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De maria_24_10

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- 𝒀𝒂 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒓𝒐́ 𝒑𝒐𝒓 𝒆́𝒍 3700 𝒂𝒏̃𝒐𝒔, π’‚π’”π’ŠΜ 𝒒𝒖𝒆 𝒂𝒉𝒐𝒓𝒂 𝒍𝒐 π’–Μπ’π’Šπ’„π’ 𝒒𝒖𝒆 𝒅𝒆𝒔𝒆�... Mais

Aclaraciones
ΒΏNecesitas un mapa?
ΒΏQuΓ© tal una cola?
Hasta que volvamos a vernos
Por tΓ­
Lo siento, Senku-chan
Matalobos
ΒΏTe lo he dicho alguna vez?
Agradecimientos

ΒΏCola...?

494 61 11
De maria_24_10


~ This is going to take a long time
And I wonder what's mine
Can't take no more
Wonder if you'll understand
It's just the touch of your hand
Behind a closed door ~

- Yazoo

___________________________________

Después de seis meses desde que despertó, pudo ver llegar a su amigo Taiju desde el techo de su cabaña

- Has tardado mucho grandullón - decía con una sonrisa ladina

- Senku...

Estuvieron todo un año poniéndose al día de los últimos 3718 años sin verse y construyendo nuevas herramientas para crear el líquido para revivir, y después de mucho esfuerzo y tiempo lograron deshacer la petrificación de un pájaro

- Y ¿A quién quieres revivir primero? - «Si fuésemos a buscar a Gen, porque ni siquiera sé dónde está, no sabría cómo explicar que ya nos conocíamos de antes y que estamos saliendo» pensaba el ojirubí para, además, darle la oportunidad a su amigo de revivir a Yuzuriha

- Creo que es evidente, Senku

Lo dijo sonriente y con determinación en su mirada, así que prepararon más líquido para revivir y se encaminaron al árbol dónde se encontraba la joven aún petrificada

Desafortunadamente se encontraron con un grupo de leones hambrientos y más que dispuestos a devorar a los adolescentes y, una vez rodeados, se vieron obligados a revivir a Tsukasa Shishio, el "Estudiante primate más fuerte del mundo", al que, tras describirle vagamente la situación, se levantó y de un golpe mató a un león, provocando que el resto de la manada huyera despavorida

- No os preocupéis, conmigo aquí no volveréis a correr peligro ni pasar hambre. Vosotros os encargareis de la ciencia y yo de la caza

«Este tipo estaba en el show de Gen ¿No?, Él fue uno de los últimos en verle, qué suerte» El más bajo pensó en eso unos segundos «... ¿De qué demonios estoy hablando? Será mejor que me limite a lo que puedo hacer por ahora» Su cara puede que estuviera algo sonrojada por la tontería que había pensado, pero se le pasó rápido y simplemente siguió a Tsukasa y Taiju, que por lo visto se llevaban muy bien, aunque a Senku le daba mala espina el mayor, pero por ahora lo dejaría estar

No tuvieron que pasar más de tres semanas para que las intenciones de Tsukasa salieran a la luz, pues él quería purgar a la humanidad y Senku creía que eso convertiría a la sociedad en un mundo poco emocionante. En esas semanas tuvieron tiempo para comer hasta saciarse, de recolectar almejas para crear varios instrumentos, como jabón, y de, por supuesto, revivir a Yuzuriha, aunque eso fue cuando quedó claro que el científico y el fortachón no compartían sus ideales, por lo tanto tomaron la decisión de ser rivales, ya que Tsukasa pretendía matar a Senku para que no pudiera usar la ciencia, y por ende, crear armas de fuego

Los tres amigos, Taiju, Yuzuriha y Senku, hicieron parecer que habían huido del “estudiante primate más fuerte del mundo”, y se fueron de la cabaña de Senku hacia un rumbo, bastante indefinido, para poder esconderse del varón de cabello largo, al menos hasta tener pistolas para hacerle frente. Necesitaban pólvora para que funcionara, que podía conseguirse con almejas trituradas, azufre, carbón y el ácido nítrico, (era relativamente fácil) y así es exactamente como lo fabricaron, aunque por un pequeño error acabaron creando una explosión, que alguien interpretó como una señal de humo y, en el caso de Tsukasa, usó el humo para descubrir la posición del grupo, pues él no creía que Senku huyera así como así de él

Acertó, y en cuanto llegó allí, vio a Yuzuriha recogiendo ramas para, aparentemente, alimentar el fuego. La usó como rehén para impedir que el más bajo usase la ciencia y se dirigió donde Senku, que estaba de espaldas a donde él se encontraba y sin Taiju cerca. A pesar de que Yuzuriha no permitiría que Senku muriese ni revelase la fórmula del líquido para revivir, y de hecho le dio la oportunidad al mayor para asesinarla, este sólo cortó su cabello y entonces el peliverde se alarmó

