Sam entro a la cocina encontrándose con McKenzie, la cual comía apresuradamente de su plato con cereal al solo tener 10 minutos para llegar a clases a tiempo.
- Debiste levantarte más temprano - comento el pelinegro recargando las palmas de sus manos sobre la barra quedando frente a la chica
- No ¿enserio? - dijo sarcásticamente a la vez que lo miraba por un par de segundos para regresar la mirada a su plato ya casi vacío y seguir comiendo. Sam sonrió divertido al mismo tiempo que sacaba algo del bolsillo trasero de su pantalón y lo deslizaba sobre la barra dejándolo frente a la chica
- ¿Dónde lo conseguiste? - pregunto sorprendida tomando el boleto y mirando al chico
- Tengo contactos - contesto con una sonrisa en el rostro mientras se servía jugo en un vaso
- Nada ilegal ¿verdad? - cuestiono McKenzie encarnando una ceja, conocía a Sam y sabia de lo que era capaz de llegar a hacer
- ¿Sería un problema? - pregunto el pelinegro con despreocupación y una sonrisa en el rostro
- Mejor no saberlo - dijo la chica poniéndose de pie para llevare el plato al fregadero
- Sé que te prometí 3, pero es lo único que pude conseguir y no fue nada fácil - se disculpó después de haberle dado un sorbo a su baso
- No importa, gracias - dijo tomando su mochila de la barra junto con sus llaves y su celular el cual marcaba 7 minutos para su hora de entrada
- Me voy, se me hace tarde - comento McKenzie en forma de despedida saliendo a paso rápido de la cocina
- McKenzie - escucho desde las escaleras haciéndola detener su paso y girarse hacia estas
- Se me hace tarde - explico con rapidez a su hermano el cual ya se encontraba a un par de metros de ella
- Te quiero aquí saliendo de la escuela - lo ordeno en tono serio
- ¿Para qué? - cuestiono evitando que sus nervios fueran notorios ante la pregunta del rubio
- Tenemos que hablar, es importante - dijo con el mismo tono de seriedad en su voz escuchándose más como una amenaza para la chica la cual, fue así como logro interpretar sus palabras
«¦»
- Créeme no fue nada agradable - comento Stiles finalizando su relato de lo ocurrido hace unas horas en los vestidores al tiempo que se sentaba en una de las sillas de la cafetería seguido de Scott y McKenzie los cuales imitaron su acto
- Al menos consiguieron boleto, ya no tendré que darte el mío Scott y así también podre estar ahí - anuncio la rubia con alegría
- ¿Conseguiste boleto? - Scott la miro sorprendido
- Sam lo consiguió por mí - respondió con naturalidad asintiendo levemente con la cabeza y abría una botella de agua
- ¿Porque esa cara? - pregunto McKenzie al ver la expresión disgustada del ojimiel al escuchar su respuesta
- ¿Qué cara? es mi expresión natural - contesto a la defensiva a lo que Scott sonrió divertido negando levemente con la cabeza y llevando la mirada de su amigo hacia la chica
- Sam no le agrada - revelo sin una pisca de tacto llevándose la mirada inquisitoria de Stiles y una risa divertida en tono bajo por la chica
- ¿Celoso? - pregunto la rubia con una sonrisa burlona en el rostro
- ¿De él? Para nada ¿Por qué tendría que estarlo? - comento avergonzado tratando de no hacerlo notorio, aunque no entendía porque. Le había confesado a la chica lo que sentía la noche del baile pero después de ese incidente y de enterarse de que ella también lo quería como algo más que un amigo, no volvieron a tocar el tema.
