YELLOW (Ross Lynch) (Hot)

By _R5FamilyLatina_

1.4M 48.2K 14.2K

1.- Red 2.- Blue 3.- White 4.- Yellow More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
<3
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Por favor lean esto

Capítulo 36

21.1K 1K 304
By _R5FamilyLatina_

-No me toques.-advertí.

Ambos rieron, y sus miradas de superioridad de instensificaron.
¿Por qué estaba pansando esto? ¿Qué estaba haciendo yo allí?

La confusión con la que desperté hace 5 minutos no había desaparecido.

Sabía que ellos me habían traido, recordaba haberlos visto antes de que todo se pusiera oscuro, pero luego había un gran espacio en blanco, eso terminaba aquí.
En una habitación de paredes cremas, suelos sucios, y ventanas cubiertas con polvorientas cortinas.

-Veamos si continuas siendo así de amable luego de unos minutos.- dijo el más alto.

Por la apariencia de ambos pude decir que eran hermanos: la misma estructura robusta, cabello oscuro, largo y desordenado. Ambos tenían la misma asquerosa sonrisa.

El alto se acercó a mí, ambos me miraban como si fuera un extraño animal del zoologico, y se detuvo cuando yo retrocedí.

Soltó una pequeña risita.

-No te hare daño.

Oh, seguro.

-¿Qué hago acá?

El alto le hizo una seña al bajo, y este le sonrió. Metió una de sus manos a sus bolsillos.
Mi corazón se detuvo.
Oh no.

Pero mi pulso volvió a casi su normalidad cuando solo sacó un delgada soga.
No era un arma.

Caminó hasta mí, retrocedí y choqué con la pared.
Tiró de mí y me giró, juntó mis dos manos y las ató con la soga.

Sabía, gracias a mi padre, que cuando esto pasaba lo peor era perder el control.
Volverse loca y dejar que el miedo se apodere era un camino fácil a lo peor, y no darles problemas iba a hacer que ellos no me vean como un fuerte oponente, lo cual no les daba la necesidad de lanzarse sobre mí al instante.
Decidí jugar con la segunda.

Terminó de atar mis manos y con un tosco tirón me hizo quedar nuevamente frente a ellos.

-Solo para asegurarnos de que no saldrás corriendo.

-¿Porqué no ataron mis piernas entonces?

¿Qué van a hacerme? Y ¿Por qué?
No encontraba respuesta para ninguna apesar de que mi cerebro sugería muchas cosas.

-Ella es inteligente, hermano.- dijo el alto. Sonrió. Estaba cansandome de esa fea expresión.-Supongo que tú ya sabías de nosotros. Tuviste mucho cuidado durante los últimos días pero por alguna razón hoy estuviste disponible y bastante facil.

No los interrumpí.

-Y creímos que sería más dificil.- continuó el 2do.- Imaginamos que tendríamos que dormirte más de una vez, pero resultó que solo fue necesaria una.

Toqué mis brazos.

-¿Qué me inyectaron?- ahora entendía porqué sentía un pequeño escozor en cierto punto de mi piel.

-Nada peligroso, solo te mantuvo inconsciente por unas horas.

Oh gracias.

-¿Qué hora es?- volví a interrumpir.

Uno de ellos rió.

-No te preocupes, tenemos tiempo de sobra.

Volví a quedarme callada.

-Y luego solo tuvimos que colocarte dentro del auto y conducir hasta que llegaramos a este hermoso lugar.

La manera en la que contaba todo solo me molestaba más. Era como si contara una anecdota divertida de la que debía presumir.
Esto no era divertido.
No lo era.

-No has contestado mi pregunta.- reclamé.- No has dicho porqué estoy acá.

Ambos se miraron y sonrieron.

-Tal vez quieras ponerte cómoda.- dijo bajo al mismo tiempo que se sentaba en una de las sillas que había en la esquina. El otro se mantuvo de pie.

-Estoy bien, gracias.- respondí.

La puerta estaba a unos metros.
¿Cómo iba a abrirla? No tenía mi idea, pero tal vez si la pateaba lo suficientemente fuerte cedería.

El alto empezó a caminar en circulos alrededor de mí: observandome, estudiandome, disfrutando de mi situación.

Mientras que el otro se limitó solo a mirar.

-Veras...- comenzó.- Todo inició hace tiempo atrás, cuando todo lo que queríamos era un poco de dinero.

