Capitulo 13
Quackity estaba arreglando unas cosas de su isla al lado de Merlon Vegetta, estaba aprovechando la mañana lo mejor que podía ya que las tardes eran un desmadre, pero volviendo a su isla, estaba arreglando cosas, ya sea reemplazando los bloques diferentes que habían en su muro o arreglando un poco los alrededores, dándole a su isla y pirámide la apariencia que tenía al principio, claro que su paz no podía durar mucho tiempo, ya que llegó el sabio Sapo Peta, con el cual tenía una especie de romance secreto o algo así, ninguno sabía que eran.
— ¡Quackity!
Se le escucho gritar al moreno mientras iba a la casa del mexicano, el cual soltó un pequeño suspiro, la presencia del hombre le daban nervios.
— ¡Sapo Peta! ¡Hola!
Quackity saludo alegre, aunque el mayor de cuatrocientos cincuenta años notó la mala mirada que le daba el "hijo" de su amante.
Se acercó y los dos entraron a la isla de el híbrido de pato por un hoyo que hizo, arruinando su muro de madera de nuevo.
— ¿Qué te trae por aquí, Sapo Peta? Pensé que estarías ocupado con el corazón ese.
Pregunto Quackity, entrando a su pirámide por un hoyo recién hecho por el, siendo seguido por su hijo y el moreno.
— Pues pensé en visitarte para. . Ya sabes, tener una mejor visión de ti.
Okey, Quackity será medio menso, pero noto esa indirecta desde lejos, volteando a ver al mayor con curiosidad.
— Ay, Sapo Peta, no enfrente de mi hijo.
Hablo con una sonrisa nerviosa, mientras se acercaba a uno de sus cofres y lo abría para dejar todo su inventario en el poco espacio del cofre.
— Pues que tú hijo no vea.
Se escuchó la voz del hombre más cerca, por lo cual Quackity se voltearía a su dirección, dándose cuenta de que Sapo Peta lo había acorralado, poniendo sus brazos a sus lados apoyándose en el cofre.
Trago saliva nervioso, no sabiendo como actuar en esta situación, más su hijo tortuga empujó con un golpe al señor, esto repetidas veces hasta la salida, y sin dejar quejarse al moreno cerró el hoyo.
Estaba sorprendido del actuar de su hijo, pero al mismo tiempo le hacía gracia como lo saco como si nada, aunque la tos de cierto slime llamo su atención, volteando a ver a la izquierda, encontrándose con Charlie.
— ¿En esto estabas ocupado, Quackity?
Pregunto con cierta curiosidad, arqueando su ceja, sacando risas nerviosas del muchacho híbrido de pato.
— Hay explicación, cabron.
Luzu y Rubius ya habían empezado sus planes de alejar al par de gringos de Quackity, obviamente tenían una rivalidad por el cariño de el pato, pero quedaron en que eso no afectaría su alianza, luego se pelearan por eso.
Lo primero que hicieron fue jalarse a el híbrido a un paseo, para no tener a ninguno de los pretendientes de el patito cerca, aunque bueno, primero tuvieron, o más bien Rubius tuvo una discusión con Charlie por qué este no quería dejar ir a Quackity solo.
Luego, harían la técnica de la manipulación, o Luzu dijo que la haría, Rubius tenía unos pequeños planes además de esos.
Aunque mientras caminaban, un sonido de un balazo los sorprendió, así alejándose lo más que pudieron de Quackity, ya que había sido disparado justo al lado suyo.
Desviaron sus miradas al suelo, encontrándose con una tortuga con una. . ¿Pistola?
— ¡No chingues mijo! ¡Te dije que solo a los asaltantes cabron!
Se escuchó como Quackity regaño a su retoño, el cual miraba enojado a Rubius y a Luzu aún apuntándoles con el arma.
— ¡Quackity! ¿Tienes un hijo?
Luzu se veía confundido, nunca se enteró de que Quackity tenía una tortuga como mascota o mejor dicho, cómo hijo, lo mismo le pasa a Rubius solo que el estaba un poco extrañado más que confundido.
— ¡Pues si! ¿Esperabas que estuviera solo cuando te vas a dormir a las 6:00 am?
Luzu soltó unas risitas por lo dicho por Quackity, Rubius no podía evitar algo en esta situación por más que lo intentará.
Parecía que Luzu y Quackity se llevaban muy bien, con una relación de amistad impecable además de entenderse muy bien, a pesar de las diferencias culturales.
Pero no sabía si eso era parte de la manipulación de Luzu, o si solo, y esto era lo que menos quería, si solo está siguiendo a su corazón.
Sin dudas, se tiene que apurar con esto.
Llegaba el atardecer en Karmaland, y con eso, una nueva idea aparecía en la cabeza de Wilbur, la cual no era buena, para nada de hecho, su plan era el siguiente;
Darle a el hibrido de pato la pinta de que era amable y bueno, empezar a dar influencia en su mente y forma de pensar, arruinaría la amistad de Quackity con el resto, aislándolo de los demás y alejando a la competencia, y luego llevárselo muy lejos, gran plan, ¿no?
Para el castaño con mechón blanco era un plan de maravilla que funcionaria, así que lo haría, pero necesitara ayuda, ya que hacer un plan así de grande no era para solo una persona, aunque recordó su alianza con cierto slime de lentes.
Aunque escucho pasos atrás de el, volteando a ver y encontrándose a un chico de estatura baja con casco.
