Camino hasta Berlín
-- ¿Que pasa con los perros?- pregunta en clave
-- Helsinki los está sacando de la jaula-
En aquel silencio, la inspectora pudo escuchar las máquinas a pleno rendimiento haciendo billetes y se dió cuenta de que la habíamos engañado. De que los disparos habían sido fingidos y de que su visita al museo solo había servido para regalarnos dos horas en las que ella había estado fuera de juego y nosotros habíamos ganado 16 millones de euros más
Tenía razón el profesor. En este atraco el puñetero tiempo era oro
Parecía fácil. A lo mejor para otro inspector a el mando, pero Raquel era una mujer en un mundo de hombres, una madre soltera en mitad de el divorcio, una tipa que había aguantado el maltrato de su marido
Y ahí, frente a Berlín se sentía cómoda, como una maestra frente a sus alumnos rebeldes. Y no iba a quedarse de brazos cruzados viendo cómo le tomaba de el pelo
-- muy bien, he visto a todos los rehenes, menos a Parker. Entiendo que ahora es su turno ¿No?
Ella camina hacia mi, con superioridad
-- ¿O si no, que?- la reto - ¿Nos vas a esposar?
-- ey- Berlín se levanta con una sonrisa- por favor, señoritas, paz
-- mira...- ella se gira hasta Andres- desde que estoy aquí dentro, solo te he oído decir estupideces- suelto una carcajada burlona y mi hermano se burla también- esperaba algo más sustancioso de un hombre al que le quedan ¿Cuánto? ¿12 meses de vida?
Rio para su risa y Berlín cambia su expresión
-- ¿de que está hablando?- mi hermano pregunta
-- ¿Que coño pasa?- Tokio se para frente a el-
-- tiene miopatía de Helmer- informa Raquel- una enfermedad degenerativa, muy agresiva con una esperanza de vida de unos 12 a 24 meses- Berlín cierra sus ojos estresado- posiblemente sus músculos ya han empezado a atenzarse, y se traduce en espasmos, temblores de manos...¿No has notado que cada vez te cuesta más sujetar la pistola?
Dirijo mi mirada a su mano y está empieza a temblar
El camina hacia atrás, y sale de el salón, sin decir una palabra
-- ¿He metido la pata?- pregunta la inspectora, con hipocresía- creía que no habían secretos entre vosotros...que erais amigos
-- yo sabia- le aseguro, con una falsa sonrisa, aún que no me vea
Saco mi pistola y la dejo de lado de mi cuerpo, de manera amenazante, pero sin ser directa
-- quiero ver a Alisson Parker, ahora- ella pide- Yo, a vuestra edad, también creía que podia comerme el mundo. Que no iba a mirar atrás en la puñetera vida y que nunca me arrepentiría de nada...
-- pero un día, algo te para en seco- completa Tokio
-- si, y es mejor que te pare en seco con un embargue o una relación...
-- lo que pasa es que a mí ya me paro en seco un tiro. Concretamente uno directo a el corazón de mi novio. Salga ahí y digaselo a todos. Que yo ya no siento nada y que pueden entrar por mi a tiros
-- ¿Cómo sabe que edad tengo?- Pregunto burlona
-- pues no lo sé, Valentina ¿Crees que sea adivina?
Rio me mira alarmado y yo solo le doy una sonrisa
-- ¿Quien es Valentina?- pregunto
-- ¿No la conoces?
-- nah, pero luego me la presenta. Ahora, tengo que ir a ver cómo está mi compañero. Con permiso
━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━
Quito mi careta, respirando un poco más tranquila
Voy hacia el despacho de Berlín y toco tres veces la puerta
-- si no eres Boston, no puedes pasar- escucho de el otro lado y suelto una sonrisa
Entro a la habitación, y lo encuentro sentado en la silla de el escritorio, con su cabeza apoyada en su mano
-- ¿Cómo estás?- pregunto, acercándome
-- de puta madre- susurra, con una sonrisa forzada
Me siento frente a el sobre mesa y el levanta su mirada
-- es una hija de puta- susurro con diversión, refiriéndome a Raquel - ya sabe quien soy
-- ¿Cómo?
