Nos quitasteis la libertad
Olvidasteis vuestra responsabilidad
Y así decreció vuestra efectividad
¿Quién votará si el pueblo muere por falta de pan?
¿Qué pasó con el capital?
No queráis callarnos, intentamos hablar y solo recibimos disparos.
El daño está causado,
la acción se desenfunda
y el poder crece, tanto que no cabrá en ninguna urna.
Vuelve el Hip Hop a la calle
No os olvidéis, vamos a por todas.
Pues cuándo nos quedamos sin nada,
tan solo tuvimos ganas
De ver cómo vuestro sistema se apagaba."
Sean y Alejandro han sido capaces de infiltrar unas pequeñas rimas dentro de la televisión. Hasta hacía 10 años esto había sido imposible, ellos no tenían suficientes formas de poder lanzar el mensaje.
En la Mancha todo está revuelto, la gente grita de emoción. Muchas personas dicen que todo ha cambiado gracias a mí, aunque yo me sigo viendo insuficiente. Yo no tenía ni idea de esto hasta que no ha salido, llevo días encerrada dentro de la cama y mantengo al máximo la soledad, pues no me apetece dar explicaciones a nadie sobre por qué me había desmayado aquella tarde.
Creo que lo que más miedo me da de todo es la idea de enfrentarme a Alan. Él sabe que entre nosotros algo no marcha bien, al igual que lo sé yo, pero ninguno de los dos está dispuesto a hablar de una forma totalmente clara. Yo le quiero, le quiero tanto como nunca había querido a nadie, en cambio, no creo que llegue a amarle y suena egoísta el pensar que si tal vez Sean no hubiese aparecido por nuestras vidas, todo seguiría igual que antes, pero no soy capaz de engañarme a mí misma por mucho que quiera.
Sigo pensando en el recuerdo que tuve aquella tarde.. ¿Y si tal vez Sean tenga razón? Tal vez, solo necesite algo de tiempo para entenderme. Debo llegar a entenderme y debo, por respeto, dar una oportunidad a mi antiguo "Yo". Si estaba loca por Sean antes de que me borrasen la memoria, creo que mis razones tendría.
En fin, evito pensar en esto aún así, pues hay cosas más importantes ahora mismo que yo. Todavía no sé cómo afrontar una revolución, así que muchísimo menos, liderar una. Esta es mi familia, las personas que luchan por un mismo objetivo que el mío - ¿Y no era acaso, la desigualdad, mi primera queja desde los principios de los días?- así que de cierta forma, hemos tenido que volver. Creo que nunca nos fuimos, me refiero al hip hop, a la gente de las calles y es que, el pueblo tiene una única voz y debe ser escuchada.
- Es hora de sacarte de la cama, tienes que contemplar por ti misma lo que han conseguido tus versos.- Dice Sean, después de entrar por la puerta y dar un beso en mi caliente frente.- Va, sé que me dijiste que no se lo dijera a nadie, pero esas rimas son tuyas.
- No tengo fuerza.- Respondo haciéndome la niña más enferma del planeta.- Puede que mañana...
- Sal ya, o te llevaré en brazos.- Y entonces, empieza a hacerme cosquillas, las cuales acaban en una pelea de almohadas. Cuando siento que mis hoyuelos van a estallar de la risa contenida y emitida, me doy cuenta de que alguien más abre la puerta, Al. - Eh!- Saludo. Aunque se puede notar en su cara la decepción y el enfado.
- Siento haber interrumpido algo. Mejor me marcho.
- No, da igual, me voy yo. Al fin y al cabo te la he robado un poco estos últimos días.- Responde Sean de espaldas a él, guiñándome un ojo. No puedo evitar esbozar una sonrisa, aunque Alan se lo toma de todas las maneras menos bien.
- Al fin y al cabo es mi novia ¿No?- Y ahí están, los putos y malditos celos. Aunque no le critico, pues tiene razón. He sido una cabrona, intentando hacerme la loca, diciendo que era para conocer mi antiguo "yo" todo este tiempo que no he pasado con él, cuando en realidad era que me moría de ganas por estar con Sean después de la primera vez que le vi. Tal vez, Al tenga motivos suficientes como para quejarse, pero eso no evita que no me haya sentado mal que en esta semana no haya aparecido por mi habitación para preguntar ni cómo estoy. Tal vez, la culpa ha sido de los dos.
Sean sale, sin forzar nada. Sabe que el ambiente está bastante caldeado como para montar un espectáculo y ahora mismo es lo único que no quiero, más peleas.
- Lo siento mucho..- Digo.- No sé muy bien por qué, quizá por todo. - Él se tumba en mi cama, apoyándose en mi pecho. Yo le acaricio el pelo, como antes cuando todo era más normal, o intentaban desde fuera simular una normalidad fantasiosa..
- Yo también, pero no puedo evitarlo. No puedo evitar quererte y sentirme como una mierda cuando.. En fin...- Intenta coger aire.- Es que, aunque hayan pasado 3 meses, para mí todo ha ido demasiado rápido. Estoy intentando hacerme a tu mundo, pero no es fácil, compréndelo.
