Kayla.
05 de marzo, 2023.
Estamos a al menos treinta minutos de que inicie la carrera y mis nervios aumentan con cada minuto que pasa, lastimosamente el día de ayer Lando y Oscar no obtuvieron la clasificación que querían, Lando saldrá en el decimoprimer lugar mientras que Oscar saldrá decimoctavo.
Camino hacia donde se encuentra el monoplaza de Oscar y vamos a un lado de la pista en donde se encuentra Oscar con Kim Keedle su entrenador personal, Roma lleva unos auriculares para que el ruido no le afecte tanto.
—Mami, ¿puedo correr de aquí hasta donde esta el tío Oscar?—dice tratando de verme sobre la gorra que lleva del equipo.
—Dejemos que el tío Oscar se concentre antes de la carrera, iremos y le desearemos suerte para después ir donde el tío Lando—la alzo en mis brazos—Tienen que estar concentrados antes de subirse al monoplaza lo hemos hablando antes.
—De acuerdo.
Llegamos hasta donde están y mi hija le desea suerte a Oscar dándole un pequeño abrazo haciéndolo reír, pasamos hacia más adelante buscando el lugar en donde esta Lando con Thomas Scott su entrenador físico y Roma hace lo mismo que hizo con Oscar, Lando deja un pequeño beso en su cien antes de dejarla en suelo para que venga a mi lado.
—Tenemos que ir al garaje del equipo—le digo un poco alto—¿Estas lista?
Niega haciéndome confundir un poco.
—Quiero ver a Charles antes de irnos.
Me siento un poco inquieta por lo que me pide, pero al final no se lo puedo negar así que caminamos hacia el tercer lugar en donde se ubica, esta hablando con Andrea dándonos la espalda y el primero que nos nota es Andrea haciéndole un movimiento con la cabeza hacia nuestra dirección.
Confundido se da la vuelta y se sorprende cuando nos ve caminando hacia ellos, cuando llegamos no tenemos tiempo y Roma le da un pequeño abrazo y deseándole suerte, cuando me acerco a tomar a Roma no puedo evitar desearle suerte e incluso Roma le desea suerte a Carlos que esta un poco atrás de nosotros.
—Tenemos que irnos, cariño.
Tomo su mano y caminamos hacia la salida que da hacia los boxes, caminamos un poco más hacia el garaje de McLaren en donde nos ubicamos en el garaje de Lando, José López el ingeniero de pista de Lando nos pasa unos auriculares en donde podemos escuchar lo que dice Lando e incluso lo que dice Oscar.
Observamos por las pantallas toda la preparación antes de que los pilotos se suban a sus coches, el himno nacional, los niños que están con los pilotos y todo es muchísimo mejor acá que por la televisión, pasamos a ver como los pilotos se suben a los coches y empezar la vuelta de formación.
—Pon atención, Roma—señalo una de las pantallas—Los tíos Lando y Oscar ya van a correr.
Nunca pensé que mi hija prestaría tanta atención a algo como lo esta en las pantallas, los coches se ponen en sus posiciones y las luz se van prendiendo uno a uno hasta que se apagan por completo y se lanzan a correr, Max sale bien al igual que Checo y Charles se queda un poco atrás.
Mi respiración se corta un poco cuando están por llegar a la primera curva, pero todo sale bien y los veinte pilotos siguen con la carrera, Lando logro avanzar dos puestos más y Oscar uno mas, cuando están por llegar a la cuerva cinco aplaudimos porque Oscar pasa al Williams de Logan Sargeant.
—Roma, este es el tío Oscar—aplaude feliz—Lo esta haciendo genial.
Vemos una batalla entre Lando y Esteban que no se quita detrás de Lando haciendo que se me corte la respiración cuando casi se tocan en una de las curvas, las primeras vueltas esta todo bien esta que escuchamos la radio de Oscar.
—Mi volante se siente raro—dice un poco agitado—Algo anda mal, no se siente bien.
—Copiado, ya vuelvo contigo.
