Ascenso, Stranger Things

By livfialas

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A S C E N S O ❝Los muertos pueden hablar.❞ 𝔈nid Webster nació para salvar a su... More

introducción
mixtapes
epígrafes
índice de capítulos
o. la muerte es indulgente
volumen i.
ii. el funeral
iii. las luces me encontrarán
iv. construyéndome un hogar
v. sigue mi voz
vi. la primera mentira
vii. necesita una conexión
viii. pensar en sobrevivir
ix. los siete sellos
x. días de apagón
xi. lacrimosa
xii. la mártir

i. la chica rara de la calle cedar

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By livfialas

CAPÍTULO UNO — la chica rara de la calle cedar
( el fantasma de la casa creel, parte i )





ENID



        Tengo la sensación de que si muevo un solo dedo, los relojes funcionarán aunque estén destrozados, y el martilleo constante volverá, al igual que los dolores de cabeza y las punzadas que me recuerdan que estoy viva. No sé cuánto tiempo he pasado sentada en el suelo del salón, pero aún estoy intentando poner en pie el sueño que he tenido esta noche.

        Soy plenamente consciente de que es normal tener sueños extraños si me he pasado las últimas tres noches poniendo en orden la información que tengo sobre Eddie Munson, pero hay algo en los huecos vacíos de esos recuerdos que no consigo cuadrar. Siempre que intento ordenarlos acabo teniendo un vacío mental que me impide continuar, y entonces oigo a mi madre llamándome. Si Howard estuviese aquí diría que esto me pasa por enfocar toda mi atención en esta investigación que no va a llevarme a ningún lado en vez de cuidarme y asegurarme de que como en condiciones y descanso lo necesario como para sobrevivir un día más.

        Ah. Quizá tenga razón.

        Me aparto de la pared y hago uso de mis pocas fuerzas para levantarme y mirar la pila de relojes rotos que hay frente a mí. Vaya. Me he esforzado. Creo que no había puesto tanto empeño en algo desde que el invierno pasado me prometí a mí misma que arreglaría el cobertizo antes de las vacaciones de Navidad cuando faltaba menos de una semana. Al final es verdad que trabajo mejor bajo presión.

        Esta casa está hecha un asco. Desde que murió mi madre, nadie la ha pisado, ni para limpiarla, ni para regar las plantas y mucho menos para remodelarla, así que es vieja, huele mal y toda persona que vive en esta calle no se molesta en mirarla, lo que es una ventaja enorme para alguien como yo, que solo busco un sitio en el que dormir independientemente de que sea bonito o cómodo. Cuantas menos exigencias tenga, menos sospechas levantaré. Mi plan es quedarme al margen, ser un personaje secundario en esta historia, no moverme de las esquinas y sobre todo, no dejar que se me perciba más de lo necesario.

        Howard no echará de menos el dinero que le robé y seguramente no averiguará mis planes hasta que yo vuelva a casa y se lo explique detalladamente a raíz de la nota que le dejé sobre la encimera de la cocina, y que decía que necesitaba despejarme y viajar un poco.

        Él siempre me ha insistido en eso. En viajar, en dejar de hacerme preguntas a mí misma y, en cambio, permitirme responderlas. A veces, por la noche, hablábamos de que me estaba estancando en el pasado y debía pasar página. Se sentía culpable por haberme contado la verdad. No es tu culpa, había dicho, pero yo lo dudaba. Aún lo dudo.

        Nací aquí, en este pueblo, aun cuando era un lugar como muchos otros: tranquilo, habitable, perdido entre los otros muchos miles de pueblos de Estados Unidos. Pero Howard, mi tutor legal, me sacó de aquí después de que se confirmara la muerte de mi madre, y nos trasladamos a Pensilvania, donde crecí siendo una niña que siempre tenía en la boca las palabras «¿POR QUÉ?»

        Siempre he sido una preguntona. Howard tuvo que aceptarlo cuando empecé a cuestionar las dudas más comunes que tienen los niños. ¿Por qué el cielo es azul? ¿Por qué vuelan los pájaros? ¿Por qué no tengo madre? Esta última se la calló durante muchos años, bien porque nunca me acosaron por ello (más bien, los niños de mi clase me tenían compasión), o porque no se veía capaz de decírmelo.

        Pero ahora eso no importa. Porque lo sé, y porque necesito averiguar qué demonios tiene este pueblo para estar maldito.

