Pequeña nota: En la galeria pueden mirar como es mi jeff ideal. Pueden imaginar a los personajes como ustedes quieran claramente, pero así es como yo lo veo. Sin más que acotar a esta nota, pueden leer
Sam
Me despierto y siento como si una manada de elefantes me hubiera pasado encima mil veces y juro que quiero hacer pagar a Jeff por su dichoso entrenamiento de mierda, pero, alejo el pensamiento tan pronto llega.
Me levanto de la cama, entro al baño, hago mis necesidades, ato mí cabello y cepillo mis dientes, pero cuando veo mi reflejo en el espejo esta vez las ganas de querer matar a Jeff no se hacen esperar.
Tengo un moretón en mi pómulo y tengo otro en la comisura de mi labio, tomo tres inhalaciones profundas para calmarme, cuando lo logro salgo de mi habitación y miro mi reflejo en el espejo que está en mi habitación y tengo las intenciones de cambiarme, pero no lo hago y bajo a la cocina.
Lo primero que veo son tres hombres en la cocina y ellos me notan antes de poder hablar.
- Buenos días bonita - Axel es el primero en hablar
- Buenos días - respondo cortante y el ceño de los tres hombres se frunce
- ¿Estás bien? parece como si estuvieras viviendo en un apocalipsis - dice ahora Marcus
- ¿Qué si estoy bien? bueno, siento que aventaron mi cuerpo desde el piso quince de un edificio unas tres veces y tengo dos moretones en mi cara, pero nada más - dije sarcásticamente
- Si, se nota - supongo que pasaron por alto mi sarcasmo - pero te vas a sentir mejor cuando veas a Jeff, lo dejaste horrible chica - dice Axel
- Esta que lo lleva el infierno, en serio - dice Harry
- No sé si fue el enojo o que realmente tenías ganas de patearle el culo, pero lo dejaste vuelto mierda cariño - acota Marcus y los otros dos hombres asienten
- Pues ¿Cómo no?, no hico ni el mínimo esfuerzo en defenderse cuando lo golpee. ¿Dónde está? - dije con cierta emoción en mi voz Axel se ríe y camina hasta estar a mi lado
- Esta en su habitación ¿vamos? - dijo ahora él con emoción y asentí animadamente. Caminamos, pero nos detuvimos por la voz de Harry
- Yo que ustedes lo pensaría mejor, tiene un humor de perros
- Creo que entonces voy con la compañía perfecta - dice Axel y me mira sonriente - dudo que se atreva a decir algo al respecto contigo en frente, su ego de macho no se lo permite - Harry volteo los ojos, Marcus, Axel y yo nos reímos
Terminamos de hacer nuestro camino hacia su habitación Axel tocó y entro sin esperar una respuesta.
Un Jeff con diversos moretones en su rostro, sin camisa y acostado, con uno de sus brazos cubriendo sus ojos fue lo que nos recibió
- Cuando me dijeron que estabas horrible no pensé que tanto - fue lo primero que dije. Dirigió su mirada a mí y en su mirada había rabia y admiración al mismo tiempo - realmente estas horrible
- Y que lo digas, - siguió Axel - hermano lo siento, pero ella - me señala y la cara de Jeff denotaba irritación - es la mejor, te pateo el culo y mira cómo te dejo
- Si, ya cállate Axel - espetó Jeff - ¿no que se iban hoy en la mañana?
- Si, pues ya ves que no nos vamos en la mañana - mira su reloj con una sonrisita en su rostro - son las 2:32 pm nos vamos en la noche, queremos hablar un poco más con Samantha al igual que ella - me mira y hago los mismo - ¿cierto Sam? - no respondo y me guiña un ojo y le sigo el juego
- Si, así es, además los quiero conocer - miro a Jeff y el fastidio se puede notar en su rostro - es bueno entablar una conversación fuera de ti pedazo de orangután - Axel suelta una risita que es callada por la mirada de Jeff - créeme estar tres semanas contigo sola, llega a ser un poco irritante - lo miro con una sonrisa triunfante
La carcajada de Axel fue lo que rompió el silencio en el que quedo por unos segundos la habitación y cuando se calmó él fue el primero en hablar.
