6. Un nuevo comienzo
No pasaron más de un par días para que Shen Qingqiu despertará, pero antes de eso, todos los discípulos de la Cumbre Qing Jing esperaban pacientemente a que su maestro despertará, especialmente Ming Fan como el discípulo principal, y Luo Binghe que lo hacía más que nada por sus sentimientos, los de culpa, los de preocupación y, finalmente, los de amor.
Día y noche, Binghe insistió en permanecer cerca de la casa de bambú de su shizun, por si despertaba en cualquier momento, nunca se despegó de su lugar; eso provocaba que la poca paciencia de Ming Fan desapareciera, una vez más era hostil hacía Binghe, pues él también lo culpaba de las heridas de Shen Qingqiu. Pero a pesar de las amenazas de Ming Fan, Binghe nunca se despegó, tal vez solo en ciertos momentos para preparar un congee por si llegaba a despertar.
Por suerte para él, Shen Qingqiu abrió finalmente sus ojos justo en el momento en el que seguía estando cerca de la casa de bambú, pero aun se sentía inseguro de si podía entrar a ver a su shizun.
Dentro de la habitación, Shen Qingqiu se sentó y le dijo a Luo Binghe, quien aún se encontraba afuera, que pasará. Sin dudarlo ni un solo segundo, Binghe entró a la habitación y se arrodillo de golpe, a pesar de no reprimir su llanto aún quería disculparse por todos los problemas que había causado, decirle que lamentaba haber dudado de él, también le dijo que a partir de ahora, le serviría de todo corazón. Definitivamente cada una de sus palabras eran sinceras y esperaba que le llegaran a su shizun y lo hicieron.
Shen Qingqiu pudo notar que Binghe era de hecho alguien muy amable y honesto, borrando todo el pasado por haberlo salvado en una sola vez, incluso pensó que ya se había logrado deshacer de su destino como vara humana.
Binghe, por otro lado, se sentía aliviado de que haya sido aceptado, pero aún se rehusaba a retirarse de la casa de bambú, pues quería más que nada en el mundo decirle a ese maestro suyo de la comida que le había estado preparando para cuando él logrará despertar.
-¿Hay algo más? -preguntó.
Entusiasmado respondió: -Shizun estuvo durmiendo por muchos días y apenas acaba de despertar, -antes de continuar levantó su mirada, dejando ver esos ojos que ardían como el fuego -¿No sé si shizun tiene de casualidad hambre?
Sin dudarlo ni un segundo, Shen Qingqiu respondió: -Mucha. Tú tráelo entonces.
Después de escuchar tal respuesta, fue corriendo a la cocina por el congee que estuvo haciendo y rehaciendo durante el tiempo que estuvo dormido. El entusiasmo de Binghe estaba por los cielos, que incluso intentó alimentarlo directamente en la boca, solo después de un incómodo tosido se dio cuenta de lo que estaba haciendo. Sus orejas se pusieron rojas de la vergüenza e incluso se puso a pensar que tenía que reprimir sus propios deseos para no incomodar a su shizun. Solo se sentó cerca de la cama y observaba detenidamente a su maestro.
Miraba como las pestañas se movían ligeramente a cada sorbo que daba, miraba también como sus labios soplaban el congee que aún estaba humeante; estaba disfrutando de la vista. Ahora que ya entendía que amaba con toda el alma a su shizun haría todo lo posible por hacerlo feliz, cocinaría para él todos los días si es que le gustaba lo que había hecho para él. Mientras se perdía en sus propios pensamientos escuchó como Shen Qingqiu decía que el congee estaba delicioso, haciendo más que feliz a Binghe. -Si a shizun le gusta, ¿Qué tal si este discípulo le prepara cosas nuevas todos los días?
La expresión de Shen Qingqiu era de confusión, realmente no esperaba esas palabras que eran usadas para unas cuantas chicas del harem del Binghe original, por lo que incluso terminó atragantándose. Binghe, sintiéndose algo incómodo preguntó que si no le gustaba, ya sea la idea o la comida, realmente había dejado muy ambigua la pregunta para ejercer un poco de manipulación ingenua sobre la otra persona, al igual que una chica haciendo un puchero para hacer sentir culpable a su pareja, lo cual logró ser realmente efectivo, pues Shen Qingqiu respondió:
-A este maestro realmente le gusta. Estos deberes serán dados a tu cuidado a partir de ahora.
