Los adultos lentamente hicieron su camino de regreso al área cercada. Los dos jóvenes que fueron incapaces de convocar a sus escobas iban a la cabeza, tratando de localizar a su voladora futura pareja.
.- Bueno, eso fue bastante inesperado -dijo la Sra. Zabini.
.- ¿Quién era ese chico? - preguntó la mujer con acento fuerte.
.- Ese, cariño, era Harry Potter -dijo Narcissa Malfoy, con una sonrisa bastante parecida a la de su marido mientras se sentaba en una de las mesas y un elfo doméstico le servía té.
.- ¿Harry Potter es una veela sumiso? - preguntó el Sr. Ivanoff cuyo hijo no se las había arreglado para convocar una escoba-. Exijo que todo esto empiece de nuevo. No estábamos informados de esto y convocar una escoba es muy irregular. Todos los adquiridos tendrán la misma oportunidad.
.- La tuvieron. Creo que recuerdo a todos ellos rodeando al Sr. Potter en el bosque-algo válido de acuerdo a las leyes-incluso antes de que él supiera lo que estaba pasando, como solía ser en la antigüedad. Él no tenía aviso y aún así se las arregló para escapar por sus propios medios, sin ayuda del exterior-como está permitido por las leyes-y ahora la persecución se ha movido al nuevo terreno de SU elección. Es perfectamente regular.
.- Pero...
.- Me temo que el Sr. Malfoy está en lo correcto -dijo el Sr. Zabini, que estaba sentado al lado de Lucius-. Aunque no haya sido invitado, el Sr. Potter es un participante válido de la reunión; todos lo sentimos. Cualquiera que sea la familia en la que termine será fortalecida por su sangre. -Nadie notó la mirada intercambiada por Zabini y Malfoy.
.- Aún más razones para traerlo de vuelta y empezar todo esto de nuevo.
.- No creo que eso pueda ser posible -dijo Dumbledore, entrando con Ron a su lado-. Ninguno de los jóvenes actualmente involucrados estará de acuerdo con una interrupción. Sus instintos son bastante demandantes por el momento.
.- Pero esto arruinó completamente el día para los otros sumisos; quiero decir, ¿Cómo va cualquiera de los otros a emparejar con otro antes de que Potter regrese con pareja? - preguntó la Sra. Parkinson.
.- Mi querida Sra. Parkinson, tiene usted un punto. Sugiero que consideremos este día por acabado y procedamos al té. La reunión seguirá mañana, cuando, con suerte, esta situación inesperada sea resuelta.
Los padres sabían que no había nada más que ellos pudieran hacer-legalmente-así que aceptaron la sugerencia del director y se dispusieron a tomar el té. Todos los otros sumisos fueron escoltados a una habitación especial preparada para ellos, ya que no podrían interactuar con el resto hasta que estuvieran emparejados.
Narcissa se sentó con algunos de los padres, haciendo su trabajo de anfitriona perfectamente. Incluso si no era su casa, era todavía su vieja escuela y su país, así que obviamente era su obligación. Además, siempre era lindo recordarles a todos los demás cuál era la familia a la cabeza de su sociedad. Por la esquina del ojo pudo notar que Lucius y Augustus Zabini todavía estaban hablando. Era obvio por su lenguaje corporal que un juego de poder estaba siendo llevado a cabo entre los dos.
.- Así que, Augustus, debes estar orgulloso; Blaise salió bastante bien.
.- Al igual que Draco, mi amigo. Un buen joven tienes ahí.
.- Sí, líneas de sangre muy fuertes harán eso. Sería una última vez perderla ahora.
.- Cierto, mi amigo, absolutamente cierto.
Los dos hombres siguieron hablando, sabiendo lo que no estaba dicho. Una variación de la misma conversación se había llevado a cabo al menos una vez por generación entre sus familias por al menos tres generaciones ya. Ninguna familia había producido un sumiso por mucho tiempo, sólo los dominantes que no emparejarían entre ellos, y siendo dos de las familias más prominentes, una alianza entre ambas era lo más deseable.
Ya que sus hijos estaban ahora consiguiendo parejas propias, quizás un arreglo podría ser logrado para... facilitar un futuro encuentro entre sus nietos. Semejantes tratos no estaban estrictamente prohibidos por las leyes porque, incluso aunque las familias de sangre pura estaban orgullosas de dar a conocer y hasta celebrar su herencia mágica, también se aseguraban MUCHO de que estaba claro que no eran animales gobernados por el instinto.
Narcissa y Glory se sonrieron, mientras intercambiaban cumplidos y pretendían que no sabían lo que estaba siendo discutido por sus esposos. Una unión entre las familias consolidaría ambas como la sima del mundo mágico, y ahora había un bono, algo que estaba desequilibrando la balanza. Las cartas ya estaban en la mesa para esta generación-dos chicos dominantes y ningún sumiso, una verdadera lástima-pero la siguiente, ¡oh! La siguiente vendría con un niño de una de las familias y con la sangre poderosa de Potter para finalizar. No era un premio para subestimar.