- En definitiva, esta chica - puso su mano en mi hombro - es la ideal para cerrarte el hocico hermano - pone su otra mano en mi otro hombro y hace que quedemos cara a cara - ¿Por qué no apareciste antes en nuestras vidas? Realmente eres de las mejores cosas que nos han pasado - ahora yo me reí - no te rías es enserio el idiota ahí acostado - mueve su cabeza hacia Jeff - necesitaba a alguien como tú y... - Jeff lo corto antes de que pudiera seguir
- Axel
- ¿Qué? - ahora mira a Jeff - ¿necesitas algo?
- Si
- ¿Qué cosa?
- Que te salgas
- ¿A dónde? - Axel tenía una sonrisa de ángel en su rostro y entendí que solo lo quiere molestar
- De mi habitación - soltó Jeff al borde del colapso
- ¿Por qué? Estamos hablando todos muy animadamente ¿a que no? - me mira y asiento, pero el grito de Jeff me hizo dar un respingo en mi lugar
- ¡Sal de mi maldita habitación! - Axel no se mueve - ¡ahora! - Jeff bajo un poco su voz - tengo que hablar Samantha, nos puedes dejar a solas, por favor - Axel me mira y asiento levemente.
Se queda estático unos segundos cuando reacciona se da la media vuelta y hace su camino afuera de la habitación, sus pasos se escuchan alejándose, el lugar queda en silencio y no me muevo de mi sitio por unos minutos, me dirijo al escritorio que tiene Jeff, muevo la silla y me siento. Pasan algunos minutos más y Jeff no habla, así que lo hago yo.
- Trataste mal a Axel - lo miro y él tiene su vista fija en la ventana que estaba a su lado izquierdo - para que saliera de la habitación porque necesitabas hablar conmigo y ahora no hablas ¿Qué quieres Jeff? - me mira
- ¿Cómo lo hiciste? - se pregunta me dejó una enorme interrogación
- ¿Cómo hice qué? - suelto un poco irritada
- Todo esto - señalo sus moretones - estoy tratando de saber cómo mierdas lo hiciste - dirigió su mirada a mi - el hombre que estaba detrás de ti cuando estábamos en el claro, era más alto, fuerte y tiene un entrenamiento de más de un año y tú lo derribaste en segundos con un entrenamiento de tres semanas
- No te entiendo, para eso estábamos acá ¿o no? para poder hacer todo lo que se supone que se hasta ahora - no responde y me levanto de la silla dispuesta a salir de la habitación - ¿sabes? Esto no tiene sentido, me voy, que te recuperes - doy dos pasos lejos de la silla cuando la voz de Jeff me interrumpe
- ¿Te he dicho que te puedes ir? - me detengo en seco y doy media vuelta para centrarme a Jeff levantándose de la cama
- Y yo te he dicho que esto no tiene sentido, así que me voy ¿te quedó claro? - se termina de levantar y se posa frente a mi retándome con la mirada y yo no cedo ni un poco
- Y yo no te he dicho que te puedes ir, así que te quedas, aún no hemos terminado
- ¿Sabes? Muchas veces no les hacía caso a mis padres como para hacerte caso ahora a ti y si crees que será así, estas muy mal de la cabeza - me alejo y voy directo a la puerta, la abro y se cierra de golpe cuando Jeff pone su mano en ella.
Me toma del brazo alejándome de la puerta, sus ojos grisaescos están llenos de molestia y mi espalda se estrella de golpe con la pared que esta donde está el escritorio de la habitación, con sus manos en mis hombros
- Te dije que no hemos terminado, ahora vas a mover tu hermoso culo a la maldita silla donde estabas - no me moví, solo levanté el mentón, estuvimos así unos minutos hasta que quitó sus manos de mis hombros, pero se quedó a mi lado para evitar que saliera
De mala gana me siento en la silla, veo a Jeff caminar a su cama y sentarse
- Sabes que esto - señalo su rostro con moretones - me lo vas a pagar ¿no? - y eso me enojó
- ¿Sí? ¿Cómo? ¿con tus malditos ejercicios? ¿haciendo que caiga drogada por alguna de esas mierdas? ¡Hazlo, te aseguro que, si lo haces, el que sale perdiendo aquí serás tú, no yo cariño! - grito
- No niña mimada - mantuvo su voz más baja que la mía, pero denotando advertencia al mismo tiempo - te voy tener en mi maldita cama - y eso me dejo fuera de balance - toda la jodida noche, porque me vas a pagar cada golpe ¿lo entiendes? - no respondí porque la puerta se abrió de golpe dejando ver a Axel y Marcus en el umbral de la puerta mirándonos de hito en hito, Marcus fue el primero en hablar
- ¿Está todo bien? - me mira - ¿estas bien? - asiento
- ¿Todo bien Jeff? - dice ahora Axel mirando a Jeff y él mirándome a mi - Jeff - lo llamas cuando no obtiene respuesta
- Si - se gira para mirarlo - todo bien - hace su camino y pasa por medio de los dos chicos en el umbral.
