๐’๐ข๐ง ๐๐ฎ๐ž๐ซ๐ž๐ซ ๐๐ฎ๐ž๐ซ๏ฟฝ...

็”ฑ sam_weasley-fudge

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๐—ฆ๐—œ๐—ก ๐—ค๐—จ๐—˜๐—ฅ๐—˜๐—ฅ ๐—ค๐—จ๐—˜๐—ฅ๐—œ๐—˜๐—ก๐——๐—ข| ๐Ÿฎ๐Ÿฑ/๐Ÿฌ๐Ÿฎ/๐Ÿฎ๐Ÿฌ๐Ÿฎ๐Ÿฎ ๐– ๐—†๐—’ ๐–พ๐—‡๐—ˆ๐—‹๐–บ ๐– ๐–ป๐–ป๐—ˆ๐—๐—, ๐—๐–พ๐—‹๐—†๐–บ๐—‡๐–บ ๐–ฝ๏ฟฝ... ๆ›ดๅคš

1. Carteles y amenazas.
2. la acosadora y el viejo.
3. no fue nada del otro mundo
4. junta de chismes.
5. cita arreglada para Amy
6. ยฟy Pupi?
7. la ayuda de George
8. ยฟCrees que no lo harรญa?
9. no estoy lista.
10. ansiaba ver a Amy.
11. la boda de Hannah.
12. trรกtame bonito.
13. dรฉjame agradecerte.
14. solo necesitame.
15. ensรฉรฑame, George.
16. todo fue planeado.
17. cita arruinada.
18. beso en el callejรณn.
19. indirecta directa.
20. experimentando.
21. se mรกs cariรฑosa
22. enojo mutuo.
23. enamorado de ti.
24. no vayas a trabajar.
25. competencia de quidditch.
26. te amo.
27. una respuesta.
28. termina de destrozar
29. ยฟFue lo correcto?
31. ยฟA quien eligiรณ?
32. visitas.
33. decision definitiva.
34. de vuelta a casa.
35. no es buen momento.
36. sin compromisos, ni sentimientos.
37. cuรญdame.
38. amanecer juntos.
39. aรบn sientes algo por ella.
40. ยฟSigue en pie?
41. exponiendo sentimientos.
42. cita interminable.
43. la gran diferencia.
44. charla en la oficina.
45. cumpleaรฑos George.
46. ยฟformalizar?
47. almuerzo Weasley.
48. abrumados.
49. descubrimiento.
50. relaciรณn no secreta.
51. confรญo.
52. cena de parejas
53ยน. gran dรญa de F & L.
53ยฒ. gran dรญa de F & L.

30. fuiste importante, Amy.

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็”ฑ sam_weasley-fudge


Los días pasaban y pasaban, y decidí hacerle caso a papá. Abrí la tienda nuevamente, y al ver que el primer día casi colapse con tanto trabajo papá le pago a tres peluqueras el primer sueldo. Él tenía mucha razón, debía continuar con mi vida, cómo George lo había hecho.

Mentiría si dijera que me he sentido mejor al volver a la rutina. Podía estar haciendo cualquier cosa y me quedaba sumergida en recuerdos que me hacían querer llorar.

Evitaba a toda costa pasar por enfrente de su local, algo muy difícil. Deje de ver el periódico ya que sortilegios Weasley era un boom, siempre estaban en el periódico. Pensé en no atender a Lea en dos meses más, para su boda... Sin embargo debía ser profesional.

Hoy debía hacer las compras de la casa, y odiaba tener que hacerlas por una razón muy simple. El local de George estaba casi enfrente de la verdulería. No podía vivir toda la vida escondida de él, incluso si tenía suerte no lo iba a ver.

Me arregle lo que más pude dentro de mi falta de ánimo. Lo que iba a cocinar eran verduras asadas con carne. María era fan de comer las cosas que preparaba cuando tenía ánimo, aunque quizás lo hacía por pena... No lo sabía, pero cuando comíamos y ella elogiaba mi comida automáticamente me sentía bien. Cuando estuve en la tienda comence a seleccionar todas las verduras.

—hola...— alguien a mi lado habló. Reconocí su voz de inmediato, y sonreí mirándola hacia el lado.

