Regreso Doble

By makuromevi

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Después de un reencuentro horrible en Manila, Takemichi regresa al pasado para remediarlo todo, solo que esta... More

Capitulo 1
Capítulo 3
Capitulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capitulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capitulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35

Capitulo 2

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By makuromevi


Muchas gracias por darle tanto apoyo a esta nueva historia, en verdad gracias.

Me esforzare por publicar un capitulo nuevo todos los jueves. \(@^0^@)/

Anteriormente:

— ¡Oye! ¡Te estoy hablando! Por hoy, ya deja de molestar a Takemicchi con tus caprichos —Comento Draken con molestia.

Mikey se tensó aún más y esta vez sí lo miro, pero la forma en que lo hizo... fue aterradora.

Casi fue parecida a la mirada que le dio a Kazutora, pero... eso no puede ser posible ¿Verdad?

Quiero decir es Draken. Mikey no podría verlo así. Y aunque así fuera ¿Qué motivos tendría?

Draken dio un paso atrás e incluso puso una mano frente a Emma como si tuviera que protegerla de Mikey.

Fruncí el ceño ante su reacción.

El ambiente se tensó y Emma miro a Draken confundida.

Sentí que tenía que intervenir de inmediato.

—No me está molestando, solo estamos pasando el rato. ¿Verdad Mikey? —Dije mirando a Mikey mientras le sonreía un poco para aliviar lo que sea que esté pasando.

El me miro y me congele.

Esa mirada vacía... Esa mirada, no es del Mikey de este tiempo. Él se relajó al verme y asintió para después desviar la mirada de nuevo como si no soportara a Draken y Emma.

Si no se peleó con ninguno de ellos y prácticamente no hay razones para que evite a las dos personas más importantes en su vida, al menos no ahora, entonces...

Mi corazón se aceleró.

Recordé todo lo que pasamos desde esta mañana y una teoría imposible comenzó a tomar cada vez más fuerza en mi mente.

No es posible, simplemente no puede serlo, pero... si tengo razón...

Yo...

¡Tengo que averiguarlo! ¡Ahora!


Takemichi pov.

—D-Debemos...ir por su Babu a mi casa y luego ira con ustedes. Nosotros nos adelantamos— Dije rápidamente tomando a Mikey del brazo para luego alejarnos hacia mi moto.

En cuanto a Emma y Draken, ni siquiera les di tiempo de decir algo, pero creo que estaban bastante confundidos por todo como para reaccionar.

Pensaba preguntarle a Mikey, pero... ¿Qué pasa si estoy equivocado y solo estoy paranoico?

Además ¿Cómo debería preguntarle?

"Oye Mikey, de casualidad... ¿Eres tu versión futura?"

Eso no suena como una buena pregunta.

¡¿Qué hare?!

Estaba tan metido en mis pensamientos que ni siquiera note cuando llegamos a la moto y nos fuimos del lugar.

Mikey no hablo.

Llegamos a mi casa sin decir nada.

Entramos y en cuanto llegamos a la sala, di media vuelta para observarlo.

Su rostro se veía tan triste, tenía la mirada baja y sus ojos eran iguales que en el futuro, iguales al momento en que... me confeso que el mato a todos.

El Mikey de esta época no tendría esa mirada...

Mi corazón se estrujo, las lágrimas se acumularon y no dude más.

—Soy del futuro, regrese en el tiempo...—Confesé.

El de inmediato levanto la mirada sorprendido.

Quizás no debí decirle eso, quizás estaba en un error, pero tenía que arriesgarme.

—Te dije que lo arreglaría todo, que lo cambiaria—Dije sin poder aguantarlo más y es que él está frente a mí. El mismo Mikey que murió en mis brazos con una sonrisa.

El mismo que fue perdiendo el calor de su cuerpo y que cerró los ojos para no abrirlos sin importar cuanto me desgarre la garganta llamándolo, o cuanto suplique.

