↣ Inglaterra - Londres / 1862 - Marzo 27
—¿Por qué hay tantas personas en la casa cuando hay un enfermo? —preguntó.
—Buenos días, Doctor Magnus disculpe que lo llamáramos de una manera inesperada, pero en este caso o la persona a tratar no sé cómo manejarla.
—No hay problema con eso, por favor cierre las puertas con seguro.
El joven al escuchar esto hizo caso y rápidamente se guio a la puerta para cerrarla con seguro, soltó un suspiro y miro a Seokjin.
El doctor Magnus dejo a un lado su maletín y miro a ambos jóvenes que tenía a un lado suyo.
—Por favor cuéntenme que es lo que ha pasado aquí, porque lo que estoy asumiendo no es bueno y por las expresiones de sus rostros me dicen mucho. —quitó su abrigo. —Además de que me he dado cuenta de que este joven depende de nada para tener vida, díganme ¿Qué sucede?
—Como usted mismo se ha dado cuenta....él depende de casi nada para mantenerse con vida. —levanto su mirada. —él está en un proceso de conversión donde pueda que se transforme o muera.
—Entiendo.... —acomodo sus lentes y subió las mangas de su camisa. —Creo que están más que enterados, pero si el consejo se entera de esto y en la manera a la que este joven fue o está siendo sometido a una conversión, están en grandes problemas y Sam no se los perdonara tanto al que le ha hecho esto a él como a quienes saben de esto.
—Lo sabemos muy bien...pero en realidad necesitamos de su ayuda doctor Magnus.......tanto Esteban como yo no sabemos qué hacer ante esta situación.
El doctor tan solo se limitó a soltar un suspiro y volteo su mirada al chico que yacía en la cama casi sin fuerzas, totalmente pálido sin color alguno en sus mejillas o labios, estaba sin duda alguna sin alguna fuerza para decir o hacer algo tan sencillo como hablar o mover un dedo, no tenía casi sangre la cual corriera por sus venas como así mismo si no hacían algo en ese preciso momento el joven se iba a desvanecer.
—Por favor sin llamar demasiado la atención dígale la situación por la cual el joven está pasando y traiga al que se ofrezca a ayudarlo.
Ambos jóvenes se miraron y sin rechistar Esteban salió de la habitación para llamar a uno de los amigos de Jungkook, el cual era Park Jimin quien se encontraba hablando animadamente con Taehyung. Sin llegar a ser demasiado grosero llamo la atención de ambos jóvenes y pidió amablemente que subieran.
Taehyung al escuchar aquello frunció el ceño, era demasiado extraño sin embargo opto por ir a ver qué era lo que estaba sucediendo. En cuanto Esteban abrió la puerta noto que el Doctor Magnus estaba allí mirando el brazo de Jungkook mientras sacaba de manera apresurada algunas cosas de su maletín.
—¿Qué sucede? —preguntó el menor de todos.
—Me presento soy el Doctor Magnus, y necesito que por favor se quite su abrigo y alce las mangas de su camisa, estaré a punto de hacer una trasfusión de sangre.
—Un gusto conocerlo soy Park Jimin, pero primero que nada me podría explicar qué está sucediendo aquí.
—Jimin como lo sabes Jungkook...últimamente no se sentido totalmente bien, en este momento en su cuerpo no está corriendo la sangre suficiente por lo cual necesita una transfusión de urgencia, Jungkook en el peor de los casos podría morir.
—¿Qué?...pero si hace unos días lo que visto y estaba totalmente bien... ¿Qué ha sucedido?
—Realmente no lo sabemos aún, por favor quite su abrigo y suba las mangas de su camisa, dolerá un poco pero solo será un dolor mínimo.
El joven aun confundido opto por mi rechistar y quitar su abrigo y subir las mangas de su camisa, procedió a sentarse en un sillón admirando que cada movimiento que el doctor hacía, cerro sus ojos al sentir un dolor un tanto soportable en su brazo, pero a la misma vez admirando y contemplando el rostro de Jungkook que carecía de color alguno, era como si estuviera muerto en vida, era totalmente aterrador verlo de esa manera tan melancólica.