—Leonard... Hola.— saludé aún tomando unos tomates.— ¿Vienes a comprar?

—oh bueno...— rascó su nuca y negó.— vengo un poco sudado... Salí recién de trabajar y yo...— río nervioso.— quería saber si querías ir a cenar quizás, juntos.

—oh me encantaría-

—siempre hay un pero, y siempre me rechazas.— frunció los labios.— está bien, ten una buena tard-

—¡No!— sostuve su brazo y él me miró curioso.— no quiero ser descortés, sabes que no soy así Leonard.— seguí eligiendo verduras, tranquila de que estuviera a mi lado.— es que hoy debo hacer la cena para mí y María. La verdad es que he andado triste estos días... No tengo mucho ánimo, prefiero cenar en casa.

—¿Triste?— toco mi hombro y lo mire, su expresión era de pura preocupación.— es por lo de... Oh claro, ya entiendo. George y Saray... Te entiendo tanto.— suspiro.

—aja.— le di una sonrisa.— creo que aún no estoy preparada para salir con alguien más. ¿Aún quieres salir conmigo?

—no, en realidad quería la compañía de alguien... Me vine hace poco acá y eres a la única que conozco aparte de Saray y George, aunque los dos no me quieren ver ni en pintura.— me interese de inmediato.— ya te contaré... Podemos ser amigos, ¿Te parece?— asentí. Seguí eligiendo y escuche su suspiro de cansancio.

—¿Has comido algo?

—no... Pero podemos ir a comer si te apetece.

—¿Quieres ir a mi casa mejor?— pregunté yendo a pagar, el abrió los ojos.— como amigos, como amigos.

—¡Claro, claro!— sonrió y abrió la boca sin saber que decir.— Amy... No mires hacia atrás.— jamás le hacía caso a nadie. Al mirar mi sonrisa y toda mi alegría se desvaneció. George me estaba mirando fijo mientras su novia, Saray, parecía estar eligiendo lechugas. Me sentía paralizada. Mis piernas no reaccionaba nada y lo seguía mirando fijo al igual que él. Solo podía ver a George, y jure que todo a mi alrededor se desvaneció y juraba escuchar solo mi corazón.

Tome la mano de Leonard.

—Leonard...— apreté su mano.

—Amy, Amy ven.— tomo mi cintura y yo bote todo mi aire. George y yo nos seguíamos mirando fijo.

—por favor, sacame de aquí.— susurré. Estaba en una fea pesadilla, mis piernas temblaban y quería correr.— sacame de aquí, Leonard. Ahora.

—tranquila, está bien.— sentí como sumi su voz estuviera a lo lejos. Me hablaron y comencé a ver algo distorsionado, o quizás estaba muy confundida, me sentía confundida.—...¿Okey? ¡Estoy aquí, Amy!— no pude responder nada. Sentía pánico por verlo, mis manos, todo mi cuerpo sudaba y no dejaba de hacerlo.

¿Se me iba a acercar? ¿Me iba a decir algo?

—ahi tiene.— Leonard pago mis cosas y me tomo el brazo. Mire hacia atrás una última vez, cómo Saray también me miraba sorprendida. George le dijo algo y dió un paso hacia mi, pero ella corrió a su encuentro y tomo su mano.— ya nos vamos, tranquila.— seguimos caminando hasta llegar a la casa y Leonardo paso conmigo directamente al segundo piso.

—¿Amy?— se arrodilló frente a mi.

—¿Hey? ¿Quien eres y que haces aquí?— mire a María y mordí mi labio.

—vio a George...— aclaro Leonardo tomando mis manos.— hey, Amy...

—carajo.— María llegó hasta mi y comencé a sentir mis ojos arder por el deseo de llorar.

—esta en la verdulería, ahí está.— susurré tragando.— está con ella, me vio y sigue con ella.

—lo sé...— me apoyo en su pecho.— lo sé cariño, está bien...

—¿Estas bien, Amy? ¿Quieres chocolate? Le traeré agua.— Leonardo se levantó y trajo un vaso de agua hasta mi. Al beberlo y refrescarme pude estar más consiente.— Amy... Lo siento.