Estamos apenas en la vuelta trece y Oscar entra a pits para un cambio de volante, vemos que se están tardando bastante en poder actualizar el volante y en la vuelta quince le dicen a Oscar que retiraran el coche. Cuando las cámaras no lo están enfocando observo como con sus dos manos echas un puño golpean el volante, se saca todos los implementos para poder salir del coche.
Lando por el momento va octavo y es un buen resultado para el equipo, Charles sigue tercero y Roma no sabe algunas cosas, pero esta concentrada viéndolos. Va avanzado la carrera y Lando reporta un problema con el el sistema hidráulico, por eso cuando llegaban sus paradas en boxes sus mecánicos arreglaban el problema y así fue en las otras cinco paradas que hizo obligatoriamente.
Varios murmullos me hacen ver la pantalla para ver como un coche de Ferrari queda a un lado de la pista y casi maldigo cuando veo que se trata de Charles, Roma también lo nota y me vuelve a ver con los ojos llorosos, vamos por la vuelta cuarenta y iba muy bien en camino a conseguir un tercer lugar en la primera carrera.
Por lo que dice la transmisión fue una falla eléctrica lo que hizo que el motor muriera haciendo que saliera el auto de seguridad, una de las chicas me hace una señal para que vaya con Oscar al lugar en donde se hacen las entrevistas. Me levanto de la silla quitando mis auriculares y dejando a Roma con la misma mujer prometiéndome que estará aquí con ella cuando regrese.
Camino con Oscar en silencio hasta el lugar en donde Lawrence Barretto lo espera, antes de llegar a él saco el otro móvil con el que tenemos que grabar todas las entrevistas de los pilotos por si llega a ver un mal entendido con lo que ellos dice.
—Hola, Oscar.
—Hola.
Me mantengo un poco atrás de Oscar y pongo el móvil cerca para que pueda grabar.
—Um, aprecio que no es así como hubieras querido que tu primera carrera se fuera, solo cuéntame lo que pasó.
—Fue un problema eléctrico con el auto, no estamos cien por ciento seguros todavía, pero desafortunadamente fue terminal, así que sí, un breve debut—sonríe amablemente—Pero aún así fue agradable regresar, pero hicimos una primera vuelta y estar en un entorno de carreras nuevamente, tener una IP de carrera bastante razonable hasta ese momento, así que, sí, es una pena, pero fue agradable hacer las vueltas que hice de todos modos.
Lawrence le pregunta sobre cómo se sintió el coche y sobre cuando lo llamaron a boxes para el cambio de volante entre otras cosas, Oscar en todo momento le responde con calma y amabilidad.
—Gracias, Oscar—le estrecha la mano.
—Gracias a ti.
Dejo de grabar y caminamos hacia otro stand para otra pequeña entrevista, tardamos unos veinte minutos y caminamos hacia la salida para ir al garaje del equipo.
—Lo hiciste bien—le sonrió—Roma estaba feliz de verte.
—Hubiera deseado poder seguir—dice frustrado—Aún siento que tengo que acostumbrarme al auto.
—Lo harás, dale tiempo—lo tranquilizo—Por lo que vimos lo estabas haciendo muy bien.
Cuando estamos por llegar en donde están los Stan de los equipos Charles pase a un lado de nosotros hablando con una mujer y no nos nota.
—¿Cuando partes a Londres?
—El martes en la mañana—me paro en la entrada—Iré por Roma al garaje, recuerda ir a la zona de pits para grabar el vídeo con Lando y Andrea después de la carrera.
Asiente entrando al hospitality de McLaren, por mi lado me concentro en ir por mi hija y tal vez llevarla a ver el podio un poco lejos. Cuando entro al garaje y observo las pantallas en donde Max Verstappen está cruzando la línea de meta ganando el Gran Premio de Baréin seguido de Checo en segundo lugar y tercero Fernando Alonso.
Camino hacia donde está Roma y Carlota le está explicando en que posición quedó Lando, lastimosamente quedó décimo séptimo—último lugar por los abandonos de Charles, Oscar y Esteban Ocon—, es un mal comienzo, pero tengo la esperanza de que el equipo avance.
—¿Quedó último?—dice con cara de tristeza.
—Si, cariño—le pone un mechón de cabello detrás de su oreja—No es lo mejor, pero Lando hizo mejor que pudo.
