lo que se acostó a lo largo del asiento del carruaje. Jeon Jungkook contempló aquel humano por varios segundos, alzó el rostro mirando con cierta curiosidad a ese ser, sus ojos se volvieron de un color rojo intenso y sus incisivos picaron, deseando afilarse y morder aquel blando cuello que quedó al descubierto.
Jeon Jungkook dio un suave golpe a la puerta del carruaje, tratando de mantenerse cuerdo, hace mucho que no probaba la sangre humana, debido a que no había tenido encuentros con la segunda amante y la primera fue asesinada y fue comida para las vigilantes, sabía que el joven Min todavía no estaba en buen estado de salud y debía tener mucho cuidado.
Iba ordenar a Jennie que alimentaran más a ese chico, estaba demasiado delgado y no era muy apetitoso.
Al recordar el frágil y pálido cuerpo desnudo en aquella noche que lo tomó, trató de no hacerle mayor daño, no fue su intención que el humano quedara postrado una semana en cama sin poder moverse, aunque por dentro se sintió un poco orgulloso. Cubrió su boca pensativo y frunció el ceño, recordó en ese momento a la sirvienta que dejó caer las copas y aquellos ojos morados, pero lo primero que se le vino a la mente, fue porque Min Yoongi se había abalanzado frente a él.
Pudo haber sido peligroso si caía y unos de esos vidrios lo hubiese lastimado.
¿Qué demonios, por qué se preocupaba por ese chico?
Yoongi se removió en la cama y sonrió, hasta que sus ojos se abrieron y se sentó de un golpe al darse cuenta que se encontraba en su cuarto, incluso estaba bañado y vestido: "¿A qué hora había llegado allí?" no recordaba mucho, después de haberse quedado dormido. La puerta del cuarto se abrió, ingresando una fresca Sejeong, que se acercó con su amo con un poco de agua y un pañuelo, lista para lavar el bello rostro de su amo.
—Buenos días mi señor ¿Cómo durmió?
—¿Cómo llegue aquí? no recuerdo nada, ni siquiera me di cuenta ¡No puedo creer lo profundo que es mi sueño!
—No fue un problema traerlo hasta acá, me alegro que tenga un sueño profundo, no queríamos despertarlo—ella se acercó y como si Yoongi fuera un pequeño, empezó a limpiar su rostro con sumo cuidado—. Escuché que no le fue bien en la fiesta, no se preocupe mi señor, habrán más en las que puede ir.
—Ahora todos hablarán cosas de mí, la sociedad de esta época es muy...juzgona—Yoongi frunció el ceño: "¿Pero desde cuándo me interesa? ¡Que se jodan todo, soy libre como una mariposa"—.Aunque me duele más porque avergoncé al Duque, yo era su acompañante.
Sejeong contempló a su amo sin decir nada, para seguir limpiando el rostro del chico, recordando la noche anterior.
<<Jeon Jungkook ingresó a la mansión con Min Yoongi en sus brazos, el cual estaba profundamente dormido, Sejeong que había estado caminando de lado a lado, esperando a su señor, sonrió espléndida y extendió los brazos para que el vampiro le entregara al chico; pero este le miró de pie a cabeza.
—Ve a descansar, me encargaré yo—ordenó con su rostro frio, la humana se estremeció—. Y porfavor, no le digas sobre esto.
—Sí...señor—afirmó Sejeong, viendo como el Duque subía las escaleras con sumo cuidado de no despertar al humano entre sus brazos.
Jeon Jungkook ingresó al cuarto, depositó sobre la cama al durmiente Yoongi y buscó entre el ropero la pijama del chico, eligiendo una bata cómoda, en esos días hacía calor en la noche, era verano, por lo que algo delgado y fresco le iría bien al chico, depositó aquella pijama sobre la cama y empezó a desnudar con cuidado a Min Yoongi, quien parecía un muñeco al no moverse.
—Si tienes un sueño así, es preocupante—musitó el vampiro hasta terminar por desnudarlo y lo alzó de nuevo entre sus brazos.