—no lo hagas, está bien...— limpie mis lágrimas.— gracias por todo...— en mi mente seguía plasmada su mirada, sus ojos tan profundo y como intento venir hasta donde estaba. Menos mal no lo hizo, o no hubiera sabido como reaccionar.

¿Por qué no has venido a verme, Georgie? ¿Me extrañas aunque sea un poquito?

Esas preguntas me atormentaban de forma constante. Llorando descubrí que olvidar a alguien tan especial como George Weasley iba a ser muy díficil. Cuanto daría por haber disfrutado más los momentos a su lado, quizás preocuparme de enamorarlo y que él pudiera verme como una opción, ¿Eso valía? ¿Ser una opción?... No, yo merecía más, al menos unas buenas explicaciones. No debía ser una opción.

¿Por qué no has venido a explicarme todo George? Me siento confundida.

—Amy...

—soy una estúpida.— reí y me levanté.— Merlín, ¿Como le creí a ese idiota? Eso me convierte en otra idiota más. Soy tan estúpida.

—eso no es así... Eres una chica inteligente, él no te supo apreciar, porque vaya que eres una mujer que cualquiera desearía.— Leonardo me abrazo y le devolví el abrazo sin dejar de llorar.

—¿Por qué? Yo no soy mala... ¿Por qué me pasa esto?— me apoye en su hombro y me sentí mejor con sus caricias en mi espalda.— lo odio tanto... Él me hace mierda y yo quedo mal, ¿Y quién sigue feliz con su fama en los periódicos y su amor de toda la vida? ¡Él! Ese idiota que no merece nada... Ni siquiera a alguien tan inteligente como Saray.

—exacto.— Leonardo se separó y seco mis lagrimas.

—que se joda.

—eso es, ¡Que se joda!

—¡Que se joda!— repitió María.

—se va a joder, porque lo iré a olvidar.— tome un abrigo con una sonrisa.

—¿Amy?— Leonardo me siguió.— ¿A dónde vas?

—ven a verme en unos días, podré atenderte con el humor de la nueva Amy.— bese su mejilla y salí corriendo.

...

Había venido al bar, ya no me debía importar George, era más, ¿Quien era George?

Otro liquido ardiente cayó por mi garganta. Ya no sabía que estaba bebiendo pero estaba apoyada sobre la mesa sin dejar de pasar tragos como si de agua se tratasen. Iba a olvidarme de todo y mañana sería un nuevo día, uno nuevo dónde el nombre de él fuera tan insignificante como solía serlo.

—no creo que deba beber más señorita.— me dijo el señor que limpiaba los vasos, se acerco y me dió una mirada de compasión.— ¿Ahogando las penas en alcohol?

—¿Qué tanto se nota?

—poquito.— rei tomando su mano.— si me das el último trago te regalo una cita, ¿Si?

—¿Contigo?

—claro que no, con alguna clienta.— rei. Acaricié su mano y lo mire a los ojos.— aunque si me das dos... Podría ser.

—uno y un shot de tequila, después pura agua.

—me gusta.— asentí hasta que sentí mi nombre.

—¿Amy? ¡Amy!— me gire, intentando enfocar mis ojos en el alto ser.— Merlín, Amy.— tomo mi mejilla y mis ojos se cerraron. Tenía sueño.

—¿Por qué me tomas? Suéltame.— me queje descansando en sus brazos.— que fuerte eres...

—ay Amy.— me abrazo y fruncí el ceño. ¿Por qué me abrazaba? ¿Quienes era?

—me confundes.— reí.— deja de abrazarme rarito.— tomó mi mano y abrí los ojos.— ¡Hey! Un vaso de agua, por favor.

—tranquila, estoy aquí. María estaba preocupada, y yo también.

—pff.— lo empuje.— siempre preocupo a María, y a todos. Estoy tan cansada de mi misma... Soy un estorbo, una segunda opción... Mi vida apesta.

—¿Por qué dices eso?— una caricia llegó a mi espalda y las lágrimas salían solas.— eso no es así, hey, te lo dije. Vales mucho.

