El fin de semana que Taehyung tanto había esperado llegó y no podía estar más que emocionado
El pelirosa no recordaba la última vez que se había ido de vacaciones así, en donde relajaba su mente y no tocaba absolutamente ningún libro
Además, ¡esta vez estaría con su novio! Taehyung no podía esperar a saber qué clase de aventuras tendría con Jungkook. Era un fin de semana perfecto para hacer lindos recuerdos
Y como Taehyung no solamente quería recordarlo, se llevó su cámara fotográfica que en realidad era de su padre. Él la solía usar para la época en que conoció a su madre y empezó a salir con ella
Él decía que los mejores momentos habían que capturarlos más que sentirlos porque no se deteriorarían con el tiempo y permanecieran vivos para siempre en nuestros recuerdos cada vez que miráramos las fotos
Asique empacó su cámara, varias prendas de ropa, accesorios, maquillaje, zapatos y el resto de cosas necesarias para sobrevivir un fin de semana fuera de casa.
Luego se despidió de su madre en cuanto Jungkook apareció en un gran auto blindado en su casa y subió con ayuda de su novio su equipaje al maletero
— te ves genial cariño — Jungkook acarició su espalda baja con una gran sonrisa en su rostro. Taehyung siempre era creativo con sus outfits rositas
— gracias Kookie. Tu te ves... como tú — rió con el azabache antes de subirse al auto
Lo primero que notó Taehyung y que le causó algo de alivio fue ver que su suegra no se encontraba en ninguna parte
Saludó tímidamente al resto de personas que estaba en el auto, y en cuanto Jungkook subió se inclinó a él para preguntarle qué había pasado con su madre
— le tocaba ir al campo de entrenamiento, no volverá en semanas
— oh, lo lamento...
— no te preocupes, ya estoy acostumbrado — Jungkook se encogió de hombros, pasando su brazo por los suyos
— hola Taehyung — su suegro se volteó hacia donde él se encontraba y le ofreció una sonrisa — ¿cómo amaneciste? ¿cómo está tu mamá?
Taehyung asintió: — todo bien señor Jeon
— bien, ahora que los tengo a todos quiero decirles esto — el hombre acomodó su cuerpo para encararles mejor y mirarle a los ojos a los cuatro chicos que llevaba ahí — cuando estemos allá no quiero ninguna muestra de cariño en público...
— ¿ni un abrazo pa? — preguntó Yugyeom
— ok, abrazos si...
— ¿besitos chiquitos? — sugirió Jungkook
Su padre negó: — no, nada que muestre cariño explícito. Mientras estén con el resto de la familia no les quiero ver en ninguna situación de esas, cuando estén en privado pueden hacer lo que quieran, pero mientras ese no sea el caso, nada de cariñitos, ¿ok?
Los cuatro asintieron, pero Taehyung estaba algo decepcionado. ¿Cómo haría para fingir que Jungkook era como un amigo o algo así?
— bebé — le susurró Jungkook en su oído — el que tiene cara de tonto es mi hermano mayor — señaló a Yugyeom como si este no pudiese verle ni escucharle — y él es su novio, BamBam
— mi nombre es Yugyeom — se dirigió el pelinaranja a Taehyung — y tú te acabas de llamar tonto también, tienes el cincuenta por ciento de mi rostro — se dirigió a Jungkook esta vez
— un gusto conocerles — balbuceó Taehyung entre risas
Como quisiera tener un hermano para jugar con él y molestarle de vez en cuando
— hey, ¿y esa cámara? — señaló Jungkook lo que llevaba en su regazo
— era de mi padre, es... muy importante para mi — le explicó Taehyung con un brillo en sus ojos
— oh... ¿Puedo tocarlo?
Taehyung miró de reojo la cámara, pasando sus dedos por cada detalle
— sip — se la dió en sus manos. Taehyung confiaba en él
— ¿cómo tomo una foto? — preguntó Jungkook, chequeando el aparato
Taehyung le explicó y le hizo una demostración al tomarle una foto
— luego esperamos un poco en la sombra y... ¡listo! — Taehyung le enseñó la foto que la polaroid había sacado con delicadeza, haciendo sonreír a Jungkook
— amo estas fotos, se me hacen muy lindas — Jungkook la tomó con delicadeza entre sus dedos — ¿tienes en donde guardarlas?
