Gulf se removió en la incómoda camilla donde lo tenían. Abrió sus ojos lentamente y se encontró con una de las salas de emergencia, conectado a un tipo de suero que suponía que tenía algún calmante, pues su cuerpo estaba muy relajado.
-Mi niño.- llamó Mali. -¿Cómo te encuentras?.- preguntó la mujer preocupada.
-Me siento cansado mentalmente.- murmuró el menor sobando su cabeza para tratar de despejar el dolor.
-¿Gulf está despierto?.- preguntó Sam en voz baja, asomándose un poco por la puerta de la habitación.
-Si, Sam, recién despierta.- respondió Mali y la psiquiatra entró.
-¿Cómo estás, querido?.- preguntó Sam tomando una de las manos de Gulf.
-Me duele la cabeza.- respondió el moreno.
-Los enfermeros ya revisaron si había sufrido algún golpe severo pero todo está en orden.- informó la enfermera.
-De acuerdo, eso es bueno.- comentó la doctora. -Pero tenemos que saber que sucedió, ¿quieres hablar de eso?.-
-No lo sé.- murmuró Gulf en encogiéndose en la cama para recargar su cara sobre sus rodillas.
-Está bien, Gulf, pero debo saber qué sucedió para pensar en alguna solución.- la doctora tenía una idea de lo que pudo haber pasado, pero si su presentimiento era cierto, ni siquiera las pastillas con las que lo estaban tratando, estaban haciendo su efecto correctamente.
-Lo vi de nuevo, Sam, él estaba ahí en el pasillo.- la voz de Gulf era muy baja y sonaba casi rota, como si quisiera llorar de solo rememorar la situación.
-Oh Gulf.- jadeó la psiquiatra asustada. Esa entidad extraña que Gulf afirmaba ver y sentir cerca no tenía un nombre en especifico, de joven el moreno solía llamarlo "el monstruo" por su aspecto desfigurado y su voz grave, aunque se suponía tenía una apariencia algo similar a la de un humano normal.
-El llamó mi nombre, no recuerdo mucho de lo que dijo, pero era él.- lágrimas comenzaron a bañar su rostro y Mali no dudó en abrazarlo, limpiando sus lágrimas.
-Tranquilo, mi niño.- murmuró la enfermera.
-Voy a pedir que coloquen unas bocinas aquí, quiero hacer unas pruebas con el cantante que te gusto.- informó la psiquiatra. -¿Lo recuerdas, Gulf?.-
-Si, quiero escuchar a Mew.- afirmó Gulf escondiendo su rostro en el cuello de Mali, tal como un niño pequeño que fue asustado.
Esa misma tarde Sam se encargó de tener todo listo para poner a prueba su "experimento", aunque le dolía llamarlo de esa forma pues se trataba de Gulf y ella no quería hacer nada que dañara al menor.
-Mali, no quiero estar solo.- murmuró el moreno con miedo, haciéndose bolita en su cama, abrazando la almohada con fuerza.
-Lo sé, mi niño, pero tengo que volver a casa.- dijo la enfermera, acariciando el cabello del menor. -Lau debe estar esperándome.-
-Tu esposo debe odiarme por hacerte trabajar horas extra.- afirmó Gulf haciendo un tierno puchero.
-No es así, él sabe que te amo como un hijo e incluso a pensado en venir a visitarte.-
-¿Vendrás mañana?.- preguntó el menor solo para asegurarse, pues nadie más que Mali y Sam le daban la confianza de contar sus problemas y la forma en que se sentía.
-Claro, mi niño, estaré aquí antes de que despiertes, eso tenlo por seguro.- afirmó la mujer mayor.
-Dudo que vayas a estar aquí a las 3 de la mañana, cuando las voces comienzan a gritarme.- murmuró el moreno.
-Si tan solo pudiera protegerte de todo eso, mi niño.- Mali tomó una de las manos del paciente y la besó con todo el amor de madre que siempre le profesaba.
-Pero nadie puede protegerme de mí mismo.- comentó el moreno, soltando algunas tristes lágrimas.
Más de una vez había considerado quitarse la vida, no sólo por lo que decían las voces en su mente, si no por lo frustrante que era para el no poder siquiera dormir o convivir mucho con otros pacientes, sentirse dependiente de dos mujeres ajenas a su familia pero que significaban más para el que las personas que compartían su sangre.
-Adiós, mi niño, intenta dormir un poco.- dijo Mali con pesar, pues de alguna forma también le dolía dejar solo al chico.