- ¿Entonces porque me dijiste que...? - pregunto Scott desconcertado ante sus palabras
- Scott - regaño en tono serio a su amigo mirándolo a lo que este no entendió su intención ya que se disponía a terminar su pregunta
- ¿Porque no le cuentas a McK lo que dijo Deaton? - pidió con vergüenza al querer que el chico captar si indirecta muy directa según él creía que había sido así. Y lo había sido, ya que McKenzie pudo notar su nerviosismo y vergüenza en su voz y expresión, agregando así otra de las cosas que le gustaban de el a su lista
- Pero no nos ha dicho nada, lo veremos después de clases ¿recuerdas? - comento el pelinegro completamente desubicado ante las peticiones de su mejor amigo haciendo que este dejara caer su cabeza hacia el frente golpeando su frente contra la mesa rendido ante sus suplicas no captadas.
«¦»
- McK - la llamo Sam acercándose a ella cuando esta había salido de su auto al aparcar frente a su casa
- ¿Qué haces? ¿Qué te pasa? - se quejó siguiendo al pelinegro a paso rápido el cual la tenía tomada de la muñeca
- Cállate y escúchame - ordeno cuando detuvo su paso ahora encontrándose dentro de la cochera
- Cooper lo sabe, sabe que Jackson es el Kanima - dijo preocupado mirando a McKenzie frente a el
- No, eso no... - intento decir pero las palabras simplemente no salieron. No podía explicarse cómo es que su hermano se había enterado, y si era así no quería saber lo que haría para detenerlo
- Escúchame - ordeno nuevamente el pelinegro en tono serio y nervioso
- Está furioso, casi me dispara al enterarse que yo lo sabía - conto a la rubia la cual al escucharlo lo único que su cerebro pudo procesar fue el hecho de que Sam haya sido capaz de haberle contado
- ¿Cómo pudiste decírselo? confié en ti - reprocho indignada soltándose del agarre del chico con rudeza
- Yo no se lo dije - le respondió en un tono más alto pero sin llegar a gritar, y al igual que ella indagando por sus acusaciones. Él podía ser muchas cosas, pero jamás había roto una promesa. Le había jurado que no diría nada, que no hablaría y eso había hecho y a pesar de que Cooper lo apuntara con una pistola a poco menos de un metro el no había dicho nada que la comprometiera
- ¿Entonces quién? ¿Quién se lo dijo? - pregunto exigiéndole una respuesta haciendo que cada segundo que pasara su cuerpo se llenara de enojo e irritación por su silencio
- Chris - lo miro incrédula al escucharlo y entender su doble respuesta
- No, ella no pudo hacer eso - negó efusivamente con la cabeza como si tratara de evadir todo lo que escuchaba y comenzaba a formularse en su cabeza
- ¿No? ¿Entonces quién? - preguntó exasperado e irritado mirándola fijamente. Negó levemente con la cabeza y hablo.
- Abre los ojos McKenzie, tu no eras así no eras tan ciega como lo eres ahora - dijo como si le suplicara a la chica que lo escuchara lo que esta simplemente omitió palabra
- No confíes en nadie, porque hasta tu sombra te abandona en la oscuridad, tú me dijiste eso ¿lo recuerdas? - comento el pelinegro con un tono más serio y calmado, pero sin dejar de insistirle con sus palabras
- Creo que deberías poner en práctica tus propios consejos - reprocho después de unos segundos de silencio por parte de la chica, los cuales colmaron su paciencia. No sabía si estaba exagerando o no al reprocharle su ceguedad, o como ella creía, la confianza que le tenía a sus amigos, pero él había sacrificado y hecho mucho por ella, además de que la vida le había enseñado que no puedes confiar en nadie, ni siquiera en tu familia, o en los que dice ser tus amigos y ella lo sabía.