-- me dijo Valentina- viro los ojos- obvio, negué todo
El asiente, poniendo sus manos en mi cintura
-- ¿Estás estresado?- pregunto coqueta y el sonrie
-- No tienes idea
Tomo su mano y lo impulso a levantarse
Camino hasta una silla a la mitad de la habitación y lo obligo a sentarse ahí
-- vamos a relajarnos- propongo, alejándome ante su atenta mirada
Me paro frente a el y llevo mis manos hasta el cierre de mi traje
Bajo de este lentamente y el me mira con una sonrisa traviesa
-- ¿te lo puedo quitar yo?- pregunta y niego con la cabeza, mordiendo suavemente mi labio
Con mi mirada, busco algo para atarlo
Encuentro lo que el usa para atar rehenes
Camino hasta el y el me mira con el ceño fruncido y una sonrisa
-- ¿Vas a...?
Pongo sus manos en su espalda y las hato
Regreso a mi lugar y continuo quitando mi ropa
Tras quitar mi blusa y quedar solo en ropa interior, camino hasta Berlín y me siento a horcajadas sobre el
Se ve que intenta jalar sus manos, para tomarme de la cintura y le doy una sonrisa
-- parece que estabas preparado- comento, viendo cómo su traje solo está bien puesto en el pantalón y el resto está atado a su cintura
-- destino- susurra, con acento italiano
Me levanto un poco, bajando su pantalón y volviendo a sentarme
En acerca su cara a mi cuello, con intención de dejar besos en este
-- n-necesito tocarte-
Niego con la cabeza y el empieza a morder mi cuello, suavemente
Me muevo sobre el, y el tira su cabeza hacia atrás
-- s-se dónde tocarte para que te vengas en tres segundos, desamarrame por favor-
Cierro mis ojos, sintiendo sus labios sobre mis pechos, que solo están cubiertos por la tela de el sostén
-- suéltame por favor- susurra
-- mierda- jadeo un poco, llevando mi mano para soltarle- a veces te odio...- susurro, desamarrandolo
A penas tiene sus manos libres, me carga, levantándose de la silla, y camina hacia el escritorio, dejándome parada frente a este
Me voltea bruscamente, y baja mi torso, apoyándome en el escritorio y dejándome algo expuesta ante el
Con su brazo, rodea mi cintura y pone su cabeza en mi hombro
Baja mi ropa interior y me mira con una sonrisa
Siento su mano en una de mis piernas. La sube, hasta que queda totalmente recargada en el escritorio y comienza a tocar mi centro
Me intento mover, pero su mano en mi cintura me lo impide
- calma...- susurra en mi oído, ingresando un dedo
Recargo mi frente en el escritorio, soltando un leve jadeo
- m-más- pido, haciendo mi cadera hacia atrás
El mete otro dedo y acelera sus movimientos
━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━
-- compañeros, después de una severa reflexión, quería pediros perdón por no haber sido del todo sincero con vosotros- Berlín habla, frente a todos nosotros- la inspectora tenía razón. Tengo una enfermedad degenerativa, bastante cabrona y mis días están contados. No es mi intención que os pongáis tristes y mucho menos que me compadezcaís- el saca varios shots y una botella- al fin y a el cabo se trata de una enfermedad que padece una de cada 100 000 personas y eso me convierte en alguien especial. Lo que quiero es invitarlos a celebrar...Río-
Le llama a mi hermano, quien estaba distante, viendo algo entre sus manos
-- ¿Quieres?- el niega
Berlín termina de servir los shots, y levanta uno
-- todos vamos a morir- Tokio, Nairobi y Denver lo ven con lastima- por eso brindo. Por qué estamos vivos...y por qué el plan va como un tiro
El provoca la risa en el resto, mientras yo lo miro con algo de tristeza
-- por la vida- nos invita a tomar nuestro respectivo vasito-
Todos los tomamos
--...y por el plan-
Chocamos los shots mutuamente y nos los tomamos de un trago
Noto que mientras el toma, su mano tiembla y bajo mi mirada
En ese momento, me di cuenta que estaba jodida.
Nunca me había preocupado por alguien que no fuera Aníbal
Y ahí estaba yo. Destruida por qué la probabilidad de un futuro con el, estaba jodida
Todo estaba jodido...
O por lo menos así lo veía en ese preciso instante