—aparte... Extraño tanto a George... Y lo intento, intento sacarlo de mi mente, sin embargo su recuerdo está tan presente en mi.— limpie mis lágrimas y me apoye en la mesa destrozada.— se que debería olvidarlo... Pero nadie enseña como olvidar a alguien que amas. Lo peor es que se que me duele el que lo amo más de lo que él podría llegar a amarme... Carajo, yo lo hubiera elegido por sobre todos.— reflexione unos cuantos segundos.— María solo se preocupa porque soy una inútil y... Y nada está como era antes. Papá cree que puedo salir adelante, pero no... No puedo hacerlo.

—tú puedes, George es un idiota.

—pero es lindo. Aunque te lo explicará no entenderías el porque lo amo. No me refiero a que es lindo físicamente, bueno, lo es... Sin embargo me trataba...— me costó respirar por tanto llanto. Levanté mi dedo y otra cerveza llegó a mi mano, por lo que le di un sorbo grande. Trague el nudo de mi garganta.— ¿Por qué me importa como me trataba? Debería quedarme con lo que me hizo... Aunque hasta para romper mi corazón fue un caballero que se preocupo en mi...— bebi otro gran sorbo.— de solo verlo con ella me duele el estómago, me dan ganas de quitarme las entrañas de tanto dolor.

—tú igual fuiste importante, Amy...

—claro que no. Su ex lo es todo para él. Ella ahora es yo... Digo, no es yo, a mi no me ama, pero es que... Yo antes hacia con él lo que ella hace ahora con él y eso me da rabia. Quería ser la única para George, jure que lo era.

—¿Y no crees que puedas encontrar a otro hombre? Estoy seguro que algún otro te puede tratar igual de bien.

—claro que no idiota...— bebi varios sorbos y me termine el vaso.— el tequila por favor.— el chico sonrió y yo suspiré.— Hannah también me lo dijo, que buscará a otro... Que me quedara con Dean, o con Viktor... Quizás podría hacerlo, sin embargo sería algo cruel.

—mmm... Podrías hacerlo.

—si, una vez que lo supere lo haré. ¡Agh! De nuevo ese idiota está en mi mente.— cerré los ojos.— si lo viera le daría un puñetazo en su estúpido y sensual rostro.— trague de un sorbo el tequila y me dolió el pecho.— mentira, no lo haría. Sin embargo me encantaría dañarlo hasta que llore todas las noches como yo... Que quede cansado llorando, como yo. Lo odio tanto.

—no digas eso... Quizás él también a llorado todas las noches porque te extraña.— puso su mano en mi frente.— tienes algo de fiebre.

—¿Y que?— su aroma llegó a mi, era tan delicioso.— me preguntó si pude haber hecho algo más para que me eligiera. Hubiera Sido tan feliz si lo hubiera hecho... Yo sería una gran novia, lo esperaría después del trabajo y le haría cariño en el cabello... Su cabello era muy suave.— lo recordé con una sonrisa.— me gustaba poner su cabeza en mi pecho y apretarlo ahí. Pensaba que él podía oír como latía mi corazón por el.

—yo creo que lo hacia...

—no, créeme que no... Me hubiera ido a ver estos días. No me ha preguntado si estoy bien, si sigo sufriendo o... Si aún me duele el corazón.

—¿Aún te duele?

—demasiado...— me senté lo más derecha que pude.— es como cuando se te quiebra una taza, nadie repara las tazas... Yo intento recoger cada trozito de esta para pegarlo e intentar seguir con mi vida. No creo poder amar nuevamente, es muy doloroso, porque hasta Dean Thomas me cambio.— bufé molesta.— ¿Me ves muy mal? Quizás para los hombres soy fea... ¿Hay algo mal en mi?

—no... Te veo preciosa.— su brazo me rodeo y me apretó en su pecho, sentí su nariz en mi cabello.

—no te pases de confianza.— avise de inmediato para marcar un límite.— pero si me quieres llevar a tu casa... Digo, a mi casa, estaría genial. Todo me da vueltas y creo que si he bebido más de lo que aguanto.

—¿Te llevo? Ven, te llevo a mi casa.— no sé cómo me tomo en brazos. Mis ojos permanecían cerrados.— puedes ocupar mi cama y yo el sillón.

—no... Llévame a...— suspiré.— no te muevas tanto, que me estoy mareando más.

