Jack POV
Volaba con rapidez, dejando atrás una fina capa de hielo sobre el suelo del bosque y a mi alrededor, el aire iba enfriándose peligrosamente y el viento se hacía más intenso. Mi enojo iba haciéndose presente más y más a mi alrededor, y yo no hacía ningún esfuerzo por controlarlo.
-¡Jack! ¡Esperá, por favor!-Oía a Hada gritar detrás de mí, al igual que su incesante aleteo, luchando por no caer a causa de los fuertes vientos que azotaban todo lo que me rodeaba.
Hice oídos sordos a sus gritos y seguí atravesando, cada vez más rápido.
-¡Jack, por favor!-Me detuve de la sorpresa al sentir la cálida mano de Hada cerrarse en mi hombro. Me volteé hacia ella con brusquedad y pregunté:
-¿Qué queres?
-Jack, yo… Quiero pedirte disculpas.-Sus bellos ojos color lila estaban llenos de dolor.
-¿Por qué? ¿Por haberme jurado un amor eterno? ¿Por haberme engañado? ¿Por haberme lastimado tanto.-Podía sentirse la tristeza en mi voz.
-Sí, por eso.-Bajó la mirada.-No pude realmente comprender el significado de la promesa que hice, pero Jack, yo te amé.
-Solo por un tiempo.-Gruñí.-Y cuando dejaste de hacerlo, ni siquiera me lo dijiste, solo decidiste engañarme con otro hombre.
-Lo sé, Jack.-Levantó la vista, las lágrimas rodaban por sus mejillas y se me hacía imposible no querer abrazarla y decirle cuanto la amaba, porque lo seguía haciendo.-Estuve muy mal, realmente no sé por qué no te dije nada, pero aunque reconozco mi error, tengo que confesarte que amo a Will y no estoy dispuesta a dejarlo porque siento que mi vida ya no tiene sentido sin él.
-¿Tenías que decírmelo?-Pregunté con la voz quebrada.
-Perdona, Jack. Pero, me di cuenta que nosotros congeniamos solo como amigos y nada más ¿Podemos seguir siéndolo?-Un atisbo de sonrisa se dibujó en su cara y yo, solo por el infinito deseo de hacerla sonreír, dije:
-Sí, claro.
-¡Fantástico!-Ella sonrió y no pude evitar deshacerme por dentro al ver su perfecta sonrisa, la que tanto amaba. Comenzó a retroceder.- Adiós, Jack.-Dicho eso, se internó por completo en la espesura del bosque, dejándome desilusionado. Había esperado con todas mis fuerzas que Hada me abrazara, por una última vez, que dejara que me refugie entre sus cálidas y suaves plumas, pero sobretodo, deseaba que esto nunca hubiera ocurrido, que nunca me hubiera sido infiel.
Solo, en el bosque, me permití llorar, derramar las lágrimas completas de odio y tristeza. Había amado a Hada con toda mi vida, había atesorado cada momento con ella en mi mente, sin importar que fueran buenos o malo, para mí, eran todos perfectos. Excepto uno.
Había llegado al taller de Hada, con la intención de darle una dulce sorpresa. Ingresé en el establecimiento y me dirigí a su oficina, con mucha rapidez, ansioso por verla. Sin embargo, me llevé la peor de todas las sorpresas, al ver por entre la rendija de la puerta, a Hada… Con un hombre. Estaban de pie, a escasos centímetros y hablaban muy entretenidos, hasta que la conversación tomó un giro inesperado. Él pregunto:
-Hada ¿Cuándo vas a dejar a Jackson?-Mi boca se abrió más de lo que había pensado que podía y comencé a desesperarme.
-No lo sé, Will, sabes que es difícil, Jack me ama demasiado y lo haré sufrir.
-Sufra o no, tenés que hacerlo, sino, nuestra relación no va a poder hacerse pública.
-Ya sé y lo voy a hacer pronto, no te preocupes por eso.-Y lo siguiente, fue tal vez lo más horrible que en mi vida había visto: Hada acercándose al sujeto y besándolo con pasión.
Lo que pasó después ni siquiera me interesé en verlo, solo me fui del taller con el alma en los pies y las lágrimas corriendo por mis mejillas.
No supe realmente cuanto tiempo había estado allí, llorando, tendido en el suelo. La tristeza manaba y manaba de mi corazón, sintiendo como mi mundo se iba acabando, como si ya no quedara felicidad en él, nada que valiera la pena. Pero, entonces, algo llamó mi atención, el sentimiento de vacío se había disipado un poco y lo que sentía en su lugar era una gran sensación de calidez, como si Hada estuviese abrazándome. Despegué mi rostro del suelo y por un momento, mi vista se cegó al recibir de frente un rayo de luz de la luna.
“Jack, ya no llores.”
Sentí la grácil voz del Hombre de La Luna colándose a través de mi cuerpo y obligándome a parar de llorar. Me sequé las lágrimas con mi mano y dije:
-¿Hombre de La Luna? ¿Qué quiere?
“Sé lo que ocurrió con Hada”
-Ah ¿Sí?
“Sí, Jack y sé cuan triste estás, pero tenés que entenderla”
Levanté la vista, enojado ¿Entenderla? ¿Cómo iba a entender su engaño?
“Jack, tenés que saber…
-¡No!-Exclamé.-Todos la entienden a ella, pero ¿Quién lo hace a mí?