-Adiós, Mali.- murmuró Gulf sintiendo el cálido beso de despedida en su frente.
Las primeras horas fueron bastante tranquilas para el pelinegro, pudo dormir con el tranquilo y dulce recuerdo del artista que acababa de descubrir.
Pero claro que las voces no lo dejarían en paz, tenían que resurgir, como si no quisieran perder la costumbre de despertarlo gritando y llorando en la madrugada.
-Volverás a estar bajo mi poder.- la gruesa y tétrica voz del "monstruo" lo despertó de inmediato, haciéndolo sentarse en la cama y abrir los ojos.
-No.- murmuró Gulf doblando sus piernas para esconder su rostro entre sus rodillas, tapando también sus oídos.
Desde su oficina, Sam estaba viendo la cámara de la habitación del moreno. Había tomado la decisión de quedarse ahí toda la noche para probar su teoría, aún cuando ya estaba casi muriendo de sueño, pero quería ayudar al menor.
Tan pronto vio que Gulf se sentó abruptamente, comenzó a buscar una pista al azar del artista. Reprodujo una canción de nombre Summer Fireworks.
El menor se quedó totalmente quieto al escuchar la voz de Mew, porque aunque no era la canción que él conocía, podía identificar esa dulce voz sin problemas.
Su vista se levantó, la oscuridad de su habitación no le permitía ver mucho de los pocos muebles que tenía en ese lugar. Aún así, pudo distinguir la sombra desfigurada de su peor pesadilla.
-No, no, no.- Gulf movía su cabeza de un lado.
Quería concentrarse en la dulce voz de Mew, por lo que comenzó a tararear la canción.
Comenzó a calmarse, su pulso volvió a la normalidad y todo a su alrededor se calmó, no había nada más que la dulce voz de Suppasit.
Sam vio desde la cámara como Gulf volvía a acomodarse en la cama, abrazando su almohada. Sonrió feliz al saber que toda la música del famoso artista funcionaba para calmar los "demonios" del menor.
Colocó la canción de Season Of You cuando la otra se terminó y la dejó en bucle para que se repitiera una y otra vez, esperando que así Gulf pudiera dormir tranquilamente.
Sus días de descanso pasaban cada vez más lento, aunque quisiera salir y pasear por la ciudad para poder distraerse un poco, sabía que al ser alguien tan famoso no podría tener la tranquilidad que quería en esos momentos.
Entre no tener amigos y que su familia estuviera lejos, no quería estar solo, hubiera deseado tener a alguien con quien compartir esos tranquilos días.
-Este es tu sueño.- se dijo a sí mismo. -Amas a tus fans, cantar y escucharlos gritar por ti.- se recordó.
Suspiró pasando su mano por todo su rostro, despejando un poco el sueño que aún sentía, no porque no hubiera dormido, sino por lo aburrido que estaba de solo levantarse para caminar a la sala y perder el tiempo en el celular.
Tomó su usual plato de cereal y caminó hasta la sala, donde en la televisión dejó algún canal con películas al azar.
Su mirada estaba perdida en alguna parte de su casa, mientras su mente comenzaba a crearse esos escenarios falsos que sabía que no pasarían en mucho tiempo.
-Amor, ¿dónde estás?.- preguntó una dulce voz que sonaba algo joven.
-En el sofá, cariño.- respondió él con una sonrisa en el rostro.
Pronto una figura delgada y esbelta hizo presencia en la sala. No podía distinguir el rostro de la persona, aunque era más que seguro que se trataba de un chico joven.
-Amor, te extrañe en la cama.- dijo esa dulce voz. -Sabes que amo que me despiertes con besos en la mañana.-
-Lo siento, bebé.- Mew tomó al otro por la barbilla y junto sus labios de forma lenta. -Tenía que mandar la letra de una nueva canción.- informó.
-Eso es genial, ¿puedo escuchar la canción?.- la voz del chico sonaba mimada y eso llenó de alegría el corazón del pálido.
-¿Quieres que te la cante, bebé?.- preguntó Mew dejando tiernos besos por todo el rostro del menor.
-Eso me encantaría, amor.- afirmó el pequeño, sentándose sobre las piernas de su pareja, dejando su cabeza descansar sobre el amplio pecho firme de su novio.
Mew comenzó a tararear una canción, agregándole la letra poco después, escuchando los enamorados suspiros del menor, además de sus tiernos besos en su cuello.
-Te amo, Mew.- afirmó el chico tomando el rostro del artista para besar sus labios de forma dulce.