«¦»
- Así que... ¿Cuándo pensabas decírmelo? - cuestiono el chico con seriedad recargándose con sus manos sobre el escritorio frente a el
- No pensaba hacerlo, no hasta que... - contesto dejando inconclusa la frase al no tener aún una excusa convincente, o mejor dicho, una mentira que fuera creíble para el
- ¿Hasta qué...? - pregunto frustrado haciendo énfasis en su pregunta exigiendo una respuesta
- Hasta que hubiera acabado con él, creí que podía hacerlo sola - explico segura de sus palabras, pero a la vez con un tono de disculpa para convencer a su hermano de que estaba arrepentida
- ¿Sola... tu, contra un Kanima? ¿Sabes cuán peligroso es? - le regaño aparentando preocupación, pero McKenzie sabía que lo único que en ese momento sentía su hermano era impotencia y rabia, a una vez más darse cuenta de que su pequeña hermana desobedecía sus órdenes, y que a pesar de su amnesia no sería sencillo controlarla como el había supuesto desde el principio
- Ya no somos mercenarios ¿Entiendes? somos cazadores, trabajamos juntos - le recordó recibiendo una leve afirmación con la cabeza por parte de la rubia, la cual lo único que quería era mantenerse callada para que su vomito verbal no la delatara
«¦»
- McK ¿qué haces aquí? - pregunto la pelinegra sorprendida al ver a la chica entrar por la puerta principal seguida de su hermano y un par de hombres más los cuales siguieron su paso hasta el sótano guiados por la madre de la chica
- Les dijiste - hablo McKenzie al ya encontrase las dos solas
- Solo... no es como lo estás pensando - dijo afligida mirando a la chica
- No intentes arreglarlo Allison - reprocho seria cortando sus palabras
- Hay gente muriendo - intento explicar conteniendo las lágrimas, a pesar de todo tenia esperanza en que su padre pudiera ayudarlos
- Mira - ordeno seriamente atrayendo su atención ates de dejar salir un pesado suspiro
- Lo único que hice desde que llegue a Beacon Hills fue mentir, le mentí a todos, antes de este lugar asesine hombres lobo inocentes, tantos que ni siquiera puedo recordarlos, pero ante todo personas, personas que no le habían hecho daño a nadie, y es era algo que yo no entendía, me enseñaron que un hombre lobo ya no era una persona si no un animal salvaje al cual tienes que matar para que este no lo haga antes - dejo salir todo el aire de sus pulmones y reprimió las lágrimas que amenazaban por caer antes de continuar
- Eso es lo que ellos harán, van a matar a Jackson no van a intentar salvarlo - revelo como si le recriminara su culpa
- Él no les preocupa, pero no te lo dirán, no te dirán que lo asesinaran porque aún no creen que estés lista para todo esto - dijo con cinismo al mismo tiempo que una voz en su cabeza le preguntaba lo mismo "¿Y tú si lo estás?"
«¦»
Chris tomo una escopeta automática y se la entregó a uno de sus cazadores, cerro la rejilla de metal que resguardaba sus armas y miro a su hija la cual simplemente se limitaba a observar.
- De acuerdo - hablo Chris para llamar la atención de los presentes
- La fiesta es en una bodega dentro del sector industrial - explico el hombre para después mirar a la pelinegra la cual se encontraba sentada en la parte baja de la escalera
- Alison dice que Jackson Whittemore ira buscando su siguiente blanco entre la multitud, dado que aún no sabemos qué tan fuerte es tenemos que ser muy precavidos - anuncio mientras Gerard escuchaba y tomaba sus coctel de tabletas
- Cuando Allison o McKenzie sepan la ubicación de Jackson y determine que este en un punto óptimo para que lo atrapemos nos llamaran - aseguro el hombre poniéndose su porta armas en la cintura al tiempo que miraba a Cooper el cual asintió levemente al estar de acuerdo
- Optimo significa que lo más lejos posible de las personas - explico Sam con desdén el cual había creado un resentimiento y odio hacia la chica la cual se limitó a asentir con la cabeza
- No habrá daños colaterales esta noche adelante - asevero Chris en un tono alto de voz
- Adelante - le ordeno su padre a la chica la cual se puso de pie y subió las escaleras sin decir palabra, seguida de McKenzie la cual sabía que también la orden era para ella, ya que las dos tenían que asegurar el blanco, en ese caso, Jackson