        El periódico de Hawkins suele llegar a las seis en punto de la mañana, sin excepción, así que a las ocho, hora a la que decido salir de casa, ya está sobre el felpudo, enrollado con una goma casi rota y empapado por la lluvia primaveral que se ha cernido sobre el pueblo. Lo cojo con cuidado de que el papel no se me quede pegado a las manos y lo pongo sobre el mueble del recibidor. El titular dice «NO HAY RASTRO DE EDWARD MUNSON, SOSPECHOSO DE HOMICIDIO»; la noticia es poco prometedora y ofrece detalles poco elaborados, como palabras de los vecinos, algunos que afirman estar aterrados por el desconocimiento de su paradero, y otros que directamente esperan que estuviera muerto.

        Cierro la puerta sin mirar atrás.

        El mal tiempo me permite tener ventaja sobre todos los demás vecinos aún acostados o regocijados junto a las chimeneas para ahuyentar el frío. Hay una extraña neblina que se extiende por las calles, y de vez en cuando el aire trae consigo una nube de polvo espeso que nadie sabe de dónde viene, pero que te ciega durante unos segundos de extrema incomodidad. Es como estar en un desierto. La arenilla, el polvo, se me cuelan por mi nariz y por la boca hasta asentarse en mi garganta y darme la bienvenida oficial al pueblo con un ataque de tos que solo cesa cuando entro en la biblioteca para pedir las llaves del Archivo que hay en el sótano. Entre los papeles, busco rápidamente el nombre de interés y consigo sacar un buen conjunto de titulares más objetivos que el de esa mañana. Titulares con información sobre su familia, sobre su situación. Cosas que me interesan de verdad; no las especulaciones ni los tal vez que han llevado a este pueblo a convertirse en una verdadera secta.

        No entiendo por qué todo el mundo tiene la mala costumbre de juzgar la situación familiar de alguien al tomar constancia de sus acciones. La frase El chico de familia disfuncional, o El desastroso historial de su padre se repite en todos ellos. Siempre me salto esa parte de los artículos, primeramente, porque los detesto; en segundo lugar, porque no me importa saber qué clase de vida llevaba este tío. Solo quiero saber qué pasó con él, por qué no han encontrado su cuerpo y qué tiene que ver con la serie de locuras que llevan ocurriendo en Hawkins desde hace dios sabe cuánto, porque tengo una corazonada de que todo esto lleva a la muerte de mi madre. A esa enfermedad en la que nunca ahondaron. A esa desaparición súbita de su cuerpo. A la razón por la que escondieron todo lo ocurrido con ella desde que supieron que se estaba muriendo.

        Recojo los papeles que necesito y los guardo en el bolsillo interior de mi chaqueta antes de dejarlo todo como estaba y salir. Siento decir que el Archivo de Hawkins no volverá a ver estos documentos. La recepcionista me mira cansada, alzando un poco la vista de su libro de ficción y mostrando una pequeña sonrisa al verme pasar hacia la puerta.

        ❝¿No has encontrado nada de interés?❞ me pregunta con voz suave.

        Sin parar de andar le respondo:

        ❝Quizá la próxima vez.❞








DUSTIN




        Han pasado cuatro días. Hoy es el funeral.

        Steve me ha preguntado cómo estoy alrededor de siete veces desde que ha venido a recogerme y siempre le he respondido que estoy bien y que esto es lo mejor, pero sé que no sé lo traga porque ni siquiera yo mismo lo hago. No tiene sentido que organicemos un funeral para alguien a quien no han encontrado. Es inútil. Tan inútil que me cabrea tener que ir al cementerio, vestido entero de negro para escuchar las palabras de alguien que seguramente se esté cagando en la existencia de Eddie.

        ❝Ha venido Max,❞ dice Steve cuando aparca en la acera contraria a la entrada del cementerio, obligándome a girar la cabeza para ver que es cierto.

        Lucas sujeta su silla de ruedas. Está levemente apoyado sobre ella, hablando de algo que tiene que estar aburriendo a Max, porque tiene los ojos cerrados y solamente abre la boca para decir «ajá» o «mmm». Él parece darse cuenta, rodea la silla y se agacha, apoyando las manos en los reposabrazos de la silla.

        No puedo ver lo que pasa a continuación porque Steve me da un golpe en el hombro para llamar mi atención. ❝Vamos. Hay que bajar.❞

        Acepto a regañadientes. ❝¿Crees que a Eddie le molaría esto?❞

        ❝Creo que se lo merece. Un entierro digno.❞

        ❝Ni siquiera han limpiado su nombre. No les importa, Steve,❞ añado a medida que cruzamos la calle. ❝Si les importara habrían hecho lo mínimo para dignificarlo de verdad. Esto es una mierda.❞

        ❝Lo sé.❞ Steve suspira. ❝Pero tú... Intenta pensar que esto también es por Wayne. Lo necesita.❞

        Llegamos adonde están Lucas y Max, y al momento, llega Erica acompañada de Mike y Will. Por un momento, noto que mi mente se calma y que no me duele la pierna. Estamos todos juntos, a excepción de El, que se ha quedado en la cabaña con Hopper. Steve saluda a todos un poco por encima, revolviendo el pelo de Mike y dándole un golpecito en la espalda a los Sinclair y a Byers antes de entrar y dejarme con ellos.

