Vuelo Los Ángeles, California a La Ciudad de Nueva York primera llamada.
Abordan en 30 minutos.
- ¡Ay no! ¡Ya se va! - Chilló Entrapta abrazando el brazo de Scorpia.
- ¿Segura que llevas todo?
- Sí, Scorpia. Por milésima vez.
- Está bien, lo siento, es que... Estamos emocionadas - Le dijo Scorpia balbuceando como solía hacerlo cuándo se ponía nerviosa - Es tu primera vez viajando sola.
- No iré sola, DT estará también.
- Eso me preocupa más - Dijo con una risa nerviosa.
- Oye, no nos meteremos en problemas - Sonrió maliciosamente - Creo.
Su amiga pareció asustarse y la hizo soltar una carcajada.
- Las llamaré cuándo llegue.
- Ugh... Son como 4 horas de vuelo, ¿Por qué no puedes llamarnos durante el vuelo?
- Los teléfonos celulares crean ondas electromagnéticas que afectan al avión - Respondió Entrapta - Sin mencionar que si hay turbulencia puede salir volando y sacarle un ojo a alguien.
Ambas se le quedaron viendo.
- ¿Qué? Todo el mundo sabe eso.
Segunda llamada para el vuelo Los Ángeles, California a La Ciudad de Nueva York.
Catra sintió náuseas.
Tal vez era porque era la primera vez que viajaba en avión o porque se dirigía a Nueva York.
Miró más allá de sus amigas involuntariamente, buscando a alguien.
- ¿Crees que venga?
Miró a Scorpia y negó con la cabeza.
- Nah - No estaba triste por eso, le había dicho lo que quería en esa carta y ya se había terminado - No importa, ustedes están aquí.
Sólo sentía curiosidad de cuál había sido la reacción de Adora cuándo leyó su carta.
No se había permitido tener esperanzas de creer que eso la haría ir a despedirse.
Por mucho que le gustara ese clásico cliché en las películas románticas... Era la vida real, y tal como había pasado antes, Adora no iba a llegar.
Alguien tocó su hombro detrás de ella.
Era DT, y se estaba recargando sobre ella como si ir por los boletos hubiera sido la tarea más agotadora del mundo.
- Listo, ya vámonos.
Scorpia los abrazó a ambos levantandolos del suelo.
- ¡Los veo luego chicos!
- ¡Me mandas un hot dog!
Catra se despidió con una mano y agarró su maleta con la otra siguiendo a DT hacia dónde todos estaban yendo.
Una vez que subieron al avión DT comenzó a maquillarse. Se veía muy feliz por más que lo simulara.
- Que bueno que aceptaste venir conmigo - Le dijo - Será genial vivir juntos.
- Igual estabas en mi casa casi todos los días.
- Ésto será increíble - La ignoró - Estarás en la escuela mientras yo debuto en mi primer película justo como debe ser.
Catra lo imaginó.
Eso era suficiente.
¿No?
- Ambos buscamos lo que queremos, no tenemos tiempo para cosas tan estúpidas como el amor. Así es como somos.
Tal vez sería suficiente con el tiempo.
Después de todo, era Nueva York.
Estaría viviendo con DT y saldrían de fiesta cada fin de semana y después iría a la escuela.
Sería jodidamente libre y feliz como siempre había querido.
Adora solamente había sido alguien que pasó por su vida y nada más.
No podía seguir con eso.
- Sí - Miró por la ventanilla a las personas abordar como si fuera lo más interesante del mundo - Así somos.
....
Adora nunca se cansaría de repetir lo agradecida que estaba por tener amigos como Bow y Glimmer.
Los tres estaban en la sala de su casa, no estaban haciendo nada realmente, sólo estaban sentados, ambos chicos habían insistido en acompañarla ya que ese día se iría Catra y sabían que sería muy duro para ella.
Sabían que Adora no iba a estar muy habladora, pero aún así la acompañaron en silencio.
Mermista, Sea Hawk y Perfuma habían ido a sus casas fuera de California para Navidad, Adora agradecía eso un poco porque no tenía ánimos de estar con muchas personas.
Adam pasó hacia la cocina como si nada y al no escucharlos hablar retrocedió para verlos.
- Hola - Saludó - ¿Qué están haciendo?
Su hermano había llegado el día anterior.
- Apoyamos a Adora - Le dijo Glimmer acostada en el sillón grande.
- Que bien - Respondió mirándolos raro - Continúen.
El rubio pasó hacia la cocina y después de unos segundos volvió a las escaleras corriendo con el Topper que tenía el último pedazo de Pay que Razz le había hecho a Mara.
