Lo primero que vi al abrir los ojos fue el inmenso ramo de flores frente a mí rodeado de globos de helio con frases como recupérate, todo estará bien, sana pronto. Uno de los globos me saco una sonrisa, tenia la leyenda FELIZ CUMPLEAÑOS, supongo que la persona que lo compro no encontró el adecuado por que evidentemente no era mi cumpleaños, pero como dicen, la intensión es la que cuenta. También había un letrero en el fondo con mensajes positivos sacados de algún libro de superación personal, todo cortesía de mis compañeros de trabajo.
Me alegro ver que podía mover las piernas, pero el dolor era inmenso que deje de intentarlo y trataba de mantenerme lo más quieta posible, una enfermera fue a darme mi medicamento contra el dolor aproximadamente a las diez de la mañana, me hizo las preguntas de rutina y después me dejo sola por un tiempo hasta que me quede dormida.
El doctor Johnson, cuyo nombre no sé pasa a revisarme, es un hombre de unos cincuenta años, se le ve bastante serio
—¿Cómo me encuentro?
—Con una buena terapia y reposo estarás bien dentro de un par de meses
Una mujer a quien reconozco entra a mi habitación de hospital, su nombre es Alexa King, una de mis compañeras de trabajo, aunque tiene un puesto mayor que el mío, y desde luego mejor pagado. Lo primero que hace es acercarse a mí y tomar una foto
—Di Whisky
Toma la foto y esta unos segundos en su celular, supongo que está subiéndola a instagram.
—Querida, en cuanto supe de tu accidente llore mucho y compartí mi experiencia en instagram para que el mundo sepa lo mucho que te aprecio.
—Gracias, creo
—Te gusta mi vestido —se da un par de vueltas para mostrarme su vestido corto color rojo— Compre dos iguales, uno rojo y otro negro, ese último lo compre para tu funeral, puedes creer que estaban en descuento en Zara, Raúl, el de intendencia nos dijo que sobreviviste al accidente y yo tipo Hello, ahora tendré que esperar a que alguien más muera para usar mi outfit fúnebre
Nos quedamos en silencio unos segundos, mi cabeza duele pero trato de hacerme la fuerte.
—Oye, ¿Y cuando vuelves al trabajo?
—No lo se
—¿Si vas a poder caminar verdad o quedarás invalida de por vida?
—Tampoco sé esa información
—¿No estarás fingiendo para no ir a trabajar verdad?
Ni siquiera me molesto en responder, Alexa hace una mueca de molestia, mira alrededor, parece que no está a gusto, no me molestaría si se fuera en este momento
—Recuerdo cuando me caí del caballo en mi luna de miel y me rompí una pierna, lo peor de todo fue que no podía hacer ejercicio y subí tanto de peso que parecía una ballena, cuida tu alimentación o terminaras más gorda de lo que ya estas
—Sabes, no me siento muy bien, quisiera descansar un rato
—¿Te molesta que este aquí?
—No —mentí, de verdad me molestaba su presencia, pero no me agradaba decir cosas malas a los demás, nunca me gusto— Pero de verdad quiero descansar
—Solo unos minutos más querida, te tengo un chisme de oficina, ¿Conoces a Ruth?
Ruth era una compañera que trabaja en recursos humanos, no solía hablarle mucho salvo cuando tenía que acudir a firmar mis nominas o solicitar algún permiso de ausencia.
—Pues resulta que esta de noviecita con Josh y si me lo preguntas, creo que está embarazada, subió mucho de peso últimamente
Quiero dormir, pero no encuentro las fuerzas para correr a Alexa. Un hombre entra con un ramo de rosas blancas y las coloca en una mesita que está a mi izquierda
—Vaya, no sabía que tenías novio
—Deben ser de mi ex Matthew
—Matthew es el que te engaño con tu amiga o el borracho que te golpeo
—El segundo
Mi historia con Matthew era bastante difícil en ocasiones, siempre fue amable y cariñoso, pero cuando bebía se ponía bastante agresivo y en una ocasión se puso algo violento y me golpeo con un bate de beisbol, cometí el error de contarle a mi compañera Sussy, quien se encargó de regar el chisme por todas partes.
Alexa corre a ver la tarjeta adjunta, la miro con curiosidad
—Quizá se equivocaron y es para otra persona del hospital—dice Alexa mientras comienza a leer la nota— Siento lo de tu accidente, espero te recuperes pronto, mis mejores deseos... Jimmy Garoppolo.