Karma.
Madison.
2 semanas después.
Al fin estoy completamente curada, hace dos días me entregaron las imágenes de la radiografía y mi costilla está bien, todo volvió a la normalidad.
Mis terapias avanzan, hoy tuve mi sexta sesión y si hemos tenido avances, antes lloraba desconsoladamente al tocar ese tema, aún lo hago, pero pasamos de llanto que me cortaba el aire a lágrimas normales.
Si pudimos entregar las clases a tiempo en la universidad, estuvimos varias noches sin dormir donde amanecíamos estudiando, pero logramos entregar todo a tiempo y en unas semanas nos graduaremos.
¡Oficialmente seré una licenciada!
Si entrego a mi padre deberé tomar su puesto en la empresa y eso sería condenarme a esa vida, lo mejor es dejar que mamá se haga cargo, obviamente yo vendría a ser accionista mayoritaria porque todo pasaría a mis manos.
Tengo una idea rondando mi mente hace tiempo, me encantaría unir Blake Industries con Maxwell Architects. Somos las empresas más cotizadas de arquitectura en toda Europa, unirnos subiría aún más nuestro estatus y ganancias.
Los famosos papeles con todas las pruebas se mantienen frente a mí. Tomo un sorbo de mi taza de café pensando en qué haré. Mamá, Los Longwell, Theo y yo estamos reunidos decidiendo que sucederá, pero la última palabra la tengo yo.
—Yo no quiero que me eliminen, todas las pruebas en mi contra déjenlas. —Mamá llama mi atención al instante.
—No. —Me niego rotundamente—. No dejaré que pagues en una cárcel injustamente.
—No me darán años de cárcel, mínimo una fianza costosa, pero no años de cárcel —toma mi mano—, si yo fui testigo de todo será aún más creíble cuando testifique en contra de tu padre, más rápido será declarado culpable.
—Ella tiene razón, Madison —la apoya Adam, el papá de Cami y uno de mis abogados—. Además, tu padre es un hombre con contactos poderosos, no se quedará quieto. Hasta hoy lo mantuvimos en aquella bodega custodiado por los hombres del señor Maximilian Beckett, pero no estará ahí por siempre, debemos tomar decisiones ahora.
—Mis decisiones ya están tomadas —informo ganándome la atención de todos los de la mesa—. Le entregaré estos papeles a Timothée Maxwell a cambio de asociarse con Blake Industries.
—¿Estás segura? —Olive frunce el ceño, todos lucen confundidos. Acomodo mi saco color gris y me levanto de la mesa.
Apoyo mis manos en la mesa adoptando una posición de confianza.
—Sí, lo estoy —confirmo—. Estoy pensando como lo que necesita la empresa, un líder estratega. Cuando todo esto salga a la luz, la reputación de Blake Industries estará por el suelo y las acciones e ingresos se devaluarán un ochenta por ciento, pero si estamos asociados con la víctima de todo esto, eso brindará confianza al cliente.
—Tienes toda la razón —apoya Theo—, hablaré con Timothée y le informaré que irás a verlo —se pone de pie.
—¿No irás conmigo?
—No, alguien debe ir por Michael, si lo entregamos no podemos revelar que lo teníamos encerrado en una bodega —se acerca dándome un beso corto—. Nos vemos en Red Valley.
Sale del departamento y yo organizo todos los papeles metiéndolos en una carpeta.
—Bien, si no hay más que decir, yo les aconsejo pasar dinero a una cuenta secundaria, congelarán las suyas mientras se investiga —sugiere Liv.
—Sí, ya me encargué de eso, tengo una cuenta secundaria con cinco millones. —Informo.
—Bueno, sin más que decir, nos vemos cuando todo esto estalle —Adam se despide dándome un beso en la mejilla y Liv me abraza.
Quedo sola con mi mamá.
—Ma, si no estás segura podemos sacarte de todo esto. —Digo sentándome frente a ella.
—Estoy segura, mi amor —peina mi cabello con sus manos—, es hora de que Michael Blake coseche lo que sembró —me da un beso en la mejilla.