Pues la baza que tenía Tsukasa es que eran amigos y Senku jamás dejaría que su amiga muriese a manos de un enemigo que era suyo. Yuzuriha estaba preocupada, y bajo la impotencia de no poder ayudar, gritó el nombre de Taiju, esperando que le hubiera escuchado y que llegase a tiempo. De nuevo, el más alto acertó su teoría, y Senku le reveló la fórmula a cambio de no dañar a la castaña y, aunque no renunció a la ciencia, accedió a ser asesinado rápidamente por él, y así lo hizo, un fuerte golpe en la nuca con el mango de su lanza y Senku cayó muerto

Taiju llegó en ese instante y vio cómo su mejor amigo de la infancia se desplomaba, sin brillo en los ojos y completamente inerte

- ¡SENKU! - el castaño gritó el nombre de su amigo mientras lo tomaba en sus brazos - No... Senku, tú...

Yuzuriha miraba la escena impotente, paralizada, aterrada, triste... Todos los momentos que los tres habían compartido, ahora no eran nada

Taiju empezó a girar su cabeza en dirección a Tsukasa y, enfurecido tomó una enorme roca y la lanzó hacia arriba, en dirección al más alto. Un simple acto que en principio parecía impulsivo, producto de la rabia e impotencia, pero que era un plan bien estructurado donde la fémina lanzó la pólvora en dirección a Tsukasa, que la esparció con una patada y provocó una enorme explosión debido al impacto de la roca anteriormente arrojada. El momento de confusión y humo, lo aprovecharon los castaños más bajos para escapar con su peliverde amigo en brazos, mientras una fina lluvia empezaba a aumentar en intensidad

Pararon frente a un gran árbol y tumbaron al varón más bajo, mientras su amigo trataba de realizarle una reanimación cardiopulmonar, aunque la castaña estaba casi segura de que no funcionaría

- Tal vez deba pasarle aire - decía el chico mientras se preparaba para hace un "boca a boca"

- ¡No! ¡No deberías mover mucho su nuca, Tsukasa le golpeó allí! - decía la chica mientras detenía a su amigo

- ¿En la nuca...? Ésto no tiene sentido, Senku jamás se sacrificaría - pensaba su mejor amigo

Los dos castaños se acordaron de una hora libre que tuvieron unos nueve meses antes de la petrificación, dónde estuvieron en la sala del laboratorio con Senku, haciendo una especie de test donde debías elegir si salvar a tu amigo, a tu pareja o a tí de caer por un acantilado, y Senku eligió buscar la manera de salvar a todos, alegando que eso sólo era una revista basura y que en una situación así ni siquiera podrías permitirte el lujo de escoger

- Tienes razón, Taiju-kun - decía la chica

- Dijiste que le golpeó en la nuca ¿No? ¿Por qué Senku se sacrificaría?

- Su cuello... Ahora que lo recuerdo, Senku hizo un gesto intencionado con su cuello antes de que Tsukasa le golpeara - decía dubitativa la joven

- Es verdad, él hacía un movimiento deliberadamente con su cuello, que anteriormente no había hecho nunca

Le dieron la vuelta al peliverde y apartaron una parte de su cabello para descubrir una parte petrificada de su nuca, donde el castaño le golpeó

- Claro, al igual que con tu pie, tal vez su nuca se cure si le vertimos el líquido para revivir que nos queda ¿No? - Taiju lo decía más bien desesperado porque así fuera, no quería perder a su mejor amigo

- Debemos hacerlo - dijo segura la chica, mientras Taiju dejaba caer todo el líquido en la nuca del ojirubí, esperando que se despertase

- ¡SENKU! - gritaba desesperado el joven - ¡DEBES DESPERTAR!

El peliverde recobró la consciencia lentamente, mientras recordaba sus primeros días cuando despertó de la petrificación y los cálidos momentos que pasó con su padre, y cómo no, con Gen, mientras poco a poco notaba como su cuerpo dejaba de estar entumecido y las gotas de una, ahora, débil lluvia, impactaban contra su rostro

- La lluvia ha cesado - dijo el peliverde, mientras que sus amigos se daban cuenta de ello - No podéis seguir gritando así, la lluvia ya no os ocultará de Tsukasa y él puede encontraros - decía, aún tumbado, cuando sus compañeros se levantaron de un salto mirando alrededor

- Es cierto

- Él no está por aquí ahora ¿No?