Se dirigió al cuarto de baño y llenó la bañera con agua tibia, no tan caliente para no lastimar el cuerpo del chico, cuando ya estuvo lista, lo depositó y empezó a bañarlo, pasando el jabón por el cuerpo. Se quedó viendo el rostro ajeno y puyó la blanda mejilla de su amante, su ceño se frunció, debía terminar de bañarlo y vestirlo.
Fue así cuando terminó de bañarlo, lo secó y lo vistió, en todo ese momento, Min Yoongi no despertó y en verdad que le preocupó al vampiro el profundo sueño, si la mansión era atacada, ese chico no despertaría y podía estar en peligro y ser secuestrado en el proceso. Suspiró y silbó en dirección de la ventana. Una Mijoo se asomó e ingresó con cuidado, se hincó con respetó frente a su amo.
—Debes mantener vigilado a este humano, es indefenso—ordenó.
Mijoo recordó como Min Yoongi había desmayado a la sirvienta en medio del pasillo: "¡Indefenso su culo!" pero no dijo nada y solo sonrió con amabilidad.
—Si amo, cuidaré de él como lo hago con mi propia vida.
—Confio en ti y no digas nada respecto a esta noche.
Dichas aquellas palabras, el Duque se retiró en silencio, Mijoo empezó a escalar las paredes y se puso sobre el techo, quedando enfrente de la cama y se cubrió con sus grandes alas como lo hacían los murciélagos, para proteger al chico.>>
Sejeong terminó de lavar el rostro de su amo, se dirigió a tomar la ropa del chico para ese dia, eligiendo una camisa blanca con cuello de moño, un corsé negro y un pantalón del mismo color, era época de verano y era mejor que su amo anduviera cómodo, la camisa era de tela de gasa, pero no habría problema ya que el corsé de hombre, cubrirá sus pechos y no quedaría su pecho expuesto. Sería un problema que alguien se enamorara de su señor y no fuera el Duque.
Yoongi soltó un largo bostezo mientras esperaba su vestimenta, sus caderas dolían un poco y sabía que era por el sexo que tuvo en el carruaje, no entendía como ese tipo salió fresco como una lechuga y él como si miles de fantasmas lo hubieran consumido. Además, ese no era el principal problema, si no que se había encontrado con la protagonista principal y no pudo evitarlo.
Jeon Jungkook se encontraba en el comedor, no había tocado su comida debido a que esperaba a Min Yoongi, usualmente el comía primero pero por alguna razón, se sentía demasiado curioso por ese humano. Pasado unos largos minutos, el mayordomo ingresó, avisando la entrada de aquel chico, así que disimulado, tomó su copa de vidrio que tenía sangre de ternera, la cual era más gustosa y dio un sorbo. Yoongi ingresó y saludó con respeto al Duque, se sentó hasta el otro lado de la mesa un tanto tenso.
—¿Acaso hablaré con la pared?—preguntó molesto al ver demasiado lejos a ese humano.
—Esque estoy avergonzado por mi conducta de ayer—musitó desviando la mirada.
—Ven—ordenó haciendo un gesto con su mano.
—Si, Duque—"¡Voy papi! ¡Controlate Min Yoongi, no es el momento". Yoongi se levantó y se dirigió a sentarse a la silla de la par, ahora que recordaba, no veía a la otra amante del vampiro.
—Si buscas a la otra chica, está de vacaciones, visitando a sus padres—Jungkook tomó el periódico que estaba a su izquierda y lo empezó a leer, se sorprendió al enterarse que 20 doncellas habían aparecido inconscientes en un cuarto, siendo el lugar donde fueron a la fiesta—¿Qué clase de monstruo haría eso?—inquirió dudoso sin salir de su sorpresa.
Yoongi contempló al Duque, comiendo con suma normalidad sin saber que era lo que leía aquel hombre. Degustó la comida, es como si comiera en un hotel de cinco estrellas, había un buen cocinero en esa casa, un día iria a conocerlo y felicitarlo por sus gloriosas manos. La ama de llaves ingresó y saludó con respeto a su amo y al joven Min, en su manos tenía una carta, al acercarse al Sangre pura, la extendió.