Dinero.
Eso era.
Eso era lo que querían.
Yo podía darselo, lo haría si me dejaban ir.

-Puedo...

-Déjame terminar.- me cortó.- Queríamos asustarte un poco y a cambio de tu paz de vuelta ibamos a pedirte dinero...

-Puedo darles el dinero.- dije rápidamente.

Suéltenme ya.
Suéltenme ya.
Mis piernas hacían todo lo posible para no temblar y doblarse.

-Oh nena, no queremos dinero.- respondió.- Como te decía, al inició solo queríamos asustarte, pero para eso necesitabamos conocerte, saber lo que hacías, seguirte a todo momento, saber cada uno de tus movimientos.

-Disfrutamos mucho observarte día y noche.- agregó el segundo con una sonrisa.

Me sacudí.

-Y poco a poco fuimos obsecionándonos contigo, con tu perfecta y pequeña vida, con cada una de las perfectas personas que formaban perfectamente parte de ella.

Se detuvo detrás de mí, donde no podía verlo.
Podía sentirlo.

Me quede quieta.
Sentí su aliento cerca a mi oido...

-Y entonces nos dimos cuenta de que ya no nos importaba el dinero.- susurró, rozó mi oreja con sus labios.- Queríamos destruir toda tu maldita y perfecta vida.

Se alejó luego de eso y continuó con sus vueltas en círculos.

-Creímos que sería fácil, creíamos que no tardaríamos mucho en tenerte con nosotros, pero resultó ser lo contrario.- bajé la mirada al suelo.- Hace unos meses fue el primer intento, estabas en una fiesta, ibamos a vertir algo en tu bebida pero te nos adelantaste y saliste del local, para nuestra suerte: saliste sola.

Me costó encontrar el recuerdo en mi memoría pero al cabo de unos segundo apareció.

"¿Quién era la persona que estaba junto al auto de Rydel?"
Las palabras de Ross sonaron en mi mente sin que yo las llamara.
Ross...
¿Dónde estaba? ¿Estaba bien?
Mi corazón volvió a detenerse.
¿Y ________(1) y Emma?

Rogué que a ellos no los hubieran ni tocado.

-Ya te teníamos.- continuó.- Estaba apunto de llegar a tí pero...

-Pero.- agregó su compañero, parecía que le divertía eso.

El alto volvió su mirada a mí.
Sonrió con los labios pegados.
Era asqueroso.

-Pero el rubio lo arruinó. Él me vió pero no me dió importancia y solo caminó hasta tí. Yo no pude hacer nada, no porque él me daba miedo, estoy seguro de que ni podría patearme la rodilla, pero lo dejé allí por que tendría que también llevarlo a él. Y él plan era solo llevarte a tí.

Tragué la saliva que tenía retenida.
Ellos habían estado allí esa noche, nos observaron.
Nos había estado observando.

-¿Y donde estaría lo divertido en llevarlos a ambos? Él no hubiera podido volverse loco buscandote, es un espectáculo que queremos presenciar.

Ross.
Él problablemente seguía con sus hermanos, estaba seguro, pero Emma y ________(1) no lo estaban.
Mierda. Mierda.

Sabía que debí decirle a Ross que sí me importaba que llegara más tarde, debí haberle dicho que quería que viniera de inmediato a casa.
Ese corto mensaje de texto pudo haber cambiado todo.
Todo.

-Luego de eso continuamos siguiendote, volvimos a observarte por un tiempo antes de que volvieramos a hacer otra cosa, pero no podíamos, el rubio no se quitaba del medio. Y cuando lo hizo tu empezaste a moverte por todas partes. Saliste del estado y no estuvimos seguros de que tambien poder hacerlo, pero ¿Qué mejor lugar para que desaparescas que un estado que no conocías muy bien? Era perfecto. Fuí a tu camerino cuando logré entrar en el hotel y ¿Con qué crees que me encontré?

Sabía la respuesta.

_________(1).

-Mi hermano estaba con Ross, él se había encargado de mantenerlo alejado de tí, por un instante creíamos que talvez sería mejor llevarnoslo a él, así podríamos ver como caías de rodillas para que lo dejemos, pero como ya te lo dije era muy dificil. Así que dejamos al rubio.- sonrió.- Y tomamos al otro rubio.

-Tú fuiste el que se lo llevó.- grité sin poder contener mi ira.- Tú fuiste el maldito...