- Aunque parece que lo hace con gusto - hablo Cooper de brazos cruzados después de que las dos chicas salieron del sótano y atrayendo la atención de Chris el cual aseguraba su porta armas a su pierna
- Tu protegida también parece tener la impresión de que planeamos una trampa - comento el chico con seriedad al mismo tiempo que Chris recargaba su arma y la embolsaba en su porta armas
- Y no necesita saber más que eso - dijo a lo que recibió una sonrisa sínica por parte del rubio el cual se seguía preguntando porque no cambiaban de una ver y por todas a lo que eran ellos, cazadores sin código ni moral, era mucho, mas practico que segur reglas, además de que era como su padre se llamaba a ellos mismos
- Quiero que le quede claro a los demás - ordeno Gerard llevándose la atención de los cazadores
- No atrapas a una criatura, peligrosa la aniquilas - aclaro después de haber tomado una navaja de bolsillo de la mesa frente a el
«¦»
McKenzie salió a paso rápido de la casa en dirección hacia su auto al mismo tiempo que llamaba por tercera vez a Scott, y que al igual que Stiles no contestaban a su llamado. Al llegar a su auto golpeo este con su puño lleno de frustración lastimándose levemente, busco las llaves en el bolsillo de su suéter mientras que con su otra mano marcaba nuevamente el número de Scott, coloco el celular en su oreja y al esperar unos segundos de tonos de llamada el contestador volvió a sonar haciéndola desesperar y soltar un grito ahogado.
«¦»
- ¿Que estás haciendo? - pregunto Scott a la chica la cual se encontraba con Matt en la fiesta y del cual se había alejado de el para ver al pelinegro
- Me dijiste que saliera con el - contesto siendo obvia al no entender su reacción
- No, no aquí - intentó explicar dejando a Allison más confundida
- No entiendes, tenemos un plan - trato de explicarse nuevamente recibiendo una expresión sorprendida e incrédula como respuesta
- ¿Tienen un plan bueno? - dijo más como una pregunta hacia ella misma a lo que el chico asintió levemente con la cabeza
- Bueno mi padre, Gerard y Cooper vienen en camino - le revelo desesperada
- ¿Que les comentaste? - pregunto el pelinegro desconcertado seguid de que la chica dejo de hablar
- Yo les dije... - intento aclarar siendo interrumpida por un Scott muy desesperado
- Allison - hablo en reproche al poder imaginarse lo que los cazadores hacían ahí
- Yo, yo tenía que decirles la verdad - al escuchar sus palabras Scott se quedó en silencio un par de segundos poniendo sus ideas en su lugar
- Ellos saben que es Jackson - aseguro más para sí mismo que para ella
- Hay personas muriendo Scott ¿que querías que hiciera? - pregunto desesperada en un tono más alto, como si le reprochara y el tampoco, al igual que McKenzie no entendiera que solo lo había hecho para ayudar
- Solo tenías que confiar en mí - reprocho enojado el pelinegro inspeccionando el lugar con la mirada en busca de Jackson o alguno de los cazadores
- Y confió, en ti más que en ninguna persona - confeso con el mismo tono usado anteriormente, pero lo único que Scott podía hacer en ese momento era pensar en cómo hacer para que ellos no se interpusieran
- Teníamos un plan - dijo el pelinegro con la mirada perdida
- Ellos igual - aseguro Allison
- No va a funcionar - se dijo a sí mismo el chico convenció de que todo ya se había arruinado
- ¿Qué quieres que haga, sí? puedo, puedo arreglarlo por favor por favor Scott solo dime lo...- suplico con desesperación atrayendo la mirada del chico
- No te interpongas - le ordeno interrumpiéndola para después alejarse de ella
- Scott lo llamo en un grito desesperada
- No te interpongas - repitió en tono alto mirándola unos segundos para después seguir su camino dejando a la pelinegra llena de impotencia
«¦»
3 camionetas aparcaron detrás de la bodega donde en esta se llevaba a cabo la fiesta, de estas salieron los cazadores de Argent junto con Gerard y Chris, quienes eran acompañados también por Cooper y sus cazadores. Los presentes armados dieron unos cuantos pasos al frente alejándose de los vehículos y revisaron el lugar con una mirada rápida antes de que Gerard hablara.