Un segundo más tarde repararon en que les había avisado Senku, que su amigo estaba vivo, y por ello Taiju le dió un fuerte abrazo mientras sollozaba, aunque el ojirubí le apartó de una patada, quejándose de que le rompería la espalda

La muchacha encontró una tela que, a vista de ella y del otro castaño, parecía un cohete, y ató el cuello y una larga rama al cuello de Senku, para que no se hiciera daño, aunque éste se quejaba mientras decía que no era necesario. En cuanto el más alto se alejó de ellos, el chico le encargó una misión secreta a la castaña, que sentía mucha responsabilidad, pero que igualmente aceptó

Momentos más tarde decidieron separarse con una despedida, más o menos emotiva, mientras el pedazo de tela del cuello de Senku, a modo de bandera, se movía a causa del aire, y mientras Senku se marchaba hacia las personas que podrían servirle para crear su reino científico, Taiju y Yuzuriha se dirigían al imperio de Tsukasa, como infiltrados

__________________________________

Una joven rubia peleaba contra el castaño de cabello largo, mientras le recriminaba severamente lo que había hecho, aunque éste la apartó rápidamente y la tiró al suelo, posteriormente dejando caer un árbol de una tonelada sobre ella y yéndose de ese lugar sin mirar atrás, mientras la chica se maldecía internamente por perder contra el tipo de pelo largo

Senku vio desde la lejanía cómo el enorme árbol caía y se dirigió hacia allí, encontrándose con la muchacha atrapada bajo el tronco, y se acercó a ella

- ¿Estás bien?

- ¡Oh!, Tú eres el joven caballeroso - decía ella sorprendida - Pensé que el hombre de pelo largo te había asesinado...

- Bien, ¿Puedes aguantar ahí un tiempo? Si puedes hacerlo podré sacarte sin daños al 10.000 millones por ciento, sino me arriesgaré y gastaré mi última pólvora para sacarte

- Mis órganos y huesos están intactos, así que podré aguantar

- Bien

El peliverde se dispuso a crear lo que la fémina identificó como unas ruedas de bambú, pero con unos tubos de bambú rellenos de tierra atravesando las ruedas. También vio cómo fabricaba unas largas cuerdas que colgó de la rama de un árbol cercano y donde pasó la cuerda por una ranura que había en las "ruedas"

Senku hacía cálculos de cuantas poleas necesitaría basándose en su peso aproximado y el peso del árbol. Cortó en tronco por la mitad para reducir el peso y colocó las tres poleas en su lugar, con todas las cuerdas rodeando la rama menos una, que necesitaba para tirar de ella y levantar el árbol de, ahora, 500kg. Trepó el tronco del árbol hasta llegar a pasar la cuerda suelta por la rama y la untó con el jabón que antes fabricó para evitar que se rompiese por la fricción, y una vez hecho eso, sólo se dejó caer, pues el sistema de poleas que creó permitía que un enclenque de unos 60kg pudiera levantar el peso de media tonelada sin esfuerzo

Ató fuertemente la cuerda al tronco y miró en dirección a la joven, para ver su estado

- Creo que me he quedado embelesada

La cara del adolescente era todo un poema

- No me digas que es como en esas películas basura y te has enamorado de mí en una situación como ésta - su expresión y tono pedía a gritos que no fuera así, mientras veía a la fémina levantarse de su sitio y rehacerse la coleta

- ¡Nunca he dicho eso, quería decir que me pareces interesante y quiero trabajar contigo! - la muchacha estaba alterada por el comentario del contrario, algo cabreada también

- Pues te lo agradezco, no hay nada más ilógico e inútil que un cerebro enamorado - el ojirubí seguía pensando en eso aunque estuviera con Gen, pero realmente lo dijo por la nostalgia, llevaba demasiado tiempo sin decirlo. Después de eso tuvieron una pequeña charla cuando anocheció, hasta que finalmente la rubia accedió a dormir

Al amanecer, antes de llegar a la aldea de la joven, donde le indicó al peliverde que tendría mano de obra, pasaron por un lugar dónde había agua caliente que la "leona", llamada Kohaku, llenó en una ánfora bastante grande, aunque mientras la cargaba se quejó, adolorida

- No deberías llevar algo tan pesado, tus lesiones no se han curado

- Estoy acostumbrada, no te preocupes

- ¿Cuántas veces llevas esa cosa?

- Al menos cinco veces al día, forma parte de mi entrenamiento - lo dijo como si fuera lo más común del universo

Kohaku estaba herida y, sin querer, resbaló casi dejando caer el jarrón, pero el chico sostuvo una parte en el último instante

- Déjame que lo lleve

- Actúas como todo un caballero

- Sólo déjamelo - tomó la vasija, pero a los pocos segundos se cayó por el peso de ésta

- Pero eres muy débil

- ¿¡Cómo puedes llevar ésto cinco veces al día!? ¡Realmente eres una gorila!