—¿En donde está el tío Lando? Quiero verlo.
Me acerco completamente a ellos poniendo una de mis manos en el hombro de Carlota dándole una sonrisa.
—Yo se lo explicaré, Car.
Ella sonríe despidiéndose de nosotras, me vuelvo hacia Roma y le explico que tío Lando llegará pronto ya que lo tienen que pesar y después se vendrá para acá al igual que el tío Oscar.
—¿Quieres ir a ver el podio un rato?—la animo un poco.
—¿Podemos?
—Claro, vamos—la cargo en mis brazos—Tal vez más adelante podamos ver a los tíos en el podio.
Y lo digo de toco corazón, me encantaría poder ver a los muchachos allá arriba. Llegamos cuando le están dando el trofeo de tercer lugar a Fernando y una ovación de los mecánicos de Aston Martin de escucha por todo el lugar, vemos el baño de champán y Roma sonríe feliz.
Cuando todo acaba regresamos al garaje en donde Lando está saliendo a sus mecánicos, Roma se mueve en mis brazos para que la baje y cuando lo hago va directamente donde Lando que la alza dándole un abraza que mi hija corresponde felizmente.
—Ahora regreso, estrellita—la pone en una silla—No tardare y podremos ir a comer algo todos juntos.
Observamos a Lando salir por donde nosotras acabamos de entrar y observo como todos los mecánicos se empiezan a mover para traer el coche de Lando hacia el garaje, siento un jalón en mi pantalón y observo a mi hija.
—¿Hacia donde iba el tío Lando?
—Tiene que dar algunas entrevistas y tiene que grabar un vídeo con Oscar y el señor Andrea.
Asiente y hace una mueca con sus labios, saco mi móvil personal y se lo entrego para que se entretenga un poco mientras esperamos, saco el otro móvil y conecto mis AirPods y escucho la entrevista de Oscar y escribo varios correros de respuesta a las entrevistas solicitadas para los muchachos.
Así pasamos alrededor de dos horas hasta que vemos a Lando llegar vestido con unos jeans y la camisa del equipo, Oscar llega segundos después vistiendo unos jeans y una camisa básica blanca.
—¿Están listas?—Lando carga a Roma y la monta en sus hombros—Kay, ¿Te importa si la llevo conmigo?
Niego y es cuando Lando empieza a caminar, Oscar se pone en mi lado y nos volvemos a ver cuando escuchamos la risa de hija mientras caminamos detrás de ellos. Nos despedimos de todos los que están en el garaje y paramos unas cuantas veces cuando los fanáticos le piden autógrafos a Lando y Oscar, algunas me saludan e incluso a Roma.
Ayudo a Lando a subir a Roma a su coche y me despide con su manita haciéndome reír, sé por Zak que algunas veces Lando y Oscar se van en el mismo coche y otras no. Esta ocasión se van en coches distintos, antes de subir al coche de Oscar siento la mirada encima de mi y cuando veo alrededor me doy cuanta que se trata sobre Charles.
Sus ojos están fijos en mi mientras Andrea le dice algo a lo que no esta prestando atención, trato de sonreírle a lo que él me da un asentimiento de cabeza antes de seguir caminando hacia su coche haciéndome sentir confundida.
—¿Todo bien?—la voz del australiano me saca de mis pensamientos.
—¿Eh? Si todo esta bien—me termino de subir.
Me pongo mi cinturón de seguridad antes de que Oscar arranque el coche, salimos detrás de Lando y varios fanáticos agitan sus manos despidiendo y varios carteles. Mi móvil suena anunciando un nuevo mensaje, cuando lo saco me doy cuenta que se trata de Charles.
Charles: ¿Están libres para cenar?
Kayla: Cenaremos con Oscar y Lando.
Kayla: ¿Quieres cenar con nosotros?
Charles: ¿Habrá algún problema?
Me vuelvo hacia Oscar antes de responderle su mensaje.
—Oscar, ¿hay algún problema si Charles se une a nosotros en la cena?
—Claro que no, después de todo es el padre de Roma—dice dándome una sonrisa.
Abro mis ojos en un gesto de sorpresa haciendo que suelte una sonrisa.