- Cuidado caballeros, algo malo está por venir - comento el hombre como si disfrutara de lo que pasaba y pasaría en un corto tiempo, a lo que Chris lo miro con seriedad
«¦»
- ¿Porque yo? - pregunto el chico de ojos azules al pelinegro
- Porque debo asegurarme de que Argent y los cazadores de Cooper no arruinen el plan - aclaro con la jeringa en manos y mirando a su acompañante el cual llevo la suya unos segundos hacia la pista llena de gente bailando y saltando al ritmo de la música
- Mira tiene que ser intravenoso, debe llegar a la vena, cuando lo encuentres jala el embolo de aquí - le explicó mostrándole como debía hacerlo
- Creo que en el cuello será los más sencillo - comento dándole una opción señalando el cuello de Isaac
- Encuentra una vena, métela ahí y jala el gatillo, con cuidado - elucido mirándolo fijamente mientras este tomaba la jeringa
- Dudo que yo pueda lastimarlo - comento el chico dejando salir una leve risa ante sus últimas palabras
- Me refiero a ti - dijo Scott siendo suficiente para atraer la atención de Isaac el cual tenía su mirada en la jeringa y la cual tomaba con fuerza
- Puedes salir herido - le dijo intranquilo después de unos segundos de silencio para después alejarse de ahí dejándolo solo
«¦»
- Scott - grito McKenzie al ver al chico a un par de metros de ella
- ¿Porque no contestas? te he estado llamando - reclamo con desesperación cuando este ya se encontraba frente a ella
- Eso no importa, mi hermano y los... - se interrumpió a sí misma y a Scott el cual estaba a punto de hablar al querer llegar a lo que era importante
- Lo sé - dijo el chico sin dejarla terminar llevándose una mirada extrañada por parte de la rubia
- Allison ya me lo dijo, pero necesito saber si tú también les dijiste algo - le pido en tono afligido y desesperado. Allison les había contado y el obviamente se había puesto histérico, pero que McKenzie hubiera hablado, después de todo lo que había hecho por ellos, hasta mentirle a su propia familia junto con los cazadores le había hecho confiar plenamente en ella y no sabría como reaccionar al enterarse que su amiga estaba de parte de ellos
- Estoy contigo Scott - aseguro mirándolo fijamente a o que el chico asintió aliviado
- Te ayudare, solo dime que hacer - Scott respiro profundamente y de alguna forma envidio la valentía de la chica
- Aquí nada, no quiero que Jackson te lastime - dijo mirando el lugar en busca de este o alguna de este
- Pero... - reclamo McKenzie siendo interrumpida
- Isaac y Érica se encargaran de él, tu ve al estacionamiento, ahí esta Stiles y creo que también Derek junto con Boyd - dijo rápidamente mientras seguía inspeccionando el lugar de vez en cuando
- ¿Qué? ahí está Chris, Gerard, mi hermano, todo el sequio de cazadores está afuera esperando la llamada de Allison o la mía - comento con exasperación haciendo énfasis en cada palabra dicha
- Está bien, está bien, solo déjame pensar - pido perdiéndose en sus ideas por unos cuantos segundos
- Yo ayudare a Derek, tu busca a Stiles - dicho eso se alejó de ahí a paso rápido en dirección a la salida
- Scott - grito McKenzie mirando al chico marcharse el cual al escucharla se detuvo rápidamente y regreso su mirada a ella
- No te hagas el héroe - le pido preocupada y segura de que lo había escuchado a pesar del ruido ya que este asintió con la cabeza y continuo con su camino
«¦»
- Derek, vete de aquí - ordeno Chris cuando este al igual que Boyd y sus cazadores, junto con Cooper detenían su paso unos frente a otros quedando unos pocos metros de distancia
- Vete de aquí - repitió sus palabras con diversión
- ¿Es todo lo que vas a decir? - pregunto con la misma expresión en su tono de voz haciendo enfurecer interiormente al hombre
- Debo ser honesto Chris, esperaba mucho más del cazador veterano de hombres lobo - comento con una sonrisa en el rostro, demostrándole que, el que estuviera ahí no significaba que él se marcharía o no llevaría a cabo su plan