Salimos juntas del departamento de mi novio, ella sube al mío y yo voy directo al estacionamiento, mi hermoso McLaren me espera, el pobre Bugatti está más abandonado que dieta en navidad.
Me subo al McLaren dirigiéndome a la mansión Maxwell, la seguridad me deja pasar rápido. Saben quién soy y no creo que Timothée Maxwell desperdicie una oportunidad de hablar conmigo.
Bajo de mi hermoso McLaren y acomodo el traje que llevo, me encanta como se ven en mi cuerpo, aún más después de que mi peso volvió a su normalidad.
Una de las chicas del servicio me abre la puerta. Tanya Maxwell termina de bajar las escaleras y se dirige a mí. Me da un abrazo que correspondo, ella no tiene nada que ver en todo este lío.
—Que hermosa estas. —Toma mi mano dándome una vuelta, me hace sonreír.
—Usted también está muy linda, se mantiene aún más hermosa de cómo era cuando yo estaba pequeña. —La adulo haciéndola sonreír.
—¿Vienes a hablar con mi esposo?
—Sí, ¿puede avisarle? —Pido—, por favor.
—Claro. —Se va y tarda unos minutos en regresar. Thiago no está y supongo que debe estar en la escuela. Observo la gran mansión, hay muchas fotos de Theo y Thiago, también muchas de Tanya, pero muy pocas fotos familiares.
Al menos actuales no hay muchas, solo de antes. Anoto mentalmente en mi cabeza sacar un momento para platicar con Theo, él también tiene problemas y debo centrarme en ellos.
Tanya vuelve a la sala.
—Adelante. —Me señala donde está el despacho, le agradezco y abro la gran puerta.
Es un despacho muy amplio y anticuado, pero que resalta el lujo. Timothée Maxwell se levanta acomodando las mangas del traje. Es un hombre con un aura oscura y demandante, a pesar de los años está muy bien cuidado.
—La princesa de Michael Blake visitando esta mansión, ¿a qué se debe tal acto? —Indaga con clara burla y un leve aire de curiosidad.
—Le agradecería que no me relacione con Michael Blake y menos con el título de princesa, es uno muy pequeño para mí. —Respondo con el mismo tono y actitud.
Observa los papeles que tengo en la mano por mínimos segundos y vuelve a mi cara.
—¿Qué quieres? —Espeta.
—No, la pregunta correcta aquí es, ¿qué tanto está dispuesto a hacer? —Tomo asiento sosteniéndole la mirada y él hace lo mismo. Soy experta en administración y en eso te enseñan como manipular a la gente para venderle lo que necesitas.
—¿Qué tanto estoy dispuesto a hacer a cambio de qué?
—A cambio de la cabeza de Michael Blake con todo y los papeles que lo incriminan —suelto sin titubeos. Le muestro la carpeta que toma y abre leyendo todo, incluidas las distintas facturas donde mi padre dio sumas incontables a los Fernsby—. De paso, como extra y porque estoy de buen humor, se lleva a los Fernsby incluidos —digo sonriendo y con una obvia seguridad plasmada en mi cara.
—¿Qué quieres? —Pregunta sin dudar.
—Eso es, me encantan los hombres directos —me yergo en la silla mirándolo directo a los ojos—. Quiero que te asocies conmigo y unamos Blake Industries con Maxwell Architects.
—¿Qué? ¿Estás loca? —Me mira como si no lo creyera.
—No, soy inteligente, que es muy diferente —me levanto tomando la carpeta con los papeles—, pero si no quieres, está bien.
Empiezo a caminar dirigiéndome a la salida y el "espera" que sale de su boca es todo lo que quería, está saliendo justo como lo planeé.
—Bien, estoy dispuesto a eso, pero hay condiciones y tratados que firmar —dice cuando me giro—. No cometeré los mismos errores que con tu padre.