Para Binghe esas eran las mejores noticias que pudo haber recibido, pues de verdad quería alimentar a su shizun con deliciosa comida hecha solo para él, así de alguna manera podía protegerlo.
Emitiendo un aura como de "una flor floreciendo" salió rápidamente de la habitación después de que su maestro terminará su comida, se dirigió hacia la cocina para así poder planear muchos más platillos, además de completar las otras tareas que tenía que realizar, verdaderamente se sentía muy feliz.
Esa nueva tarea que se le fue dada a Binghe realmente molesto a Ming Fan, como el discípulo principal de Shen Qingqiu la alimentación de este era una de sus principales tareas, pero ahora se le había arrebatado esa tarea y por un "don nadie". Como Shen Qingqiu les había ordenado anteriormente ya no molestar a Luo Binghe, debía encontrar maneras de molestarlo sin que llegara a los oídos de su maestro, por lo que principalmente le daba algunas tareas extras para que hiciera, pero era algo contraproducente, pues en ningún momento se había quejado y las realizaba impecablemente; ¡ahora incluso se veía como alguien más productivo que él mismo!, y así fue como muchas de sus propias tareas habían pasado a manos de Luo Binghe. Se sentía desplazado por alguien a quien de verdad despreciaba. Incluso llegó a decir en voz alta el hecho de que su maestro había opinado buenas cosas sobre ese mocoso, lo cual lo hacía sentir de verdad ofendido; esto llegó a los oídos de Binghe, haciéndolo sentir aún más feliz y satisfecho, ahora hasta su shizun decía cosas buenas de él frente a Liu-shishu, todo iba de maravilla.
Uno se preguntara si de alguna manera esta fue la pequeña venganza de Binghe por todo el abuso y daño que le hizo a través de los años, pues en la novela original el destino de Ming Fan era convertirse en carne de cañón después de que Binghe regreso del Abismo sin fin. Y pues en parte era cierto, pero en sus planes no era precisamente hacer sentir mal a Ming Fan, sino más bien era tomar su lugar como el discípulo principal, o al menos ser la persona en quien Shen Qingqiu depositara toda su confianza y esperanza, en otras palabras ser el mejor discípulo para su shizun.
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Con la aceptación de sus sentimientos, los sueños extraños desaparecieron, se sentía más tranquilo, pues ahora que no se despertaba a mitad de la noche a lavar su ropa, podía descansar mejor. Acompañado con sus sentimientos, también creció su ambición por ser alguien más fuerte, por lo que incluso entrenaba arduamente con la espada fuera de las horas de entrenamiento; en una ocasión incluso tuvo la suerte de encontrarse con su shizun en medio de un entrenamiento extemporáneo.
Pensó que sería regañado por su maestro, pero en vez de eso, le dio consejos para mejorar
-Levanta más la espada, no encorves tu espalda- decía mientras posaba su mano sobre la espalda de Binghe, provocando un fuego interior a su paso.
Por su lado Binghe intento todo lo posible por mantener la calma, no debía permitirse sonrojarse o que apareciera otra reacción más fisiológica en su cuerpo, así que siguió los consejos de su shizun al pie de la letra. De verdad había logrado pulir sus movimientos con unos simples consejos, y aunque todo era gracias al halo de ser el protagonista de su propia novela, él depositó toda su mejora en las enseñanzas de su maestro.
-Es...Este discípulo ha logrado mejorar gracias a su ayuda -se inclinó hacía Shen Qingqiu. -Si me permite, estaría realmente agradecido si Shizun me ayudará con otros movimientos.
Luo Binghe se dio cuenta que esa última frase sonaba un poco muy extraña, ¡claramente se refería a movimientos con la espada! Empezó a ponerse nervioso de que su shizun se diera cuenta de su error, pero no se atrevía a mirarlo a la cara.
-Luo Binghe -Shen Qingqiu lo dijo en su tono autoritario que era muy usual, el cuerpo de Binghe se volvió de hielo, pues pensaba que sería reprendido por lo mismo. -A este maestro no le molesta darte otros consejos extras, aún así espero que no descuides tus tareas ni te sobre esfuerces con esto... -ya no usaba ese tono aterrador de antes, ahora se escuchaba un poco más comprensivo y cariñoso -para mejorar también se requiere el descanso.