-También te amo.- declaró el pálido sonriendo contra esos suaves labios.
De pronto la sensación de algo húmedo y frío en sus piernas lo devolvió a la realidad
-Mierda.- se quejó poniéndose de pie, dándose cuenta que había tirado todo su cereal sobre él. -Eres un idiota.- corrió a la cocina y dejó el plato en el fregadero, tomando algunas toallas para limpiar su desastre.
Su apetito desapareció, por lo que se cambió la ropa húmeda y se dejó caer en otro sofá, tomando su celular para perder el tiempo.
Ingreso a sus redes sociales y encontró una etiqueta de su amigo Tul en un tweet. Pensó que tal vez sería de algún recuerdo de su juventud, pues con los años que tenían juntos habían creado muchas memorias que Mew recordaba con cariño.
"La música de Mew es medicinal y sirve como tratamiento para algunas enfermedades" se leía en la noticia.
El tweet tenía muchas respuestas de las fans del cantante, algunas etiquetado su cuenta para que viera esa inusual noticia.
Con curiosidad hizo click en el enlace y este lo dirigió a otra página donde se explicaba en trasfondo de ese encabezado.
"Gulf es un joven de 23 años que padece de esquizofrenia desde hace casi 10 años, ningún tratamiento parecía hacer efecto en él, pero para sorpresa de todos la música del mundialmente famoso cantante, Mew Suppasit, calma los ataques del chico.
Aquí un video de prueba."
El pálido se sorprendió ante la noticia, nunca creyó que su música pudiera ayudar tanto a alguien, aún cuando muchos fans le afirmaban que gracias a él seguían vivos.
Con curiosidad bajó más en la noticia, encontrándose con el video de lo que parecía ser una cámara de seguridad o algo parecido. Reprodujo el video y miro a un joven en la cama, agitado y gritando.
La voz del chico sonaba destrozada y su corazón se apretó en su pecho con dolor por ver el sufrimiento del desconocido en la pantalla. De pronto una de sus canciones comenzó a sonar en los altavoces y el chico se calmó notablemente, tarareando suavemente la melodía de su canción.
Al final se durmió calmadamente escuchando Season Of You de fondo, apretando una almohada contra su pecho.
"Gulf es un gran fan de Mew Suppasit, tararea su música todo el día y lo mantiene calmado.
Nos gustaría que Mew visitará al lindo paciente, para que lo haga un poco feliz." se leía al final del artículo junto al nombre de psiquiátrico Moon.
-¿Debería visitarlo?.- se preguntó con algo de melancolía, pues le dolió ver la situación del chico, quería hacer algo por ese joven que a través de su música encontró algo de calma y alivio.
Busco la ubicación del lugar y encontró que estaba relativamente cerca de su casa, apenas a unos 15 minutos en auto.
De pronto le llegó un mensaje de su mejor amigo Tul, que decía "¿Viste el artículo en Twitter?".
Rápidamente le respondió de forma afirmativa, volviendo a ver el video, aún sorprendido por el abrupto poder que parecía tener su voz en el paciente del psiquiátrico Moon.
"¿Planeas visitarlo? Creo que sería un lindo detalle." decía el siguiente mensaje de Tul.
"Lo estoy pensando, aunque tengo que verlo con Best." respondió Mew.
Claro que le parecía un lindo gesto, pero si sus fans se enteraban antes de su visita, seguro llenarían el psiquiátrico y eso podría incomodar a los pacientes y trabajadores del lugar.
"Pídele permiso, si lo hacen un poco encubierto para que nadie sepa de tu visita y después ponen en los noticieros tu buena obra, tenlo por seguro que todos te amarán aún más." afirmó su mejor amigo y sabía que era cierto, pero no quería hacerlo solo por quedar bien ante la prensa, si decidía hacerlo era por su enorme corazón y la forma en que este se apretó en su pecho al ver a ese chico sufriendo por un trastorno del cual no podía curarse.
"Hablaré con Best." mando Mew antes de dar por terminada la conversación, comenzando a sacar otros temas a su amigo, para ponerse al día después de algunos días sin contacto alguno.
-Gulf Kanawut.- suspiró el nombre del paciente en el video.
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Hola de nuevo!!!
Los chicos se conocieron ya!!!, relativamente jajaja
¿Se imaginaban así la forma en que se conocerían nuestros chicos?
La verdad se vienen capítulos que enserio amo y espero que ustedes los disfruten.
Agradezco su apoyo y todo su amor.
Los amo, nos leemos mañana.💙💙💙💙💙