Note como los ojos de Mikey se volvieron brillosos y en instantes las lágrimas se acumularon hasta que se derramaron por sus mejillas.

Al verlo así no pude evitar llorar con más fuerza.

No lo pensé más, me lance a abrazarlo.

Caímos. El quedo sentado en el suelo y recargado en el sillón, mientras yo estaba de rodillas abrazándolo.

Él estaba tenso y quizás fui demasiado lejos al lanzarme así, pero... él está aquí conmigo.

—Mikey ¡Perdóname por no haberte protegido! ¡Yo te falle! — Grite mientras me aferraba a él.

— ¿Qué? —

—No pude salvarte y tu... tu... ¡Moriste en mis brazos! ¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡Lo siento tanto!—

Se supone que había superado lo que paso con ayuda de Chifuyu, pero no puedo, no puedo.

—Takemicchi... No fue tu culpa, yo... quería morir— Escuchar eso solo me termino de estrujar el corazón.

— ¡NO! ¡No digas eso! ¡No vuelvas a decir eso! — Dije molesto mientras me alejaba y lo agarraba con fuerza de la ropa.

Él se veía sorprendido.

Mi ceño fruncido se fue desvaneciendo al ver su rostro y la angustia me consumió.

—Por favor... ¡No digas eso nunca más! ...Por favor—Suplique con la voz entrecortada mientras mis lágrimas caían sin parar.

No pude verlo más a los ojos, porque sentía como se me desgarraba el corazón.

Si él... si él decía las mismas palabras, yo... simplemente no podría soportarlo.

— Cuando moriste... fue doloroso, fue... simplemente horrible. No puedo sentir eso de nuevo. Preferiría... ¡Preferiría morir en tu lugar!—Grite cerrando los ojos con fuerza para quitar esa imagen de mi mente.

Yo estaba comenzando a temblar e incluso tenía la impresión de que olía a sangre, cuando simplemente no era posible...

Sentí una mano en mi nuca y de un empujón estaba de nuevo recargado en su cuerpo.

Mikey me abrazo con fuerza y yo le regrese el abrazo.

—No. Eso era necesario, yo... los mate—Dijo con un tono tan bajo que solo escuche porque estaba muy cerca.

El me apretó un poco más.

Mikey esta repitiendo eso porque sigue pensando en que morir es lo mejor, pero... pero estamos de regreso, las cosas pueden ser diferentes.

Y sé que es confuso separar los recuerdos que ya tiene de lo que estamos viviendo ahora, así que solo tengo que convencerlo de que este es el pasado y de que todo estará bien.

—Están vivos y... nada de eso paso— Dije intentando que el enorme nudo en la garganta no me impidiera hablar.

Estábamos tan cerca que sentí como negaba con la cabeza.

—No. Está en mi memoria. ...Todo está fresco en mis recuerdos. El verlos ahora es... doloroso, es asfixiante, antes fue sencillo lidiar con eso, porque no los vería o escucharía nunca más. Era difícil alejar los recuerdos y pesadillas, pero no era imposible, y ahora que están frente a mí. Es...horrible. Me da náuseas y siento mi pecho explotar, si todo será así, si voy a sentir esto todo el tiempo... ¿No debería terminar con eso de nuevo?... Después de todo, ya lo hice una vez—

Al escuchar eso, de inmediato me aleje un poco del abrazo para verlo.

Definitivamente no esperaba lo que vi.

Él tenía una sonrisa torcida en su rostro, pero sus ojos demostraban su enorme angustia y las lágrimas que corrían por sus mejillas me obligaron a morderme los labios para no sollozar con fuerza.

Lo abrace por el cuello sin decirle nada y el me correspondió.

Su cuerpo temblaba.

Nunca espere verlo así y esto me está destrozando por dentro.

— ¿Estoy en lo correcto, verdad? Dime Takemicchi ¿Si me deshago de todos otra vez, dejare de sentir dolor?—Pregunto con la voz cada vez más entrecortada.

—No. Si haces eso, sufrirás más...—Dije aferrándome a él con la misma intensidad que el usaba conmigo.