        Vernos vestidos de luto me devuelve el malhumor.

        ❝¡Hola, Max!❞ saluda Will, y ella abre los ojos, completamente blancos por la ceguera, antes de alzar la mano para entrelazarla con la de nuestro amigo. ❝¿Cómo estás?❞

        ❝Tienes las manos muy suaves,❞ responde ella con voz suave. ❝Estoy bien. ¿Mike está aquí?❞

        ❝Sí,❞ responde él. Automáticamente, Will se hace a un lado y le deja pasar, apartando la vista hacia mí para dedicarme una sonrisa triste que le devuelvo. Tengo que hablar con él. Apenas hemos pasado tiempo juntos desde que llegaron porque las cosas han sido muy complicadas. Echo de menos a mis amigos. ❝Hola.❞

        ❝Estás muy guapo hoy.❞

        ❝Gra...❞ Al captar la broma, frunce el ceño, se cruza de brazos y rueda los ojos. En cualquier otra ocasión le habría reído la gracia y habría molestado a Mike hasta que se acabara marchando, pero ahora mismo solo quiero que este día acabe.

        Max busca la mano de Lucas, quien no tarda en sujetarla para asegurarle de que sigue ahí, junto a ella. Como siempre.

        ❝Dustin también está aquí, Max,❞ dice Lucas. ❝Y Steve ya ha entrado.❞

        Ella le pide a Lucas que gire su silla para poder hablar conmigo. Yo bajo los hombros.

        Me alegra que esté bien. En el hospital dijeron que no podría volver a caminar ni a ver, y tampoco volver a escribir, porque su brazo derecho está completamente roto. Pero está viva, y creo que eso es algo que nos anima a todos de algún modo, y a ella también. No para de sonreír, y las marcas se le quedan en el rostro cuando curva los labios hacia abajo porque le duele no cambiar de mueca.

        ❝Dustin, ¿has traído las camisetas? Lucas dijo que las ibas a traer tú. Yo no soy parte del club, pero me gustaría echar una.❞

        ❝He traído seis. Una para cada uno de nosotros. Gareth, Jeff y Grant dijeron que traerían las de Corroded Coffin. Y Steve ha traído las pocas cintas que salvamos de su tráiler en el Mundo del Revés. De Iron Maiden, Dio y Metallica.❞

        ❝Te dije que no se le olvidaría,❞ comenta Lucas en tono burlón. 

        Me resulta tan raro que todos estemos así, como si nada hubiera pasado. Es una sensación doble que odio con toda mi alma. Me alegra y me extraña a partes iguales porque sé que si cualquiera de nosotros hubiese reemplazado a Eddie, él no habría estado bien. No sé cómo lo habría gestionado pero así no. Nadie ha llorado. Nadie ha hecho nada. Solo yo.

        Y no me parece justo.

        Los chicos se adelantan para entrar y no se molestan en esperarme o disminuir la velocidad para que mi pierna no duela más de lo debido, así que me quedo solo por unos segundos, pensando en lo mucho que detesto estar aquí ahora mismo y en cómo estaríamos si el plan hubiese salido bien. Lucas me ha contado que Jason rompió los cascos de Max y por eso ella está así, y tengo muy claro que todo lo malo que ocurrió ese día es por su culpa. Sigo pensando en ello hasta que alguien choca conmigo, causando que me tambalee y apoye la pierna mala con más fuerza de la debida. Tomo una bocanada de aire y ahogo el grito que llevo queriendo soltar desde que me he levantado esta mañana, cuando mi madre me ha recordado que debía vestirme de luto para el funeral.

        ❝¡Perdona! Lo siento. ¿Estás bien?❞

        La chica que ahora me mira como si le hubiese disparado al pecho tiene el pelo rubio y unos ojos tan extraños que me hacen tragar saliva y retroceder. ❝No pasa nada. No te preocupes,❞ le respondo, asegurándome de que la he visto bien. Ha sido solo una ilusión, pero por un momento he visto que sus ojos eran blancos. Resulta que son de un color azul muy claro. Al darme cuenta, dejo ir la rabia clavándome las uñas en la palma de la mano durante dos segundos. Suzie dice que debería dejar de hacerlo, pero es lo único que me funciona en casos así.