Nunca hubo duda, por supuesto, que la verdadera competición estaba tomando lugar entre Draco y Blaise; eran por lejos los mas fuertes de este año.
Uno por uno los jóvenes regresaron, luciendo un poco incómodos y tomando como una ofensa personal la pérdida de su pareja intencionada. Los únicos que faltaban eran Draco y Blaise, hasta la puesta de sol... cuando Blaise volvió.
Narcissa y Lucius compartieron una sonrisa discreta.
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La habitación estaba casi completamente oscura, con solo unas velas por aquí y por allá transmitiendo a la habitación un toque íntimo; había rosas rojas bellamente arregladas alrededor de la habitación y una mesa cubierta de frutas, queso, pan y vino dispuestas en el rincón cerca de una hoguera casi extinta. Recostados sobre un suave colchón cubierto con sábanas de color carmesí oscuro, dos jóvenes apenas notaban todo lo demás.
Harry estaba flotando; no había otra explicación sobre eso. Su cabeza estaba girando y su piel estaba ardiendo en todos los lugares con los que Draco había estado en contacto. Estaba desnudo bajo Draco, que se estaba asegurando de besar y acariciar cada centímetro del cuerpo de su pareja. Los pantalones de Harry habían sido tirados al piso dos minutos luego de empezar el tiempo de Malfoy, que había sido... menos de tres minutos atrás, estaba seguro. No había otro modo que los cinco minutos se hubieran ido tan rápido.
Draco movió su mano sobre los muslos de Harry. Harry jadeó por aire cuando la mano de Draco encontró su camino entre sus muslos, acariciándolos en su camino hasta que tocó la hombría de Harry. Acarició a Harry levemente antes de empezar a mover sus dedos de nuevo en busca de...
Los ojos de Harry se abrieron de golpe.
.- Espera, para -dijo, incorporándose y casi arrojando a Draco de la cama.
.- Shhh, Harry, todo está bien -dijo Draco, tratando de calmar al otro chico. ( Demasiado pronto, maldición, me moví demasiado pronto. Tiene que calmarse, no hay modo de que lo deje ir )
.- No, no está bien, Draco. Nos odiamos. Lo hacemos -dijo Harry, más para convencerse a sí mismo que nada más. No entendía porqué su cuerpo se estaba comportando así, pero tenía que detenerlo.
Harry se mantuvo tratando de alejar a Draco, peleando contra él.
( ¡Pelea con él! Tengo que pelear con él; no es suficientemente fuerte para mantenerme. No me someteré; no es suficientemente fuerte. No vale la pena. ) Harry no se paró a pensar de dónde había venido lo último, pero en un nivel básico él sabía que sólo alguien lo suficientemente fuerte para obligarlo a someterse sería capaz de protegerlo.
Draco pudo sentir cómo su sangre comenzaba a correr más rápido por sus venas. El sumiso lo estaba retando, demandando que probara que era lo suficientemente fuerte para protegerlo de los otros dominantes y cualquier otra amenaza que pudiera presentarse. Este sumiso era fuerte y poderoso; sólo un dominante más fuerte y más poderoso sería aceptado por éste. Tenía que probar que valía para la paternidad que el sumiso bajo él proveería.
Harry se las arregló para empujar a Draco al otro lado de la cama y descubrir escapar. Casi olvido salir de la cama antes de que Draco cayera sobre él, agarrando su pelo y tirando de su cabeza para tener más acceso a su cuello, y lo mordió fuerte mientras trataba de empujar sus piernas.
Harry gritó y sintió que su cuerpo se aflojaba un segundo. Le tomó cada resto de fuerza que tenía para rodar sobre sí mismo, empujando a Draco de nuevo, y se arrojó de la cama.
Se enfrentaron, respirando duramente y sus cuerpos listos para entrar en acción. Harry estaba arrodillado en el piso, sin perder nunca contacto visual con Draco, que todavía estaba en la cama, pareciéndose bastante a un gato preparándose para saltar.
.- Eres mío, Harry.
.- En tus sueños, Malfoy.
.- Estarás usando un tono de voz diferente y llamándome Draco antes de que haya acabado contigo.
.- Nunca sucederá.
Draco sonrió y se lanzó hacia Harry. Rodaron por el piso, mordiendo y arañando, hasta que Harry se las arregló para desenredarse y correr. Puso un gran sofá entre él y Draco. Se miraron nuevamente. Draco tenia un labio cortado, manchas aparecían en su cara y torso; una gran magulladura se mostró en su hombro derecho y otra en sus costillas.
El cuello de Harry estaba ensangrentado por la mordida que Draco le había dado antes; tenía manchas en su espalda, brazos y piernas, y magulladuras por todas partes.