- Bueno ¿qué tal esto? - dijo Chris esbozando una sonrisa
- Que acaso ¿nunca te dijeron que no lleves garras a una pelea con armas? - pregunto tratando de intimidarlo o enfurecerlo al tiempo que sus cazadores, junto con los de Cooper cargaran y apuntaran sus armas hacia ellos
- Eso sonó muy bien - comento Boyd a Derek dando un paso hacia atrás intimidado a lo que Derek sonrió de nueva canta
- Pues, no creo que te sientas muy confiado, ya que tuviste que pedirle ayuda a... otros cazadores - dijo haciendo énfasis en su última palabra llevándose como respuesta una mirada interrogativa por parte de Chris y una sonrisa cínica de Cooper por el tono usado en sus palabras, sabía lo que quería. Quería hacerlo enfadar y perder el control, pero eso no sucedería, no de nuevo
- A mí tampoco me alegra verte Derek - comento con desdén mirándolo fijamente
- Creí que no tenías código - dijo cuestionándole, como si se burlara de el
- Y no lo tengo, pero un Kanima vale más que un simple hombre lobo, de cualquier forma no te creas tan afortunado que en la primera oportunidad que se me presente, voy a terminar lo que ese día no pude - le amenazo con rabia
De un momento a otro los disparos comenzaron y Derek junto con Boyd intentaban resguardarse detrás de un basurero mientras eran acorralados y atacados por docenas de balas cubiertas de acónito.
Segundos después, al haberse recuperado Boyd salió rápidamente de detrás del basurero atacando a varios de los cazadores los cuales se negaba a dejar de dar pelea y seguían disparando en dirección hacia sus blancos, en ese caso un alfa y un integrante de su manada. Al ver esto Derek salto sobre el gran contenedor oxidado para atacar. Este al escuchar el rugido de Boyd y seguirlo con la mirada su atención se dispersó permitiendo que 2 cazadores le dispararan con unas Taser X26, las cuales a unos segundos de su efecto en él, pudo tomar los hilos y retirar los dardos de su pecho y haciendo golpearse mutuamente a los dos cazadores por su acción y fuerza requerida para lograrlo.
«¦»
McKenzie salió corriendo al ver una cortina de metal entre abierta que daba paso a la parte exterior de la bodega encontrándose con Stiles el cual festejaba dándole la espalada lo cual le impidió darse cuenta de que ella estaba ahí.
- Stiles - grito haciendo que el chico se girara exaltado, esta corrió hacia él y lo único que pudo hacer fue golpearlo con el puño en su brazo derecho
- ¿Eso porque? - cuestiono adolorido llevando su mano hacia la extremidad golpeada
- Demonios Stiles, creí que estaba en medio de un maldito tiroteo ¿Porque no contestas? - recrimino frustrada en un tono alto cuando su preocupación al verlo bien se había esfumado
- Lo siento tuve un pequeño problema - contesto con una media sonrisa al ver su actitud hacia él y su bienestar, al contrario de McKenzie que lo único que pudo hacer fue abalanzase contra el chico fundiéndose en un abrazo el cual correspondió al instante
«¦»
- No, no, no, no, no somos nosotros, somos nosotros - aseguro Stiles en tono alterado al notar como Érica y Isaac se abalanzaban hacia la puerta con intenciones de atacar
- Fenómeno - dijo Stiles hacia Isaac mientras cerraba la puerta de la pequeña bodega y miraba a Jackson sentado en una silla inconsciente
- ¿Está bien? - pregunto McKenzie mirando al chico desvanecido frente a ellos
- Pues... averigüémoslo - dijo el ojiazul caminando hacia este quedando a unos pocos centímetros de distancia. Levanto su brazo izquierdo sacando sus garras y abalanzándolas sobre el cuello de Jackson el cual instintivamente lo detuvo haciendo exaltar a los 3 adolescentes frente a él. Tomo su brazo haciendo quejar al chico de dolor al punto que no pudo mantenerse completamente en pie. Jackson soltó el agarre de unos cuentos segundos y volvió a su estado inconsciente mientras Isaac se alejaba de él.