Cuando ya no está a la vista suelto todo el aire que no sabía que estaba en mis pulmones y el primero en acercarse a mi es Marcus.
- Samantha - lo miro - ¿estas bien? - asiento - ¿no te hizo algo? - niego
- ¿Estas segura que no paso nada? - pregunta Axel
- Si estoy segura - respondo en un murmullo - ¿bajamos? - los miro y ambos asienten
Hacemos nuestro camino a la sala de estar, cuando llegamos Harry y Jack están ahí, cuando notan nuestra presencia nos miran más no dicen nada.
Axel, Marcus y yo nos sentamos en el sofá grande conmigo en medio de ellos, Jack en el individual que está a la derecha y Harry se sienta en el piso con su espalda recostada al sofá quedado en la mitad de mis piernas.
En la mesa de centro hay cervezas, algunos vasos con whiskey, comida, frituras y algunos dulces, vemos una película de suspenso Dangerous Lies (Mentiras peligrosas) a la cual no le tenía mucha fe, pero si terminó siento buena a las 4:40 nos levantamos todos, arreglamos el pequeño desastre que teníamos en la sala de estar.
Ellos se fueron al gimnasio y yo subí a mi habitación para quitarme el short de pijama con el que dormí y el hoddy.
Me decidí por un conjunto de licra color salmón, até mi cabello en una coleta alta y bajé. Pase por la cocina busque 5 botellas de agua y fui al gimnasio.
La imagen que hay frente a mi cuando entro es muy.... muy... apetecible, es demasiado y en ese momento me pregunto porque mierdas todos ellos estaban tan buenos.
Marcus y Jack están en el ring de boxeo, con unos pantalones cortos para entrenar, sin camisa dejando ver a la perfección los tatuajes que cubren el cuerpo de Jack y los poco que tiene Marcus, sus cuerpos bien trabajados y están cubiertos por una ligera capa de sudor.
Frente al espejo levantando pesas esta Harry, con pantalones cortos, sin camisa, con él también puedo ver con mayor facilidad sus tatuajes y el sudor que le recorre el torso.
Por último, en la prensa de piernas esta Axel, con su torso al descubierto, con sudor cubriendo su cuerpo.
Me acerco primero al ring, ambos hombres se detienen y le tiendo una botella de agua a cada uno y beben de ella inmediatamente.
- Gracias - dice Jack
- Fuimos muy imbéciles y no trajimos agua, gracias, te debemos una - dice ahora Marcus
- Vaale, me voy - sigo mi camino y llego al reproductor de música, reproduzco la primera playlist y en todo el gimnasio suena la música.
Voy hacia donde Harry que se detienen cuando me tiene cerca y le entrego una botella de agua
- Gracias Sam - asiento y me voy a donde Axel que deja de hacer el ejercicio cuándo lo llamo, se levanta y le entrego la botella, la abre y bebe de ella
- Gracias chica
- No es nada
- ¿Estas bien? ¿no paso nada con Jeff?
- Si, estoy bien, pero ¿puedo hacerte una pregunta? - asiente - ¿por qué tantas preguntas con respecto de si estoy bien? - la duda se filtra en todas sus facciones - y dime la verdad - pasa sus manos por su cabello desordenándolo un poco más y habla
- Tiene ataques de ira que aveces no logra controlar, lo logró cuando empezó a entrenar y hacer ejercicio. La veces que han herido su, - hace una pausa y continua - su ego, pierde la paciencia muy rápido y a veces puede llegar a ser violento o no poder controlar su ira, por eso la pregunta varias veces, no sé si sabes que él conoce a Demonio - niego - bueno es una historia para otro momento, pero, en conclusión, Demonio jugó a la pelota con Jeff y otro chico que se llama Aaron, que dudo que conozcas, cuando tuvo la oportunidad de matarlo, no pudo, todo fue planeado por Demonio, si no fuera por los hombres con los que íbamos esa vez y por Alonzo, probablemente estuviéramos muertos, todos nosotros - dio una mirada rápida a todos los hombres en el lugar
- ¿Quién es Alonzo?