—Lando me conto todo el día que se dio cuenta—niego escuchando lo chismoso que es mi amigo—, además hay que ser ciego para no ver el parecido entre los dos.
No digo nada más y le digo a Charles que no hay ningún problema y que nos vemos en el restaurante del hotel, él me responde que nos veremos ahí y que tiene una sorpresa para Roma.
El camino hacia el hotel es tranquilo y silencioso, Oscar pone música y disfrutamos del viaje, después de veinte minutos nos detenemos al frente del hotel donde uno de los trabajares recoge las llaves de Oscar para llevar el coche.
—Tomare primero un baño y después bajare a cenar—digo entrelazando mi brazo con el suyo—Hoy sentí que me iba a morir del calor.
—Y eso que ya no hacen la carrera en la tarde, era una cosa barbara correr a esa horas.
Llamamos el ascensor y tarde unos minutos en llegar, entramos y cada uno marca el piso de su habitación mientras subimos escucho como el móvil de Oscar suena y lo saca, sonríe cuando ve la pantalla y escribiendo alegremente.
—¿Por que sonríes tanto, eh? —sale mi lado chismoso.
—Es Lily, mi novia—oh, con que su novia.
—Mmh, no sabia que tenias novia—trato de sonar menos chismosa.
Asiente respondiendo y guardando su móvil, cuando llegamos a mi piso salgo diciéndole a Oscar que le mandare un mensaje a él o a Lando cuando vaya bajando.
Camino hacia mi habitación y saco la tarjeta cuando estoy enfrente de la puerta, espero a que me la acepte y cuando lo hace abro la puerta suspirando cuando el aire fresco que acabo de prender hace contacto con mi piel. Voy hacia la cama para dejar mi bolso y móvil para poder ir hacia mi malata y sacar algo de ropa cómoda para la cena, cuando esta lista camino hacia el baño con todas mis cosas personales de baño.
Me despojo de toda mi ropa y entro en ducha, cuando el agua fría toca mi piel pego un pequeño grito por el impacto y lo bien que se siente, no tardo mucho tallándome el cuerpo con mi jabón. No lavo mi cabello porque lo hice en la mañana, cierro la llave de la ducha y agarro la toalla blanca que hay aun lado colgando para envolverla en mi cuerpo.
Cuando salgo del baño escucho mi móvil sonar y corro para poder agarrar la llamada. cuando lo tengo en mis manos veo que se trata de mi padre y no dudo en contestar.
—¡Hola, papá!
—Hola, cariño—escucho un poco de ruido—Llame para saber como están mis chicas, ¿Roma se porto bien?
Me siento en la cama para poder hablar bien con mi padre.
—Lo hizo bien, fue muy linda con todos—sonrío recordando como saludaba a todos—En estos momentos esta con Lando abajo del hotel, subí para darme una ducha y poder cenar. ¿Tú no deberías estar dormido?
—Tontearías, tú tío me llamo y quería vernos—escucho una puerta cerrarse—Vengo llegando a casa, se siente un poco vacía con todo guardado y sin muebles.
Eso me sorprende, pensé que papá dejaría a alguien cuidando al casa algunos días para que no se llenara de polvo o algo así.
—¿Sin muebles? —digo sin entenderlo muy bien.
—¿No te lo conté? —se hace el inocente—Vendí la casa, Kayla.
¿Qué?
Tarto de respirar porque esa ha sido la casa de mi infancia, la de Iris e incluso la de Roma.
—¿Qué hiciste que, papá?
—Dios mío, desearía estar ahí para ver tu cara—escucho su risa y me relaja un poco—No me hagas caso, Rose la vecina se encargara de la casa una vez a la semana. Si veo que seria mejor quedarse en Reino Unido considerare venderla, pero no antes de hablarlo contigo y tu hermana.
Me siento un poco mejor por eso, hablamos un poco más y mi padre se despide y yo puedo empezar a mudarme para bajar a cenar y lo que me pongo es muy cómodo, me pongo un poco de maquillaje y peino un poco mi cabello antes de hacerme un trenza de lado.