“Hada es mucho más antigua que vos, vivió y sufrió mucho más. Por un largo tiempo estuvo buscando a alguien que la acompañara porque odia la soledad y sus haditas ayudantas no llenaban el vacío, cuando te conoció a vos, creyó que ibas a poder ser esa persona especial que la acompañara y siempre la hiciera sentir bien. Estuvo muy feliz con vos, hasta que Will llegó a su vida, lo conoció el día en el que ella iba a buscar el diente de su hermano menor y desde la ventana, ella escuchó como el niño le contaba a Will sus dudas acerca de la existencia de Hada y él le decía que ella existía, que era hermosa y amable y que nunca debía ponerse en duda sobre su existencia. Ella sintió como si un hilo que los conectaba, la atrajera poco a poco hacia él, y luego de recoger el diente del niño, Hada se presentó ante Will y bueno, ya te imaginarás que sucedió después.”
A pesar del enojo que sentía, no podía evitar sentirme un poco conmovido por la historia, por el modo de actuar de Will, sabiendo que yo hubiese hecho lo mismo.
-¿Se supone que escuchando esta historia, tendría que perdonarla?
“¿No lo hiciste ya, al decirle que podían seguir siendo amigos?”
-No.-Respondí.-Lo hice solo para verla sonreír.
“En ese caso, te cuento esto para que la entiendas, Jack, Hada no quiso lastimarte, pero su corazón siempre perteneció a Will.”
-¿Cómo sabes que Will es el chico de su destino?-Pregunte nervioso, aún guardaba una mínima esperanza de que ella pudiera amarme de nuevo.
“Simplemente lo sé.”
Solté un largo suspiro, ya sin esperanza de poder tenerla solo para mí.
“Jack ¿No crees que tendrías que alejarte de ella? ¿Distanciarte por un tiempo?”
-¿Alejarme?-Pregunté confundido.
“Sí ¿Crees que no sé todas las emociones que vas a sentir cada vez que la veas? Sé que vas a querer abrazarla, besarla, gritarle que la amas, llorar, decirle lo traicionado y mal que te sientes, incluso desearías que apareciera Will para golpearlo. El primer tiempo va a ser así y lo mejor sería que te alejaras.”
-Tal vez, estaría bien estar solo por un tiempo.
“Tengo la misión perfecta para eso.”
-¿Qué?-La confusión seguía incrementando ¿Una misión? ¿En qué momento habíamos llegado a ese punto?
“Lo que escuchaste, una misión ¿Recuerdas al Sol?”
Asentí de mala gana, lo había visto solo dos veces y se me hacía muy amargado. La primera vez, había sido en el nacimiento de su hija, al que concurrí por obligación de Norte, pero estaba de lo menos interesado, que me fui antes. Luego, unos tres años después, mientras repartía mi invierno, había tropezado con él, en el bosque y cuando me vio, lo primero que me dijo, fue:
-Tus inviernos son demasiado crudos y muy molestos.
-Perdón, pero es mi trabajo.
-¡Con esta nieve, me cuesta más buscar a Rapunzel!
-Y bueno, usted no debería jugar a las escondidas con su hija pequeña, en la noche mientras nieva.
-Es más que un simple juego de escondidas, Jackson, a mi hija la secuestraron el mismo día de su nacimiento y aún la busco.
Recordaba lo nervioso que me había puesto al escuchar eso y como, luego de unas disculpas, me había alejado con rapidez de allí.
“Decidió que en una semana, el día exacto del cumpleaños de su hija, va a destruirlo todo, ya que piensa que el Mundo que le arrebató a Rapunzel y no le permitió encontrarla, no merece vivir.”
-¡Pero, eso es muy injusto!-Exclamé indignado.- ¡No todos tenemos la culpa de su desaparición!
“Es lo que traté de explicarle, pero no me escuchó. Sin embargo, conseguí que me diera una semana para encontrarla y si lo hacía, no destruiría el Mundo.”
-Y si te lo pidió a vos ¿Para qué me decís a mí?
“Porque, Jack, para poder encontrar en una semana a Rapunzel y llevarla con su padre, hay que estar continuamente haciéndolo, y yo, no tengo tiempo para dedicarme solo a eso, pero vos sí, por eso te encargo esta misión.”
-No sé si quiero que el destino del Mundo recaiga en mis manos.-Dije dudoso.
“Jack, por favor, además, el Sol puede darte una recompensa.”
-¿Una recompensa?-Pregunté más animado.- ¿La que yo quiera?
-Supongo que sí, pero debes saber que hasta el Sol puede tener algunas limitaciones.”
Pero yo ya no lo escuchaba, porque un deseo estaba plasmado en mi mente: Hada. Podría volver a amarme, podríamos volver a ser felices, podría ser feliz de nuevo con ella.
-Claro que voy a aceptar.-Dije sonriendo.
“¿Más que seguro, Jack? Sabes que no hay vuelta atrás.”
-Más que seguro.-Respondí, mientras mi sonrisa se iba extendiendo en mi rostro, con la sensación de las cálidas plumas de Hada contra las mías.
Bueno, acá les traigo el capítulo 1!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Ojalá les guste!!! Ah, y quería avisarles, que normalmente, los capítulos van a ser narrados por Jack y Rapunzel, pero en este, ha sido la excepcion! Bueno, solo eso! Nos leemos pronto!! Voten y comenten ♥