¿Qué puedo hacer?

Por favor que alguien me diga cómo puedo ayudarlo.

Por favor, yo... haré lo que sea.

Por favor.

—Entonces... ¿Qué puedo hacer Takemicchi? Dime ¿Qué debo hacer?—Pregunto entre sollozos.

No lo sé.

Las lágrimas corrían por mi barbilla y ya casi no podía respirar.

Daria lo que fuera por tener una respuesta.

—Yo... Cuando desperté, creí que era un sueño o una maldita pesadilla que no quería dejarme morir en paz, pero al ver a Emma dormida en su cuarto, deje de respirar, me di cuenta que todo era real. Recordé tus palabras y por un momento, pensé que podría cambiar las cosas, que podría arreglarlo todo, vine contigo a confirmarlo, pero estabas tan confundido al verme y actuaste normal. Creí que solo yo había regresado y me propuse cambiar ese futuro... pero—El dejo de hablar un momento y me estrujo antes de tomar aire.

—Pero al verlos frente a mí. Me di cuenta de que no importa que ese futuro no se repita, eso ya está en mi mente y no cambiara. Lo peor de todo es que... no puedo dejar de confundirme. Por un momento no vi al Draken de este tiempo y es por eso que yo... yo...—Su voz se fue quebrando cada vez más. Podía notar la desesperación inundarlo con cada palabra y poco a poco su tono se volvía frio.

Lo tome de las mejillas con fuerza y lo obligue a mirarme.

— ¡No les hiciste nada! ¡Te controlaste! ¡Ellos están bien! — Le asegure frunciendo el ceño y con voz alta porque mi voz no saldría si bajaba el tono.

—Eso fue porque estabas ahí, la próxima vez no...— Dijo con una mirada vacía.

—Siempre estaré ahí, me asegurare de que nada pase—Prometí determinado.

Puse mis manos en sus hombros mientras el subió su mano derecha a mi rostro.

Pasó su pulgar por mi mejilla y fue bajando, sostuvo mi mandíbula unos segundos y después enterró su pulgar justo debajo de mi barbilla, haciendo un agarre más fuerte.

Fue doloroso.

—Ya habías prometido eso y me dejaste... ¿Por qué lo hiciste? Antes no me respondiste— Dijo con un tono triste esta vez.

— ¡No! Yo no fui. No te deje por que quise, yo jamás lo habría hecho—Negué rápidamente y por la intensidad de mis sentimientos simplemente respondí sin pensar demasiado en ello.

Él se sorprendió y dejo de sostenerme con fuerza.

— ¿Alguien te obligo? ¿Quién? ¿Quién fue? — Dijo frunciendo el ceño y sus ojos se afilaron.

—No es eso... Yo... Esta no es la primera vez que viajo en el tiempo. Yo cambio de lugares con mi yo pasado. Cuando te conocí era yo, pero el que se alejó... era mi versión del pasado—Intente explicar.

Mikey pasó su pulgar por debajo de mi ojo derecho.

El decir todo eso en voz alta suena como una completa locura, dudo mucho que me creyera si el mismo no hubiera viajado al pasado conmigo.

—Es por eso que tus ojos y la sensación que das es diferente. El Takemicchi de todos esos años no eras tú... Eso... explica tantas cosas—Dijo comprendiendo.

Asentí mientras tallaba mis ojos en un esfuerzo por dejar de llorar.

—Yo no me iré de nuevo, no te dejare. Y quizás no podamos borrar lo que está en tu mente, pero... podemos crear nuevos recuerdos. — Le asegure y por primera vez en toda esta conversación lo vi poner una expresión de alivio con una pequeña sonrisa.

El peso en mi corazón fue más ligero y le sonreí mientras me entusiasmaba con una idea que ni siquiera había pensado bien, porque era algo que había dicho en el calor del momento, pero... era lo mejor que tenía y podría funcionar.