— ¡Hola! No nos han presentado, ¿verdad?
El castaño de mechón blanco negó ante la pregunta, estando levemente incomodo, no interactuaba mucho con los héroes de el pueblo de Karmaland, solo con Quackity y Charlie, y también solo interactuaba con Karl y Sapnap pero esto solo para pelear.
— Bueno, me presento, soy Alex pero dime Alexby, el cura del pueblo.
Es curioso que el cura del pueblo se acercara a el, pero viendo la sanidad mental de todo el pueblo y la suya, no le sorprendía nada a este punto.
— Bueno, cura Alexby. . Soy Wilbur, un gusto
Ofreció su mano al de baja estatura para estrecharla, lo cual noto el pelinegro y sonrió bajo su casco de StarWars.
— Espero que seamos buenos amigos.
Era de noche, Charlie estaba preocupado por Quackity ya que no llegaba, pensaba en lo peor gracias a las dos personas que se lo llevaron, aunque confiaba en Luzu un poco debido a que lo veía mas como un aliado, pero Rubius. .
Veía a el hibrido de oso como un enemigo, al enterarse de todas las traiciones, abusos y todo eso entre ambos híbridos le agarro odio a Rubius, y no se molestaría en eliminarlo si este amenaza la vida del hibrido de pato, pero eso seria en una ocasión muy seria.
El sonido de una de las paredes de la pirámide siendo rota llamo su atención, acercándose a ver quien era con esperanza de que fuera Quackity y no el pelinaranja Lolito. . Otra vez.
Aunque ver al pelinegro le trajo alivio además de alegría., No se tardo mas de dos minutos para ir corriendo a el hibrido de pato, tomarlo de las mejillas y revisar su estado, ya que estaba lleno de cenizas y tenia una pequeña flama en la punta de un cabello suelto suyo.
— ¡Quackity! ¿Estas bien?
Pregunto con algo de pánico, soltando las mejillas del hibrido y apagando la flama que estaba en un pelo pelinegro perteneciente al chico contrario.
— Estoy finísimo, Charls, solo me exploto una pinche mina por la puta culpa de Rubius.
Charlie se enojo un poco por lo que le respondió Quackity, otra vez le había explotado una mina, y el culpable fue Rubius.
Quackity noto la expresión de Charlie que se tornaba poco a poco en una enojada, haciéndole sentir nervioso ya que sabia que el slime le tenia rencor a el hibrido de oso, asi que queria ahora hacer algo que lograra que el slime evitara hacer algo sumamente idiota.
— ¡Charlie! ¿Y si asaltamos a alguien?
Charlie se confundió ante la pregunta, aunque un balazo dirigido al techo resonó en la pirámide, ahí Charlie se dio cuenta de que la tortuga Merlon estaba presente.
El hibrido le insistió mas el ir a ''asaltar'' a alguien y Merlon se mostraba alegre y entusiasmado por la idea de su padre humano, así que se decidió ir con el hibrido y con la tortuga para distraerse de todo lo sucedido en las ultimas semanas.
— Uh. . Esta bien, los acompaño a eso.
Quackity se emociono, moviendo sus alas y colita de pato sin patrón por la alegría, mientras que su hijo, Merlon, empezó a saltar por todo el lugar.
Jalo a el slime de lentes a afuera de su hogar y hasta la orilla de la tierra, siendo seguidos por la pequeña tortuga la cual estaba emocionada por convivir con su padre mas tiempo y con su tío, por primera vez no se tenia que preocupar de los simps de su papa.
Esta seria una noche para recordar. . O mínimo para reír mientras los perseguían.
Karl miraba a su amado correr por un campo, jalando a su amigo de slime a cualquier lugar y siendo seguidos por el ''hijo'' de el alado no tan alado.
Desvió su mirada, pensativo por todo lo que paso hace unos días con Staxx, no dejaba de pensar en esa escena.
Desde ahí empezó a tener la preocupación de que, si Quackity volviera con el y con Sapnap, le podría hacer daño de nuevo y que todo se rompiera de nuevo, y que sufriera mas de lo que ya lo ha hecho.
Pero lo quería de nuevo con el, no lo forzaría, pero necesitaba su presencia, lo amaba mas que nada ahora y lo extrañaba, no podía evitarlo.
Volvió a el interior de su hogar, encontrandose a Sapnap dormido, en un sofa que hicieron hace poco con un pequeño lobo que domesticaron el dia anterior, dormido tambien en el regazo de el demonio. Sonrio levemente, enternecido por la escena y uniendose a dormir con los dos, dejando de pensar por un poco en su preocupación.
1670 palabras
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ACABEEEEEE-
DOS HORAS HACIENDO ESTO AKJFKSNFKDSJGSD-
Bueno, aqui tienen un capitulo medio corto en lo que hago el siguiente, que PROMETO que sera mas largo, i promised.
Y planeo seguir el rol original de Karmaland 5 con solo una de estas dos cosas, o la muerte de Merlon Vegetta o el fin de la relacion de Sapo Peta y Quackity.
Y si, el capitulo siguiente sera tan largo que les dare sus escenas de drama y celos, quiero hacer un minimo de 3000 palabras.
Bueno, eso seria todo, honestamente queria hacer otra cosa en este capitulo, pero estoy satisfecha, la primera edición de este era de menos de 1000 palabras.
Adio ✨🥦