Agarro mi móvil, billetera y la tarjeta de la habitación, salgo mandándole un mensaje a Lando que ya voy a abajar cuando choco contra el pecho de alguien haciéndome perder el equilibrio, pero no llegando a golpearme porque alguien me agarra de la cintura y me estabiliza.
—¿Estas bien?
Cuando reconozco su voz algo en su tono hace que me recorra un escalofrío por toda la espalda, levanto mi vista hasta la suya y casi puedo decir que suspiro cuando me da una pequeña sonrisa. Cuando me doy cuenta que sus manos aun están en mi cintura me aclaro la garganta y el lo nota por lo cual me endereza y las aleja.
—Estoy bien, gracias—sonrío viendo a otro lado— ¿Qué estas haciendo aquí?
—Cuando llegue no te vi con Lando y Roma así que supuse que estabas acá, así que pensé que no era mala idea que bajáramos juntos.
Lo observo fijamente y no puedo creer que él sea el padre de mi hija, he leído mucho sobre su vida amorosa, pasando de Giada a Charlotte y cuando termino con ella se le empezó a relacionar con otra mujer, pero nada serio.
Por lo mismo pienso que solamente podríamos tener una relacion formal por el echo de que tenemos a Roma en común, le sonrío viendo que me he quedado en silencio algunos minutos.
—Por mi esta bien.
Sonríe y se hace aun lado para que yo pueda pasar primero, caminamos lado a lado hacia el ascensor y aprieto el botón que lo llama, esperamos unos minutos hasta que llega y él vuelve hacer lo mismo, darme espacio para que yo pase primero. Él aprieta el botón del lobby y nos sumergimos en un silencio cómodo, cuando las puertas se abren algo primero seguida de él y seguimos en silencio.
—Lamento lo de tu retiro en la carrera—digo rompiendo el silencio.
—Son cosas que pasan, es mas estresante cuando vas en posición de podio.
Llegamos hasta el restaurante del hotel y con la mirada busco a Lando o Oscar, no tardo mucho en ver una mano agitándose y se trata de mi hija, sonrío tocándole el hombro al Charles y señalando hacia donde la mano de Roma se agita.
Caminamos hasta ellos y es cuando noto que en la mesa no están solamente Lando, Oscar y Roma si no que también esta Carlos dándome una sonrisa.
—Al fin llegan—dice sonriéndole a Charles—Lando casi sube a buscarlos.
Niego sentándome en medio de los pilotos de McLaren, Roma va a saludar a Charles con un abrazo, él la trae hasta la mesa en sus brazos y la pone en la silla que esta al lado de Oscar y se sienta a su lado quedando en medio de Roma y Carlos.
—¿Han pedido algo? —pregunto viendo el menú.
—Los estábamos esperando—Oscar llama al mesero—Roma no quería pedir sin ustedes.
Le sonrío a mi hija que me ve unos segundo para después seguir hablando de no se que con Charles, los observo y algo en mi corazón se siente tan cálido de ver como Charles se va metiendo en la vida de nuestra hija.
El mesero llega y todos ordenamos, Roma ordena por ella misma y me gusta que mi niña hago algo tan simple como eso, todos en la mesa le sonreímos cuando nos vuelve a ver. Los minutos en que tardan que tardan en traer la comida hablamos de varios temas, Charles casi no participa por estar hablando con Roma y están en su mundo, Lando me golpea con su codo y me guiña el ojo y sonrío.
Todo el rato que pasamos cenando sentí que era ese el lugar en donde pertenecía y en como todos estábamos tan cómodos, Oscar que muy pocas veces se le ve con algún piloto que no sea Lando esta compartiendo tiempo con los muchachos de Ferrari y todo se siente tan correcto en este momento.
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¡CAPÍTULO PUBLICADO!
Quería hacerles maratón, pero me pase casi todo el mes de diciembre enferma y casi no hice nada, como podrán notar las demás historias no están disponibles y es porque según yo tenía un orden en donde iban a pasar las cosas, pues ya no es así.
Conforme vaya escribiendo y se vayan dando las cosas publicaré la siguiente historia, lo único que tengo presente es que la siguiente historia será la de Max y Aura.
Nos leemos después xoxo.