— ¡Eso es! Cambiaremos el futuro y crearemos tantos buenos recuerdos que algún día sepultaras todas esas cosas dolorosas. Podemos arreglarlo todo, tenemos otra oportunidad. — Comente mientras me sentaba a su lado, recargando mi espalda en el sillón.

Creo que es un gran plan aunque... eso solo será después de un tiempo, por que por ahora, yo no puedo hacer nada con el dolor que siente.

...

Mi entusiasmo se fue y lo mire angustiado.

—Desearía poder aliviar tu dolor de inmediato, pero... prácticamente soy inútil, así que lo único que puedo hacer es compartir tu carga. ...Y solo puedo prometerte, que hare lo que sea para que seas feliz y dejes de sufrir. Yo... no descansare hasta que sea así—Comente apretando los puños con tanta fuerza que mis nudillos se volvieron blancos.

Estoy tan frustrado.

Si tan solo pudiera hacer más, si tan solo pudiera serle útil.

Mordí mis labios porque no quería llorar más.

...

No dijo nada y solo pude seguir lamentándome por no ser suficiente para ayudarlo como necesita.

Sentí un peso en mi hombro.

Mikey se había recargado contra mi costado.

Fue algo común y sin importancia, un gesto no tan grande, pero de inmediato me sentí aliviado, aunque no tenía muy claro el por qué.

—Takemicchi... Tengo miles de razones y excusas gritando en mi mente para hacer las cosas...más fáciles, pero...—

¿Las cosas más fáciles? ...

Creo que había mencionado que matar era una de esas cosas fáciles ¿A eso se refiere?

—pero confió más en ti... Siempre que estés conmigo, hare lo que me digas—Dijo con un tono de voz más tranquilo.

Sus palabras me hicieron sonreír y respirar, porque había contenido un poco la respiración.

Con esa respuesta por fin pude ver esperanza en todo. Sentí que pude convencerlo de alguna manera y creía firmemente en que este nuevo futuro, sería el mejor de todos, porque ahora contaba con él.

—Sí, Mikey, todo se volverá mejor, ya lo veras— Asentí con entusiasmo.

Después de eso, hubo un silencio bastante cómodo.

Poco a poco deje de llorar y solo nos quedamos sentados con tranquilidad.

Cerré los ojos.

El peso sobre mi hombro era reconfortante y estaba tan cerca que podía sentir su cuerpo moverse al respirar.

Aun no tenía una idea clara de que haría, pero Mikey estaba a mi lado, estaba vivo y dispuesto a esforzarse por cambiar todo. Quizás aún no habíamos hecho nada para que todo fuera diferente, pero no pude evitar relajarme un momento.

—Takemicchi... Dijiste que no es tu primer viaje en el tiempo ¿Cómo?... ¿Cómo es posible? ¿Cuántas veces has viajado?—La pregunta de Mikey me hizo tensarme.

Él tiene derecho a saber, debo contárselo todo, pero eso no lo hace más fácil.

Yo creí... que no tendría que hablar de eso tan pronto, al menos no hoy, pero... no parece que tenga tanta suerte.

Me siento avergonzado y angustiado por que lo único que le contare es como le he fallado más veces de las que él sabe.

El enorme peso en mi corazón volvió, mis ojos picaban.

Pase saliva para ignorar el nudo en mi garganta y le conté absolutamente todo.

Al terminar ni siquiera podía terminar una frase completa sin sollozar y perdí por completo el valor de mirarlo a los ojos.

—Lo siento... por mi culpa Baji. Yo... no pude salvarlo y tampoco pude ayudarte—Me disculpe entre lágrimas.

—Sé que... ya no querrás confiar en mí, después de que... falle tantas veces, pero... aun así no me rendiré hasta cumplir mi promesa, yo...—Dije sintiéndome tan culpable que mi estómago se revolvió y las náuseas me hicieron tener un sabor amargo en la boca.

—Aun confió en ti... Has pasado y logrado tanto...—Me interrumpió con un tono suave.