        Además, no es su culpa; no puedo descargar toda mi ira contra ella solo porque el día de hoy esté siendo una mierda y no sepa qué hacer con mi vida. No sabemos qué ha pasado con Vecna, ni quién ha sustituido a Max en el sacrificio. Todo ha pasado tan de repente que ni siquiera he terminado de asimilar nada de lo que ha pasado.

        ❝Lo siento mucho. En serio. Encima vas cojeando. Hoy no es mi día, te lo aseguro.❞ La chica se lleva las manos a la cintura y sus ojos se entrecierran. ❝Un momento. ¿Eres Dustin Henderson?❞

        ¿Debería conocerla? No creo haberla visto por el instituto y puedo confirmar que no está en mi clase. ¿Qué hace aquí, igualmente?

        ❝En carne y hueso,❞ respondo, tratando de mostrar una sonrisa. ❝¿Y tú eres...? Lo siento. No sé tu nombre.❞

        ❝Bueno, no me conoces, así que yo diría que es normal. Soy Beth, una amiga de Eddie.❞

        Esto sí que no me lo esperaba.

        ❝No sabía que Eddie tuviera amigas.❞

        ❝Sorpresa,❞ comenta ella tratando de no reírse, y su mueca se vuelve súbitamente fría. ❝He venido lo antes posible. Estoy hospedándome en un hotel de la calle Cedar. Las noticias vuelan, y quería venir. Me hablaba mucho de ti. De vez en cuando. Cuando no estaba extremadamente ocupado con el club o aprendiendo canciones nuevas y se acordaba de llamarme.❞

        ❝No puedo decir lo mismo.❞

        Ella ladea la cabeza.

        ❝¿Nunca... Me ha mencionado?❞

        ❝Que yo recuerde, no. Lo siento.❞

        Ella traga saliva. ❝Ah... Vaya,❞ susurra. ❝Está... bien saberlo.❞

        Así que Beth, amiga de Eddie. Lleva una camiseta de W.A.S.P. un colgante con una guitarra plateada, y del bolsillo derecho de su pantalón asoma un inhalador. La chica se aparta de mí y suelta una gran cantidad de aire.

        ❝Me da igual,❞ habla. ❝Estoy aquí porque era mi amigo. Ya no puedo hacer nada para recriminárselo. Supongo que nos veremos luego, Dustin Henderson.❞ Al sonreír, se le marcan pequeños hoyuelos. ❝Eddie tenía razón. Pareces simpático.❞

        Y se marcha sin más. ¿Qué mierda ha sido eso?

        ❝Tío, el funeral va a empezar.❞ Ni siquiera me doy cuenta de que Mike está a mi lado cuando giro para marcharme. Al mirarme, él alza una ceja. ❝¿Qué pasa?❞

        Miro hacia atrás, pero no hay rastro de Beth. ❝Nada,❞ le digo.

        ❝Vamos. Wayne está preguntando por ti. Quiere que hables antes de que bajen el ataúd.❞

        Sé que le estoy siguiendo, porque mis piernas se mueven, pero mis ojos la siguen buscando, y mi cabeza vuelve a ponerse en marcha después de haber estado apagada durante cuatro días.

        Beth, no sé si habrás sido amiga de Eddie en algún momento, pero lo que sí sé, es que eres una chica rara de cojones.




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A/N
holi :)

los povs de dustin van a doler !!!!! no sé si esperabais que dejara las cosas como se dejan al final de la temporada pero sorpresa para nadie, no voy a hacerlo!

los duffer deberían aprender que sus acciones tienen consecuencias y una muerte como la de eddie claramente deja secuelas a sus amigos!

sinceramente eso de que dos días después estén todos así 😄😄😁😁😃😆 es 1 poco raro........ y no raro de gracioso de raro sino raro de no sabemos escribir duelos 😝

+psa:
voy a tratar de mantener lo que ya sabemos para esta fic pero dado que no tengo ni idea de cómo va a ir la quinta temporada lo más seguro es que algunas cosas cambien. si leéis algo que no cuadra con la historia principal no os preocupéis! lo tengo bajo control (creo) y será un cambio de vital importancia para la trama

+psa 2:
dios está escrito en minúscula como referencia a las creencias de enid !! si os dais cuenta, en el prólogo siempre habla de la Muerte en mayúscula :) 

+psa 3:
aviso ya que esto va a ser devastador !!!! y de que habrá múltiples puntos de vista. si en algún momento se cambia se escena y no hay nombre de ningún personaje, es que se narra en 3ra persona !!! sé que es un poco unhinged, pero lo unhinged es lo que se lleva 😼 y yo voy con la moda (mentira)

¿qué os ha parecido este primer capítulo? ¿y qué pensáis que va a pasar? me encantaría saberlo 💌 (risa malévola 😼)

Besitos :)


palabras: 2750
publicado: 12 de agosto de 2022

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