- Es un viejo amigo, es de confianza, siempre nos ha ayudado desde el anonimato, pero, por ahora mueve tu - me señala con su dedo - culo chica y ponte a entrenar - me reí un poco pero así hice.
No sé cuánto tiempo pasa mientras hago ejercicio, en todo el tiempo pienso o trato de buscarle respuesta a cómo es que Jeff tuvo la oportunidad de matar a Demonio y no pudo, pero no hay respuesta alguna.
Paro para tomar un respiro y un poco de agua, todos siguen en el gimnasio concentrados en sus ejercicios, aunque ya me cansé de hacer lo mismo, así que voy por la acción.
Me fijo en todos y ya sé a quién voy a elegir, me acerco a un lado del ring donde están los guantes busco dos pares y voy de regreso hasta dónde está mi presa.
- Jack - lo llamo, voltea a mirarme y le aviento el par de guantes - ¿vamos? - hago una seña con la cabeza hacia el ring y asiente, se levanta de la máquina donde estaba con una pequeña sonrisa y caminamos hasta el ring, nos subimos, nos ponemos los guantes y las otras personas se acercan con nosotros al ring
- ¿El que gane dos? - pregunta y asiento - ¿estas lista?
- Creo que si - y no se dice nada más, me acerco primero dándole un derechazo a la boca seguido de dos golpes en su estómago, me alejo y se viene hacia mi rápidamente, me atesta tres golpes, dos en las costillas y otro en mi barbilla haciendo que el sabor a hierro llegue a mis papilas gustativas.
Me alejo rápidamente de su alcance, pero llega rápidamente a mí, golpe en el estómago, barre mis pies con su pierna, caigo dándome un fuerte golpe el en trasero, en la cabeza y me derriba en pocos minutos
- Cuando te alejes, asegúrate de mantener tu guardia arriba - me tiende la mano enguantada y me ayuda a levantar - en especial si es casi el doble del tamaño que tú y aprovecha tu baja estatura a tu favor, eso puede ser una ventaja, pero si no lo aprovechas o la sabes usar a tu favor será una enorme desventaja
- ¡Patéale el culo a él también chica! - grita Axel interrumpiendo a Jack y me hace reír un poco
- ¿Cuánto a que gana Sam? - dice Marcus
- Apuesto 420 por Jack - dice Harry
- Yo 340 por Sam - dice Marcus
- Pues van a perder los dos, apuesto 500 a que Samantha - dice Axel, lo miro con los ojos muy abiertos, el me mira, me sonríe y me guiña un ojo - vas a ganar, ya veras
- No creo eso - dije en un murmullo solo para mi
- ¿Ya terminaron de apostar? - dice Jack - queremos terminar aquí - señala el ring - todos asienten - ¿lista?
- Te voy a destrozar amigo mío - le respondo y nos reímos un poco
- Ya veremos eso linda
Espero a que el atieste el primer golpe y en efecto lo hace, uno que logro esquivar, doy dos pasos alejándome de él y arremeto con un golpe directo a su nariz seguido de un golpe certero en su estómago para terminar con una patada en el mismo sitio.
- ¡Eso es chica! ¡hazlo picadillo! - grita Axel
Se viene contra mi rápidamente y me da tres golpes seguidos en el torso, derecha, izquierda, derecha, viene con un zurdazo a mi rostro, pero soy más rápida y paso por debajo de su golpe alejándome de él un metro. Jack está en posición de ataque con las piernas un poco abiertas y guardia arriba, se acerca rápidamente, pero me deslizo por entre sus piernas quedando atrás de él, me levanto cuando se está dando la media vuelta, me acerco rápidamente y arremeto con cuatro golpes directos a sus costillas y termino con otro golpe en la nariz, se viene contra mi rápidamente y me tira a la lona, pone mis manos a cada lado de mi cara.
Pero yo aun no termino, con mi rodilla le pego en las pelotas - no muy fuerte pero lo suficiente para que me suelte - me levanto rápidamente y aprovecho que él aún está en la lona y con el pie lo empujo por su espalda baja, hago que quede acostado boca abajo con mi rodilla en el centro de su espalda y sostengo sus manos en su espalda para evitar que pueda seguir - aunque claramente se puede deshacer de mi en segundo, no se mueve -
- ¡ESO ES CHICA! - el efusivo grito de Axel me hace levantar la mirada hacia el - ¡SIGUE ASÍ Y LO VOLVERAS MIERDA! ¡TE AMO SAMANTHA! - y solté la carcajada, hice una reverencia y los tres espectadores aplaudieron y yo no podía dejar de reírme
- ¿Seguimos? - dijo Jack, asiento, iniciamos nuevamente.