↣ Inglaterra - Londres / 1862 - Marzo 28
—¿Cómo sigue? —preguntó el joven.
—Aun no despierta, pero estará mejor, gracias por hacer esto por Jungkook. —tomó la mano de Jungkook nuevamente y acaricio esta. —Gracias Jimin.
—No es nada, si no hubiera estado presente el día de ayer no sé qué hubiera sido de Jungkook.
—Menos mal estaba aquí para verlo. —levanto su mirada y le brindo una sonrisa.
—Esteban.... Espero que no le incomode lo que le diré a continuación, pero le he dicho sobre la deplorable situación de Jungkook a nuestros amigos más cercanos, y se les ha mandado una carta a los padres de Jungkook esta mañana.
El joven al escuchar sobre la carta mandada a los padres de Jungkook, soltó un pequeño suspiro debido a que las cosas se iban a poner complicadas.
—No hay ningún problema, es lo que debías hacer si eres una persona tan cercana a Jungkook.
—Me preocupa que no mejore.
—El proceso es tardado, pero mejorara, tiene un poco de color en su rostro, dentro de poco despertara.
En medio de su conversación Seokjin entro a la habitación junto con Ana quien lo primero que hizo fue ver a Jungkook y acariciar su rostro.
—¿Aún sigue dormido? —preguntó
—Si aun esta dormido, quizás despierte en un momento o en horas aún está en un estado delicado.
—Hubiera estado encantada que ayer mismo me hubieran llamado para dar ayuda a Jungkook.
—No teníamos tiempo Ana, sé que siempre eres demasiado atenta con las personas que te importan, pero no teníamos tiempo, además teníamos a Jimin, fue un milagro tenerlo en ese preciso momento. —la miró. —no te sientas mal por no poder ayudar a Jungkook. —acaricio su cabello. —Eres tan linda.... —musitó Seokjin dándole un pequeño beso en la mejilla.
—Igualmente, gracias por avisarme sobre el cómo esta Jungkook... —musitó —Gracias Esteban por ser tan atento con Jungkook, más atento que otra persona.
—Es lo que debo hacer por él. —miro a un lado suyo, admirando el rostro de Jungkook. —Antes de que se me olvide por favor si Seokjin, Taehyung o yo no estamos aquí presentes para cuidar a Jungkook, por favor no abran las ventanas como tampoco lo dejen solo por demasiado tiempo. —miro a Seokjin. —Puede...que despierte y necesite algo o incluso su estado no mejore.
—¿Alguno de ustedes tiene que retirarse?
—Tanto Seokjin como yo tenemos unas cosas pendientes que tenemos que arreglar, no sé si Taehyung pueda quedarse, aunque sea un momento con él, aunque no lo creo.
—Está bien tanto Jimin como yo estaremos atentos ante cualquier cosa si es necesario.
—Gracias por ello, les avisare con tiempo si sucede algo para que puedan cuidar de Jungkook.
—¿Sabes realmente en el problema que nos has metido Yoongi?.
El menor tan solo soltó un suspiro y miro a sus padres que lo miraban de una manera terrorífica.
—Los rumores corren demasiado rápido, no nos sorprende que gustes ya sea de hombres o mujeres, pero las personas que están allí afuera no pensaran lo mismo que nosotros, no lo aceptaran como nosotros lo aceptamos, así que ¿Qué planeas hacer? —habló su madre.
—No creo que se pueda hacer demasiado.
—Hijo...lo único que podemos hacer es que te cases o te comprometas con una mujer, necesariamente no será enserio, meramente será en apariencia. —alzo la mirada. —Los padres de Jimin no tomaran bien el rumor sobre ti, tienes dos opciones en esta ocasión.
—¿Opciones? ¿De qué hablas?
—Puede que los padres de Jimin te alejen de él por el miedo tan tonto de volver a su hijo gay o que tú mismo termines con él y aparentes tener un compromiso con una mujer que necesariamente no será tu esposa y no necesitaras amarla.
—¿No sería cruel utilizar a una persona con el fin de fingir algo?
—Quizás lo sea, pero es lo necesario para mantener tanto tu nombre como el de nosotros.