Me cubrió la boca con su mano.
Estuve tentada a morderlo, pero si yo recurría a la violencia él también lo haría.

-Shhh.- susurró.- Dejame seguir con la historia, se pone mejor.- me soltó y yo me limpié la boca con el hombro.- Lo llevé y lo metí en el auto, pero los de seguridad me había visto entrar sin permiso y me siguieron. Una vez más habíamos fracasado.

Mi respiración se había acelerado.
________(1).
Mi hijo había pasado por todo eso por mi culpa, todo eso por mi maldita culpa.

-Intentamos más cosas como tratar de asfixiarte mientras dormias, hasta incluso tratar de asustar al niño, pero desde la última vez el rubio ya estaba alerta. Él sabía que algo pasaba y entonces no pudimos hacer mucho, tú confiabas en él, ibas a hacer todo lo que él te ordenara.- se detuvo una vez más y me miró a traves del cabello que le caía sobre la frente.- Y en serio hacías todo lo que te ordenaba, tuvimos el placer de verlo todas las noches.- me guiñó el ojo mientras yo contenía las ganas de vomitar.- Y para que dejes de confiar en él debíamos hacer que ya no esté de su lado.

Señaló a su hermano.

-Owen tenía unas fotos, las dejó en tu puerta y tu no estuviste muy contenta al verlas, quiero suponer que tuvieron una discución por eso, pero ¡Por el amor de Dios! ¡Lo solucionaron! Yo estaba sorprendido. Muy sorprendido. ¿Qué clase de mujer perdona?

-Una que ama.- respondí sin pensar.

El chico alto y Owen se quedaron mirándome con diversión.

-Claro.- dijo finalmente.- Una que ama.

Se acercó una vez más y sobó mi mejilla con su dedo.
Limpió mis lágrimas.

-No llores, nena. Aún no llegado al final.

No lloraba de miedo o cualquier otra cosa.
Lloraba de ira, de rabia, de todo lo que sentía por esas personas.
Lloraba por las ganas de querer golpearlos, y también al sentir la frustración de no poder hacerlo.

-Traté de darte señales de que ibamos por tí. ¡Lo juró! Pero no lo notabas. Incluso estuve al lado tuyo cierta tarde, tu pequeño y rubio hijo me vió y me reconoció, entonces tú empezaste a sacar condiciones. Sabía que ibas a hacer algo, pero no que ibas a llamar a la policía. Y ese fue otro intento fallido de nuestra misión.

-Ahora que ya que escuche su historia.- dije antes de que él pueda continuar.- ¿Puedo irme?

Ambos rieron, sus risas me atravezaron como filudos cuchillos, no iba a mentir, me daban miedo.

Ahora que sabía lo que había hecho empezaba a sentir miedo.
Ellos había estado vigilandome todo este tiempo, y yo no tenía ni idea.

-Aún no hemos tenido lo que queremos.

-¿Cuanto quieren?- pregunté.- Solo digan en monto exacto de dinero y lo tendrán en un instante, terminemos esto de una vez.

Owen rió y se puso de pie.

-Esto está recién empezando.

Retrocedí, la proximidad de ambos solo me hacía sentir más pequeña.

-Creo que mi otro hermano va a poder ayudarnos con esto, insistió ser él.- me informó Owen.

Abrió la puerta.

Y me tomó solo dos segundos saber de quien se trataba.

Oh Dios mio.

Cabello negro, desordenado.

Lo que diferenciaba a esto de la última vez que nos vimos era que ahora estaba vestido.

Todo en mí sabía que no se venía nada bueno.

Chuck.

Continue Reading

You'll Also Like

87.7K 2.4K 78
Mia y Josh, vivirán la mejor experiencia de su vida, pasaran por muchas cosas juntos- NOTA: La mayoría de personajes que aparecen en esta historia, s...
158K 7.5K 33
Ambos viven en la masía. Desde que se conocen Héctor siempre la ha molestado. Y ella no piensa nada bueno del él. Pero todo cambiará tras un trabajo...
228K 12.2K 51
HISTORIA EN EDICIÓN. Sus vidas tendrán un antes y un después Mentiras, delitos y misterios. ¿Ella sera capaz de comprender? ¿O se rendirá fácilmente...
4.1K 594 35
La historia de Chase y Hailee Una vida universitaria puede ser un desafío, más aún cuando está el amor de por medio, y un error podría alterar todo...