- Bueno, nadie vuelva a hacer algo así, nunca - precepto Stiles alarmado señalando a cada uno de los presentes los cuales asintieron temerosamente
- Creí que la ketamina iba a dejarlo inconsciente - hablo Isaac disgustado el cual seguía quejándose sin soltar su brazo llevando su mirada al chico
- Si y al aparecer es lo único que va a pasar - manifestó Stiles mirándolo
- Esperemos que quien lo controla haya decidido venir aquí esta noche - dijo McKenzie en demanda mirando a Jackson
- Estoy aquí - oyeron decir a una voz sobria la cual al seguirla llegaron a Jackson el cual no se movía y tenía la mirada perdida pero estaba consiente
- Estoy con ustedes - concluyo alarmando y atemorizando a los 4 adolescentes los cuales tenían su mirada pegada en el
«¦»
Chris miro nuevamente la pantalla de su teléfono el cual no tenía ningún mensaje por parte de su hija o McKenzie. Se recargo en la pared la cual impedía su vista de Derek y Boyd, y suspiro, pero sonido de una escopeta cargándose lo sobresalto llevando su mirada hacia su costado izquierdo donde se entraba Cooper con el arma en manos, y sin pensarlo dos veces salió de su escondite.
- ¿Qué esperas Derek, o acaso tienes miedo? - reto el chico con agitación soltando un disparo al aire e inspeccionado la calle desierta con la mirada
- ¿Qué haces? - cuestiono Chris alterado atrayendo su atención
- Mira, que los estemos ayudando no significa que puedes meterte en mis decisiones, esto es algo que he tenido que hacer desde hace mucho tiempo y tú no vas a interponerte - le encareció con irritación cargando el arma de nuevo. En ese momento Boyd salió corriendo hacia el otro lado de la calle haciendo sonreír al chico de satisfacción
- ¿Dónde estás Derek? - pregunto con inquietud tomando con fuerza su arma y dando unos cuantos pasos hacia donde había salido el chico hace unos instantes
- Aquí - respondió al mismo tiempo que lo golpeaba por la espalda y lo hacía caer al suelo soltando su arma para poder detener el impacto
- Maldita sea - mascullo Cooper golpeando el suelo con el puño al ver como Derek se alejaba
- Voy a encontrarte te lo juro, y esa vez no tendrás tanta suerte - amenazo en un grito cuando se puso de pie y lo único visible era la pequeña silueta de Derek en la lejanía
«¦»
- Jackson ¿eres tú? - pregunto Stiles poniéndose de cuclillas frente al chico
- Nosotros, estamos aquí - contesto con la misma sobria voz y la mirada perdida. Stiles miro a los chicos a sus espaldas los cuales lo miraban igual: anonadados. Regreso su mirada a Jackson.