Taehyung asintió: — en mi equipaje llevo el album de fotos de mi familia — tomó la foto que le había sacado a Jungkook en sus manos — decidí traérmelo porque... También eres parte de mi familia y quiero tenerte ahí — susurró lo último casi en su oído para que el resto no escuchara, siendo cubierto por el escándalo que Yugyeom tenía con su novio y su padre
La sonrisa del azabache se expandió casi de oreja a oreja al escuchar aquello. Eso le hizo sentir un agradable calorcito en su pecho
Sabía que los romances de secundaría raras veces perduraban con los años por los caminos diferentes que tomarían al graduarse, pero Jungkook ya estaba mil por ciento convencido de que quería vivir su vida entera junto con Taehyung.
No se imaginaba con alguien más. Ese lindo pelirosa ya era de su familia y estaría incompleta sin él
Luego de varios kilómetros y minutos en donde Yugyeom parecía no callarse la boca, Jungkook comenzó a cabecear en su puesto. El haberse levantado tan temprano le estaba pasando factura
Taehyung lo notó a pesar de que este fingía seguir despierto y escuchar todas las anecdotas raras de su hermano en la presidencia hasta que llegó un punto en el que se quedó dormido con su mejilla apoyada en su puño
El brillante sol del fin de semana le estaba pegando en su mayoría a él y su cuello parecía a punto de partirse, asique Taehyung tomó su cabeza para que se recostara en su regazo y descansara
Jungkook no quiso, no queriendo incomodarle, pero Taehyung insistió y se quitó el chal que cargaba para ofrecérselo a su novio como una sabana que cubría su cuerpo del sol
— descansa Kookie — le dijo antes de besar su mejilla y pasar sus dedos por su cabellera gentilmente
Su suegro, a pesar de la estruendosa voz de Yugyeom en el auto, le escuchó y les miró por el retrovisor, sonriendo al ver como ese pelirosa era tan gentil y atento con su hijo
Sintió algo de alivio en su corazón. Saber que su hijo había elegido bien su pareja le brindaba paz
Taehyung decidió sacar su cámara para tomar algunas fotos del paisaje por el camino y una que otra sobre su novio
— esta en definitiva va para el album — sonrió suavecito al observar de cerca la foto que le sacó a Jungkook en donde sus labios hacian un bonito puchero y su cabello caía delicadamente sobre sus ojos
Taehyung se guardó la foto y se quedó mirando a Jungkook. Tenía sus delicados y rojizos labios ahí frente a él pidiendo ser besados, pero no le hizo caso a esa voz en su interior. Tenía pena de hacerlo frente a todos
En cambio, acarició una y otra vez sus suaves cabellos azabaches, dandole una especie de masaje en su cuero cabelludo. También alternó aquello con algunas caricias en su mandíbula, sintiendo lo afilada de esta y lo redondas que eran sus mejillas
Taehyung sonrió para sus adentros. Jungkook parecía un bebé. Su bebé
De sus bolsillos, sacó sus audifonos y con una mano se los colocó, buscando en su celular una canción en específico para escuchar mientras el viaje continuaba
Y no pudo evitar ensimismarse, pensando en Bogum...
Tal vez, después de todo, lo que tuvo con Bogum fue un engaño o cosa del destino que le hizo conocer a su verdadero príncipe azul.
Taehyung miró al azabache en su regazo y volvió a sonreír en grande. Ya no habían los "tal veces" o "probablemente", ahora más que nunca estaba seguro de que amaba a Jungkook y que lo era todo para él
Ahora a duras penas podía recordar lo que era ser feliz estando con Bogum, solamente recordando aquella primera vez en su cama como un trago amargo que sería difícil de pasar en su garganta cada vez que lo recordara
— Jungkookie — le susurró Taehyung a su novio en su oído cuando llegaron
El azabache se levantó de a poco y se estiró
— ¡vamos bello durmiente! — le molestó su hermano, bajando sus cosas del maletero
— ¿ya te sientes mejor? ¿Cómo dormiste? — preguntó Taehyung mientras quitaba las manchas brillantes de baba de su mejilla con su chal
Jungkook asintió: — gracias bebé — le robó un pico en sus labios
Taehyung tapó su boca con una mano y miró a su alrededor asustado en busca de su suegro:— Kookie recuerda que... que somos "bros" aquí
Jungkook sonrió, bajándose del auto: — ¿"bros"?
