Alzaste un poco tu vestido mientras caminabas, no estabas segura para qué era esa fiesta de "gala" en la comisaría pero tenías que ir.
—Hola — murmuraste mientras alzabas la mano
Leon fumaba de su cigarro
—¿Qué tal Lily? — volteó a verte — wow, luces hermosa
—Gracias — agradeciste avergonzada — tú igual luces muy bien de traje
—Claire dijo que no iba conmigo
Reímos
—¿Qué haces acá afuera? — preguntaste
—Sólo salí a fumar algo, no se puede fumar dentro — respondió irónico
—Bieeen, bueno, yo iré dentro, ahorita nos vemos
—Sí, adelante
Con tus tacones resonando, entraste a la comisaría.
Viste a todos los policías (uno por aquí y otro por allá) afuera de ahí.
Entraste al lugar, aún no veías caras conocidas (de tus amigos), s.t.a.r.s o algo.
Mirabas y mirabas hasta que viste a Chris de espaldas, decidiste acercarte hacia él.
—Hey — tocaste muchas veces su gran espalda
—Hey, Lily — te miró — luces bien eh
—Gracias, tú igual — pausaste — ¿Has visto a Claire o Rebecca?
—Claire estaba con Leon y Rebecca andaba por la oficina, algo haría con Jill, si quieres alcanzalas
—Bien, iré, gracias
—No hay de qué
Dejaste de nuevo a Chris y empezaste a caminar hasta el otro pasillo.
Estabas por dar vuelta cuando te vuelves a topar a alguien más, Kevin.
—¡Kevin! — sobresaltaste — me asustas
—Lo siento, no fue mi intención...— comentó con una ceja alzada mientras apartaba la caja de vasos de su cara
—¿Necesitas ayuda?
—Un...poco...sí
Reíste para después sostener también unos vasos.
—¿A dónde?
—Al segundo piso, por la bomba de agua
Kevin y tú siguieron los pasillos.
Y justo cuando cruzaron en el segundo pasillo, Wesker salía de la oficina, no le quedaba de otra, hasta que te vió con él, riendo.
Frunció el ceño, algo sintió pero no sabía qué exactamente.
Era el grandísimo Albert Wesker, él no podía sentir esas cosas, además, habían quedado que no sentirían otra cosa...sólo sentir placer junto al otro y...ya.
—No inventes Kevin...¿todo eso conseguiste? — preguntaste sorprendida mientras dejabas los vasos
Tenía muchas cajas de cerveza
—El dueño de la tienda es muy amigo mío y me debía algunos favores — dijo malévolo — es más...siento que no ajustaremos
—Ay, no puede ser — murmuraste para después poner tu mano en la cara, cómo restregandola — apuesto que Chris se tomará una completa
—No lo dudes — murmuró mientras veía las cajas — bien, yo iré por hielos, nos vemos en un rato adentro y gracias por la ayuda
Tú solamente alzaste la mano para después mirar al patio, desde arriba se veía hacia el frente de la comisaría.
Sonreíste en cuanto viste a Claire al frente, ibas a gritarle cuando viste que llegó con Leon.
Juntaste las manos con una sonrisita malvada.
—Esa es mi cachorra — murmuraste triunfante
—¿Quién es qué? — oíste un susurro muy cerca de tu oído
Sobresaltaste asustada.
Hasta que oliste esa colonia, y lo miraste.
Wesker lucía increíble con ese traje negro.
Hiciste un leve sonido con tu garganta mientras acomodabas tu vestido color verde.
—N-nada — murmuraste — sólo...veía las luces de allá
A pesar de que traía lentes (y sí, de noche) se acercó muy cerca de su mejilla y miró a la misma dirección que tú.
—¿De dónde? — preguntó, tratando de seguir tu juego
—D-de allá — apuntaste a una dirección x
Lo miraste de reojo, solo viste que abrió la boca levemente para después mirarte.
Subió un poco sus lentes.
—Aquí andaba Kevin contigo...¿no?
—Ah...si — respondiste como si nada — le vine a ayudar con unos vasos...aunque en realidad iba a en busca de Rebecca y Jill
—Ellas están en el siguiente piso — comentó mientras apuntaba con su dedo índice hacia arriba
Tragaste saliva, de nuevo.
—Okaaay, gracias — comentaste mientras te hacías algunos cuantos pasos hacia atrás
Sólo se escuchaban tus tacones; hasta que justamente la pared se interpuso en tu camino y topaste ahí lentamente.
Wesker aprovechó y puso una de sus mano encima de ti, casi recargandose.
Te encantaba cuando hacia eso.
—¿Algún problema? — susurraste inocentemente
Wesker asintió lentamente, él volvió a susurra cerca de tu oído.
—No me gusta verte con Kevin
Frunciste el ceño.
—¿Kevin? — reíste un poco — pero si es Kevin...digo...somos muy amigos, fue de los primeros amigos que hice aquí
—Dije...no me gusta...¿quieres que te lo vuelva a explicar...niña?
Miraste a la misma dirección donde se había ido Kevin, por suerte, nadie venía.
A wesker le divertía lo preocupaba que te veías de que alguien los viera, y sinceramente, a él le daba igual.
Lo volviste a mirar.
Él tenía esa pequeña sonrisa arrogante, de siempre.
—Tú eres mía.