Aunque ya había entendido el hecho de que su shizun se preocupaba realmente por él, aún no se había logrado acostumbrar a no ser regañado por él, incluso le dijo que tenía que descansar. Inconscientemente, trató de correr y darle un abrazo a su shizun, pero incluso antes de que pudiera dar un par de pasos, sus pies tuvieron un extraño enredo, haciéndolo caer sobre el pasto y tierra. Quería ser tragado por la tierra en ese preciso momento, pues la vergüenza le recorría todo el cuerpo, ni siquiera hizo el intento por levantarse.
Eso preocupó a Shen Qingqiu. -Binghe, ¿te encuentras bien? -dijo mientras intentaba levantarlo.
Aunque Shen Qingqiu no lo había notado, Luo Binghe pudo escuchar claramente como fue llamado "Binghe", era la primera vez que su shizun lo llamaba de esa forma, una sin reproche o con enojo, era tierna, ya no quería ser tragado por la tierra, a lo que alzó su cara para ver la expresión que su shizun tenía. Se podía ver que su rostro era uno de preocupación, haciendo que su corazón diera un vuelco. En cambio el rostro de Binghe estaba lleno de tierra y polvo, Shen Qingqiu uso su mano para limpiar lo que más podía. El toque era dulce.
-Shizun, no es necesario que haga eso -se paró del suelo lo más rápido que podía -este discípulo se disculpa por su propia torpeza -su cara se encontraba roja como un tomate, no se podía discernir si era por la vergüenza o por el golpe que recibió al caer.
-Mmm... no esperaba que fueras así de torpe, pero eso se puede arreglar con unas cuantas lecciones. -dijo Shen Qingqiu; a los ojos de Binghe, la imagen de su maestro era la de un ser sumamente elegante, a pesar de que hace unos solos segundos tenía un rostro de preocupación, ahora volvía a tener un rostro serio y pensativo. -Podemos agregarlas a tu entrenamiento, pero solo los días que no sean realmente exhaustivos...
-¡Shizun, este discípulo está dispuesto a comenzar con las lecciones hoy mismo! -lo interrumpió.
-No creo que sea conveniente este día -dijo mientras acariciaba la coronilla de Binghe. -Como este maestro te mencionó, es necesario el descanso para la mejora. Mañana mismo las podríamos empezar, sí es que tienes tanta urgencia.
Los ojos de Luo Binghe se iluminaron al momento de escuchar esas palabras, su shizun se preocupaba por su bienestar, cosa que lo hacía sentir realmente bien, incluso lo hizo olvidar que hace unos momentos su cara estaba contra el suelo. Sin dudarlo ni un momento, asintió -Este discípulo seguirá sus indicaciones.
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El cielo se estaba empezando a oscurecer, indicando la llegada de la noche, como había prometido en ese mismo día, Luo Binghe se encargaría de la alimentación de Shen Qingqiu, por lo que se despidió de este y se fue directamente a la cocina, gracias a su buena suerte, Ming Fan ya ni se encontraba en ese lugar, por lo que sabía que no sería molestado o interrumpido mientras preparada la cena. No hace mucho había descubierto que su shizun tenía preferencia por las comidas dulces, así que preparó un té y lo acompañó con unos cuantos pastelillos.
Después de terminar apropiadamente los alimentos, partió inmediatamente hacía la casa de bambú de Shen Qingqiu, inesperadamente, al llegar ahí se topó con la sorpresa de que los demás señores de las cumbres y sus respectivos discípulos habían ido a presentar sus condolencias a su shizun.
Binghe no se esperaba para nada esta situación, se sentía un poco afligido puesto que no llevaba suficiente comida para todos los presentes, aunque en el fondo solo quería preparar comida para su shizun. Puso la caja de la comida detrás de él, y entró a la casa de bambú.
Una vez adentro, ni siquiera se acercó a su shizun, se paró no tan cerca pero no tan lejos de él, observando cómo cada persona se acercaba a su shizun. Todo esto provocaba una sensación desagradable en su interior, aunque no era la primera vez que la sentía, aún no se había acostumbrado a ella. En un intento por calmar sus propios sentimientos, empezó a morder levemente su labio, aunque realmente no era levemente, pues un sabor a hierro surgía de él. Ya habían dos sabores y sensaciones desagradables en su interior, pero pese a todo esto, su rostro nunca reflejó dichas sensaciones. A pesar de que la herida era ligera, el ardor de ella no se detenía, para evitar que otros notaran la sangre en la boca, Binghe uso rápidamente la manga de su túnica interior para limpiarla.