- ¿Eres el que está matando personas? - pregunto nuevamente
- Somos los que matamos asesinos - fue la respuesta que salió de su boca haciendo que McKenzie se acercara a él y se colocara de pie a un costado de Stiles
- Y todas las personas a las que has matado... - dijo la chica dejando inconclusa la frase esperando que el la terminara
- Se lo merecían - espeto la misma voz con frialdad
- Si tenemos un libro, que dice que solo perdigue homicidas - manifestó Stiles hacia Jackson
- Todo se rompe con suficiente presión aplicada - dijo como paradigma a sus acciones
- De acuerdo, las personas que matas ¿son homicidas? - pregunto la rubia mirándolo fijamente
- Todos, y cada uno, de ellos - dijo enfatizando cada una de sus palabras
- ¿A quién mataron? - interrogo el chico temeroso
- A mí - contesto con ira en su sobria voz dejándolos pasmados
- Espera ¿Qué? ¿De qué hablas? - cuestiono Stiles desconcertado
- Me mataron a mí - dijo con un bufido de ira y rabia atemorizando a Isaac y Érica los cuales dieron un paso atrás siendo observados por McKenzie y Stiles los cuales al instante regresaron su vista a Jackson el cual levantaba su rostro y pudieron notar como sus ojos cambiaban a un tono amarillo y tenían el aspecto de ojos de lagarto.
- Me mataron a mí - repitió con la misma ira en su voz haciendo que Stiles se pusiera de pie y junto con McKenzie se alejaran de él caminando de espaldas hasta llegar con Érica y Isaac
- Bien de acuerdo - comenzó a hablar Stiles al ver como Jackson lentamente levantaba nuevamente el brazo el cual estaba cubriéndose por la piel del Kanima y sus garras estaban fuera
- Más ketamina, el hombre necesita ketamina - pidió alterado sin despegar la vista de el
- Ya no tenemos más - revelo Isaac tratando de estar tranquilo y mostrándole la botella el cual al igual que todos no despegaba la vista de Jackson
- ¿Usaste toda la botella? - cuestiono exasperado llevando su mirada hacia él y quitándole el pequeño frasco de la ano
- Stiles - lo llamo McKenzie alarmada dándole pequeñas palmadas en el hombro al ver como Jackson se ponía de pie. Todos llevaron su mirada hacia el en el momento en que dejo salir un rugido silencioso mostrando su conjunto de dientes perfectamente afilados y comenzaba a transformarse
- Ok, sal salgan todos - ordeno alteradamente Stiles corriendo hacia la puerta
- Deprisa, vamos - dijo Isaac rápidamente mientras empujaba a los 3 adolescentes hacia la puerta la cual era abierta por Érica. Al salir los 4 chicos se recargaron apresuradamente sobre la puerta como si así impidieran que Jackson, ahora convertido en camina pudiera salir
- Ahora, encuentra algo para bloquear la puerta - hablo Stiles al aire esperando que alguno de los presentes le hiciera caso, pero antes de siquiera alguno se moviera se creó un estruendoso ruido producido por la cortina metálica la cual era atravesada por el Kanima dejándolos pasmados
- Tenemos que salir de aquí - dijo McKenzie a lo que todos asintieron rápidamente con la cabeza
- Váyanse, tengo que buscar a Allison - ordeno alejándose de ellos
- McK - la llamo Stiles desesperado al verla marcharse
- Váyanse - les ordeno nuevamente antes de correr en dirección hacían donde se había ido Jackson
«¦»
Allison y McKenzie salieron desesperadas del lugar bajando rápidamente las pequeñas escaleras cuando de pronto alguien tomo el brazo de la pelinegra alarmándola y haciendo que McKenzie detuviera su paso.
- Oigan, oigan, oigan, soy yo - hablo Gerard tranquilizando a las dos adolescentes y haciendo que Allison soltara un gran suspiro de alivio
- Debemos sacarlas de aquí - les dijo para guiarlas hasta el auto
- No funciono, nada de eso funciono - aseguro la pelinegra desesperada deteniendo su paso haciendo que el hombre y McKenzie la imitaran
- No yo no diría eso, de hecho diría que el pronóstico no es tan malo como parece - comento el hombre preocupando a la rubia la cual se limitó a callar y pensar en que es lo que pudo haber pasado para explicar las palabras de Gerard
- Para nada - concluyo con una sonrisa de satisfacción guiándolas de nuevo