- Oye Adam, eso no es tuyo.
- ¡Quítamelo entonces!
Adora puso los ojos en blanco, sabía que lo estaba haciendo a propósito.
Rápidamente se paró del sillón para para perseguirlo.
Subió las escaleras corriendo y jaló el gorro de su chaqueta rosa antes de que entrara a su cuarto y lo hizo para atrás, tirando varias cosas del pasillo incluyendo una maceta de Razz y el bote de basura.
Adora rió entre dientes mientras su hermano se limpiaba la tierra de la maceta que había roto y se quejaba porque el Pay se había caído al suelo, pero dejó de reírse al ver un sobre con su nombre escrito con la letra de Catra entre los papeles.
Se agachó incrédula y comprobó que sí se trataba de la letra de Catra.
- ¿Qué es ésto?
- Adora, ¿Has visto mi...? - Mara salió de su cuarto pero al ver la carta en sus manos retrocedió, quedando pálida.
- Mara, ¿Sabes qué hacía ésto en la basura?
Mara los miró a ambos con los ojos muy abiertos.
- Ah... Bueno... - Se rascó la nuca - Es posible que Catra haya venido ayer y me la haya dado para ti.... - Su voz se fué haciendo cada vez más baja, pero Adora escuchó perfectamente.
- ¿Catra vino ayer y no me dijiste? - Adora estaba gritando.
- Estabas sufriendo, Adora, ¿Qué esperabas que hiciera?
- ¡No debiste esconderme ésto!
Adora tomó aire.
- No importa - Abrió su puerta de su cuarto - Tengo que leerla.
- Adora, lo sient...
Cerró la puerta con fuerza.
Miró otra vez su nombre escrito en el papel.
Catra le había escrito una carta.
Sus manos temblaron mientras la abría con cuidado.
Entonces se detuvo antes de leerla.
Tenía miedo de lo que podría decir.
Pero quería saber lo que sea que Catra quisiera decirle.
Después de todo, era Catra.
La chica en la que más confiaba en el mundo.
La que jamás la lastimaría intencionalmente.
Así que abrió la carta y comenzó a leer.
"Hey Adora.
Si estás leyendo ésto seguro ya estoy en el avión camino a Nueva York.
Ojalá lo esté.
Sería más fácil."
Adora se sentó en su escritorio.
"Tengo un millón de cosas que decirte que no se las diría a nadie más porque sé que no las entenderían tanto como tú.
Lo más difícil al separarnos fué no tenerte a mi lado para contarte las cosas que pasaban por mí cabeza cada vez que descubría algo nuevo.
Justo ahora estoy por ir a Nueva York, ¿Quién lo diría no?
Quisiera no estar en ésta situación y decirte todo sobre cómo me siento. "
Sonrió.
"Adora, tal vez lo que pasó entre nosotras jamás podrá arreglarse.
Pero quiero decirte que me ayudaste a no sentirme sola cuándo pensé que era la única en el mundo que quería hacer algo diferente a quedarse en un sólo lugar.
Sobre lo que te dije aquella vez en el café...
No me arrepiento de haberme ido.
Así como tampoco me arrepiento de haberte conocido y haber echo planes contigo.
De alguna forma los cumplimos, ambas logramos salir de ese pueblo que tanto nos asfixiaba.
Mentí aquella vez que te dije que no estaba feliz de verte, en realidad si lo estaba. Estaba feliz de saber que pudiste irte por tu cuenta, estaba feliz de ver qué te reconciliaste con tu hermano, y estoy feliz de haber vuelto a verte. Sin importar cómo.
Voy a irme por un tiempo, y no sé cómo sean las cosas entre tú y yo cuándo vuelva, pero espero que sean como sean, pueda seguir sabiendo de tí y de cómo sigues avanzando.
Te amo, Adora.
Espero que entiendas que siempre lo hice.
Catra. "
Adora dejó que las lágrimas cayeran de sus ojos.
Comenzó a reír por alguna razón.
Estaba feliz... Pero también triste. Era una sensación extraña.
- Yo también te amo, Catra - Susurró, abrazando la carta.
Volteó hacia la ventana.
Finalmente entendió a lo que Adam se refería.
Finalmente lo había entendido.
Y necesitaba decírselo a Catra.
Necesitaba alcanzarla.
¿Cuándo había dicho que se iba?
Miró la hora en el reloj de su escritorio.
11:30AM.
Cómo si supieras a qué hora sale su avión.
Idiota.
Tal vez aún estaba en su casa.