—Takemicchi es mi héroe. —

Mi corazón se aceleró.

Mis lágrimas no dejaban de caer sin importar cuanto tallara mis ojos.

¿Cómo puedo ser su héroe cuando el murió en mis brazos?

—Eres tan cálido— Dijo con voz baja, acomodándose más en mi hombro.

Esas palabras solo terminaron de estrujarme el corazón.

—M-Mikey no, no digas eso. No... puedo e-evitar recordar cuando t-tu—Solloce.

—Está bien, está bien— Dijo con una sonrisa pequeña como si todo fuera una broma.

Mis ojos se hincharan por tanto llorar a este paso, pero el verlo sonreír... me hace sentir mejor. Siempre lo ha hecho.

—Eres tan llorón— Comento divertido mientras estiraba los brazos y cuando bajo la mano él la dejo caer sobre la mía casualmente.

Ese ligero roce y el hecho de que aun creyera en mí a pesar de todo, fue muy reconfortante.

En algún punto y sin darme cuenta de quien lo inicio, termine con mis dedos entrelazados con los suyos y poco a poco el respirar se fue haciendo más fácil.

Después de algunos minutos de estar así, yo al fin había dejado de llorar.

—Takemicchi... ¿Por qué no nos quedamos aquí por siempre? —Dijo repentinamente con tono tranquilo.

¿Eh?

Mire hacia al frente, la habitación estaba oscura, podía escuchar diferentes ruidos que venían de la calle, pero me sentía tan bien con solo estar aquí sentado con él, sin preocupaciones, sin presiones, sin problemas o frustraciones.

...

Es muy tentador hacer lo que dice, en verdad lo es, porque de esa forma quizás el futuro no se repetiría y Mikey estaría a salvo, pero... si algo he aprendido es que las cosas nunca salen como las planeas o esperas, y aunque puede ser que todo sea mejor por el solo hecho de no hacer nada, también existe la posibilidad de que todo se vuelva infinitamente peor.

Así que, si... eso no estaría nada mal, pero... aún tenemos cosas que hacer.

—No podemos, tenemos que cambiar el futuro y crear nuevas memorias ¿Recuerdas? —Pregunte sonriéndole y el asintió sin dejar de recargarse en mi hombro.

—Es... solo que estoy tan cansado, pensé que por fin todo terminaría y no es así, solo ha vuelto a comenzar...—Dijo casi en un susurro.

...

—Lo entiendo... pero... si queremos que todo sea mejor, debemos seguir, además... el que todo comience de nuevo también trae cosas buenas ¿No?—Comente con un tono suave.

Él se alejó un poco para observarme, me dio una mirada que no supe descifrar y asintió volviendo a su posición.

—Si... tiene cosas buenas—Respondió apretando mi mano ligeramente.

Fue una suerte que lograra convencerlo de alguna manera, porque... sinceramente, si él seguía insistiendo no podría negarme, no después de ver esa mirada vacía o de escuchar ese tono triste en su voz.

—Bien, entonces ¿Qué debemos hacer primero? —Interrogo.

—Ehmm...—

— ¿No sabes? —

No...

...

Lo escuche reír y mis mejillas se calentaron. No me extrañaría que mi rostro sea rojo, pero debajo de toda la vergüenza siento un cosquilleo en el estómago.

—No te rías, ya estoy pensando en algo—Replique.

—Claro, lo que digas— Dijo suspirando con fuerza cuando termino de reír.

Se veía más relajado y el sonido de su risa me hizo querer reír también, fue solo gracias a mi fuerza de voluntad que pude seguir aparentando molestia.

Espera... el viene del futuro.

Se supone que Mikey si recuerda todo a diferencia mía y él puede decirme que debo cambiar.

¡Eso es!

— ¡Mikey tu vienes de este futuro y recuerdas lo que paso! Ahora será más fácil cambiar todo—Dije entusiasmado.

...

Cuando él no respondió, lo mire.

El negó con la cabeza.

¿Eh?

—No me digas que...—Dije temiendo lo peor.