Los dos estaban sin aliento y sin mostrar intención de ceder a los deseos del otro. Rodearon el sofá algunas veces, cambiando dirección y velocidad. Estaban poniendo a prueba a su oponente mientras se preparaban para la siguiente ronda.
El pensamiento de irse nunca cruzó la mente de Harry. Quería poner distancia entre él y Draco, pero no suficiente como para perder al rubio de vista. No se rendiría, y por alguna razón sintió que era muy importante que Draco probara que era capaz de vencerlo en una pelea.
Draco se sintió muy bien; había durado todo eso en una pelea viciosa para probar que valía la pena como pareja. Sí, había elegido bien. Este delante de él era una pareja orgullosa y fuerte, nunca antes conquistada, y Draco iba a tener que ser igualmente fuerte y orgulloso para reclamarlo de su propiedad. Él, Draco Malfoy, había encontrado una pareja que valía, y haría lo que fuera necesario para mantenerla. Draco saltó encima del colchón y lanzó un nuevo ataque.
Harry no se esperaba el movimiento y su reacción llegó una fracción de segundos tarde. Se arrojó hacia un lado, aterrizando en la alfombrilla frente al sofá, y se estaba preparando para rodar y escapar hacia el otro lado de la habitación; desafortunadamente, Draco estaba encima de él antes de que pudiera implementar el plan y lo mordió de nuevo, esta vez sin dejarlo ir.
Harry dejó de pelear inmediatamente. El dolor de su cuello y el peso de Draco encima de él hacían que su cuerpo perdiera fuerza. Sintió a Draco sujetar sus muñecas mientras dirigía una rodilla entre las piernas de Harry, separándolas. Sintió la erección de Draco frotándose contra su trasero y supo que había perdido.
.- Draco, por favor -gimió Harry.
Draco notó como el cuerpo de Harry se relajaba bajo él y no pudo reprimir una sonrisa. ( mío )
Soltó las muñecas de Harry, moviendo una mano hasta el pelo de Harry y usando la otra para apoyar su propio peso.
.- Relájate, Harry -dijo, lamiendo la marca de mordida en el cuello de Harry-. Todo está bien, sólo relájate.
Harry gimió cuando sintió a Draco lamerle el cuello antes de depositarle otro en su espalda. Draco continuó besando y lamiendo la espalda de Harry y mordiendo suavemente su piel, haciendo que se relajara más y más mientras él se seguía moviendo bajo el cuerpo de su pareja.
Harry jadeó por aire cuando sintió a Draco depositar pequeños besos en sus nalgas- sólo para mantener el aliento al sentir las manos de Draco separar sus nalgas y sentir la cálida, húmeda lengua que encontró su camino por la ranura. El cerebro de Harry enviaba señales mezcladas, como si no pudiera decidir si detenerse o trabajar a la velocidad de la luz. Decidió detenerse cuando la lengua de Draco fue puesta en buen uso.
Harry se retorció y gimió mientras la lengua de Draco se volvía más familiar con su entrada. No podía evitar mover la cadera, empujándose contra la cara de Draco. Apenas se daba cuenta de las risitas de Draco mientras suplicaba por más. Sollozó cuando Draco detuvo lo que estaba haciendo para hacer un hechizo.
( ¿Qué demonios está haciendo? ¿Por qué paró? ¿Tanto desea morir? ¿Qué...? ¡Oh, Merlín! ¿Qué está haciendo? ¿Ese es su dedo? )
Draco estaba en el cielo: tenía a su pareja recostada delante de él, gimiendo, suplicando, retorciéndose por él. Tenía sus dedos dentro de él, estirándolo dulce y lentamente, y en un minuto estaría tomando el paso final para reclamarlo como su pareja. Había dado la mordida ya, y ahora todos los otros dominantes sabrían que este sumiso ya estaba reclamado. Su aroma rodearía a su pareja, sería parte de él -para siempre. Ese pensamiento probó ser demasiado provocador para que Draco se pudiera resistir. En un solo movimiento reemplazó sus dedos por su erección, al diablo con la preparación.
Harry inclinó la cabeza hacia atrás al sentir a Draco deslizándose en él. ( ¡Demasiado! ¡Explotaré! Merlín, lo necesito; ¡necesito más de él! )
.- ¡Mío!
.- Tuyo, ¡Hah! ¡Draco! ¡Tuyo, dame más, por favor! -Ninguno de los dos era capaz de pensar coherentemente, los instintos se apoderaban, y se movieron uno contra el otro más y más rápido hasta que el mundo entero tembló en una gran explosión que los dejó a ambos cerca de la inconsciencia en el piso.
Draco notó que Harry se había quedado dormido y sonrió al notar que olía diferente ahora. Draco enroscó sus brazos alrededor del cuerpo más pequeño de su pareja y lo mantuvo cerca mientras se dormía frente a la hoguera.
Continuará...