Sus golpes son certeros, costillas, brazos, piernas, aunque soy ágil para evitar algunos.
Da un golpe en mi estomago haciendo que bote todo el aire de mis pulmones de golpe, pero me repongo en segundos - siento una gota de sudor recorrer mi frente y espalda, al igual que siento una oleada de adrenalina por todo mi cuerpo - se aleja, respiro un segundo y me voy contra él, llevándolo a las cuerdas del cuadrilátero, doy golpes seguidos en sus costillas, me alejo, se viene contra mí.
Antes de poder acercarse más le doy un golpe en las costillas, se recompone en segundos, me derriba y se queda de pie a la altura de mi piernas con una sonrisa que le devuelvo y antes de que pueda reaccionar, barro sus piernas con toda la fuerza que puedo implementar, seguido de un golpe en la sien que lo deja aturdido, un puñetazo en la mandíbula y termino con un golpe seco en el estómago.
Listo, le gane, si, le gane ¡mierda, le gané!
Siento que me alzan del suelo y cuando miro son las otras tres personas presentes que están en la lona, Marcus le da agua a Jack, Harry y Axel están conmigo.
- Le ganaste chica, por cierto - mira a Harry y Marcus - mi dinero - les tiende la mano - les gane - a regañadientes le entregan el dinero
- ¿Qué pasaría si no hubiera ganado?
- Nada, solo pierdo el dinero, pero te tenía fe, por eso aposte más por ti - asiento y en ese momento me tienden una botella de agua que bebo gustosa
- Gracias - le digo a Marcus
A eso de las 6:15 pm estamos saliendo del gimnasio, los muchachos se quedan abajo peleando no sé porque y yo subo a mi habitación, miro un rato mis redes sociales media hora y bajo a la sala de nuevo y me encuentro con todos los chicos bañados, arreglados y con sus pertenencias.
- Ya te iba a sacara patadas de tu habitación para que te despidieras - Axel es el primero en notar mi presencia y hablarme
Todos comienzan acercarse, me abrazan y se despiden, el último en pasar en Axel
- Chica - pone su mano en mi hombro - agradezco el conocerte, nos veremos en algún momento supongo - me abraza - un gusto conocerte
- Igualmente, Axel, nos vemos - nos alejamos y sale de la cabaña seguido de Jeff
- No tardo - dice Jeff, pero lo ignoro y subo a mi habitación
Cuando estoy arriba me deshago de toda mi ropa y entro a la ducha, en quince minutos ya estoy afuera, me visto con un pijama de short y cuando estoy peinando mi cabello escucho un ruido de la planta de la planta de abajo.
Abro la puerta de mi cuarto, asomo la cabeza y...
- ¡Jeff! ¿eres tú? - grito, pero no hay respuesta - ¿estás abajo Jeff? - silencio. Bajo a la sala de estas y no hay nadie, en la cocina tampoco.
Trato de convencerme que fue mi imaginación, pero cuando estoy en el segundo escalón ponen una mano en mi boca y me estrellan contra la pared. El miedo corre por mi torrente sanguíneo, pero cuando puedo ver con claridad a Jeff me relajo y el enojo toma terreno, pero su mano en mi boca me impide decir algo.
- Te dije que pagarías por cada moretón y cada golpe ¿lo recuerdas? - aunque estoy molesto, por alguna razon asiento y quita su mano de mi boca - bueno, no lo decía de broma Samantha. Sera una noche larga; así que mejor compórtate
No puedo decir nada, no sé qué responder me siento tonta y en segundos Jeff me está besando, cuando logro reaccionar le sigo el beso.
Y cuando dijo que sería una noche larga, tenía toda la razón.
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Hola criaturas al otro lado de la pantalla, ¿como están?
¿Que creen de Daddy Jeff? L@s leo
Así que aja, por ahora, gracias por leerme y leer esta historia, si me ayudan con su voto y comentario lo agradecería.
Nos leemos lueguín.
Un beso enorme 💗.
Con cariño.
Andrea B.