—No recuerdo nada de esta época y hablando del futuro, solo tengo recuerdos de unos años antes de encontrarte. Básicamente... recuerdo lo que paso antes de ahora y algunas escenas intermedias, pero no sé exactamente qué pasa o cuando. Sé cómo eran las cosas, pero no recuerdo como se volvieron así. Yo... creí que solo era un efecto secundario por regresar en el tiempo y siendo sincero... algo me dice que es mejor si no tengo esas memorias—Explico.

No puede ser.

Simplemente... no puede ser.

Me siento angustiado y me duele el pecho al escucharlo así de triste y desolado, yo no quiero que sufra más, pero... no puedo negar que si habría sido de gran ayuda que recordara.

Me quede pensando un momento mientras sentía su pulgar pasar lentamente por las cicatrices de mis nudillos y me fui relajando un poco a pesar de todo.

Bien, por un momento creí que todo sería más fácil esta vez ¡Que tonto fui! Nunca es tan fácil, pero no importa.

—De lo que recuerdas ¿Hay algo importante sobre Kisaki que nos pueda servir?—Pregunte con seriedad.

—Kisaki...—El repitió su nombre con frialdad y se quedó pensando unos segundos.

— ¿Cómo qué? —Pregunto.

—...Mmm, no lo sé, cualquier cosa, quizás algo sobre su muerte—Comente.

— ¿Su muerte? Él no está muerto—

— ¿¡Que!? —

—Él lo fingió todo con ayuda de... Izana—Respondió, pero al final le costó trabajo decir ese nombre y se veía tenso de nuevo.

—Mikey...— Lo llame para asegurarme de que estuviera bien.

El apretó mi mano y le devolví el gesto.

— ¿Quién es Izana? —Pregunte.

...

El tardo en responder, no sé qué pasa, pero está actuando extraño.

—Mi... mi hermano—

— ¿¡Tienes otro hermano!? ¿Cómo es que no...?—

—No lo sé. No sé porque no recuerdo cuando lo conocí o como. Esa parte esta borrosa, solo recuerdo que era mi hermano, pero...—

— ¿Quieres buscarlo? —Pregunte.

El dejo de recargarse en mí y miro fijamente hacia el suelo como si estuviera recordando algo.

—NO. No quiero verlo de nuevo y tú tampoco debes estar cerca de el—Dijo apretando mi mano un poco más fuerte.

Se veía algo alterado, sus ojos tenían algo que no se describir, no es miedo es algo más, solo que no estoy seguro de que es, lo único que sí sé, es que no es ningún sentimiento que normalmente tendrías hacia un hermano.

¿Qué pasó para que este así?

¿Qué le hizo ese tal Izana?

...

Tengo muchas dudas, pero... el ya esta tan alterado, no creo que sea bueno seguir preguntando.

Mi mano duele por su agarre, pero lo disimule.

—Sí, está bien—Asentí sonriendo.

El me observo y comenzó a relajarse. Volvió a recostar su cabeza en mi hombro.

Dejare el tema de ese Izana por ahora, pero...

—Si Kisaki está vivo en ese futuro entonces sigue siendo quien está detrás de todo. Tenemos que detenerlo—Dije mirando de reojo a Mikey quien estaba más tranquilo.

...

¡Ese maldito de Kisaki! Hizo sufrir a Mikey tanto que deseo la muerte. Eso jamás se lo perdonare.

— ¿Takemicchi? —Escuche que me llamo y lo vi mirarme, pero estaba tan molesto al pensar en todo lo que pudo haber pasado Mikey por culpa de ese maldito que no respondí.

Por culpa de su maldita ambición le hizo esto a Mikey y a los demás, él es el culpable del dolor de Mikey, pero no lo hará de nuevo.

Apreté su mano.

Fruncí el ceño.

—Todo es culpa de Kisaki, pero ya no te hará nada. Lo detendré así tenga que matarlo— Dije furioso.