[George Weasley]

Amy iba como una muñeca de trapo, su rímel iba seco bajo sus ojos y supuse que había llorado demasiado. Claro que había llorado demasiado, la había estado escuchando durante media hora. Su lengua se arrastraba al hablar, hablaba mal.

Me lastimaba mucho lo que ella pensaba. Yo la amaba, la amaba con mi corazón porque es Amy Abbott, la chica que me hacía sentir de más. Ahora que hable con ella confirme que si, jamás la dejaría de amar, la amo, la amo demasiado.

Seguía con Saray, lo sabía, pero es que lo debía hacer, tenía que. La quería, sin embargo me sentía tan distante a ella, y es que ella se sentía tan ajena a mi amor. Le hice bromas, como antes lo hacía, y las que antes eran rosas ahora eran miradas de muerte. Lo irónico era que no extrañaba a nuestros yo del pasado, extrañaba a Amy, que quizás también me miraba mal después de una broma, sin embargo después la hacía reír y nos besábamos. Saray era una linda chica, me contaba todo lo que vivió y cuánto me extraño... Sin embargo hasta ella se daba cuenta que estabamos actuando, al menos yo lo hacía.


—¿Como huelo?— Amy estiró su cuello hacia mi y abrí la puerta de mi auto con cuidado. La senté con cuidado sin querer aspirar más su aroma, o me quedaría en su cuello cautivo.— te pregunté cómo huelo...

—déjame ver.— me incline hacia ella, mi cabeza se hundió en su cuello gracias a que me dió acceso dejando su cuello expuesto. Inhale gustoso, y al aspirar su aroma no pare, lo hice una segunda vez. Recordaba perfectamente su aroma, y no pude evitar rozar mis labios con su cuello. Las ganas de decirle que era su George, que la deseaba conmigo, que la amaba... Me estaban matando.

—¿Huelo rico?

—si... Hueles muy rico.— suspiré y abrí los ojos separandome. No quería, pero debía.— ¿Cómo huelo yo?

—tú...— agarró mis mejillas y me acerco a ella.— hueles muy bien, hueles a... A él.— se dejo caer en el asiento con los ojos cerrados. Su escote se veía increíble, aunque no quería mirarla de más. Cerré la puerta del auto y me apoye recordando todas las veces que estuvo encima de mi. Se sentía tan mal desearla y saber que nunca volvería a amarme o desearme cómo yo a ella.

Me subí al auto y maneje hasta mi piso.

—ahora vamos a bajar.

—no... Yo no bajaré contigo.

—¿Por qué? ¿No te llevas con desconocidos?

—no es eso... No me llevo contigo, George.— abrí los ojos y ella sonrió negando.— te odio tanto...— mi corazón se apretó al oír esa palabra saliendo de sus labios. Lo decía tan sincera que mi corazón ardía.

—solo te quiero ayudar.

—no... No quiero tu ayuda.— me baje del auto y fui a abrirle.— solo déjame en paz, ¿Por qué no puedes?

—porque te amo.— la tome en brazos y la saqué cerrando la puerta del auto.— aunque no me creas... Te amo Amy.— ella se apoyo en mi pecho y dejo de responder. Se sentía tan bien tenerla apoyada en mi pecho.

Abrí la tienda y subí las escaleras con cuidado de no hacer nada de ruido. Camine a mi habitación y abrí la puerta.

—hola Georgie...— cerró su bata al instante y abrió los ojos a más no poder. Mierda, no sabía que Saray iba a estar aquí.— ¿Que hace ella aquí? ¿Uh?


—shh.— ella se levantó de la cama yendo hasta mi, y aproveché de pasar por su lado para acostar a Amy.— la encontré borracha, no la iba a dejar sola.

—¿Cómo que no? No es tu problema. Lo hace solo para llamar tu atención, lo sabes.— se quejo atrás de mi, mientras yo me preocupaba de que Amy siguiera respirando normal.

—ella no sabía que estaría ahí, no lo hizo con intención. La estoy ayudando y ya.

—llama a esa amiga que tiene, que se la lleve ahora George.— ordenó. Me estaba haciendo enojar, me sentía irritado.