̈Mientras esperaba pacientemente a que todo el mundo se fuera, sus ojos observaban cada una de las reacciones faciales de Shen Qingqiu; si este sonreía, su cuerpo experimentaba dos sensaciones completamente opuestas, mientras se sentía aliviado, con una electricidad recorriendo su cuerpo, al mismo tiempo sentía cómo miles de agujas afiladas le atravesaban la carne. Dolía, pero nunca apartó su mirada. Luo Binghe no era alguien que disfrutara del dolor, pero ver esa sonrisa le encantaba, pero esa sonrisa no era para él, eso le dolía.
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Como era de esperarse, poco a poco la casa de bambú se fue vaciando, hasta el punto que solo dos almas estuvieran dentro; pero para ello tuvo que pasar unas dos varas de incienso, pero solo así todo el mundo se había esfumado. Binghe dudaba de si debía acercarse a su shizun, pensaba que estaría cansado después de recibir a tanta gente. Ya no había otro obstáculo para ir hacia él, solamente su propia mente. Antes de que pudiera llegar a una decisión, fue interrumpido por la voz de Shen Qingqiu:
-Luo Binghe, este maestro está esperando a que te acerques -dijo con una notable voz calmada.
-Este discípulo se disculpa, shizun -dijo mientras se acercaba a él con la caja de comida aun detrás de él. No sabía si era por la calmada voz de Shen Qingqiu, pero ya no se sentía abrumado para nada, es más, ahora estaba dispuesto a entregarle la cena. -Shizun, es solo... que traía su cena de hoy, pero no sabía que vendrían a visitarlo, si lo hubiera sabido, definitivamente habría pedido que hicieran comida para todos. Este discípulo se disculpa por no prever la situación.
Aunque era probable que no se notara en sus palabras, Luo Binghe no estaba dispuesto a cocinar para los demás, solamente para Shen Qingqiu, por lo que eligió sabiamente lo que diría para que nadie se diera cuenta de ello.
-No es necesario que te disculpes, levántate, fue algo sorpresivo para todos, hasta para este maestro... mmhh cof- llevó su puño cerca de sus labios al mismo tiempo de que pensaba el cómo diría lo siguiente.
Binghe pudo suponer lo que estaba por decir, así que él mismo mostró la caja con la cena, evitando que su shizun perdiera la cara ante él. Pensó que sus reacciones fueron algo tiernas, así que sus molestias anteriores se dispersaron rápidamente.
Gracias a la acción de Binghe, Shen Qingqiu se sintió aliviado y agradeció internamente las habilidades de su discípulo para leer el ambiente, por lo que se decidió a darle un par de halagos.
-Binghe, la comida está realmente deliciosa- dijo después de dar un bocado al pastelillo, a pesar de que lo dijo sin pensar, no había ni una pizca de mentira en sus palabras.
Al otro lado de la mesa, el receptor pareció haberse congelado al escuchar dichas palabras. No esperaba para nada que le dieran un halago por su comida, y mucho menos esperaba que se refiriera a él solamente con su nombre, siempre había sido "Luo Binghe"; pero ese día solamente le dijo "Binghe". Su corazón latía como loco, y las manos, que estaban debajo de la mesa, se tensaban y sudaban por los nervios. Con una fuerza llegada del cielo-sabe-donde, reprimió todos sus deseos de lanzarse a los brazos de su shizun; quería abrazarlo y besarlo. Pero sabía que no debía de hacer eso, eso sobrepasaba los límites, y no quería volver a tener incomodidad con él.
Lo que más quería era poder estar a su lado.
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Woooo regrese, había tenido un fuerte bloqueo de escritor en mucho tiempo, además de que me quede desempleada y no me he sentido bien de eso, pero escribir y dibujar me ha ayudado a salir de este mal. Tenia este borrador desde hace muchas semanas, pero hasta hoy pude corregirlo.
Espero que la lectura les este gustando, siempre intento pensar como Binghe para que no salga del canon. Y me ayuda mucho el hecho de que yo kinneo con él jaja.