— ¡si! ¡Bros! Y los bros no se besan, bro — el pelirosa le dio un puño en su hombro, bajándose con su cámara
Le tomó una foto a Jungkook bajando sus maletas y otra al lugar, tomando un tiempo después para apreciar a donde se encontraba
Era como un resort. Con una linda piscina gigante y área verde rodeada de pequeños pero ostentosos edificios, con una cancha de volleyball y basquet, los cuales probablemente eran más pequeños que la piscina. Y eso ya era decir mucho
Pero hubo un sonido que le hizo sonreir de oreja a oreja y mirar a Jungkook con la emoción de un niño pequeño en Navidad
Era el sonido de las olas reventando con la arena
— ¿¡estamos en la playa!? ¿¡Estamos cerca de una playa!? — preguntó, intentando buscarla con la mirada
Jungkook asintió: — sabía lo mucho que te gustaba y me lo guardé hasta ahora. ¡Sorpresita!
Taehyung comenzó a saltar de aquí para allá y tuvo que taparse la boca para no chillar y llamar la atención del resto de los Jeons que estaban llegando. Además de ser su lugar favorito, porque era una de las cosas que compartía con su padre, amaba hacer castillos de arena
Se podría decir que era todo un experto en el tema
Pero debía guardar su emoción por ahora, porque ahora tocaba desempacar y presentarse con el resto de su familia, la familia Jeon
— déjame ayudarte Kookie — el pelirosa tomó la mochila de hombros de Jungkook para colgarsela y llevó en sus manos su propia mochila, dejando que su novio cargase el resto
Taehyung mordió sus labios. Estaba agradecido con Jungkook por haber usado una camiseta de mangas cortas, así podía ver en vivo y a todo color sus bíceps haciendo su trabajo
— vayan y acomoden sus cosas en su habitación, después bajen a saludar, ¿ok? — les avisó el padre de Jungkook, entregándoles una llave
Taehyung la tomó por su novio ya que este estaba algo cargado
— nos vemos pa — dijo Jungkook, caminando en dirección a uno de los pequeños edificios
Que por cierto no eran nada pequeños por dentro
— ¿qué número de habitación somos? — preguntó el azabache frente al ascensor
Taehyung, distraído viendo el lobby como un gatito, le dijo: — el trescientos diecinueve
Jungkook se sonrió, emocionado de tener a su Taehyung con él.
— ¿que haces bro? — el pelirosa levantó una ceja al sentir una mano acariciando su cuello y cabello. Jungkook no pudo evitar reírse de nuevo — eso no es muy bro de tu parte
Jungkook volvió a robarle otro beso en sus labios, divirtiéndose por la forma en como Taehyung veía su alrededor asustado como si se tratasen de celebridades ocultando su relación
— ¡Jungkookie!
El azabache rió más fuerte al final, contagiando al pelirosa
Ambos subieron al ascensor y Taehyung se encargó de los botones. Jungkook se tomó su tiempo para apreciar a su novio sin el chal. Llevaba un top blanco con estampados de flores rosas que dejaba sus clavículas enteramente descubiertas al igual que sus brazos y cintura en conjunto con una linda falda larga que llegaba hasta sus pies con el mismo estampado
— te ves muy sexy — le susurró casi al oído
Taehyung sonrió travieso y se puso de puntillas para besarle, dandole un mordisco a su labio inferior antes de que las puertas se abrieran
El pelirosa se echó a correr ante su travesura y buscó la habitación con prisa, metiendo la llave nerviosamente en el picaporte para abrirla mientras reía, viendo a Jungkook acercarse a él con pasos lentos y una sonrisa tenebrosa
Taehyung tiró lo que cargaba de inmediato a la cama y dio vueltas por la habitación, escondiéndose en el armario antes de que Jungkook llegara
Y cuando llegó, intentó no seguir riendo para guardar silencio. Jungkook dejó las mochilas en su cama y cerró la puerta de la habitación, haciéndose el que no sabía a donde estaba su bebé
— ¿a donde podría estar Taehyung? ¡Que difícil situación! — exageró el tono de su voz, haciendo reír a Taehyung y por lo tanto, encontrando su ubicación
Taehyung carcajeó cuando Jungkook le abrió la puerta del armario: — ¡piedad!¡piedad! — exclamó, haciéndose bolita para protegerse de las cosquillas de su novio
Jungkook en cambio le cargó sobre su hombro y se lo llevó hasta la cama, tirandole ahí para luego colocarse sobre él. Taehyung dejó de reír juguetón y tomó las mejillas de su novio entre sus manos, dandole un beso un poco más calmado y pausado, terminando en un chasquido
— pensé que íbamos a jugar lucha libre bro — le dijo Jungkook, haciendo a Taehyung estallar de la risa
— ¡cállate! — exclamó, bajándose de la cama — ¡mejor bajemos antes de que tu padre nos busque!
Maratón especial de navidad y año nuevo 1/4