—no lo haré, está es mi cama y ella va a dormir acá.— le di una mirada y luego me levanté.

—¡Por lo mismo te lo digo!— reclamo en un susurro.— no me has dejado dormir acá... No me has mirado desde que estamos juntos e intento provocarte para estar juntos, ¿Y llegas con ella?— la apunto.— ¿Acaso te estás burlando de mí? ¿Es una clase de venganza?

—claro que no.— comencé a quitar los zapatos de Amy.

—no estoy haciendo nada malo. Tú te burlaste de mi, resulta que me dejas, te coges a cinco chicos por allá y yo me burló de ti. Tampoco vamos a sacar el tema de que estuviste con Leonard y que le sigues llevando café y se mandan miraditas.— camine hasta mi closet para sacar prendas de ropa, sentí como ella estaba detrás de mi.— ya no importa, déjalo.

—ay George, pero no estábamos juntos. Te dije que ya no siento nada por Leonard ni el por mi... Y- ¿Le vas a prestar tu ropa? ¿Es en serio? Me estás pasando a llevar George. Te lo digo en serio, o se queda ella, o me quedo yo.

—no me hagas elegir Sary, son cosas tontas. Ella no se puede mantener en pie, tú si.— deje la ropa al lado de Amy.— no mires.— ordene comenzando a cambiarla.

—es que tú ya no me quieres, ese es el problema.— arrope a Amy, privandome de besar su frente y me acerque a Saray.

—no... No es eso.— tome sus hombros.— tú me entiendes, entonces no me hagas elegir nuevamente siendo que ya lo hice y lastime a alguien que amaba... Por favor.

—esta bien, lo siento.— me abrazo pegandose a mi pecho. No sabía dónde poner mis manos, mucho menos que decir.— estaré acá mañana por la mañana, así podemos al menos tomar desayuno.

—esta bien. Adiós.— me aleje, y ella se inclino a besarme.

—adiós.— repitió obvia para que la besara. Tome sus mejillas y bese hartos segundos su frente.

—adiós.— repetí. No quería que me dijera algo, aunque por suerte camino hacia la puerta y pude soltar todo el aire. Saray cerro y llegué a la ventana esperando a que se fuera. La vi caminar y subirse a un auto, lo cual era extraño, ya que ella no tenía y se subió de copiloto. De todas formas fui a sentarme al lado de Amy.

—Amy, cariño, ¿Estás bien?

—¿Que ocurre? ¿Que pasa?— se exaltó y rápidamente toco su estómago.— Auch...

—¿Estás bien, nena? ¿Quieres algo, un té?

—George... Por favor, me duele.— se quejo.

—¿Que te duele? ¿Vamos al doctor?— abrí la cama y ella nego.

—abrazame, por favor.— asentí quitando mis zapatos y lo demás para arroparla junto a mi. Me sentía tan feliz de estar con ella, con ella en mi pecho.

—¿Estás bien?— nego y la arrope más comenzando a acariciar su cabello.— veniste demasiado... Quizás de duele el estómago.

—mucho.— baje mi mano para acariciar su estómago y suspiro, cómo si esto calmara más su dolor.— sigue haciendo eso...

—esta bien, tranquila. Te voy a cuidar... Siempre.— me dió la espalda y la abrace aún más. Deje mi mano sobre su abdomen, me apegue más a ella y suspiré.

—ay...— se quejo una última vez para quedar dormida. Mi única preocupación ahora era despertar primero que Saray para que cuando llegara a buscarme no se encontrará con esta situación, o estaría en un lío más grande.

Estaba seguro que despertaría primero.


⋘──── ∗ ⋅◈⋅ ∗ ────⋙

AAAAAAAA jdjdjdjd ayyy no seque decir, ¿Opiniones del capitulo?

Espero que se encuentren muy bien, que les guste el cap y ojalá noten que estuvo más largo. Hoy no estaré tan activa por el día, si no por la noche, ya que mi mamá está de cumpleaños. Responderé todos los comentarios en la noche 💖

Cuidense y beban agua 💖 (a menos que no me hayan dejado su opinión de lo que les pareció, a ustedes un "cuidense" en un tono seco 😾)

็ปง็ปญ้˜…่ฏป

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