- ¡No me llames así!

Recogieron el agua de nuevo, y el peliverde pensó en una manera de llevar la ánfora de manera rápida y sin que ninguno tuviera que cargar con ella. Halló la solución, tomó las poleas y, con ramas y lianas creó un triciclo lo suficientemente grande y resistente para cargar con los dos y con el recipiente, y así llegaron a la entrada de la aldea donde una, para nada, cálida bienvenida les esperaba, en concreto al ojirubí

- Los forasteros no pueden entrar

- Las reglas son las reglas

Unos vigías que estuvieron a punto de atacar al peliverde y le denegaban el paso al mismo

- Pero él me salvó

La rubia trataba de convencerlos

- Lo siento Kohaku, las reglas dicen que no se debe dejar pasar a un forastero, sin excepciones - un hombre castaño y alto, de ojos verdes y llamado Kinro se cruzó de brazos y miró al frente con el ceño fruncido, mientras el otro guardia, más bajo y delgado, con el pelo algo más largo y de color rubio, aunque con los mismos orbes esmeraldas, sólo miraba a los contrarios

- Seguro que será fácil ganárselos... - decía el adolescente mientras sacaba el jabón y lo hundía en el jarrón con agua, creando espuma en sus manos y formando una "o" con sus dedos para soplar y crear burbujas de jabón

- ¡Qué es eso! - los dos guardias atacaban a las pompas como si fueran venenosas

- Así que ese es su nivel... - decía aburrido el científico mientras rascaba su oído

En el momento en el que el más joven de los vigilantes, Ginro, estaba a punto de huir, llegó otro chico castaño, con una gruesa cuerda, que todos tenían en sus vestimentas, rodeando su cabeza

- ¡No os dejéis intimidar por este hechicero novato, Kinro, Ginro! ¡Son sólo burbujas de carbón! - decía mientras explotaba una de ellas

- ¿no querrás decir jabón-? - musitó entre dientes el ojirubí, mirando al recién llegado

- No estaba asustado - decía Kinro, recomponiendo su postura - Yo sí lo estaba - le secundó Ginro mientras rascaba su nuca

- Chrome, ¿Qué haces aquí? - le preguntó Kohaku

Le respondió vagamente y retó al peliverde a una batalla de "hechicería", donde era obvio que el ojirubí desentrañó cada truco que Chrome hacía, quedándose con la cabaña del castaño y con sus propios servicios

Estuvieron hablando sobre la colección de rocas y minerales que el de orbes cafés había recogido a lo largo de su vida, con esperanza de que algo de lo que él recolectó pudiera servir ayudando con la enfermedad de Ruri, la sacerdotisa y hermana de la "gorila"

Finalmente, el ojirubí se ganó al guardia castaño, convirtiendo su lanza en una lanza dorada, muy conveniente e irónico, pues el nombre "Kinro" hace referencia al oro, y su hermano, Ginro, quería una lanza de plata, pero por desgracia el peliverde no se la concedió y le ignoró, por lo que Ginro empezó a estar un poco celoso y molesto con su hermano, aunque nada serio, por supuesto

Más tarde, buscando en un río con imanes, se toparon con Suika, una niña que vestía con una sandía en su cabeza, y gracias a ella lograron descubrir cómo ganarse a las personas de la aldea; con ramen, de mijo en este caso

Se pusieron manos a la obra y lograron cocinar un ramen, que si bien para Senku, un adolescente de un pasado más avanzado, no era la mayor de las delicias precisamente, para los habitantes del poblado, que nunca probaron algo parecido, les pareció comida de los dioses, y así fue como ganó mano de obra para hacer hierro, necesario para la electricidad, por sus propiedades conductoras de la dicha

- Me dan ganas de beber algo, como un refresco de cola

Mientras el peliverde servía más ramen en tazones, escuchó un quejido lastimero y sobreactuado, al que no prestó atención hasta que reparó en que los aldeanos no sabían que era la cola, y finalmente reconoció la voz de un joven, el joven

- ¿Cola...?

__________________________________

~ All I needed was the love you gave
All I needed for another day
And all I ever knew
Only you ~

- Yazoo

__________________________________

Lo he alargado de más, ¿Cierto?, En fin, pronto estará en reencuentro de los dos akfnskfdk, el final, se podría decir que está medio cerca, si tuviera que expresarlo en porcentajes, diría que vamos por el 50% de la historia, con que todavía queda, pero no tanto. Entonces, espero que hayáis disfrutado el capítulo, la próxima semana más, y no sé si mejor, pero trataré de que así sea :'D

~ENTP

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