- Lo hago, te juro que lo hago, pero por eso mismo estoy de esta forma. Este es mi antiguo y ahora mismo, actual mundo. Me debo una explicación a mí misma de quién soy y para ello, necesito estar envuelta con la gente que me quiere.
- ¿A caso yo no lo hago?- Se levanta, me mira de forma gélida, el azul de sus ojos queman y no puede estar más tenso.
- Tú eres todo. Todo ¿Entiendes la palabra todo?- Le respondo y siento que se tranquiliza. Estoy sentada, a la misma altura que él, pasando mis brazos alrededor de su cuello.- No te voy a mentir, a veces ese "todo" me caga, pero me vale la pena cagarme si después pienso en todos los buenos momentos, en TODO lo que nos hemos querido.
- Eso es lo que pasa, que piensas en los momentos que recuerdas y cuando vuelves a pensar en el borrado de memoria, te vuelves a nublar, porque no sabes si lo anterior te hacía más feliz.- Apoya su mente sobre la mía, acortando la distancia entre nosotros.- Pero, al mirarte desde aquí, a los ojos, a tus ojos color lavanda, me doy cuenta de que todo lo que quiero siempre ha estado delante de mis narices, todo lo que me ha hecho feliz. - Muerdo mi labio, pidiéndole que me bese, porque me muero de ganas, porque estoy delante del Alan al que quiero.. - Pero en cambio, tienes dudas y por mucho, que... Joder, para de hacer eso.- Repito el gesto.- Me vuelves loco, deja que termine de hablar, por Dios. Por mucho que yo quiera hacerte ver lo locamente enamorado que estoy de ti, tú no lo estás. No lo estás... Y si lo estuvieses, no le buscarías a todo un " por qué" porque yo también podría hacerlo. Es más mi padre es un cabrón comparado con el tuyo, pero me da igual quién sea, porque solo me hace falta una persona en mi vida y esa eres tú. - Se levanta, zanjando de golpe toda la tensión y saliendo por la puerta.
-Creo que acaba de romper conmigo.- Es lo único que puedo lograr pensar y, por si antes tenía mis dudas, ahora sé que estoy totalmente muerta, que la persona que me complementaba se había marchado por mucho que yo le quisiese, porque yo no llegaba a amarle.
Decidí pasar 30 minutos de sumito descanso dentro de mi cama, hasta que empecé a pensar en las consecuencias de mis actos ¿De verdad quería terminar mi relación? ¿Iba a permitirlo? ¿Y Alan, qué haría después de conocer su pasado? No creo que pudiera volver a la vida que teníamos que hacía 12 semanas habíamos dejado atrás, era imposible.
Al salir de mi habitación, me di cuenta de que la gente celebraba la difusión de nuestro pequeño spot. Aquel día podría haberse marcado como el inicio de una nueva revolución.
Peace brindaba encima del escenario, mientras que Nacho improvisaba un poco y James (Un chico de nuestra quinta, introducía una base). La gente se arremolinaba bajo ellos y se divertían, tal vez fue la revolución con el inicio más retórico del universo. No vi a Sean por ninguna parte, al igual que a Alan. Pregunté a cualquier cara que me sonase, pero todos me contestaban lo mismo. Nadie sabía nada.
- Hey mirad, ahí está Denn. - Chillaba mi hermana levantando su cerveza.- Sube aquí a celebrarlo.
Seguía sin entender mi papel de líder, pero supe lo suficiente como para comprender que la gente necesitaba escuchar una voz más allá de una base y las personas estaban expectantes. Alguien me llegó a pasar un micro y me senté allí, rodeada entre mi gente, esperando a desenvainar las primeras palabras que marcarían mi legado.
- Pez, Nach, Jota, bajad de ahí y venid aquí.- Les dije por el micro. - Sentémonos en el suelo.
La gente parecía confusa pero todo el mundo acató mi orden.
- Quiero estar a vuestra misma altura, quiero firmar parte de vosotros y que vosotros formeis parte de mí, quiero ser uno. Quiero, luchar a vuestro lado, que todos guiemos nuestros corazones hacia una misma dirección, quiero que nadie piense, que es superior. - Me puse de pie y seguí hablando. Estaba expresando todo lo que tenía guardado. - No me moveré sin vosotros, no recorreré ni un kilómetro si alguien falla. Estamos aquí por una causa común, por volver a tomar lo que es nuestro, la libertad de conducir nuestro destino sin que nadie se oponga. Busco la igualdad dónde todos podamos ser felices con el objetivo de darle algún valor emocional a nuestras vidas. No quiero jefes, no quiero presidentes corruptos, No quiero vendas en mis ojos ni cerrojos en mi boca. ¿Qué buscáis, que queréis, por qué luchais? Hoy es el día del cambio, tenedlo claro. - Empezaron a chillar los vítores de toda la gente y me sentí inmensa.- Nuestros padres nos dejaron algo que defender y yo, volveré a ser vuestro ángel guardián.