—Ya le dije que no me relacione con ese hombre —le recuerdo—, yo también tengo condiciones y reglas que poner —aviso—. Mis abogados se comunicarán con usted y le entregarán un contrato que será mi seguridad para saber que sí nos aliaremos. Ya sabe, primero debo entregar a Michael para tomar el mando de la empresa y hasta ese entonces es cuando firmaremos papeles oficiales —asiente ante mis palabras—. Sin más que decir, que pase buen día.
Salgo del despacho celebrando internamente, al fin todo se acomodó dónde debe. Aunque odie dedicarme a la administración de empresas, no puedo dejar caer el imperio, sé que podré patinar y dedicarme a cuidar la empresa a la vez. Mi madre y obviamente Timothée también se harán cargo facilitándome todo.
Subo al McLaren y marco una video llamada con Theo que contesta al instante.
—¿Adivina? —Digo sonriendo.
—¿Ya eres mi socia? —Pregunta, también va conduciendo.
—Más o menos, pero ya lo convencí de que es lo importante —empiezo a conducir saliendo de la propiedad Maxwell—. Qué afortunado eres, tienes la novia más inteligente —me adulo a mí misma.
—Lo sé —dice sonriendo—. Ya llevo a tu padre, viene en una camioneta con los hombres de Maximilian, ¿vas para Red Valley?
—Sí, nos vemos allá. —Me despido colgando la video llamada.
Conduzco hasta la mansión Blake que se llama Red Valley supongo que por todas las rosas rojas que decoran el jardín gigante. Llego a la mansión casi al mismo tiempo que las tres camionetas que vienen detrás del Lamborghini.
Todos bajamos de nuestros carros. Una de las camionetas de mi madre está aquí y noto que el Audi de Cami también esta, al igual que los carros de sus padres, imagino que trajeron a los Fernsby. Todo se acomoda justo como necesitamos.
Los hombres abren la camioneta sacando a Michael Blake, es un hombre altísimo y fuerte, pero lo mismo que le dieron de lindo se lo dieron de hijo de puta. Camino en su dirección y los hombres lo obligan a hincarse frente a mí.
No lo pienso y choco mi palma en su cara dándole una bofetada que le voltea la cara.
—Eres una mierda. —Le digo y ni se inmuta. Cierro el puño golpeando su cara, esta vez si deja salir un gruñido.
Cinco camionetas más se estacionan dejando salir a Ethan junto a Maximilian, luce deplorable, pero al menos le limpiaron toda la sangre.
—Llévenlos adentro. —Ordeno y acatan mis órdenes sin preguntar. Ignoro el leve gusto que me genera tener a gente obedeciéndome, no me puedo dejar tentar.
Maximilian saluda a Theo y luego pasa a mí.
—Madison —dice estrechando mi mano—. Vine personalmente porque mi esposa quiere invitarlos a una cena —habla mientras caminamos entrando a la mansión, yo voy en el medio de ambos. No tenía ni idea de que estaba casado.
—¿Cuándo? —Indago.
—Este viernes, es una cena que se hace todos los meses en mi casa, es una tradición de su familia italiana —informa—. Siempre debo llevar invitados y quiero que esta vez sean ustedes.
—Por mí está bien, ¿qué dices Maddie?
—Claro, nos vemos este viernes. —Entramos a la mansión y no puedo contener la sonrisa en mis labios al ver a todos estos desgraciados tal y como lo merecen.
Mi madre no pierde la oportunidad de darle una bofetada a mi padre que le voltea la cara, el sonido del golpe hace eco en la gran mansión.
Me acerco a Olive que me entrega el documento que necesito que firme el ser que se hace llamar mi padre. Los sientan a todos en la mesa del comedor y nosotros nos quedamos de pie, ninguno se atrevería a levantarse, están rodeados de hombre con fusiles de largo alcance y armados hasta los dientes.
Pongo los papeles frente a mi padre junto con un lapicero.
—Necesito que firmes esto. —Le digo sin más explicaciones.
—¿Qué me impide enterrarte este lapicero en el cuello y matarte? —Dice cruzándose de brazos y mirándome a los ojos.
Adopto su misma posición sin apartarle la mirada, tiene los ojos del mismo color que los míos. Pero los de él dejan a la vista la frialdad y maldad que le recorre las venas. Nada que ver con los míos.