Mikey me miro sorprendido y de un momento a otro, sonrió.

Fue una enorme sonrisa y su mirada se suavizo.

Mi corazón se aceleró y deje de sentir esa enorme ira. Ahora mi mente estaba en blanco y simplemente no podía dejar de mirarlo

Esa mirada... que... ¿Por qué me miro así? Y ¿Por qué quiero verla otra vez?

—Bien, primero... deberíamos encontrarlo. Se supone que... ¿Ya lo expulse de Toman? —Pregunto Mikey volviendo a recargarse en mi hombro.

Me enfoque en sus palabras y no en las raras sensaciones en mi estómago.

—S-Si, pero no sé dónde está ni que es lo que está planeando. Pensé que con la expulsión todo se solucionaría, pero al parecer solo empeoro todo y esta vez casi no tengo pistas de nada—Explique algo angustiado.

—... Podría pedirle a todos en Toman que lo busquen, eso ayudaría...—Dijo tranquilo.

— ¡Si! ¡Es una gran idea! —Acepte entusiasmado.

El asintió.

—Oh, espera que le diga a Chifuyu. No me lo va a creer—

—Espera... Dijiste que Chifuyu sabe de tus viajes en el tiempo, pero... ¿Le contaste todo acerca de este, de mi futuro?—Pregunto Mikey tensándose un poco.

—Sí, lo hice. Yo regrese ayer—Explique.

—Y... ¿Qué te dijo? —Pregunto algo serio.

—Solo me animo bastante y acordamos trabajar en cambiar el futuro aunque no teníamos idea de que hacer, como siempre—Confesé con una sonrisa nerviosa.

— ¿Eso fue todo? —Interrogo.

—Sí, lo fue ¿Por qué? —

—No,... por nada—

Estaba por preguntar de nuevo, pero el celular de Mikey sonó.

Él lo miro y no contesto, solo se quedó observando la pantalla.

— ¿Mikey? —

—Es Kenchin— Respondió sin que le preguntara.

El aun duda.

—Bien, vámonos—Dije con una sonrisa mientras me ponía de pie jalándolo de la mano para que hiciera lo mismo.

— ¿Eh? Pero... si yo... —

—Todo estará bien. Estaré contigo todo el tiempo y entre más hables con ellos, será más fácil crear nuevos recuerdos agradables. —Le asegure con una sonrisa.

El celular de Mikey siguió sonando.

Miro el celular y yo le empuje la mano ligeramente para impulsarlo a contestar

El me miro y yo asentí.

—Hola, Kenchin—Contesto sin apartar la mirada de mí, fue como si necesitara verme para seguir.

— ¿¡Donde diablos estas!? Emma termino de hacer la cena hace tiempo y te estamos esperando—Lo regaño Draken. Él estaba hablando en un tono tan alto que lo escuchaba sin necesidad de acercarme mucho.

—Perdí la noción del tiempo, pero ya vamos para allá— Mikey puso el altavoz.

— ¿Vamos? —Interrogo Draken.

—Takemicchi y yo, lo invite a cenar—Dijo aun mirándome.

—Bien, no tarden más o iré por ustedes y arrastrare sus traseros aquí—Se quejó en broma.

Vi un brillo en los ojos de Mikey al escuchar esas palabras y sonrió un poco.

—Iremos enseguida Kenchin— Respondió Mikey con ánimo en su voz.

Le sonreí también.

A mí me pareció una conversación común, pero para Mikey es claro que tuvo otro significado.

¿Cómo habrá sido su relación con Draken en el futuro que algo tan pequeño lo afecto de esa forma?

Al terminar la llamada salimos de mi casa y esta vez usamos la Babu de Mikey para ir a su casa.

El acelero demasiado, supongo que estaba ansioso por llegar pronto así que no tuve de otra que aferrarme a su cintura en un abrazo y en cuanto hice eso, escuche la fuerte risa de Mikey y no pude evitar reír también.

Definitivamente esta vez, todo será mejor.

Ruego... porque así sea.

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