—Mi señor, llegó esta carta, es una invitación a un té—espetó Jennie con una noble sonrisa.
—Yo no voy a reuniones de té.
—Es para el joven Min—recalcó aquella vampira.
—¿¡Para mí?!—exclamó con suma sorpresa Yoongi que limpió rápido su boca y tomó aquella carta con sorpresa—¿Sería este mi primer té? Oh...¿Quién es la condesa Kim Jisoo?—preguntó dudoso, no recordaba a un personaje así en la novela principal.
—Ah, es la hermana de un amigo mio, de conde Kim Seokjin...algún día te los presentaré. Viendo que sería tu primer té, debes llevar un regalo digno para ella, es una chica muy bonita, aunque le gusta los lujos.
—No sé que debería llevar—dudó el omega pensativo—, siempre he tenido dudas de que tipo de regalos se dan en esta situación.
—Jennie, encárgate de conseguir tú el regalo que el joven Min llevará a la fiesta de té.
Yoongi siguió leyendo la carta con suma emoción, sabía que las fiestas de té iban personas de alta sociedad y solían charlar entre ellos, aunque claro, también se echaban los chismes y a él, le gustaba escuchar sobre la vida ajenas de los demás. No porque le gustara hablar de ellos, solo era para enterarse.
—Joven, si no quiere ir, puede negarse—comentó la ama de llaves al ver el rostro serio de aquel humano.
—¡Iré!—exclamó con una gran sonrisa Yoongi, guardando la carta—. Debo dar una buena impresión, tal vez haga una amiga.
Jungkook lo analizó por unos segundos y después volvió su vista al periódico para seguir en lo suyo. Yoongi siguió comiendo, la ama de llaves se retiró para ir en búsqueda del regalo para la fiesta de té que se haría dentro de 3 días. Le preocupaba un poco si aquel humano encajaría en esas finas mujeres, pero ella se encargaría de mandar el mejor regalo.
—¿Qué es eso?—Yoongi señaló aquella copa un poco asqueado al darse cuenta que eso no era vino.
—Sangre de ternera.
—¿No toman los vampiros sangre humana?
—Lo hacemos; pero los sangre puras tenemos más control al respecto, contrario a los impuros. Podemos comer y digerir comida humana. Usualmente la única sangre de humano que tomamos sería la de nuestro amante, dado que se hace un lazo de sangre, solo tendré apetito por ese tipo de sangre, por eso debes engordar—dijo de último dando un suave movimiento a la copa.
—¿Engordar? ¡Piensas chuparme!—sonrió feliz al escuchar aquello— ejem digo...¡No mi pobre cuello!—se hizo la víctima y fingió llorar.
Jungkook trató de no reírse por aquella mala actuación del humano, terminó de tomar su bebida y se levantó, caminó con sus manos hacía atrás, Yoongi lo siguió sin disimular y sonrió al poner de nuevo su mirada sobre el trasero del vampiro, quien al sentir un escalofrío, se giró de un solo, el humano bajó rápido la mirada, fingiendo comer. Jungkook frunció el ceño: "¿Otra vez había sido su imaginación?" sin decir más salió de aquel comedor mientras el omega, hizo un gesto con su mano como si estuviera agarrando la nalga derecha del vampiro.
Siguió desayunando, mientras contemplaba los cuadros de pintura que permanecían en el comedor, pronto sería su primer té y estaba emocionado, aunque claro, debía recordarse que no podía darse el gusto de relajarse, el primer encuentro de la novela se había dado con la protagonista y el antagonista, el segundo encuentro era cuando el pueblo de aquella mujer era atacado por unos vampiros impuros y Jeon Jungkook llegó al lugar y al ver de nuevo a la protagonista, la secuestró para llevarla a su mansión.
Sin embargo, Min Yoongi no sabía cuando era que se daría ese ataque y eso era para él un gran problema.
Mar-11-oct-2022:
[Cualquier error de ortografía o redacción, serán corregidos cuando este fanfic pase a edición]
¡Recuerden el lema de la familia, somos sol que calienta; pero no quema!