—Que si lo haces no darás dos pasos antes de tener el cuerpo como un colador —digo con una sonrisa—. ¿Quieres comprobar? —Le entrego el lapicero y me mira cargado de ira.
—La perra hoy está valiente. —El cerdo de Ethan habla y agradezco que los demás guarden silencio dejándomelo a mí.
—Perra tu madre. —Contesto—. Y calla que no estoy hablando contigo. Firma rápido, Michael.
—¿Qué es esto? —Indaga leyendo los papeles, su cara no tiene precio.
—Oh, papi, ¿no te informaron? —Me siento en la silla del anfitrión, estoy sentada entre mis enemigos—. A partir de ahora seremos Maxwell Blake Industries y tus acciones serán mías —le cuento con una sonrisa en mis labios.
—Estás loca, zorra estúpida —me discute—. No firmaré esta mierda.
Basta una mirada a Maximilian para que le pongan un arma en la cabeza, es lo mínimo que se merece alguien que es capaz de traicionar a su propia hija por ambición.
—Firma que no tengo todo el día.
Toma el lapicero firmando cargado de rabia, me levanto y le quito los papeles cuando termina de firmar.
—Damas y caballeros, me complace presentarme ante ustedes como la accionista mayoritaria de Blake Industries.
Abro mis brazos sintiéndome superior y mi sonrisa no se hace esperar, mis amigos y familia aplauden cargando más de ira a estos malditos.
—¿Qué pretendes hacer con nosotros? —La mamá de Ethan se levanta queriendo desafiarme.
—Señora siéntese —camino hasta Olive entregándole los papales que me declaran como la dueña de la mayoría de acciones de Blake Industries—. Usted se irá a la cárcel, ¿qué esperaba? Fue cómplice del encubrimiento de asesinato de cuatro personas.
El padre de Ethan se levanta molesto tratando de írseme encima y el golpe de Theo lo vuelve a sentar.
—¡Pagarán por esto, hijos de perra! —Grita, molesto.
La puerta de la mansión se abre dando paso a mi suegro y socio que entra acompañado de mi suegra.
—Qué buen recibimiento. —Dice sonriendo. Aun le tengo cierto rencor por su maldito plan de usarme, pero en estos momentos me cae mejor que mi propio padre.
Michael se levanta molesto, listo para írsele encima, nadie lo detiene y cuando intenta golpear a Timothée este lo manda al suelo de un golpe. Como me encanta el karma, le da a todos lo que merecen.
—Sin más que hacer, deberíamos llamar a la policía. —Sugiero.
—De eso ya me encargué —habla mi mejor amiga—. En estos momentos deben estar por llegar —Ethan se levanta tratando de golpearme y el dolor por sus costillas rotas lo arquea mandándolo al piso, dejándolo retorciéndose frente a mí, a mis pies.
Las sirenas de la policía se escuchan a lo lejos, me acuclillo frente a Ethan.
—¿Escuchas eso, cariño? —Uso el mismo apodo que él utilizaba cuando me secuestró—. En poco tiempo estarás en una cárcel y déjame decirte que ahí no son nada amables con los violadores, te recomiendo no agacharte mucho.
Los hombres de Maximilian se van junto con él poco antes de que lleguen, no van muy lejos solo a los alrededores llevándose con ellos las camionetas, pero le dejan armas a Theo, Camila y Adam para mantener calmados a esta gente.
La policía toca la puerta y soy quien va a abrir.
—Señores —extiendo mi mano saludando al oficial en jefe, le paso la carpeta que inculpa a todos estos desgraciados—. Quiero declarar en contra de mi padre por homicidio en contra de cuatro personas. La familia Fernsby es totalmente cómplice y también quiero denunciarlos por secuestro e intento de homicidio.
Ver cómo la policía entra y empieza a hacerse cargo de la situación es un alivio para mí.
Este capítulo se divide en dos partes, la parte dos se las publicare mañana.
Gracias por las 25k leidas💕
Los amodoro❤️