Salió corriendo de su cuarto y bajó las escaleras casi de un salto.
Adam, Mara y el resto de sus amigos estaban sentados en la sala esperándola.
Parecieron sorprendidos al verla tan feliz.
- ¿Adora? - Preguntó Glimmer.
- Tengo que ir - Fué lo primero que dijo - Te que alcanzarla y decirle que lo siento.
- Adora, eso no hará que se quede...
- ¡No quiero que se quede! Sólo quiero decirle que lo siento, que fuí una idiota y que...
Todos la miraron atentos.
- Que aún la amo.
Adam aplaudió una sola vez.
- Eso es suficiente para mí - Dijo levantándose de un salto - Voy por mis llaves.
- ¡¿Pero q-?! Adam, ¿Qué rayos vas a hacer? - Preguntó Mara.
- Vamos a alcanzar ese estúpido avión.
- Adora... Escucha...
- No, Mara. Tú escucha - Se detuvo - Tú me dijiste que las personas que te aman no te dejan realmente, ¿Verdad?
Mara asintió algo confundida de a dónde quería llegar.
- Pues yo sí lo hice. La dejé. Y me equivoqué y debe saberlo. Por favor...
Mara volteó hacia todos en la habitación y asintió
- Le diré a Razz que saliste con tus amigos.
- ¡Gracias!
- ¿Qué esperamos? ¡Vamos todos! - Bow levantó a Glimmer del brazo para acompañarlos.
- ¿Y a dónde vamos?
- Hay que ir a su casa para ver si aún no se va.
- ¡¿No sabes cuándo se va?!
- ¡Pues no me puso la hora en la carta!
- ¿Por lo menos sabes su dirección? - Preguntó Adam tomando sus llaves.
- Uh...
- ¡Ugh! No puedo creerlo - Glimmer sacó su teléfono - Le preguntaré a Mermista.
- ¡Ya está! ¡Vámonos!
....
Llegaron a la ubicación que les había mandado Mermista.
Pero la persona que abrió la puerta fué Entrapta, quién traía unas llaves y un martillo en las manos y la ropa llena de grasa.
- ¿Qué estás haciendo? - Glimmer fué la primera qué habló.
- ¡Oh! - Entrapta arrojó las herramientas hacia otro lado y estaba segura de que rompió algo - Estoy arreglando el horno, no sé por pero cada vez que hago galletas salen quemadas.
- Es un misterio - Dijo Adam en voz baja.
- Entrapta - Adora la tomó de los hombros - Dime qué Catra aún está aquí.
- ¿Catra? Acabamos de regresar del aeropuerto, su vuelo sale como en diez minutos.
- ¡¿Diez minutos?!
- Sip, ¿Quieren pasar? Tengo galletas.
- ¿Y no puedes llamarla?
- Oh, eso no será posible - Dijo Entrapta - No puedes usar teléfonos dentro del avión, ¿Por qué nadie sabe eso?
- Adam, ¿Puedes llevarme al aeropuerto?
- ¡No en menos de diez minutos!
- Sólo... Llévame ahí, por favor.
- Adora - Glimmer trató de calmarla - Sólo espera a que Catra llegué y la llamaremos.
- Pero tengo que decírselo de frente - Estaba apunto de llorar - Tengo que decirle que lo siento.
Adora no podía simplemente tomar un teléfono prestado - Catra tenía bloqueado su número - y decirle que lo sentía por llamada.
Adam tomó aire y se acomodó la chaqueta.
- Muy bien, no perdamos tiempo entonces.
Adora lo miró con ganas de abrazarlo, y eso nunca pasaba.
- ¿Estás seguro?
- Sí, sí, sí, ¡Vámonos ya!
- Gracias, Entrapta - Le dió un abrazo a la chica de coletas antes de irse, pero se detuvo cuándo notó que su ropa se llenó de grasa.
- ¡Lo siento!
No tenía tiempo para ésto.
- ¡Los veo luego chicos!
Glimmer y Bow se quedaron parados en la puerta de Entrapta cuándo ambos salieron corriendo al elevador.
- No van a llegar - Bow negó con la cabeza.
- De echo no lo harán, aunque hagan menos de diez minutos Catra ya debe estar dentro del avión - Les explicó Entrapta - ¿Quieren galletas?
- Sí, claro - Respondió Bow emocionado.
Glimmer suspiró.
- Sólo espero que Adora no se desanime cuándo llegue y Catra ya no esté.
Omg estoy emocionada por lo que sigue jajaja ✨✨✨
Creen que Adora la alcance?